Esdras 3 – Los cimientos para el Nuevo Templo

A. La restauración del culto regular en Jerusalén.

1. (1) Comienzo en el mes séptimo.

Cuando llegó el mes séptimo, y estando los hijos de Israel ya establecidos en las ciudades, se juntó el pueblo como un solo hombre en Jerusalén.

a. Cuando llegó el mes séptimo: Este era un mes importante en el calendario espiritual de Israel. En el mes séptimo celebraban el Día de la Expiación, la Fiesta de las Trompetas y la Fiesta de los Tabernáculos.

b. Se juntó el pueblo como un solo hombre en Jerusalén: Esta fue una señal alentadora de obediencia entre los exiliados que regresaron. En una época de escasos recursos y mucho trabajo por hacer, tomaron el tiempo y el dinero para observar los mandamientos de reunirse en Jerusalén para las fiestas mayores.

2. (2-3) El altar es reconstruido sobre sus antiguos cimientos.

Entonces se levantaron Jesúa hijo de Josadac y sus hermanos los sacerdotes, y Zorobabel hijo de Salatiel y sus hermanos, y edificaron el altar del Dios de Israel, para ofrecer sobre él holocaustos, como está escrito en la ley de Moisés varón de Dios.Y colocaron el altar sobre su base, porque tenían miedo de los pueblos de las tierras, y ofrecieron sobre él holocaustos a Jehová, holocaustos por la mañana y por la tarde.

a. Jesúa… y Zorobabel: Estos fueron los dos líderes principales en este proyecto de reconstrucción, comenzando su trabajo con la construcción del altar que estaba fuera del templo en el monte del templo en Jerusalén. De los escombros del templo destruido y sus patios, ahora se levantaba un altar listo para recibir sacrificios tanto en nombre del pueblo en general como de las personas que trajeron sus ofrendas.

i. Es significativo que edificaron el altar en Jerusalén, en el mismo suelo donde alguna vez estuvo. Podrían haber razonado que el altar (y posiblemente también el templo) podría ir a cualquier parte, porque Yahveh era Dios de toda la tierra. Sin embargo, en la mente judía, solo había un lugar donde el altar y el templo podían estar: en el monte santo de Dios (Salmo 2:6, 99:9), en su tierra santa (Zacarías 2:12).

ii. Jesúa “era el nieto de Seraías el sumo sacerdote, quien murió por órdenes de Nabucodonosor, 2 Reyes 25:18, 21. Este Jesúa o Josué fue el primer sumo sacerdote después del cautiverio”. (Clarke)

b. Edificaron el altar del Dios de Israel: Mucho antes de que pudieran reconstruir el templo, sabiamente comenzaron con la construcción del altar para holocaustos y otros sacrificios.

i. Primero edificaron el altar porque era algo que podían hacer con relativa rapidez y facilidad. Comenzamos un gran trabajo haciendo primero lo que podemos.

ii. Primero edificaron el altar porque entendían su importancia espiritual. Fundamentalmente, el altar era donde se trataba el pecado y donde el hombre común se reunía con Dios (el templo era solo para que entraran los sacerdotes). Comenzaron con el altar porque era una prioridad espiritual sabia, mostrando que entendían su necesidad de tener expiación por el pecado y actos de dedicación a Dios.

iii. Primero edificaron el altar porque era un acto de obediencia hacerlo. Necesitaban reanudar los holocaustos para la expiación de los pecados en la mañana y por la tarde porque esto estaba escrito en la Ley de Moisés varón de Dios.

