2 Reyes 13 – La muerte de Eliseo

A. Los reinados de Joacaz y Joás, reyes de Israel.

1. (1-4) Un resumen del reinado de Joacaz y una respuesta a la oración.

En el año veintitrés de Joás hijo de Ocozías, rey de Judá, comenzó a reinar Joacaz hijo de Jehú sobre Israel en Samaria; y reinó diecisiete años. E hizo lo malo ante los ojos de Jehová, y siguió en los pecados de Jeroboam hijo de Nabat, el que hizo pecar a Israel; y no se apartó de ellos. Y se encendió el furor de Jehová contra Israel, y los entregó en mano de Hazael rey de Siria, y en mano de Ben-adad hijo de Hazael, por largo tiempo. Mas Joacaz oró en presencia de Jehová, y Jehová lo oyó; porque miró la aflicción de Israel, pues el rey de Siria los afligía

a. Comenzó a reinar Joacaz hijo de Jehú sobre Israel: Este era el inicio del cumplimiento de la promesa hecha a Jehú, registrada en 2 Reyes 10:30. Dios le prometió que sus descendientes se sentarían en el trono de Israel hasta la cuarta generación. Esta dinastía —aunque fundada en un violento derrocamiento de la casa real anterior— continuó porque Jehú llegó al trono haciendo la voluntad de Dios.

b. E hizo lo malo ante los ojos de Jehová, y siguió en los pecados de Jeroboam: Su padre Jehú también continuó en la idolatría de Jeroboam (2 Reyes 10:31). Joacaz siguió los pasos tanto de Jeroboam como de Jehú.

c. Los entregó en mano de Hazael rey de Siria: El reino de Israel aún tenía su propio nombre y rey, pero era una nación tributaria y subordinada a Siria.

i. En la historia general de este tiempo, el Imperio asirio mantuvo a los sirios vulnerables y débiles e incapaces de expandir su dominio a Israel. Pero hubo un periodo en el que problemas internos hicieron que los asirios retiraran sus tropas de las fronteras de su imperio, y los sirios tomaron ventaja de este tiempo de distracción asiria.

d. Mas Joacaz oró en presencia de Jehová, y Jehová lo oyó: Joacaz fue un hombre impío, y esta oración no marcó un avivamiento duradero o real en su vida. Sin embargo, Dios escuchó su oración debido a su gran misericordia y a que le importaba Israel.

i. «El término “oró en presencia de Jehová” viene de una palabra que significa “estar enfermo”, lo que implica debilidad y dependencia. Joacaz estaba al límite de sus fuerzas». (Dilday)

ii. «Esta restauración de la prosperidad inició bajo Joás, hijo de Joacaz, y culminó durante el reinado de su nieto Jeroboam II. Así la oración, frecuentemente, es contestada después de que el peticionario ha fallecido». (Knapp)

2. (5-9) El resto del reino de Joacaz.

(Y dio Jehová salvador a Israel, y salieron del poder de los sirios; y habitaron los hijos de Israel en sus tiendas, como antes. Con todo eso, no se apartaron de los pecados de la casa de Jeroboam, el que hizo pecar a Israel; en ellos anduvieron; y también la imagen de Asera permaneció en Samaria.) Porque no le había quedado gente a Joacaz, sino cincuenta hombres de a caballo, diez carros, y diez mil hombres de a pie; pues el rey de Siria los había destruido, y los había puesto como el polvo para hollar. El resto de los hechos de Joacaz, y todo lo que hizo, y sus valentías, ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Israel? Y durmió Joacaz con sus padres, y lo sepultaron en Samaria, y reinó en su lugar Joás su hijo.

a. Y dio Jehová salvador a Israel: Esto nos recuerda el patrón visto con frecuencia en el libro de Jueces. Israel se deslizó a la apostasía, Dios le permitió ser humillado bajo los enemigos; pero luego clamó a Jehová y Él le envió un libertador, e Israel se liberó del poder de los sirios.

i. No sabemos el nombre de este salvador, pero es bien conocido en el cielo. Uno no necesita tener un gran nombre para hacer una gran obra para Jehová.

b. Con todo eso, no se apartaron de los pecados de la casa de Jeroboam: Aunque Dios contestó su oración y envió a un salvador, Israel continuó en su falsa adoración al Dios verdadero. Los hombres a menudo consideran que esto es un pecado pequeño que no tiene consecuencias, y excusan la idolatría bajo declaración de buenas intenciones.

i. «El arrepentimiento de Israel fue solo de dientes para afuera; se arrepintieron debido al sufrimiento, no debido al pecado. Ellos regresaron al pecado después de haber escapado del dolor». (Spurgeon)

c. Porque no le había quedado gente a Joacaz, sino cincuenta hombres de a caballo: Israel fue liberado, aunque era un pueblo apóstata y débil. Su falta de compañerismo con el Dios verdadero los hizo débiles; o más bien, Dios los hizo débiles debido a su falta de verdadera relación con Él.

