1 Samuel 18 – El conflicto entre Saúl y David

A. David, Jonatán, y Saúl.

1. (1-4) La amistad entre David y Jonatán.

Aconteció que cuando él hubo acabado de hablar con Saúl, el alma de Jonatán quedó ligada con la de David, y lo amó Jonatán como a sí mismo. Y Saúl le tomó aquel día, y no le dejó volver a casa de su padre. E hicieron pacto Jonatán y David, porque él le amaba como a sí mismo. Y Jonatán se quitó el manto que llevaba, y se lo dio a David, y otras ropas suyas, hasta su espada, su arco y su talabarte.

a. Aconteció que cuando él hubo acabado de hablar con Saúl: Cuando David terminó la conversación de “después de matar a Goliat” con Saúl, su fama en Israel estuvo asegurada. Él realizó un extraordinario acto heroico y fue inicialmente bienvenido por el liderazgo de Israel.

b. El alma de Jonatán quedó ligada con la de David, y lo amó Jonatán como a sí mismo: Jonatán, el hijo de Saúl, apareció antes en 1 de Samuel 14. Él es el extraordinariamente valiente hombre de fe que inició una batalla en solitario contra los filisteos.

i. Jonatán era muy parecido a David. Eran aproximadamente de la misma edad, aunque Jonatán era por lo menos cinco años mayor. Ambos eran osados, ambos eran hombres de gran confianza en Dios, y ambos eran hombres de acción. Sobre todo, ambos tenían una relación real con Dios.

ii. Al mismo tiempo Jonatán y David eran diferentes. Jonatán era el hijo primogénito del rey (1 de Crónicas 9:39) y David era el hijo menor de un granjero. Esto hacía a Jonatán más que un príncipe, él era el príncipe heredero. A las expectativas de todos, Jonatán sería el próximo rey de Israel.

c. El alma de Jonatán quedó ligada con la de David: Esto sucedió después de que David hubo acabado de hablar con Saúl. Jonatán escuchó a David dar una explicación detallada de su corazón y su fe en el Dios viviente, y entonces Jonatán supo que él y David tenían el mismo corazón. Ellos no hubieran podido ser amigos tan íntimos hasta que Jonatán supo eso sobre David.

i. De la forma en que la mayoría de la gente piensa, Jonatán era el que más tenía que temer del éxito de David. Sin embargo, amaba a David, porque lo que ellos tenían en común – una relación real con Jehová Dios – era mucho más grande que cualquier diferencia.

d. Y Saúl le tomó aquel día: David nunca más sería sólo un pastor. David aún tenía el corazón de un pastor, pero sería más que un pastor.

e. E hicieron pacto Jonatán y David: Dos hombres, cada uno en camino al mismo trono – aún así, hicieron pacto de amistad que probaría ser más fuerte que los celos, la envidia y la ambición.

f. Y Jonatán se quitó el manto que llevaba, y se lo dio a David, y otras ropas suyas, hasta su espada, su arco y su talabarte: Cuando Jonatán le dio a David el manto y su espada, dijo con esta acción, “Tú serás el próximo rey de Israel. Debes ser vestido y armado como el príncipe heredero. La mano de Dios está contigo y estas te pertenecen por derecho”. Debido a que Jonatán estaba rendido a Dios podía ver la mano de Jehová con David. Él conocía el destino de David y estaba perfectamente dispuesto a hacer a un lado su ambición para honrar la elección de Jehová.

g. Se lo dio a David: Por su parte, David recibió el manto y la espada de Jonatán. Pero no dijo ni pensó, “Bien Jonatán, todos vemos quién es el jefe por aquí. Ahora apártate de mi camino porque voy a reemplazar a tu padre tan pronto como sea posible”. Pasarían alrededor de 20 años para que David recibiera el trono de Israel y reemplazara a Saúl. Si Jonatán estaba listo para reconocer a David como la elección de Dios para el próximo rey, David estaba dispuesto a dejar que Dios lo pusiera en el trono, y a que lo hiciera en Su tiempo. Ambos hombres estaban totalmente sometidos a Jehová.

i. David no pudo recibir la armadura de Saúl pero recibió la armadura de Jonatán, no sólo porque eran más similares en tamaño. Más importante aún, compartían la misma alma. Ambos amaban a Dios y vivían más para Él y para los demás que para ellos mismos. Tanto David como Jonatán sabían que si las circunstancias fueran al revés, David haría lo mismo por Jonatán – porque compartían la misma alma.

ii. Si el asunto de “¿quién será el próximo rey?” no estuviera resuelto en los corazones de David y Jonatán, nunca podrían haber tenido este tipo de amor y amistad tan cercanos. Se amaban más que al trono de Israel porque amaban más a Jehová que al trono de Israel.

iii. Algunas personas interpretan una relación homosexual en el amor entre David y Jonatán. Piensan que dos hombres no pueden amarse sin ser algo que la biblia claramente dice que es inmoral. Pero la relación entre David Jonatán muestra que la biblia no condena el verdadero amor entre hombres, sólo a una relación sexual entre hombres.

2. (5-9) Los celos de Saúl contra David

Y salía David a dondequiera que Saúl le enviaba, y se portaba prudentemente. Y lo puso Saúl sobre gente de guerra, y era acepto a los ojos de todo el pueblo, y a los ojos de los siervos de Saúl. Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música. Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían: Saúl hirió a sus miles, Y David a sus diez miles. Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles, y a mí miles; no le falta más que el reino. Y desde aquel día Saúl no miró con buenos ojos a David.

a. David Y salía David a dondequiera que Saúl le enviaba, y se portaba prudentemente: David estaba completamente sometido a Saúl y procuró servirle prudentemente en todos los sentidos. David conocía la forma de ser bendecido. Era trabajar duro para ser una bendición para su jefe. No socavaría la posición ni la autoridad de Saúl de ninguna manera.

i. ¿A dónde envió Saúl a David? Lo puso Saúl sobre gente de guerra. Se trata de un ascenso notable – un hombre de unos veinte años es ahora un “general” en el ejército de Israel.

b. Y era acepto a los ojos de todo el pueblo, y a los ojos de los siervos de Saúl: David rápidamente se volvió popular entre el pueblo y entre los líderes (los siervos de Saúl). Esto no se debió a que David haya sido un hombre adulador que buscara agradar a los demás. David no buscó esta popularidad y no dependió de ninguna herramienta carnal para ganarla. David se volvió popular porque era un hombre conforme al corazón de Dios y el pueblo pudo ver el amor, la sabiduría, y la paz de Dios en él.

i. Podemos imaginar que la reacción inicial de Saúl fue positiva. “Bien”, pensó. “Mi nuevo asistente es bien recibido. Todos piensan que tomé una decisión brillante al incorporarlo al personal. Esto está funcionando bien”.

c. Saúl hirió a sus miles, Y David a sus diez miles: David se volvió inesperadamente popular. Cuando el pueblo de Israel empezó a cantar, todo mundo sabía que David era más popular que Saúl.

i. Cuando mujeres cantan y danzan en tu honor, eres popular. Cuando pasa en todas las ciudades de Israel, eres popular. ¡Esta canción era el éxito número uno en Israel! David recibió prudentemente esta popularidad porque 1 de Samuel 18:14 dice sobre este periodo de la vida de David: Y David se conducía prudentemente en todos sus asuntos, y Jehová estaba con él.

ii. Cuando usted es elogiado y popular, no es prudente dejar que se le suba a la cabeza. David se alegraba de oír estas palabras de afirmación, pero no dejó que dominaran su pensamiento ni que cambiaran su opinión de sí mismo. Él mantuvo el corazón y la mente de un pastor, incluso en una temporada de gran éxito.

iii. Esto no era fácil. Esto era una prueba, una que el diablo quería usar para derribar a David y una que Jehová quería usar para edificar a David. David nunca recibió este tipo de afirmación cuando cuidaba de las ovejas. Las ovejas nunca le bailaron ni le cantaron para elogiarlo. Ahora David enfrenta el desafío del éxito. Muchas personas que manejan bien la adversidad caen ante el desafío del éxito.

iv. Pero debido a que David pudo estar muy contento y feliz delante de Jehová al cuidar de las ovejas sin elogios ni popularidad, esto puso su corazón en el lugar correcto para manejarlo cuando recibió elogios y popularidad. Afuera en el campo del pastor, David tuvo su corazón determinado: “Estoy haciendo esto para Jehová. Amo a Jehová, y mi recompensa viene de Él”. Debido a que su corazón fue recto en el campo del pastor, David se comportó prudentemente en todo lo que hacía cuando los elogios y la popularidad llegaron.

v. También vemos esto por la reacción de David al desprecio y a la crítica de su hermano Eliab (1 de Samuel 17:28-30). Cuando Eliab despreció y criticó a David no le gustó, pero no lo destruyó. No lo desanimó. La mayoría de las personas se corrompen con los elogios y la popularidad al mismo grado que son destruidos por el desprecio y la crítica. Debido a lo que Dios edificó en él en el campo del pastor, David podía vivir más su vida para Jehová que para las personas. No era que David no se interesara por las personas o por lo que pensaran, pero podía poner la opinión del hombre en la perspectiva correcta porque le importaba más la opinión de Dios.

d. Y se enojó Saúl en gran manera: Conociendo su carácter, no nos sorprendemos de la reacción de Saúl. Saúl no tenía una relación estrecha ni correcta con el Señor. Todo lo que tenía para afirmar su corazón era la alabanza del hombre, así que cuando David fue más alabado, realmente le molestó a Saúl.

i. Es una mala señal en un líder cuando resiente o se siente amenazado por el éxito de un subordinado. Es una señal clara de debilidad en el líder.

ii. No le falta más que el reino. Esta es una reacción exagerada típica de los orgullosos e inseguros. Saúl podría haber pensado: “David lo hizo bien y hoy tiene su gloria. Seguiré sirviendo al Señor y recibiré este tipo de alabanza otro día “. En cambio, reaccionó exageradamente y dijo: “No le falta más que el reino“.

iii. Sin embargo, hay otra dinámica en acción en Saúl: una conciencia culpable. Él recordaba que el profeta Samuel le había dicho, “Jehová te ha desechado como rey sobre Israel“. Un hombre honorable dimitiría, pero si Saúl fuera un hombre honorable, no estaría en este lío. En cambio, Saúl se preocupaba constantemente, “¿Cuándo me quitará Dios del trono? ¿Quién se levantará para reemplazarme?” Esta inseguridad, nacida de la culpa, también hizo que Saúl reaccionara de forma exagerada ante los elogios y la popularidad que recibió David.

iv. Sin embargo la multitud sí elogiaba a Saúl. Ellos cantaban, “Saúl mato a sus miles“. Para Saúl, no era suficiente matar a miles mientras alguien más mataba a diez miles.

e. Y desde aquel día Saúl no miró con buenos ojos a David: Ahora la mente de Saúl está llena de sospecha hacia David. Empezó a escuchar casi todo lo que David decía con oídos sospechosos. Veía las acciones de David con ojos sospechosos. Sus pensamientos estaban retorcidos por la sospecha.

i. “Cedió a ese vicio diabólico de la envidia, que en adelante fue como fuego en su seno, como un gusano que continuamente le roía las entrañas … Lo miraba con mal de ojo: escudriñando todas sus acciones, y sacando lo peor de todo”. (Trapp)

B. El primer intento de Saúl de asesinar a David.

1. (10) La escena en la corte real de Saúl.

Aconteció al otro día, que un espíritu malo de parte de Dios tomó a Saúl, y él desvariaba en medio de la casa. David tocaba con su mano como los otros días; y tenía Saúl la lanza en la mano.

a. Un espíritu malo de parte de Dios tomó a Saúl: Este espíritu malo fue mencionado por primera vez en 1 de Samuel 16:14. Vino sobre Saúl, permitido por Jehová, cuando Su espíritu se apartó de Saúl (1 de Samuel 16:14). David fue traído a la corte de Saúl para tocar música, para que Saúl fuera ministrado en ella y se tranquilizara cuando sufriera a causa del espíritu malo.

b. Y él desvariaba en medio de la casa: En la versión en inglés, se utiliza la palabra profetizaba en vez de desvariaba (N. del T.). ¿Por qué un espíritu malo haría profetizar a Saúl? Saúl no hablaba de parte de Jehová en absoluto, y profetizar es una mala traducción aquí. La gramática hebrea aquí puede usarse tanto para desvaríos ociosos como para profecía de Jehová. Saúl simplemente balbuceaba como un hombre que no estaba en sus cabales.

i. “Estaba fuera de sí, hacía oraciones, súplicas, y maldiciones incoherentes: ‘Dios preserva mi vida,’ ‘Destruye a mis enemigos,’ u oraciones semejantes, podrían escapársele con frecuencia en su agitado estado mental”. (Clarke)

c. David tocaba con su mano: Las mismas manos que habían matado a Goliat y llevaron el trofeo de su cabeza degollada, ahora tocaban dulcemente música para Jehová y ministraban a un rey atribulado.

i. David evidente tenía manos hábiles, tanto en la guerra como en el ministerio de música. Pero más notable era su corazón humilde. La mayoría de los hombres, después de la fama que le llegó a David, considerarían este tipo de servicio como inferior a ellos. David era general en el ejército, famoso en todo Israel, y tenía mujeres que danzaban y le cantaban alabanzas. Sin embargo realizaba fielmente este trabajo de ministrar personalmente a Saúl en la música.

d. Tenía Saúl la lanza en la mano: David tenía un arpa, y tocaba con su mano. Pero en la mano de Saúl había violencia.

2. (11) Saúl arroja una lanza a David.

Y arrojó Saúl la lanza, diciendo: Enclavaré a David a la pared. Pero David lo evadió dos veces.

a. Y arrojó Saúl la lanza: Si uno tiene una lanza en la mano, probablemente la use. Mientras Saúl sostenía la lanza, el espíritu malo se movió sobre él y en vez de ser ministrado por la música de David, el espíritu malo impulsó a Saúl a atacar a David.

i. Debemos decir que el espíritu malo no “forzó” a Saúl a hacer esto. Pero el espíritu lo impulsó. Saúl pudo decidir, “¿Haré esto o no?” y él eligió arrojar la lanza.

ii. Este mismo ministerio de música alguna vez tranquilizó a Saúl, y lo hizo tener alivio y sentirse mejor, aliviándolo del espíritu malo (1 de Samuel 16:23). Ahora, no tiene ningún efecto, y Saúl incluso responde al ministerio de David con un intento de asesinato. El ministerio y el corazón de David no cambiaron – Saúl cambió, y para mal. Saúl se negó a recibir del ministerio de David y su rechazo preparó el escenario para este tipo de violencia.

b. Diciendo: Enclavaré a David a la pared: Esto no fue un accidente. Tal vez Saúl haya querido que pareciera un accidente. Aunque no lo admitiría, su corazón se había decidido a matar a David. No quería solamente asustarlo ni herirlo. Él quería que la lanza asestara un golpe mortal, que atravesara totalmente el cuerpo.

c. Pero David lo evadió dos veces: Saúl arrojó la lanza, y falló. Tal vez la puntería de Saúl no era buena, afectada por su pobre estado mental y emocional. Tal vez David vio la lanza y se agachó. Tal vez Dios simplemente desvió sobrenaturalmente la lanza. De cualquier forma, sucedió, la lanza falló y cayó al suelo. Y David lo evadió dos veces.

i. De muchos de nosotros se hubiera escrito, “Y fulano de tal recogió la lanza del suelo y se acercó a Saúl y le dijo, ‘Si Goliat no pudo asustarme, tú tampoco puedes. Si Goliat no pudo matarme, tú tampoco puedes’. Y con un solo golpe de lanza, fulano de tal clavó a Saúl en la pared”.

ii. Pero David no levantó la lanza. No la arrojó de regreso. Simplemente la evadió. Nadie podría culpar a David si contraatacaba; fácilmente podría llamarse defensa propia. Pero David tenía un corazón diferente. No era cuestión de sí podría salirse con la suya, sino era cuestión de lo que el corazón de Dios quería. David estaba decidido a dejar la situación en las manos de Dios, y no tomar el trono él mismo. Dios tendría que encargarse de Saúl, porque David no lo haría.

iii. David dijo, “Jehová, Tú pusiste a Saúl en el trono. Y sé que se supone que soy el próximo rey, porque Tú me diste Tu promesa y Tu unción. Pero sacar a Saúl del camino es Tu asunto. Yo no lo tocaré, porque es una autoridad designada por Ti. Tu comenzaste su reinado, así que Tú termínalo”.

d. Pero David lo evadió dos veces: Quizás, las palabras más notables de este capítulo son: dos veces. Esto significa que Saúl arrojó la lanza dos veces. Esto significa que Saúl falló dos veces. Esto significa que después de haber fallado la primera vez, David regresó y tocó otra vez.

i. Aquí es donde muchos pintan su línea. “Miren, me sentaré con la diana en el pecho una vez y esquivaré la lanza. Incluso dejaré la lanza en el suelo y resistiré la tentación de arrojarla de vuelta. Pero una lanza rosando mi cabeza es suficiente. Una fallada y he cumplido mi cuota. Una vez, es sumisión a Jehová. Dos veces, es estupidez”.

ii. Incluso podríamos decir que la sumisión de David ni siquiera comenzó hasta que volvió a sentarse a tocar para Saúl después del primer atentado contra su vida. Ahora conocía el peligro, ahora conocía el corazón de Saúl y ahora tenía que confiar en Dios.

iii. Si David contraatacaba después de resistir la tentación la primera vez, podemos suponer que David todavía se convertiría en rey. Podemos suponer que todavía admiraríamos el corazón de David al no arrojar la lanza de vuelta la primera vez. Pero si David hubiera hecho esto, hubiera renunciado a su destino como el rey más grande de Israel. Aún sería rey, pero no el rey que Jehová lo había destinado a ser.

iv. “Al hacer esta pequeña hazaña de devolver lanzas arrojadas, probarás muchas cosas. Eres valiente, defiendes lo que es justo. Te enfrentas con valentía al mal. Eres duro y no te dejas pisotear. No tolerarás la injusticia ni el trato injusto. Eres el defensor de la fe, el guardián de la llama, el detector de toda herejía. No serás agraviado. Todos estos atributos se combinan para demostrar que obviamente también eres un candidato a la realeza. Sí, quizás eres el ungido del Señor. Conforme a la orden del rey Saúl“. (Gene Edwards, Cuento de Tres Reyes)

3. (12-16) David es transferido del palacio al ejército.

Mas Saúl estaba temeroso de David, por cuanto Jehová estaba con él, y se había apartado de Saúl; por lo cual Saúl lo alejó de sí, y le hizo jefe de mil; y salía y entraba delante del pueblo. Y David se conducía prudentemente en todos sus asuntos, y Jehová estaba con él. Y viendo Saúl que se portaba tan prudentemente, tenía temor de él. Mas todo Israel y Judá amaba a David, porque él salía y entraba delante de ellos.

a. Mas Saúl estaba temeroso de David, por cuanto Jehová estaba con él: Al juzgar por la apariencia externa, Saúl está en control. Saúl tiene el trono. Saúl tiene el ejército. Saúl tiene las lanzas. Sin embargo Saúl estaba temeroso de David, por cuanto Jehová estaba con él.

b. Y se había apartado de Saúl: Esto hizo que Saúl se sintiera incómodo con David, e hizo difícil tener a David cerca de él (por lo cual Saúl lo alejó de sí).

c. Le hizo jefe de mil: El deseo de Saúl no era bendecir a David, sino acomodar las cosas para que recibiera daño. Los celos de Saúl lo habían vuelto manipulador, trabajando un plan secreto y oscuro contra David.

i. “Esto fue con el pretexto de honrarlo, cuando en realidad solo era para deshacerse del objeto de su envidia”. (Clarke)

d. Y David se conducía prudentemente en todos sus asuntos, y Jehová estaba con él: No es sencillo conducirse prudentemente cuando se arrojan lanzas contra uno. No es sencillo comportarse prudentemente cuando se es expulsado del palacio. No es sencillo conducirse prudentemente cuando uno tiene enemigos poderosos y decididos. Incluso en medio de todas esas terribles circunstancias, usted puede conducirse prudentemente en todos sus caminos cuando Jehová está con usted.

e. Mas todo Israel y Judá amaba a David: David se volvió incluso más popular porque Dios estaba con él. David fue tentado a usar esta popularidad como una lanza contra Saúl, pero se negó.

f. Porque él salía y entraba: Esta es una figura retórica hebrea que significa: “David llevó a cabo operaciones militares con éxito”. La mano del éxito de Dios estaba con David a pesar de que Saúl estaba en su contra. Saúl podía atacar y herir a David de muchas formas, pero Dios no permitiría que Saúl obtuviera la victoria.

i. David nunca fue una víctima. Parecía una víctima, porque fue atacado. Pero David se conducía prudentemente en todos sus asuntos, así que no se entregó al estado mental de una víctima, pensando que su destino estaba en manos de su atacante. David sabía que su destino estaba en manos de Dios, y podía tener paz en ello.

C. Saúl tiende una trampa para David pero éste escapa y es bendecido.

1. (17-19) Saúl tiene la intención de matar a David.

Entonces dijo Saúl a David: He aquí, yo te daré Merab mi hija mayor por mujer, con tal que me seas hombre valiente, y pelees las batallas de Jehová. Mas Saúl decía: No será mi mano contra él, sino que será contra él la mano de los filisteos. Pero David respondió a Saúl: ¿Quién soy yo, o qué es mi vida, o la familia de mi padre en Israel, para que yo sea yerno del rey? Y llegado el tiempo en que Merab hija de Saúl se había de dar a David, fue dada por mujer a Adriel meholatita.

a. He aquí, yo te daré Merab mi hija mayor: Saúl había prometido entregar. . . a su hija al hombre que matara a Goliat (1 de Samuel 17:25). Ahora, Saúl cumple su promesa y le ofrece a Merab, su hija mayor, a David.

b. No será mi mano contra él, sino que será contra él la mano de los filisteos: La oferta de matrimonio parecía un gesto de bondad y amabilidad de parte de Saúl. Se suponía que David debía creer, “Saúl me ha perdonado. Ha dejado que el pasado quede atrás, él me arrojó dos lanzas antes, pero todo eso ha terminado ya”. Pero Saúl no pensaba de esa manera en absoluto. En su corazón había un motivo diferente.

i. Esta era una trampa debido a la dote que Saúl iba a pedir. En aquel entonces, se requería una dote siempre que un hombre iba a casarse. La dote era pagada al padre de la novia, y mientras más importante y prominente fueran la novia y su familia, más alta debía ser la dote. Como David era de una familia humilde, no había forma de que pudiera pagar la dote por la hija de un rey. Saúl sabía esto y exigiría que David matara 100 filisteos como dote. Saúl pensaba que el trabajo sería demasiado grande y peligroso para David, y que sería asesinado tratando de ganar la dote para casarse con la hija del rey.

ii. Saúl aún quería a David muerto y enterrado. Pero ahora, en vez de arrojar él mismo las lanzas, utilizaba astutamente la manipulación para hacer que David fuera asesinado. Él pensaba, “Las lanzas y espadas filisteas son tan afiladas como la mía. Puedo dejar que ellos hagan el trabajo por mí. Desde una postura carnal, este era un plan bastante inteligente por parte de Saúl.

iii. Fue inteligente en la carne, pero Dios no honraría la manipulación de Saúl. La manipulación usa planes secretos y motivos ocultos. Es engañosa y sigilosa. La manipulación intenta mover a las personas y eventos para lograr sus planes ocultos. Puede ser inteligente en la carne pero nunca será bendecida por Dios.

c. Con tal que me seas hombre valiente, y pelees las batallas de Jehová: Saúl trabaja como un ingenioso manipulador. Toma ventaja de la lealtad y el patriotismo de David (que me seas hombre valiente). Se aprovecha del valor y el corazón de David para Jehová (pelees las batallas de Jehová).

d. Pero David respondió a Saúl: ¿Quién soy yo. . . para que yo sea yerno del rey? David no estaba intentando ser más listo que Saúl. David no tenía idea de lo que estaba sucediendo en el corazón de Saúl. David simplemente tenía un corazón humilde delante de Jehová, y Dios lo protegió contra la manipulación de Saúl.

i. La pregunta “¿Quién soy yo?” muestra el humilde corazón de David. Él era famoso a nivel nacional. Todo Israel lo amaba. Todo el personal de Saúl lo amaba. Jonatán, el príncipe heredero, lo amaba. En todo Israel, las mujeres danzaban y cantaban en su honor. Sin embargo, cuando le ofrecieron la mano de Merab a David, él no pensó: “Bueno, ya era hora. Me alegro de que alguien lo notara”.

e. Y llegado el tiempo en que Merab hija de Saúl se había de dar a David, fue dada por mujer a Adriel: Cuando David se mostró renuente a casarse con Merab, Saúl intentó otra estrategia. De repente se la entregó a otro hombre, para tratar de hacer que David se enojara o se pusiera celoso.

i. Saúl “retiró traidoramente la oferta cuando se acercaba el momento de las nupcias, con la intención de despertar su espíritu ardiente para tomar represalias y, por lo tanto, estar sujeto al cargo de traición. Pero todos sus esfuerzos fracasaron en despertar siquiera un impulso pasajero de venganza”. (Meyer)

2. (20-25) El acuerdo de David para casarse con Mical.

Pero Mical la otra hija de Saúl amaba a David; y fue dicho a Saúl, y le pareció bien a sus ojos. Y Saúl dijo: Yo se la daré, para que le sea por lazo, y para que la mano de los filisteos sea contra él. Dijo, pues, Saúl a David por segunda vez: Tú serás mi yerno hoy. Y mandó Saúl a sus siervos: Hablad en secreto a David, diciéndole: He aquí el rey te ama, y todos sus siervos te quieren bien; sé, pues, yerno del rey. Los criados de Saúl hablaron estas palabras a los oídos de David. Y David dijo: ¿Os parece a vosotros que es poco ser yerno del rey, siendo yo un hombre pobre y de ninguna estima? Y los criados de Saúl le dieron la respuesta, diciendo: Tales palabras ha dicho David. Y Saúl dijo: Decid así a David: El rey no desea la dote, sino cien prepucios de filisteos, para que sea tomada venganza de los enemigos del rey. Pero Saúl pensaba hacer caer a David en manos de los filisteos.

a. Pero Mical la otra hija de Saúl amaba a David: Saúl se alegró de escuchar esto (le pareció bien a sus ojos). No nos sorprende que Mical se sintiera atraída por David, debido a su carácter, cualidades y fama. Pero como será evidente más adelante en el matrimonio de David con Mical, ella realmente no se sentía atraída por el corazón de David para Jehová.

b. Para que le sea por lazo: Esto podía haber significado dos cosas diferentes. Primero, obviamente Saúl quería que David sufriera consecuencias a causa de la dote. Pero también puede ser que Saúl conociera el carácter y el corazón de Mical, y supiera que ella iba a ser una carga para él como esposa, como resultó ser el caso en cierto sentido (2 de Samuel 6:16-23).

c. El rey no desea la dote, sino cien prepucios de filisteos: Ahora, Saúl continúa con su astuto plan. “David no se casará con Mical porque no tiene una dote lo suficientemente grande. Él es demasiado humilde como para preguntarme por los términos, así que yo se los sugeriré”. Incluso la manera en que lo dice es ingeniosa: “ El rey no desea la dote“. Eso lo hace sonar como si Saúl no quisiera nada de David más que “cien prepucios de filisteos“. Eso hace que parezca que Saúl no está pidiendo mucho, cuando en realidad está pidiendo algo mucho más grande que mucho dinero. Le pide a David que ponga su vida en gran peligro, porque Saúl lo quiere muerto.

i. Incluso la petición específica – cien prepucios de filisteos – era manipuladora. Estaba diseñada para provocar a David (“Ve tras esos filisteos incircuncisos”). Fue diseñada para ser difícil, porque los filisteos obviamente tendrían que estar muertos. Y estaba diseñada para que los filisteos se enfurecieran por completo con David, porque desde su perspectiva, no sólo habrían asesinado a sus hombres, sino que sus cadáveres habrían sido profanados. “Aquí hay un hermoso guante cubriendo una mano sucia”. (Trapp)

3. (26-27) David cumple la petición de la dote de Saúl y se casa con Mical.

