2 Corintios 2 – La estrategia de Satanás y la victoria de Jesús

A. El cambio de planes de Pablo: más razones del motivo por el que los corintios malinterpretaron la causa por la que él no fue a ellos la segunda vez.

1. (1-2) Pablo recuerda su triste visita a Corinto.

Esto, pues, determiné para conmigo, no ir otra vez a vosotros con tristeza. Porque si yo os contristo, ¿quién será luego el que me alegre, sino aquel a quien yo contristé?

a. Determiné para conmigo: Llevando a cabo la línea de pensamiento del capítulo uno, Pablo se defiende de las acusaciones de los corintios cristianos. Algunos de entre ellos lo criticaron porque había cambiado sus planes de viaje y no fue cuando lo planeó. Ellos utilizaron este cambio de planes para decir de Pablo: «Él es de poco fiar, no es digno de confianza. No necesitamos escucharlo en nada». Pero Pablo explica que había muchas razones por las que no pudo ir como planeó, una de ellas era librar a los corintios (2 Corintios 1:23).

b. No ir otra vez a vosotros con tristeza: La visita más reciente de Pablo a Corinto estuvo llena de conflictos y de disgustos. Así que él determinó que no haría otra «triste» visita a los corintios.

i. «Debido a los escándalos que había entre ellos, él no los podía ver cómodamente; y, por lo tanto, determinó no verlos hasta que tuviera una razón para creer que esos males habían terminado». (Clarke)

c. Porque si yo os contristo, ¿quién será luego el que me alegre? Pablo también sabía que otra triste visita no sería bueno para él. El conflicto constante con los corintios cristianos podría en realidad dañar su relación con ellos.

i. Al parecer Pablo pensó que sería mejor darles a los corintios cristianos un poco de espacio para que se arrepintieran y para que se despabilaran. Él no quería reprenderlos y amonestarlos todo el tiempo. Ya que este era el corazón de Pablo, él sabía que otra visita del mismo tipo sería de poco beneficio para ambos, o sea, para Pablo y para los corintios cristianos.

2. (3-4) En lugar de una segunda visita, Pablo escribió una carta

Y esto mismo os escribí, para que cuando llegue no tenga tristeza de parte de aquellos de quienes me debiera gozar; confiando en vosotros todos que mi gozo es el de todos vosotros. Porque por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí con muchas lágrimas, no para que fueseis contristados, sino para que supieseis cuán grande es el amor que os tengo.

a. Y esto mismo os escribí: Pablo razonó de una manera sabia que dadas las circunstancias, una carta era mejor que una visita personal. Una carta podría mostrar el corazón de Pablo, y así no dar oportunidad para el deterioro de su relación con ellos. Les daría lugar para que se arrepintieran, y para que se pusieran bien para con Dios y con Pablo otra vez.

i. ¿Dónde está esta carta de la cual habla Pablo? Algunos buenos eruditos ven la «carta severa» como 1 Corintios, pero parece mejor pensar que es otra carta que no tenemos. ¿Esto significa que algo falta en nuestras Biblias? Para nada. No todas las cartas que Pablo escribió eran escritura inspirada para todo el pueblo de Dios en todos los tiempos. Podemos confiar que lo que Pablo escribió en la carta que falta era perfecto para los corintios cristianos en ese tiempo, pero no perfecto para nosotros, de otra manera Dios la hubiera preservado. No debemos de pensar que todo lo que Pablo u otros escritores de la Biblia escribieron era necesariamente Escritura inspirada.

b. Para que cuando llegue no tenga tristeza: Pablo esperaba que esta carta sacaría de en medio toda obra dolorosa. Entonces, para cuando él los visitara personalmente, sería una visita placentera, porque ellos habrían aprovechado la oportunidad que él les dio para hacer lo correcto.

c. De parte de aquellos de quienes me debiera gozar: La mala conducta de los corintios cristianos era más problemática al considerar la manera en que ellos debieron de tratar al apóstol, quien les dio tanto.

