1 Samuel 7 – Samuel como Juez
A. Samuel guía a la nación al arrepentimiento.
1. (1-2) El arca en Quiriat-jearim.
Vinieron los de Quiriat-jearim y llevaron el arca de Jehová, y la pusieron en casa de Abinadab, situada en el collado; y santificaron a Eleazar su hijo para que guardase el arca de Jehová. Desde el día que llegó el arca a Quiriat-jearim pasaron muchos días, veinte años; y toda la casa de Israel lamentaba en pos de Jehová.
a. Los de Quiriat-jearim: Ellos trataron el arca del pacto con honra y respeto, sin embargo no la llevaron al tabernáculo. En lugar de descansar en la casa de Dios, la llevaron a la casa de Abinadab.
b. Santificaron a Eleazar su hijo: No sabemos si Eleazar era del linaje sacerdotal apropiado, o si su ceremonia de consagración fue legítima según Éxodo 29. Al menos esto reflejaba un deseo de hacer lo correcto.
c. Muchos días: Israel tenía el arca de regreso, pero las cosas no se habían solucionado realmente. Israel se dio cuenta de que no estaban mejor con Dios sólo porque tuvieran el arca del pacto nuevamente. Más bien, toda la casa de Israel lamentaba en pos de Jehová.
i. Tenían buenas razones para lamentarse. Sus ciudades estaban en ruinas, sus ejércitos fueron derrotados y estaban bajo el dominio de los filisteos – todo porque no estaban bien con Dios.
ii. “Se puede preguntar con toda naturalidad, ‘¿Dónde estuvo Samuel todo ese tiempo?’ No sé lo que estuvo haciendo durante esos veinte años; pero tengo la sospecha, puedo decir, tengo una firme persuasión, de que iba de un lugar a otro, predicando en lugares tranquilos donde pudiera reunir una audiencia; advirtiendo al pueblo de su pecado e incitándolo a buscar a Jehová, esforzándose así por infundir algo de espiritualidad en la vida de ellos como nación”. (Spurgeon)
2. (3-4) Samuel predica el arrepentimiento, tanto externo como interno.
Habló Samuel a toda la casa de Israel, diciendo: Si de todo vuestro corazón os volvéis a Jehová, quitad los dioses ajenos y a Astarot de entre vosotros, y preparad vuestro corazón a Jehová, y sólo a él servid, y os librará de la mano de los filisteos. Entonces los hijos de Israel quitaron a los baales y a Astarot, y sirvieron sólo a Jehová.
a. Habló Samuel a toda la casa de Israel: Dios levantó a Samuel como juez y profeta (1 Samuel 4:1). Sin embargo Samuel estuvo extrañamente ausente durante todo el fiasco del arca del pacto. 1 Samuel 4:1 fue el último lugar donde se mencionó a Samuel, justo antes de que Israel planeara usar el arca como amuleto de la suerte en batalla.
b. Si de todo vuestro corazón os volvéis a Jehová, quitad los dioses ajenos: Samuel hizo un llamado a la nación a arrepentirse. El arrepentimiento debía ser interno (de todo vuestro corazón) y externo (quitad los dioses ajenos).
i. Lo interno era más importante que lo externo, y debía venir primero. Por eso es que Samuel primero llamó a Israel a volver de todo corazón, y luego les dijo que quitaran los dioses ajenos.
ii. Sin embargo, el arrepentimiento interno es algo secreto. Es oculto. Nadie puede realmente “ver” el corazón de otro. Sin embargo lo interno fue probado por lo externo. Podemos saber que Israel sí volvió de todo corazón al ver si en realidad quitaron los dioses ajenos. Nadie podía ver sus corazones, pero podían ver si quitaron los dioses ajenos.
c. Y sólo a él servid: Israel no sentía que había rechazado a Jehová; ellos sentían que solo habían agregado la adoración a otros dioses a su adoración a Jehová. Samuel llamó a Israel a abandonar a esos otros dioses y sólo a él servid.