3. (10-13) Resumen del reinado de Joás sobre Israel.

El año treinta y siete de Joás rey de Judá, comenzó a reinar Joás hijo de Joacaz sobre Israel en Samaria; y reinó dieciséis años. E hizo lo malo ante los ojos de Jehová; no se apartó de todos los pecados de Jeroboam hijo de Nabat, el que hizo pecar a Israel; en ellos anduvo. Los demás hechos de Joás, y todo lo que hizo, y el esfuerzo con que guerreó contra Amasías rey de Judá, ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Israel? Y durmió Joás con sus padres, y se sentó Jeroboam sobre su trono; y Joás fue sepultado en Samaria con los reyes de Israel.

a. Comenzó a reinar Joás hijo de Joacaz sobre Israel en Samaria: Él era el nieto del rey Jehú, fundador de esta dinastía, y continuó con los mismos pecados de su padre y su abuelo.

b. El esfuerzo con que guerreó contra Amasías rey de Judá: El reino de Joás vio una guerra civil entre el reino del sur y el reino del norte.

i. «Esta guerra con Amasías puede ser vista más detalladamente en 2 de Crónicas 25; terminó en la derrota total de Amasías, quien fue tomado prisionero por Joás, y más adelante asesinado en una conspiración en Laquis». (Clarke)

B. La muerte de Eliseo.

1. (14a) La enfermedad de muerte de Eliseo.

Estaba Eliseo enfermo de la enfermedad de que murió.

a. Estaba Eliseo enfermo: Los hombres de fe y que hacen milagros no están exentos de la enfermedad. Este gran hombre se enfermó como otros a quienes él había sanado como un canal del poder y la bendición de Dios.

b. De la enfermedad de que murió: Aunque Dios usó a Eliseo en muchas ocasiones para sanar a otros, designó esta enfermedad para ser el medio por el cual se llevaría a Eliseo de este mundo. Dios no tiene una sola manera en la que hace esto; es un error creer que todos los consagrados mueren mientras duermen sin un indicio de enfermedad previa.

2. (14b-17) El rey Joás y su última audiencia con el profeta Eliseo.

Y descendió a él Joás rey de Israel, y llorando delante de él, dijo: ¡Padre mío, padre mío, carro de Israel y su gente de a caballo! Y le dijo Eliseo: Toma un arco y unas saetas. Tomó él entonces un arco y unas saetas. Luego dijo Eliseo al rey de Israel: Pon tu mano sobre el arco. Y puso él su mano sobre el arco. Entonces puso Eliseo sus manos sobre las manos del rey, y dijo: Abre la ventana que da al oriente. Y cuando él la abrió, dijo Eliseo: Tira. Y tirando él, dijo Eliseo: Saeta de salvación de Jehová, y saeta de salvación contra Siria; porque herirás a los sirios en Afec hasta consumirlos.

a. Y descendió a él Joás rey de Israel, y llorando delante de él: Esta reacción del rey de Israel puede parecer extraña, justo después de haber leído la descripción del pecado y la maldad que marcaron su reinado. Sin embargo, es importante recordar que Joás no era un adorador de los dioses falsos; él era unfalso adorador del Dios verdadero. Él tenía algo de respeto por el Dios verdadero, y, por lo tanto, algo de consideración y honra hacia Eliseo.

i. «Queridos amigos, busquemos vivir de tal forma que, incluso los hombres impíos, nos extrañen cuando nos hayamos ido». (Spurgeon)

b. Carro de Israel y su gente de a caballo: Eliseo le dijo estas palabras a Elías al final de los días del profeta mayor en esta tierra. Cuando él le dijo esto a Elías en 2 Reyes 2:12, reconoció la verdadera fuerza de Israel. Él sabía que la verdadera fuerza de Israel estaba realmente en la presencia del profeta de Dios. Ahora Joás ve la misma fuerza escapándose de esta tierra y esto lo aflige.

c. Toma un arco y unas saetas: Joás estaba preocupado de que la verdadera fuerza de Israel estaba a punto de partir de esta tierra. Por lo tanto, Eliseo usó esta ilustración de la saeta disparada por la ventana para mostrarle que la saeta de salvación de Jehová aún estaba presente, y todo lo que Joás tenía que hacer era disparar el arco en fe.