i. «Todos los males, son más problemáticos cuando aparecen fuera del lugar donde comúnmente deberían estar, como por ejemplo: la impiedad en los que profesan ser cristianos, la injusticia en los jueces, o un pueblo malagradecido o poco dócil con su pastor». (Trapp)

d. Por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí: Pablo no disfrutaba confrontar a los corintios cristianos. Era algo difícil de hacer para él, y lo hizo con muchas lágrimas. Su meta no era contristarlos (que fueseis contristados), sino que supieran el amor que les tenía (cuán grande es el amor que os tengo).

i. Tomaría algo de madurez para el corintio cristiano recibir la corrección de Pablo de esta manera. Es fácil para nosotros pensar que una persona que nos ofrece corrección es nuestro enemigo, y algunas veces que está en contra de nosotros. Pero, usualmente, el que nos trae corrección es porque nos ama, de la manera que Pablo amaba a los cristianos de Corinto. Su meta no era contristarlos, sino mostrarles su amor.

ii. «Donde he conocido que existe una medida de desafecto hacia mí, no lo he admitido como tal, a menos que haya sido forzado a hacerlo; al contrario, he actuado hacia la persona contraria con más cortesía y amabilidad, y no he escuchado nada más sobre el asunto. Si hubiera tratado al buen hombre como mi oponente, él habría hecho su mejor esfuerzo para tomar la parte que se le asignó, y llevarla a cabo para llevarse el crédito». (Spurgeon)

e. Os escribí con muchas lágrimas: «Las epístolas de san Pablo fueron escritas más con lágrimas que con tinta». (Trapp)

B. La apelación de Pablo para que perdonen al hermano que ha pecado

1. (5-7) Pablo recomienda que los corintios cristianos perdonen al hermano que ha pecado entre ellos (y se ha arrepentido)

Pero si alguno me ha causado tristeza, no me la ha causado a mí solo, sino en cierto modo (por no exagerar) a todos vosotros. Le basta a tal persona esta reprensión hecha por muchos; así que, al contrario, vosotros más bien debéis perdonarle y consolarle, para que no sea consumido de demasiada tristeza.

a. Si alguno me ha causado tristeza: Pablo muestra una verdadera sabiduría y compasión pastoral. Él se refiere a una persona en específico entre los corintios, pero no nombra al hombre. Ciertamente, este hombre debió de haber estado feliz de que su nombre no hubiera sido grabado en la Palabra eterna de Dios.

b. ¿Quién es este hombre? Quizás es el mismo hombre que Pablo les dijo a los corintios cristianos que confrontaran en 1 Corintios 5. La frase «a tal persona» es utilizada en ambos libros para describir a este hombre, y en 1 Corintios se nos dice que pecó en un asunto de incesto. Él vivió en inmoralidad con su madrastra.

i. Algunos comentaristas están en desacuerdo y piensan que Pablo habla de otro hombre. Ellos creen que este hombre pecó al insultar a Pablo durante su «dolorosa visita». Pero 2 Corintios 2:10 dice que Pablo esperaba que los corintios cristianos perdonaran primero al hermano, entonces él lo perdonaría. Si la ofensa hubiera sido algo personal hacia Pablo, esperaríamos que se expresara de otra manera; de hecho, Pablo dice: «no me la ha causado a mí solo», refiriéndose a la tristeza que le ha causado la actuación de este hombre. Su ofensa no era en contra de Pablo, así que, es probable que tal persona era aquella que Pablo dijo que debía de ser confrontada en 1 Corintios 5.

c. Por no exagerar: Aparentemente, el hombre fue puesto bajo la disciplina de la iglesia, de la manera que Pablo lo instruyó en 1 Corintios 5. Él recibió esta reprensión hecha por muchos. Después de recibir la reprensión, el hombre aparentemente se arrepintió, pero los corintios cristianos no querían recibirlo de vuelta. Por lo tanto, Pablo les dice que no sean severos (por no exagerar) con el hombre, que consideren que la reprensión le basta, y que puedan perdonarle y consolarle.