iv. “Esto es lo primero que debe hacerse antes de que nuestra construcción del templo u otras empresas puedan ser coronadas con éxito… El nuevo comienzo que Dios mismo estaba dando hubiera sido invalidado sin el altar, lo que significaba el perdón por el pasado, y consagración renovada para el futuro”. (Meyer)

v. “Así, vemos, que el pleno establecimiento de los servicios religiosos precede a la construcción del templo. Una verdad de peso está consagrada en este hecho aparentemente incongruente. Se considera que el culto en sí mismo es más importante que la casa en la que se va a celebrar”. (Adeney)

vi. “No puede haber un templo sin altar, pero puede haber un altar sin templo. Dios se encuentra con los hombres en el lugar del sacrificio, aunque no haya casa para su nombre”. (Maclaren)

c. Porque tenían miedo de los pueblos de las tierras: Cuando edificaron el altar a Jehová en el monte del templo en Jerusalén, probablemente destruyeron un altar tosco que habría sido construido en ese lugar por el remanente disperso que habitaba el área durante las dos generaciones del exilio. Al construir este altar, anunciaron formalmente su presencia y proclamaron su intención de reconstruir el templo.

i. Morgan sugiere que también tenían miedo de la amenaza espiritual de los pueblos de las tierras: “Estaban conscientes de cómo, en el descuido del altar de Dios en el pasado, se habían contaminado con las prácticas idólatras de los pueblos circundantes, y para evitar que se repitiera tal fracaso, inmediatamente levantaron el verdadero altar”.

ii. “La Jerusalén en ruinas fue mejor protegida por ese altar que si sus muros caídos hubieran sido reconstruidos”. (Maclaren)

d. Y colocaron el altar sobre su base: Esto significa que encontraron los cimientos viejos para el altar anterior y construyeron el nuevo sobre el mismo lugar que el antiguo, que se remontaba al altar de David en la era de Arauna (2 Samuel 24:16-19).

i. “El altar fue colocado en su lugar, es decir, en su lugar tradicional y propio” (Kidner). “Reconstruirlo en el mismo lugar en el que se encontraba anteriormente”. (Clarke)

ii. “Hay algo muy patético en la imagen de la gente reunida buscando a tientas entre las ruinas en la colina del Templo, para encontrar ‘las bases’, los contornos medio borrados de los cimientos del antiguo altar de las ofrendas quemadas”. (Maclaren)

iii. La centralidad del altar, asentado sobre sus antiguos cimientos, era esencial para ellos – como lo es para nosotros. Tenemos un altar (Hebreos 13:10), la cruz de Jesucristo, colocada sobre sus cimientos antiguos. El altar era para ellos lo que la cruz es para los cristianos bajo el nuevo pacto.

3. (4-6) Se observa la fiesta y se reanuda el sacrificio regular.

Celebraron asimismo la fiesta solemne de los tabernáculos, como está escrito, y holocaustos cada día por orden conforme al rito, cada cosa en su día; además de esto, el holocausto continuo, las nuevas lunas, y todas las fiestas solemnes de Jehová, y todo sacrificio espontáneo, toda ofrenda voluntaria a Jehová. Desde el primer día del mes séptimo comenzaron a ofrecer holocaustos a Jehová; pero los cimientos del templo de Jehová no se habían echado todavía.

a. Celebraron asimismo la fiesta solemne de los tabernáculos: Esta gran fiesta gozosa (una de las tres fiestas principales de Israel) celebraba la fidelidad de Dios hacia Israel durante el viaje por el desierto desde Egipto hasta la Tierra Prometida.

i. Durante esta fiesta, se ordenaba a las familias de Israel que acamparan en refugios temporales, destinados a recordarles cómo vivieron sus antepasados durante el éxodo. En este contexto – cuando al regresar a las ciudades destruidas, se vieron obligados a vivir de esta manera hasta que pudieran reconstruir adecuadamente – la fiesta solemne de los tabernáculos tuvo un significado especial para estos judíos que regresaron a Judá.

b. El holocausto continuo… todas las fiestas solemnes de Jehová… toda ofrenda voluntaria a Jehová: Esto describe la reanudación regular del sacrificio en el altar, y todo esto se hizo antes de que se pusieran los cimientos del templo.

i. “Durante su larga estadía en Babilonia, los judíos no pudieron ofrecer ningún sacrificio, ya que esto solo podía hacerse en Jerusalén. En cambio, estuvieron rodeados por una miríada de templos paganos. En los textos babilónicos se mencionan unos cincuenta templos junto con 180 santuarios al aire libre para Ishtar, trescientas tarimas para los dioses Igigi y mil doscientas tarimas para los dioses Anunnaki”. (Yamauchi)

ii. “La luna nueva marcaba el primer día del mes y era un día santo (Números 28:11-15)”. (Yamauchi)

4. (7) Preparativos para la reconstrucción del templo.

Y dieron dinero a los albañiles y carpinteros; asimismo comida, bebida y aceite a los sidonios y tirios para que trajesen madera de cedro desde el Líbano por mar al Jope, conforme a la voluntad de Ciro rey de Persia acerca de esto.

a. Y dieron dinero a los albañiles y carpinteros: Una vez que el trabajo de restauración comenzó en el altar del sacrificio, continuaron reuniendo y contratando a los trabajadores que necesitaban para construir el templo.

b. Madera de cedro desde el Líbano: Los cedros del Líbano eran legendarios por su excelente madera. Esto significaba que querían usar los mejores materiales que pudieran en la construcción y los mismos materiales que Salomón usó para construir el primer templo (1 Reyes 5:6), aunque tenían muchos menos recursos que los que tenía Salomón.

c. Conforme a la voluntad de Ciro rey de Persia acerca de esto: Esta voluntad no solo era la autorización legal para construir el templo, sino que también incluía el apoyo financiero de la tesorería real (permiso también puede traducirse como subvención).

i. “Dado que el permiso para comprar materiales apenas necesitaría especificarse, es razonable tomarse el trabajo para incluir provisión además de permiso, como con nuestra propia palabra ‘subvención’”. (Kidner)

ii. Esto muestra que usaron dinero gentil para comprar los suministros (del Líbano gentil) para construir el segundo templo. El templo de Salomón utilizó suministros y trabajadores gentiles; Dios ordenó que la construcción del segundo templo también se hiciera con la cooperación de los gentiles.

B. Comienza el trabajo en el templo.

1. (8-11) Gran gozo y adoración al comenzar el trabajo.

En el año segundo de su venida a la casa de Dios en Jerusalén, en el mes segundo, comenzaron Zorobabel hijo de Salatiel, Jesúa hijo de Josadac y los otros sus hermanos, los sacerdotes y los levitas, y todos los que habían venido de la cautividad a Jerusalén; y pusieron a los levitas de veinte años arriba para que activasen la obra de la casa de Jehová Jesúa también, sus hijos y sus hermanos, Cadmiel y sus hijos, hijos de Judá, como un solo hombre asistían para activar a los que hacían la obra en la casa de Dios, junto con los hijos de Henadad, sus hijos y sus hermanos, levitas, pusieron a los sacerdotes vestidos de sus ropas y con trompetas, y a los levitas hijos de Asaf con címbalos, para que alabasen a Jehová, según la ordenanza de David rey de Israel. Y cantaban, alabando y dando gracias a Jehová, y diciendo: Porque él es bueno, porque para siempre es su misericordia sobre Israel.Y todo el pueblo aclamaba con gran júbilo, alabando a Jehová porque se echaban los cimientos de la casa de Jehová.

a. En el año segundo de su venida a la casa de Dios en Jerusalén: El trabajo pareció comenzar tan pronto como fue posible, permitiendo los preparativos logísticos descritos en Esdras 3:7. Significativamente, el sitio fue llamado la casa de Dios en Jerusalén antes de que se construyera el templo y mientras el templo anterior todavía estaba en ruinas.

i. “Esto difícilmente habría pasado desapercibido – el segundo fue el mes en que se inició el Templo de Salomón (1 Reyes 6:1).” (Kidner)

b. Pusieron a los levitas de veinte años arriba para que activasen la obra: La Ley de Moisés ordenaba que los levitas comenzaran su servicio a los treinta años de edad (Números 4:1-3, 4:3-47). David cambió el punto de partida para el servicio levítico a veinte años de edad (1 Crónicas 23:24). Bajo el liderazgo de Zorobabel y Jesúa, adoptaron la práctica revisada de David.

