Génesis 21 — El nacimiento de Isaac

A. El nacimiento de Isaac.

1. (1) Dios cumple la promesa hecha a Abraham y Sara.

Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con Sara como había hablado.

a. Visitó Jehová a Sara, como había dicho: Tomó mucho tiempo (25 años) para que se cumpliera esta promesa, pero Dios fue fiel. Dios promete nunca fallar.

b. Como había hablado: La promesa de un hijo no se cumplió porque Abraham obedeció perfectamente, sino porque Dios fue fiel a su palabra.

i. Algunas de las promesas de Dios son condicionales y dependen de algo que nosotros tenemos que hacer, pero otras promesas de Dios son incondicionales y Dios las cumple no por lo que hacemos, sino por quién es Él.

2. (2-7) El niño es llamado Isaac.

Y Sara concibió y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le había dicho. Y llamó Abraham el nombre de su hijo que le nació, que le dio a luz Sara, Isaac. Y circuncidó Abraham a su hijo Isaac de ocho días, como Dios le había mandado. Y era Abraham de cien años cuando nació Isaac su hijo. Entonces dijo Sara: Dios me ha hecho reír, y cualquiera que lo oyere, se reirá conmigo. Y añadió: ¿Quién dijera a Abraham que Sara habría de dar de mamar a hijos? Pues le he dado un hijo en su vejez.

a. Y llamó Abraham el nombre de su hijo que le nació, que le dio a luz Sara, Isaac: Originalmente, el nombre Isaac fue como un tipo de regaño por la risa de Abraham y Sara (Génesis 17:17-19 y 18:12-15), pero Dios cambió este suave regaño en una causa de gozo.

b. Isaac se vuelve un tipo (una representación) de Jesucristo:

·Ambos fueron hijos de una promesa.

·Ambos nacieron después de un tiempo de espera.

·A ambas madres les fue dada seguridad sobre la omnipotencia de Dios (Génesis 18:13-14; Lucas 1:34; 1:37).

·A ambos les fueron dados nombres llenos de significado antes de nacer.

·Ambos nacimientos ocurrieron a la hora puesta por Dios (Génesis 21:2; Gálatas 4:4).

·Ambos nacimientos fueron milagrosos.

·Ambos nacimientos fueron acompañados de gozo (Génesis 21:6; Lucas 1:46-47; 2:10-11).

B. Conflicto entre Ismael e Isaac.

1. (8-11) Sara quiere que Abraham eche fuera a Agar e Ismael.

Y creció el niño, y fue destetado; e hizo Abraham gran banquete el día que fue destetado Isaac. Y vio Sara que el hijo de Agar la egipcia, el cual ésta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac. Por tanto, dijo a Abraham: Echa a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con Isaac mi hijo. Este dicho pareció grave en gran manera a Abraham a causa de su hijo.

a. Y creció el niño, y fue destetado: Algunos dicen que en aquel tiempo los niños no se destetaban hasta los 12 años de edad y otros que hasta los 5, pero los estudios más confiables indican que fue a la edad de 3 años.

b. Y vio Sara que el hijo de Agar […] se burlaba: Este conflicto entre los dos hijos fue casi inevitable, aunque había aproximadamente 13 años de diferencia entre ellos. Para Abraham fue difícil estar del lado de Sara, porque no quería rechazar a su hijo Ismael.

i. Nota que el conflicto vino de Ismael hacia Isaac. Ismael era el que se burlaba de Isaac. Gálatas 4:22-29 describe una aplicación espiritual de este conflicto entre Isaac (el hijo de la promesa) e Ismael (el hijo nacido por la carne).

ii. En Gálatas 4, los legalistas judíos que molestaban a los gálatas decían que eran hijos de Abraham y por eso eran bendecidos. Pablo admitió que ellos eran hijos de Abraham, pero que eran como Ismael, no como Isaac. Los legalistas reclamaban a Abraham como su padre, paro Pablo quiere saber quién era su madre: ¿Agar o Sara? Ismael fue nacido de una esclava, y nacido según la carne. Isaac fue nacido de una mujer libre, y nació según la promesa. Los legalistas promueven una relación con Dios basada en la esclavitud y según la carne. El Evangelio verdadero de gracia ofrece libertad en Cristo y es una promesa recibida por fe.

iii. De la misma manera en que Ismael y sus descendientes han perseguido a Isaac y a sus descendientes, no debemos sorprendernos de que las personas que hoy día siguen a Dios en la carne persigan a los que siguen a Dios por fe en la promesa.

2. (12-14) Bajo las instrucciones de Dios, Abraham echa fuera a Agar e Ismael.

Entonces dijo Dios a Abraham: No te parezca grave a causa del muchacho y de tu sierva; en todo lo que te dijere Sara, oye su voz, porque en Isaac te será llamada descendencia. Y también del hijo de la sierva haré una nación, porque es tu descendiente. Entonces Abraham se levantó muy de mañana, y tomó pan, y un odre de agua, y lo dio a Agar, poniéndolo sobre su hombro, y le entregó el muchacho, y la despidió. Y ella salió y anduvo errante por el desierto de Beerseba.

a. En todo lo que te dijere Sara, oye su voz: Quizás Abraham no quería dejar ir a Ismael porque era como su plan de respaldo. Si algo pasaba con Isaac, Ismael estaría allí. Pero Dios no quería que Abraham tuviera un «plan de respaldo». Dios quería que Abraham confiara en Él.

i. Abraham podía haber sido tentado a rechazar los consejos de Sara; pero buscó al Señor, hizo lo que Sara sugirió, y lo hizo sin sentir que estaba rindiéndose a las demandas de Sara.

b. La despidió: La solución de Dios fue clara: deshacerse del hijo de la carne. No debe haber ninguna reconciliación con la carne, ninguna coexistencia pacífica. El hijo de la carne debe ser desechado para siempre.

i. En nuestra batalla entre la carne y confiar en el Espíritu Santo, la solución es la misma: echar fuera a la sirvienta y a su hijo. La ley y la gracia no pueden convivir juntas como principios de nuestra vida cristiana, y no hay duda de que pertenecemos a la libre y no a la esclava.

c. Y ella salió y anduvo errante por el desierto de Beerseba: Quizá parezca despiadado que Abraham hiciera tal cosa, pero era exactamente lo que Dios quería, y exactamente lo que tenía que suceder.

i. La carne y la sangre no forman el vínculo más fuerte que Dios quiere que honremos. