Eclesiastés 6




Eclesiastés 6 – La riqueza no puede satisfacer

A. La debilidad de la riqueza.

1. (1-2) Otros pueden tomar la riqueza de uno.

Hay un mal que he visto debajo del cielo, y muy común entre los hombres: El del hombre a quien Dios da riquezas y bienes y honra, y nada le falta de todo lo que su alma desea; pero Dios no le da facultad de disfrutar de ello, sino que lo disfrutan los extraños. Esto es vanidad, y mal doloroso.

a. Hay un mal que he visto debajo del cielo: El Predicador sigue hablando desde su premisa debajo del sol.

b. El del hombre a quien Dios da riquezas y bienes y honra, y nada le falta… pero Dios no le da facultad de disfrutar de ello, sino que lo disfrutan los extraños: Salomón veía la tragedia de aquellos a quienes se les dan grandes dones de Dios – pero que no tienen la oportunidad de disfrutar lo que Dios les da. Salomón entendía que esto era vanidad y un mal doloroso.

2. (3-6) La falta de significado de la vida que no va más allá de la muerte.

Aunque el hombre engendrare cien hijos, y viviere muchos años, y los días de su edad fueren numerosos; si su alma no se sació del bien, y también careció de sepultura, yo digo que un abortivo es mejor que él. Porque éste en vano viene, y a las tinieblas va, y con tinieblas su nombre es cubierto. Además, no ha visto el sol, ni lo ha conocido; más reposo tiene éste que aquél. Porque si aquél viviere mil años dos veces, sin gustar del bien, ¿no van todos al mismo lugar?

a. Aunque el hombre engendrare cien hijos, y viviere muchos años… si su alma no se sació del bien: El Predicador sabía que un hombre podía tener todas las señales externas de una buena vida – pero aun así no estar satisfecho con el bien.

i. “Uno podría tener las cosas con las que los hombres sueñan lo que en términos del Antiguo Testamento significaba hijos por veintenas y años de vida por mil y aun así morir desapercibido, insatisfecho y sin que nadie lloré por nosotros”. (Kidner)

ii. “Como la ley Mosaica (cf. Gálatas 3:22), el Predicador está cerrando todas las puertas menos la puerta de la fe”. (Eaton)

b. Yo digo que un abortivo es mejor que él: Esta es una declaración amarga, del tipo que podríamos esperar de alguien que había sufrido como Job (Job 3). Sin embargo, Salomón, con todas sus bendiciones y ventajas, sentía y conocía la misma desesperación de la vida que tuvo Job. La vida parecía tan sin sentido que sentía que hubiera sido mejor si nunca hubiera nacido.

i. “Morir insepulto era la marca de un final despreciado y sin duelo. Es mejor ser abortado al nacer que ser abortado a lo largo de la vida”. (Eaton)

c. Además, no ha visto el sol, ni lo ha conocido; más reposo tiene éste que aquél. Porque si aquél viviere mil años dos veces, sin gustar del bien: En la mente de Salomón, el niño que nace muerto por trágico que sea está mejor que el hombre que conoce la decepción aplastante de la comprensión de la falta de sentido, incluso que aquél viviere mil años.

d. ¿No van todos al mismo lugar?: Salomón escribe con su perspectiva debajo del sol, y comparte gran parte de la incertidumbre del Antiguo Testamento sobre la otra vida.

B. ¿De qué sirve todo esto?

1. (7-9) Sufrir bajo la insatisfacción.

Todo el trabajo del hombre es para su boca,
y con todo eso su deseo no se sacia.
Porque ¿qué más tiene el sabio que el necio?
¿Qué más tiene el pobre que supo caminar entre los vivos?
Más vale vista de ojos que deseo que pasa.
Y también esto es vanidad y aflicción de espíritu.

a. Todo el trabajo del hombre es para su boca, y con todo eso su deseo no se sacia: El hombre trabaja por el pan que come, pero no sacia su alma. Salomón intuyó lo que ya había dicho Moisés y que Jesús repitió después: No solo de pan vivirá el hombre (Deuteronomio 8:3; Mateo 3:4).

b. ¿Qué más tiene el sabio que el necio?: La sabiduría misma no puede llenar el estómago de un hombre hambriento. A pesar de toda la superioridad del sabio en comparación con el necio, ambos experimentan hambre. Ser sabio no es una ventaja tan grande como comúnmente se piensa.

i. “Las necesidades de la vida son las mismas para ambos, y su condición en la vida es casi similar; sujeto a las mismas enfermedades, disolución y muerte”. (Clarke)

c. Más vale vista de ojos que deseo que pasa: El Predicador sabía que en un mundo de tanta incertidumbre y ausencia de significado, lo que uno puede ver es siempre mejor que lo que uno simplemente desea.