Cuando sus siervos declararon a David estas palabras, pareció bien la cosa a los ojos de David, para ser yerno del rey. Y antes que el plazo se cumpliese, se levantó David y se fue con su gente, y mató a doscientos hombres de los filisteos; y trajo David los prepucios de ellos y los entregó todos al rey, a fin de hacerse yerno del rey. Y Saúl le dio su hija Mical por mujer.

a. Pareció bien la cosa a los ojos de David: David tenía un corazón tan puro y humilde que parecía estar ciego a la manipulación y la astucia de Saúl. Un hombre sencillo puede sobrevivir en medio de tanta traición cuando Dios está con él.

i. Muchos hombres dirían: “¿Dote? ¿Quieres una dote? Prometiste entregar a tu hija al hombre que matara a Goliat. Si quieres ver mi dote, observa la tumba de diez pies en el valle de Ela. Eso es suficiente dote. ¡Exijo mis derechos!”. Pero David humildemente accedió a la demanda de Saúl por una dote.

b. Se levantó David y se fue con su gente, y mató a doscientos hombres de los filisteos: David respondió al intento de manipulación de Saúl tomando control de la situación y siendo un siervo humilde, y dando más de lo que se le había pedido.

c. Y trajo David los prepucios de ellos y los entregó todos al rey: Hay muchas ocasiones en las que desearíamos que hubiera una biblia visual, o que pudiéramos ver eventos bíblicos exactamente cómo sucedieron. Esta es una ocasión en la que nos alegramos de que la biblia no sea Ilustrada.

4. (28-30) La constante y creciente popularidad de David.

Pero Saúl, viendo y considerando que Jehová estaba con David, y que su hija Mical lo amaba, tuvo más temor de David; y fue Saúl enemigo de David todos los días. Y salieron a campaña los príncipes de los filisteos; y cada vez que salían, David tenía más éxito que todos los siervos de Saúl, por lo cual se hizo de mucha estima su nombre.

a. Pero Saúl, viendo y considerando que Jehová estaba con David: Saúl no usó este conocimiento para dejar de intentar matar a David. No encontró en su corazón respetar a David y abrir un camino para que la elección de Jehová llegara al trono sin problemas. En cambio, cuanto más se acercaba David al Señor, más se alejaba de Saúl y Saúl tenía más temor de David.

b. Y salieron a campaña los príncipes de los filisteos: El astuto plan de Saúl contra David aún continuaba. Sin duda, los filisteos salieron a campaña contra David en represalia por lo que sentían que era una terrible vergüenza contra el pueblo filisteo. Saúl quería convertir a David en un hombre marcado y lo consiguió.

c. David tenía más éxito que todos los siervos de Saúl, por lo cual se hizo de mucha estima su nombre: El plan de Saúl fracasó y le salió contraproducente. David no sólo seguía con vida, sino que era más popular y estaba más cerca de Jehová que nunca. Saúl no había terminado y usará más manipulación, astucia y violencia para atacar a David.

i. El prudente comportamiento de David y la alta estima estaban conectados íntimamente con su corazón humilde. Lo mismo es verdad (en un sentido más grande) del Hijo de David, Jesucristo. Filipenses 2:9 dice de Jesús,Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre. ¿Por qué fue que el nombre de Jesús se hizo de mucha estima? Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz (Filipenses 2:5-8). Esta mente, este corazón, estaba en David. Esta mente, este corazón, está en Jesús. Dios quiere que esta mente, este corazón, estén en cada uno de nosotros.

©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com