i. “Un enemigo peor que los filisteos dominaba la tierra … el pueblo estaba así en doble servidumbre; el pesado yugo de los filisteos estaba sobre ellos, porque el peso más pesado de una adoración falsa, abatía la vida de sus corazones.” (Spurgeon)
d. Entonces los hijos de Israel quitaron a los baales y a Astarot, y sirvieron sólo a Jehová: Los dioses locales de Baal y Astarot eran ídolos populares entre el pueblo de Israel. Baal era atractivo porque se creía que era el dios del clima que traía buena cosecha y éxito económico. Astarot era atractiva porque se creía que era la diosa de la fertilidad y que por lo tanto estaba conectada con el amor y el sexo.
i. “Astarot era adorada en un amplia área como la diosa de la fertilidad, el amor y la guerra, y son numerosas las placas de figuras femeninas desnudas de la Edad del Bronce y del Hierro en Palestina. Los Baales eran las deidades masculinas correspondientes”. (Baldwin)
ii. “Baal, dios de la fertilidad y la tormenta, se creía que era hijo de Dagón, dios del grano. Astarot, diosa del amor y la fertilidad, luchaba por la supremacía con Asera, madre-diosa y consorte de El. . . La asociación de Baal, Asera, y Astarot con la fertilidad, particularmente expresada en rituales sexuales depravados en los santuarios cananeos, los hacía especialmente abominables ante los ojos del Señor”. (Youngblood)
2. (5-6) La nación se arrepiente en Mizpa.
Y Samuel dijo: Reunid a todo Israel en Mizpa, y yo oraré por vosotros a Jehová. Y se reunieron en Mizpa, y sacaron agua, y la derramaron delante de Jehová, y ayunaron aquel día, y dijeron allí: Contra Jehová hemos pecado. Y juzgó Samuel a los hijos de Israel en Mizpa.
a. Reunid a todo Israel en Mizpa: Aquí es donde Jacob se separó de Labán (Génesis 31:49) y fue el lugar de reunión para un Israel arrepentido en Jueces 20:1. Este era un lugar recordado para separación y arrepentimiento.
b. Yo oraré por vosotros a Jehová: Samuel ya había llamado a la nación al arrepentimiento, y ellos comenzaron a hacerlo. Samuel sabía que la obra de Dios en ellos sólo podía ser completada a través de la oración.
c. Y se reunieron en Mizpa: Esto muestra la necesidad espiritual que Israel sentía en ese momento. Ellos expresaron su arrepentimiento dejando lo malo y buscando lo bueno.
i. La experiencia de convicción de pecado no prueba nada. Es nuestra respuesta a esa convicción la que demuestra arrepentimiento.
d. Y sacaron agua, y la derramaron delante de Jehová: En este contexto, una ceremonia de derramamiento de agua demostraba un alma derramada delante de Jehová. Era una expresión de vacío y necesidad.
i. La traducción caldea de este pasaje refleja bien este sentido: “Ellos derramaron su corazón como agua en penitencia delante del Señor”. “Parecían decir en efecto, podríamos desear derramar tantas lágrimas por nuestros pecados como gotas de agua hay en este balde; pero como no podemos hacer esto, he aquí, hacemos lo que podemos”. (Trapp)
ii. Ellos expresaron el mismo corazón que en Lamentaciones 2:19: Levántate, da voces en la noche, al comenzar las vigilias; Derrama como agua tu corazón ante la presencia del Señor.
e. Y ayunaron aquel día, y dijeron allí: Contra Jehová hemos pecado: Israel también expresó su dolor por su pecado mediante el ayuno (un mensaje de que nada más importaba excepto estar bien con Dios) y mediante la confesión (una afirmación directa de culpa y responsabilidad).
i. 1 Juan 1:5-10 deja claro que la confesión es vital para mantener relación con Dios. A medida que Dios nos convence de pecado o pecados que obstaculizan la comunión con Él, debemos confesarlos y recibir el perdón y la purificación para que nuestra relación con Dios continúe sin obstáculos.
ii. Si en verdad es de corazón, es difícil hacer una mejor declaración de confesión que “Contra Jehová hemos pecado”.Esto es casi exactamente lo que David dijo cuando fue confrontado con su pecado en 2 Samuel 12:13.
f. Y juzgó Samuel a los hijos de Israel: Samuel fue el último juez y fue juez sobre Israel como lo fueron los líderes en los días del libro de Jueces. Pero su liderazgo fue más espiritual que militar.
B. Samuel dirige a la nación hacia la victoria.
1. (7) La amenaza filistea.
Cuando oyeron los filisteos que los hijos de Israel estaban reunidos en Mizpa, subieron los príncipes de los filisteos contra Israel; y al oír esto los hijos de Israel, tuvieron temor de los filisteos.
a. Cuando oyeron los filisteos: Los filisteos tenían razón al temer a un Israel arrepentido que buscaba a Dios, porque con Dios luchando por ellos, Israel era invencible.
i. Cuando los filisteos vieron a un Israel humilde y arrepentido, probablemente vieron debilidad. Tal vez hayan dicho, “Miren a esos israelitas débiles. Son tan débiles que claman ante su Dios de esta manera”. Si los filisteos pensaban de esta manera, estaban completamente equivocados.
b. Al oír esto los hijos de Israel, tuvieron temor de los filisteos: Los israelitas no tenían mucho más entendimiento espiritual que los filisteos. Deberían haber tenido más confianza en Jehová.
i. Nuestros sentimientos de confianza pueden engañarnos. En 1 Samuel 4:5 Israel estaba totalmente confiado contra los filisteos, pero su confianza era falsa y pronto fueron derrotados. Aquí Israel está temeroso y seguro de la derrota, y no tiene absolutamente nada de confianza. Parecían tener más fe cuando confiaban en el arca que cuando se habían humillado y arrepentido delante de Jehová. Pero una fe pequeña en el Dios vivo y verdadero es más poderosa que una fe firme en una mentira.
2. (8-9) Samuel ora por la nación.
Entonces dijeron los hijos de Israel a Samuel: No ceses de clamar por nosotros a Jehová nuestro Dios, para que nos guarde de la mano de los filisteos. Y Samuel tomó un cordero de leche y lo sacrificó entero en holocausto a Jehová; y clamó Samuel a Jehová por Israel, y Jehová le oyó.
a. No ceses de clamar por nosotros: La última vez que Israel estuvo en este tipo de situación, dijeron, “Tomemos el arca del pacto y llevémosla con nosotros a la batalla. ¡Así no podremos perder!”. Ahora son mucho más sabios delante de Jehová, y en vez de confiar en el arca hicieron lo correcto y le pidieron a Samuel “no ceses de clamar por nosotros”.
b. Y Samuel tomó un cordero de leche y lo sacrificó entero en holocausto a Jehová; y clamó Samuel: Samuel se el tomó tiempo para ofrecer un sacrificio en un momento tan crítico porque sabía que solo podía orar eficazmente a la luz del sacrificio expiatorio de Dios.
i. Piensen en ese pobre cordero – un cordero de leche – que nunca hirió a nadie y que nunca pecó, sin embargo le cortaron la garganta, su sangre fue derramada, su cuerpo cortado, y su cadáver quemado. ¿Por qué? Porque Samuel e Israel tenían que decir, “Esto es lo que merecemos. Este es el castigo que debería caer sobre nosotros. Te agradecemos Dios por aceptar el castigo de este cordero inocente en nuestro lugar”: Cuando confiamos en el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo (Juan 1:29), decimos lo mismo.
c. Y Jehová le oyó: La batalla aún no ha sido librada y un hostil ejército filisteo se aproximaba. Sin embargo en un sentido real la batalla ya había terminado y había sido ganada, porque Jehová le oyó.
i. La biblia describe a Samuel como un poderoso hombre de oración: Y Samuel entre los que invocaron su nombre; Invocaban a Jehová, y él les respondía (Salmos 99:6).
3. (10-12) Jehová pelea por Israel.