i. En 1 Corintios 5, Pablo severamente reprendió a los corintios cristianos por su actitud relajada hacia este hombre y su pecado. Él les ordenó que «el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne» (1 Corintios 5:4-5). Pablo les dijo que pusieran al hombre fuera de la protección espiritual y social de la familia de la iglesia hasta que se arrepintiera.

ii. ¡Funcionó! Los corintios cristianos aplicaron la reprensión, y aparentemente el hombre se arrepintió. Ahora Pablo debe decirles que restauren al hombre arrepentido.

d. Debéis perdonarle y consolarle: Estaban igual de equivocados cuando le retuvieron el perdón y la restauración al hombre que se arrepintió, que cuando le dieron la bienvenida con los brazos abiertos y la aprobación mientras estaba en pecado. Fue fácil para los corintios cristianos errar en ambos extremos, pues primero fueron muy indulgentes y después muy severos.

i. Pablo les dijo que hicieran más que perdonarle, también les dijo que debían de consolarle. «Puede haber un perdón jurídico que es duro, y deja al alma siempre conciente del pasado. El consuelo, por el contrario, trata con el corazón, y ayuda a olvidar. Esa es la forma en que Dios perdona, y así deberíamos de hacerlo nosotros, pues somos sus hijos». (Morgan)

ii. «Si la disciplina esta carente en gran medida en la iglesia de hoy, también la gracia de perdonar y consolar a aquellos quienes, habiendo hecho mal, se arrepienten de verdad. Las almas han sido carcomidas con mucha tristeza debido a la severidad y al recelo de personas cristianas hacia ellos en vista de algún mal que han hecho. El amor nunca menosprecia la santidad, pero la santidad jamás mata al amor». (Morgan)

e. Para que no sea consumido de demasiada tristeza: Su postura severa hacia este hombre tenía un verdadero peligro. Al retener la restauración y el perdón a este hombre, ellos se arriesgaban a arruinar su vida, causándole ser consumido de demasiada tristeza.

i. «Es un dicho de Austin: ‟Deja que un hombre llore por su pecado, y luego que se goce por dicho lamento”. La tristeza por el pecado, si es excesiva, al punto de incapacitarnos para el desempeño de nuestros deberes, es una tristeza pecaminosa; sí, aunque sea por el pecado». (Trapp)

ii. La obra de «restauración» hacia los pecadores es tan importante como la obra de «reprensión». Trapp cita un ejemplo extremo del fracaso para restaurar: «Los papistas quemaron a algunos de los que se retractaron en la hoguera, diciendo que los enviarían fuera del mundo mientras estaban en una buena mente».

2. (8-11) Entendiendo la estrategia de Satanás en el asunto

Por lo cual os ruego que confirméis el amor para con él. Porque también para este fin os escribí, para tener la prueba de si vosotros sois obedientes en todo. Y al que vosotros perdonáis, yo también; porque también yo lo que he perdonado, si algo he perdonado, por vosotros lo he hecho en presencia de Cristo, para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones.

a. Por lo cual os ruego que confirméis el amor para con él: Ya que el hombre respondió a la reprensión y se arrepintió, era tiempo de darle amor y sanidad. Ellos necesitaban confirmar su amor para con él.

i. «Si el ofensor siente que mientras su pecado es castigado, él es amado y la meta a la que se apunta no es su sufrimiento, sino su bien, es más probable que llegue al arrepentimiento». (Hodge)

b. Para tener la prueba de si vosotros: Pablo escribió severamente en 1 Corintios 5, y los corintios cristianos pasaron la prueba al hacer lo que Pablo les dijo que hicieran. Ahora él les vuelve a poner la prueba, diciéndoles que muestren su amor al hermano arrepentido.