d. Porque herirás a los sirios en Afec: Eliseo dejó claro que había una conexión entre el tiro de las saetas y un ataque contra los sirios que traería liberación a Israel.

i. «La ventaba fue abierta hacia el este, hacia Siria; específicamente, hacia Afec, el sitio más estratégico entre Damasco y Siria. Afec es la ciudad donde Acab había derrotado a los sirios años antes (1 Reyes 20:26)». (Dilday)

ii. «Era una costumbre antigua disparar una flecha o arrojar una lanza en dirección al país hacia el cual un ejército tenía la intención de invadir […]. El dardo, lanza, o flecha arrojado, era un emblema del comienzo de las hostilidades». (Clarke)

3. (18-19) El rey Joás fracasa al no tomar esta oportunidad totalmente.

Y le volvió a decir: Toma las saetas. Y luego que el rey de Israel las hubo tomado, le dijo: Golpea la tierra. Y él la golpeó tres veces, y se detuvo. Entonces el varón de Dios, enojado contra él, le dijo: Al dar cinco o seis golpes, hubieras derrotado a Siria hasta no quedar ninguno; pero ahora sólo tres veces derrotarás a Siria.

a. Toma las saetas: Joás acababa de escuchar a Eliseo hacer la conexión entre las flechas disparadas por la ventana y la victoria venidera sobre el ejército sirio. Él sabía que estas flechas representaban la salvación de Dios de Israel contra Siria.

b. Golpea la tierra: Joás, tímidamente, recibió esta invitación del profeta de disparar las flechas al aire para que golpearan el suelo. Él disparó tres saetas y se detuvo, sin percibir lo que debía — que las flechas representaban las victorias en batalla contra los sirios, y debió haber recibido la invitación del profeta con más osadía.

i. La frase «golpea la tierra» puede referirse a flechas disparadas de modo que golpeen el suelo. Eliseo le pidió a Joás que disparara las flechas por la ventana al aire, no que las golpeara contra el piso.

ii. Eliseo, claramente, le pidió a Joás que hiciera algo que ejemplificaba la oración:

·Disparar las flechas requirió de esfuerzo y puntería.

·Disparar las flechas requirió instrucción y ayuda del profeta de Dios.

·Disparar las flechas tenía que ser hecho a través de una ventana abierta.

·Disparar las flechas tenía que ser hecho sin saber el resultado exacto antes de tiempo. El objetivo solo era totalmente conocido por fe.

·Disparar las flechas fue ineficaz porque no fue repetido lo suficiente, lo que reflejaba una falta de confianza en el proceso.

·Disparar las flechas tenía su momento estratégico, y cuando ese momento pasó ya no era efectivo.

·Fracasar al disparar las flechas lastima a otros, no solo a nosotros mismos.

c. Entonces el varón de Dios, enojado contra él: Debido a que el rey Joás no aprovechó el momento estratégico, Israel solo disfrutaría de tres victorias contra el ejército sirio, en vez de las muchas más que pudieron haber disfrutado.

i. «El mismo profeta no sabía aún cuántas victorias debía obtener Joás contra los sirios, pero Dios le había indicado que lo sabría con el número de los disparos del rey». (Poole)

ii. Hay muchas situaciones en las que deberíamos continuar «disparando las flechas», pero nos conformamos con un pequeño esfuerzo. «Él debió de haber continuado disparando hasta que el profeta hubiera dicho: “Suficiente”». (Trapp)

·Siga disparando en la batalla contra el pecado.

·Siga disparando en la consecución del conocimiento cristiano.

·Siga disparando en la consecución de la fe.

·Siga disparando para hacer más por el reino de Dios.

·Siga disparando, porque el mundo, la carne, y el Diablo, no dejarán de disparar.

iii. Cuando Dios nos invita a tomar algo por fe, debemos recibirlo osadamente y pedirle, sabiendo que Él es un gran rey y es honrado con peticiones osadas y reverentes.

iv. «Solo la falta de fe de Joás, manifestada en su poco entusiasmo al lanzar las flechas solo tres veces, evitó que destruyera a los sirios por completo. Y le fue conforme a su fe». (Knapp)

d. Pero ahora sólo tres veces derrotarás a Siria: Resultó que, la vida y la muerte dependían de cuántas flechas Joás disparara hacia el suelo. Cuando el rey Joás tuvo la oportunidad de disparar las flechas, probablemente, esto pareció ser algo demasiado sencillo para él. Él no conocía el plan de Dios para la nación y sus aparentemente pequeñas acciones estaban vitalmente conectadas con dicho plan.

i. «Es un hecho que Dios tiene un propósito para todas las cosas, tanto grandes como pequeñas; nada sucederá sino según su propósito eterno y su decreto. Es también un hecho seguro y certero que, a menudo, los eventos dependen de la decisión del hombre. Su voluntad tiene una potencia singular». (Spurgeon)

ii. Pensamos en todas las excusas que Joás pudo haber puesto; sin embargo, ninguna de ellas es válida:

·«Dejé de tirar porque no quería ser impertinente y pedir demasiado».