Y aconteció que mientras Samuel sacrificaba el holocausto, los filisteos llegaron para pelear con los hijos de Israel. Mas Jehová tronó aquel día con gran estruendo sobre los filisteos, y los atemorizó, y fueron vencidos delante de Israel. Y saliendo los hijos de Israel de Mizpa, siguieron a los filisteos, hiriéndolos hasta abajo de Bet-car. Tomó luego Samuel una piedra y la puso entre Mizpa y Sen, y le puso por nombre Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová.
a. Jehová tronó aquel día con gran estruendo: Dios peleó desde el cielo en nombre de Israel y derrotó a los filisteos. Esta fue una obra especial de Dios porque los israelitas escucharon el mismo trueno, pero sólo los filisteos se atemorizaron y fueron vencidos. Dios no sólo envió truenos, también envió confusión para los filisteos y confianza para Israel.
i. Ésta era el tipo de victoria que Israel esperaba tener en 1 Samuel 4 cuando llevaron el arca del pacto a la batalla. Si tan solo se hubieran arrepentido y buscado a Jehová como lo hicieron aquí, podrían haber tenido este tipo de victoria hace mucho tiempo.
b. Y le puso por nombre Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová: Samuel sabía que la nación necesitaría recordar esta asombrosa victoria, que le llegó a un Israel humilde y arrepentido. Jehová ganó esta batalla, no Israel – así que llamó a la piedra Eben-ezer, que significa “piedra de ayuda.”
c. Hasta aquí nos ayudó Jehová: Samuel sabía que Jehová había hecho una gran obra, sin embargo también sabía que había mucho más que debía lograrse. De modo que pudo decir, ” Hasta aquí nos ayudó Jehová”.Dios nos ayudó hasta aquí una vez y sus obras pasadas son una promesa de ayuda futura.
i. Hasta aquí nos ayudó Jehová puede significar “hasta este punto en el tiempo” o “hasta este punto geográfico”. Probablemente se tenían los dos significados en mente; a los escritores hebreos les encantaba usar doble significado.
4. (13-14) El éxito de Samuel como juez sobre Israel.
Así fueron sometidos los filisteos, y no volvieron más a entrar en el territorio de Israel; y la mano de Jehová estuvo contra los filisteos todos los días de Samuel. Y fueron restituidas a los hijos de Israel las ciudades que los filisteos habían tomado a los israelitas, desde Ecrón hasta Gat; e Israel libró su territorio de mano de los filisteos. Y hubo paz entre Israel y el amorreo.
a. Y la mano de Jehová estuvo contra los filisteos todos los días de Samuel. . . fueron restituidas a los hijos de Israel las ciudades que los filisteos habían tomado a los israelitas: Samuel no era un hombre militar, pero fue igual o más exitoso que los mejores generales de Israel porque Jehová peleaba por Samuel.
b. Y hubo paz entre Israel y el amorreo: Samuel fue exitoso no sólo como hombre de guerra, sino también como hombre de paz.
5. (15-17) El servicio de Samuel como juez de circuito.
Y juzgó Samuel a Israel todo el tiempo que vivió. Y todos los años iba y daba vuelta a Bet-el, a Gilgal y a Mizpa, y juzgaba a Israel en todos estos lugares. Después volvía a Ramá, porque allí estaba su casa, y allí juzgaba a Israel; y edificó allí un altar a Jehová.
a. Y juzgó Samuel a Israel todo el tiempo que vivió: Samuel fue usado por Dios todos sus días. Algunos jueces terminaron sus ministerios antes de tiempo o en desgracia, pero Samuel terminó bien.
b. Y todos los años iba y daba vuelta. . . y juzgaba a Israel en todos estos lugares: Samuel trabajó duro en su servicio a Jehová. Cada año, Samuel trabajaba duro para ir a todo Israel para ayudar a solucionar conflictos y promover justicia.
c. Después volvía a Ramá. . . y edificó allí un altar a Jehová: Samuel permaneció fiel a Jehová. Un altar era un lugar de sacrificio y adoración, y Samuel tuvo una relación constante con Jehová en sacrificio y adoración.
©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com