i. Pablo quería que los corintios cristianos fueran obedientes en todo. ¿Sería más fácil para ellos ser obedientes cuando les pidió que fueran «duros», que cuando les pidió que mostraran amor y restauración?

c. Y al que vosotros perdonáis, yo también: El hombre que ofendió también había pecado en contra de Pablo en alguna manera, directa o indirectamente. Pablo esperaba que los corintios cristianos tomarán el liderazgo al mostrarle al hombre perdón y restauración.

i. Aun si la iglesia debe de tratar a alguien como un incrédulo en alguna disciplina, debemos de recordar la manera en que debemos de tratar a los incrédulos: con amor y preocupación, esperando ganarlos para Jesús, ansiosos por su arrepentimiento.

ii. No hay inconsistencia: «si tu hermano peca, repréndelo; y si se arrepiente, perdónalo» (Lucas 17:3).

d. Para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros: Pablo sabía que este era un asunto especial, porque Satanás busca ganar ventaja de nuestros errores como iglesia, y como individuos.

i. Trapp describe como Satanás ama tomar ventaja: «Ese astuto comerciante, ese codicioso chupa sangre, el que no devora casas de viudas, sino la mayor parte de las almas de los hombres».

ii. Gane ventaja:La antigua palabra griega pleonekteo es utilizada en otros cuatro versículos en el Nuevo Testamento (2 Corintios 7:2, 12:17-18, 1 Tesalonicenses 4:6). Tiene la idea de hacerle trampa a alguien con algo que le pertenece. Cuando ignoramos las estrategias de Satanás, él es capaz de tomar de nosotros cosas que nos pertenecen en Jesús, cosas como: paz, gozo, compañerismo, un sentido de perdón, y victoria.

e. Pues no ignoramos sus maquinaciones: Su fracaso de mostrar amor hacia el hombre arrepentido puede ser utilizado por Satanás como una estrategia.

i. El retener el perdón del que se arrepiente es caer en el juego de Satanás. «No hay nada más peligroso que darle la oportunidad a Satanás de reducir a un pecador a la desesperación. Siempre que fracasamos en dar consuelo a aquellos que son movidos por una confesión sincera de su pecado, le hacemos el juego Satanás». (Calvin)

f. Sus maquinaciones: Satanás tiene maquinaciones (estrategias) específicas que utiliza en contra de nosotros para ganar ventaja […] sobre nosotros. Pablo podría decir que no ignoraba las estrategias de Satanás, pero muchos cristianos no pueden decir lo mismo.

i. La estrategia de Satanás en contra del hombre pecador fue enfocada primero en la lujuria, y luego utilizó la desesperanza y la desesperación. La estrategia de Satanás en contra de la iglesia fue primero la tolerancia de la maldad, y luego la utilización de una severidad indebida en el castigo. La estrategia de Satanás en contra de Pablo era, simplemente, hacerlo estresarse y enojarse con los corintios cristianos, para que perdiera la paz y fuera menos efectivo en el ministerio.

ii. Calvin definió esas maquinaciones como «las ingeniosas artimañas y trucos de los cuales los creyentes deben estar alertas, y que lo estarán si permiten que el Espíritu de Dios gobierne sobre ellos». ¿Estás permitiendo que el Espíritu te haga tomar conciencia de la estrategia que Satanás tiene ahora contra ti? ¿Qué punto débil está tratando de explotar? ¿En dónde está Satanás intentando hacerte caer? ¿Eres ignorante de sus maquinaciones?