c. Y cuando los albañiles del templo de Jehová echaban los cimientos: Esta fue una escena memorable. Los sacerdotes estaban vestidos con sus ropas ceremoniales, los músicos estaban listos para que alabasen a Jehová con instrumentos y alabanzas, y ellos cantaban, alabando y dando gracias a Jehová en una presentación organizada.

i. En general, la descripción coincide con la ceremonia masiva y elaborada de dedicación del templo de Salomón (2 Crónicas 5:13), excepto que se llevó a cabo en circunstancias mucho más humildes.

d. Alabando a Jehová porque se echaban los cimientos de la casa de Jehová: Fue una ocasión apropiadamente gozosa. Desde la destrucción del templo bajo la conquista babilónica, no ha habido un lugar adecuado para el sacrificio y la adoración del pueblo de Israel. Se dio otro paso importante en el largo y difícil proceso de restauración de la adoración bíblica y el servicio a Dios.

i. “Esta vez no hay arca, ni gloria visible, de hecho, no hay Templo; sólo algunos comienzos, y pequeños comienzos además. Pero Dios está entronizado en las alabanzas de Israel, y estas podrían ser tan gloriosas como las de Salomón”. (Kidner)

2. (12-13) La reacción mixta entre el pueblo.

Sin embargo, muchos de los sacerdotes, levitas y otros líderes de edad avanzada que habían visto el primer templo lloraron en alta voz al ver los cimientos del nuevo templo. Los demás, en cambio, gritaban de alegría. Los gritos de alegría se mezclaron con el llanto y produjeron un clamor que podía oírse a gran distancia.

a. Líderes de edad avanzada que habían visto el primer templo lloraron en alta voz al ver los cimientos del nuevo templo: Los líderes de edad avanzada sabían que este templo nunca alcanzaría la gloria del primero. Después de todo, el rey Salomón gastó el equivalente moderno de cinco a ocho mil millones de dólares en la construcción del primer templo. También recordaban el horrible final del primer templo, y esto se combinó con la alegría de la restauración para crear profundos sentimientos encontrados en los líderes de edad avanzada.

i. “Posiblemente algunos de ellos habían estado en este mismo lugar medio siglo antes, en una agonía de desesperación, mientras veían las llamas crueles lamiendo las piedras antiguas y ardiendo entre las vigas de cedro, y todo el oro fino oscurecido con nubes negras de humo”. (Adeney)

ii. “Vieron que la gloria se había apartado de Israel; en sus circunstancias era imposible construir una casa como la del primer templo; y si esto hubiera sido posible, aun así habría sido muy inferior, porque le faltaría el arca del pacto, el fuego celestial, el propiciatorio, el maná celestial, la vara de Aarón que reverdeció, la shekiná divina, el espíritu de profecía y muy probablemente el Urim y Tumim”. (Clarke)

iii. Había peligro en su llanto. “La mirada retrospectiva que descarta la actividad presente es siempre un peligro. Los arrepentimientos del pasado que paralizan el trabajo en el presente son siempre erróneos. Además, todos esos arrepentimientos, como en este caso, corren el peligro de cegar los ojos al verdadero valor y significado del presente”. (Morgan)

iv. Los profetas advirtieron contra despreciar este templo por sus humildes comienzos (Hageo 2:1-9, Zacarías 4:8-10).

b. En cambio, gritaban de alegría: Los más jóvenes, que no recordaban el templo anterior, no sintieron más que alegría al ver este importante paso en la restauración del templo y su adoración.

c. Los gritos de alegría se mezclaron con el llanto: Esta profunda escena mostraba la profundidad de los sentimientos encontrados entre la gente.

i. “La vista debe haber sido muy conmovedora: todo un pueblo, una parte llorando de dolor; el otro gritando de alegría; ¡y en la misma ocasión también, en la que ambas partes sentían un interés igual!”. (Clarke)

©2022 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com