·«Dejé de tirar porque no soy muy buen arquero».

·«Dejé de tirar porque Eliseo no me ayudó más».

·«Dejé de tirar porque pensé que tres veces eran suficientes».

·«Dejé de tirar porque no pensé que sirviera de algo».

·«Dejé de tirar porque no tenía humor para hacerlo. No sentía ganas».

·«Dejé de tirar porque no quería exaltarme demasiado».

iii. «Así que habrá algunos que piensan que escuchar el Evangelio es poca cosa. Vida, muerte, infierno, y mundos desconocidos, pueden depender de la predicación y de escuchar un sermón. Escuchar atentamente, y no ser molestado por el sermón, puede parecer algo muy insignificante; y, sin embargo, el recibir la Palabra puede resultar en la consecución de la fe o en la ausencia de la misma, y así de la salvación que viene por fe». (Spurgeon)

4. (20-21) El continuo poder de Dios obrando en Eliseo, incluso después de su muerte.

Y murió Eliseo, y lo sepultaron. Entrado el año, vinieron bandas armadas de moabitas a la tierra. Y aconteció que al sepultar unos a un hombre, súbitamente vieron una banda armada, y arrojaron el cadáver en el sepulcro de Eliseo; y cuando llegó a tocar el muerto los huesos de Eliseo, revivió, y se levantó sobre sus pies.

a. Y murió Eliseo: Tal vez, él esperaba y deseaba ser arrebatado al cielo como el dramático ejemplo de su mentor Elías. Sin embargo, ese no era el plan de Dios, ni su voluntad para Eliseo. Como muchos otros, simplemente, envejeció, enfermó y murió.

b. Y cuando llegó a tocar el muerto los huesos de Eliseo, revivió, y se levantó sobre sus pies: Este es uno de los milagros más extraños e inusuales de la Biblia. Hay poca explicación y el silencio del registro sugiere que no había ningún poder inherente en los huesos de Eliseo para resucitar a otros. Este parece haber sido un milagro único, que sucedió solo una vez, para traer honra a la memoria de este gran profeta.

i. «Este es el primer —y creo que también el último— relato de un verdadero milagro realizado por los huesos de un hombre muerto; sin embargo, sobre esto ha sido fundado el sistema completo de reliquias obradoras de milagros de la iglesia papista». (Clarke)

ii. Nosotros también podemos ser traídos a la vida por nuestro contacto con estos profetas muertos.

C. La misericordia de Dios hacia Israel.

1. (22-23) La bondad de Dios hacia Israel.

Hazael, pues, rey de Siria, afligió a Israel todo el tiempo de Joacaz. Mas Jehová tuvo misericordia de ellos, y se compadeció de ellos y los miró, a causa de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob; y no quiso destruirlos ni echarlos de delante de su presencia hasta hoy

a. Hazael, pues, rey de Siria, afligió a Israel: Esto fue permitido e incluso planeado por Dios como una manera de disciplinar a esta obstinada nación. Segunda de Reyes 8:12 registra el conocimiento previo de Eliseo de la calamidad que Hazael traería sobre Israel.

b. Mas Jehová tuvo misericordia de ellos: Israel merecía esta disciplina; sin embargo, Dios se negó a abandonarlos. Él les dio muchas bendiciones y los salvó de muchos problemas y no quiso destruirlos ni echarlos de delante de su presencia.

2. (24-25) Las victorias del rey Joás contra los sirios.

Y murió Hazael rey de Siria, y reinó en su lugar Ben-adad su hijo. Y volvió Joás hijo de Joacaz y tomó de mano de Ben-adad hijo de Hazael las ciudades que éste había tomado en guerra de mano de Joacaz su padre. Tres veces lo derrotó Joás, y restituyó las ciudades a Israel.

a. Tres veces lo derrotó Joás: Eliseo le había prometido a Joás tres victorias sobre los sirios. Podemos suponer que, especialmente después de su tercera victoria, el rey Joás deseó haber tirado más flechas por la ventana cuando escuchó la invitación de Eliseo.

©2022 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com