C. El triunfo de Cristo Jesús

1. (12-13) Lo que Pablo hizo de camino a Macedonia

Cuando llegué a Troas para predicar el evangelio de Cristo, aunque se me abrió puerta en el Señor, no tuve reposo en mi espíritu, por no haber hallado a mi hermano Tito; así, despidiéndome de ellos, partí para Macedonia.

a. Se me abrió puerta en el Señor: Pablo estaba interesado en ministrar en donde Dios abría las puertas. La única manera en la que nuestra obra por Dios será bendecida es cuando sea un servicio dirigido.

i. Donde vemos una puerta abierta, podemos tener fe que Dios bendecirá el ministerio. «El lugar donde el amo pone la luz, entonces allí hay trabajo por hacer; el lugar a donde él envía a sus trabajadores, entonces allí hay alguna cosecha que se debe de recoger». (Trapp)

b. No tuve reposo en mi espíritu, por no haber hallado a mi hermano Tito: Aun cuando había una puerta abierta, Pablo sintió que no podía hacer todo lo que necesitaba hacer sin Tito allí. Pablo no se consideraba como un hombre que podía hacerlo todo; él sabía que necesitaba de otras personas con él y además de él.

En 2 Corintios 2:13, Pablo menciona su partida de Macedonia. En 2 Corintios 7:5, escribe sobre su llegada a Macedonia. Lo transcurrido entre estos pasajes —desde 2 Corintios 2:14 hasta 7:4— es algunas veces llamado «la gran digresión». En esta sección extendida, Pablo describe y defiende su ministerio como apóstol.

2. (14) Jesús, el líder victorioso

Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.

a. Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre: Pablo lidió con críticas de los corintios cristianos, quienes decían que él era de poco fiar y voluble, debido a sus planes de viaje. Él ha explicado sus razones de no llegar cuando lo había planeado antes. Quería que los corintios cristianos supieran que estaba siguiendo a Cristo Jesús. Más que cualquier plan que pudo haber declarado a los corintios cristianos, el plan de Pablo era seguir a Cristo Jesús.

b. El cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo: Aquí Pablo toma una ilustración del mundo romano, viendo a Jesús como el general victorioso y conquistador en un desfile de triunfo. Un desfile de victoria romano era hecho en honor de los generales exitosos cuando regresaban de sus conquistas.

i. «La idea es tomada del antiguo triunfo romano, el cual para los ojos del mundo de aquella época era el espectáculo más glorioso que podía concebir la imaginación». (Meyer)

ii. «En un triunfo, la procesión del general victorioso marchaba por las calles de Roma hacia el Capitolio. Primero, llegaban los oficiales del estado y el senado; luego, llegaban los trompetistas y eran llevados los despojos tomados de la tierra conquistada. Después, llegaban imágenes de la tierra conquistada, y modelos de ciudadelas y barcos conquistados. Posteriormente, le seguía el toro blanco que sería tomado para el sacrificio. Luego, allí caminaba la princesa cautiva, y líderes y generales en cadenas, quienes en poco tiempo serían echados en prisión, y lo más probable es que fueran ejecutados inmediatamente. A continuación, venían los lictores cargando sus varas, seguidos por los músicos con sus liras y los sacerdotes que columpiaban sus incensarios con un incienso dulce que ardía en estos. Después de esto llegaba el general en persona. Finalmente, llegaba el ejército usando todas sus decoraciones y gritando: ¡Lo triumphe! (su clamor de triunfo). Mientras la procesión se movía por las calles, todas decoradas y con guirnaldas, entre las multitudes que aplaudían, era un día tremendo que podía suceder una sola vez en la vida». (Barclay)

iii. «Esa es la imagen que está en la mente de Pablo. Él ve a Cristo marchando en triunfo a través del mundo, y se ve a sí mismo en el séquito conquistador. Es un triunfo que Pablo da por seguro, que nada puede detenerlo (Barclay). Pablo se ve como partícipe del triunfo de Jesús, el Capitán del ejército del Señor, ¡y Pablo es uno de los oficiales principales del Señor!

c. Nos lleva: Pablo quería que los corintios cristianos se dieran cuenta de que él seguía a su general, Cristo Jesús. Pablo casi puede ver el desfile del triunfo de Jesús abriéndose paso por medio de todo el Imperio Romano, a través de todo el mundo.

d. Manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento: La fragancia, en la forma de incienso, era común en el desfile triunfal romano. En la mente de Pablo, esta fragancia es como el conocimiento de Dios, el cual las personas pueden oler mientras el desfile triunfal va pasando.