2. (10-12) La futilidad de sentir que nada puede mejorar las cosas.

Respecto de lo que es, ya ha mucho que tiene nombre,
y se sabe que es hombre
y que no puede contender con Aquel que es más poderoso que él.
Ciertamente las muchas palabras multiplican la vanidad.
¿Qué más tiene el hombre?

Porque ¿quién sabe cuál es el bien del hombre en la vida, todos los días de la vida de su vanidad, los cuales él pasa como sombra? Porque ¿quién enseñará al hombre qué será después de él debajo del sol?

a. Respecto de lo que es, ya ha mucho que tiene nombre: Esta es una visión fatalista de la soberanía de Dios. La idea es que Dios tiene todo el control, y sea lo que sea, es porque el Dios todopoderoso ya le ha dado nombre.

i. “Dado que Dios es supremo, seguramente lo ha predestinado todo y ha hecho al hombre demasiado débil para resistir. Razonar, quejarse y discutir no trae respuesta y lleva a una mayor frustración”. (Wright)

b. No puede contender con Aquel que es más poderoso que él: La gran frustración de Salomón está enraizada en el entendimiento de que el hombre es hombre, Dios es Dios, y el hombre nunca puede contender con Aquel que es más poderoso que él.

i. Muchos en la actualidad se niegan a saber lo que sabía el Predicador. Creen que cuando se enfrenten a Dios (abandonando la premisa de Salomón debajo del sol) realmente contenderán con Aquel, y le dirán a Dios una o dos cosas. Tales personas están seria y tristemente engañadas.

ii. “Dios vencerá los que contiendan con él: y su propia razón le dirá que no es apropiado que Dios derribe primero los escudos: y que cuanto más profundo vadee el hombre, más se mojará”. (Trapp)

c. Ciertamente las muchas palabras multiplican la vanidad. ¿Qué más tiene el hombre?: El Predicador sentía que la vida era un juego que no se podía ganar. Había demasiadas cosas que multiplican la vanidad que, en última instancia, no dejarían mejorar al hombre.

i. “Evidentemente, el pensamiento del predicador es que cuanto más posee un hombre debajo del sol, más profundamente consciente se vuelve de la vanidad y la vejación de todo ello”. (Morgan)

d. Porque ¿quién sabe cuál es el bien del hombre en la vida?: A menudo pensamos que sabemos lo que es bueno para nosotros; pero ¿realmente lo sabemos? En el transcurso de una vida, ¿qué es mejor: la riqueza o la pobreza? ¿Salud o enfermedad? ¿Fama u oscuridad? Muchos de los que tienen lo que comúnmente se considera el bien no son mejores por ello.

e. Todos los días de la vida de su vanidad, los cuales él pasa como sombra. Porque ¿quién enseñará al hombre qué será después de él debajo del sol?: Salomón miró a la vida y le pareció vanidad y una sombra. Miró a la muerte y solo vio oscuridad e incertidumbre. Hasta este punto hay poco alivio de la tragedia de la falta de sentido de la vida (y la muerte) debajo del sol.

i. “Entonces, el capítulo se abrirá camino hacia un final deprimente e incierto, muy adecuado para el estado del hombre en sí mismo”. (Kidner)

ii. Podemos explicar la falta de conocimiento de Salomón sobre la otra vida al comprender el principio de 2 Timoteo 2:10: que Cristo Jesús sacó a luz la vida y la inmortalidad por el evangelio. El entendimiento de la inmortalidad era, en el mejor de los casos, borroso en el Antiguo Testamento, pero es mucho más claro en el Nuevo Testamento. Por ejemplo, podemos decir que Jesús sabía completamente de qué estaba hablando cuando describió el infierno y el juicio (como en Mateo 25:41-46). Por lo tanto, confiamos en el Nuevo Testamento para nuestra comprensión de la otra vida, mucho más que en el Antiguo.

iii. También entendemos que esto de ninguna manera quita la verdad de la biblia y el Libro de Eclesiastés. Lo que es cierto es que Salomón realmente escribió esto y realmente lo creyó (con su premisa debajo del sol); la verdad de la declaración misma debe evaluarse de acuerdo con el resto de la biblia.

©2022 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com  

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