i. Ningún sentido queda en la memoria como el olor. No hay nada que recordemos con más fuerzas que los olores; excepto, quizás, los olores desagradables. «Así, el apóstol deseaba que su vida fuera un olor fragante, flotando por el aire, recordándome y, sobre todo, recordando a Dios, a Cristo». (Meyer)

ii. «¡Un dulce aroma de Cristo! No consiste mucho en lo que hacemos, sino en nuestra forma de hacerlo; no tanto en nuestras palabras u obras, sino en una dulzura indefinible, tierna, cortés, desinteresada, y en el deseo de agradar a los demás para su edificación. Es el aliento y la fragancia de una vida oculta con Cristo en Dios, lo que expide un aroma de compañerismo con Él. Envuelve los hábitos de tu alma en la dulce fragancia del carácter de tu Señor». (Meyer)

2. (15-16a) El desfile triunfal significa cosas diferentes para personas diferentes

Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden; a éstos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquéllos olor de vida para vida.

a. A éstos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquéllos olor de vida para vida: El incienso quemado para los dioses en un desfile triunfal romano olía maravillosamente para los romanos. El mismo aroma era un mal olor para los cautivos prisioneros de guerra que iban en el desfile, quienes serían pronto ejecutados o vendidos para ser esclavos.

b. Para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden: De la misma manera, el mensaje del evangelio es un mensaje de vida para los que lo reciben y un mensaje de condenación para aquellos que lo rechazan (Juan 3:17-21).

i. «Lo mismo sucede en el día presente a aquellos que reciben y a aquellos que rechazan el evangelio: para los primeros es el medio de salvación; para los segundos, el medio de destrucción, ya que ellos no son únicamente no salvos debido a que no creyeron el evangelio, sino que son condenados porque lo rechazaron». (Clarke)

3. (16b-17) Pablo describe brevemente su ministerio

Y para estas cosas, ¿quién es suficiente? Pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Cristo.

a. Y para estas cosas, ¿quién es suficiente?: Cuando Pablo piensa en la grandeza del plan de Dios, se pregunta si alguno es suficiente para formar parte de dicho plan. «En sí mismo, nadie lo es. Pero alguien debe de predicar a Cristo, y Pablo procede a mostrar que él es suficiente». (Robertson)

i. «Esta es una gran obra que implica, primero, consultar la mente y voluntad de Dios, y hallarla por medio del estudio y la meditación; y luego, comunicarla fielmente hacia las personas, sin mezclas vanas o corruptas (no como los que adulteran la palabra predicada), y aplicarla a la conciencia de aquellos que nos escuchan. ¿Quién es suficiente para estas cosas? Esto es, para delegar el cargo del ministerio de predicar el evangelio como los hombres debieran de predicarlo». (Poole)

b. Pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra de Dios: La palabra «medran» tiene la idea de «adulterar» o «diluir» para poder obtener ganancia, y era utilizada especialmente para hacer referencia a un vendedor de vino que diluía el vino para obtener más ganancias. Pablo no era como los demás que diluían el evangelio para poder obtener ganancias.

i. Trapp dice sobre la frase «medran falsificando la palabra de Dios»: «Esta es una de las ‟profundidades del maligno” (Apocalipsis 2:24); en donde los ministros fieles de Dios son unos perfectos extraños».

c. Sino que con sinceridad: «Sinceridad» proviene de la antigua palabra griega eilikrineia, la cual significa «puro» o «transparente». Barclay dice que «puede describir algo que puede pasar la prueba de ser puesto a la luz del sol y verse mientras el sol brilla a través de él». El mensaje y ministerio de Pablo no tenía motivos o agendas ocultos.

d. Delante de Dios, hablamos en Cristo: Pablo siempre está conciente de que su primera audiencia en el ministerio es Dios mismo. Cada palabra que habló, la habló delante de Dios.

©2020 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com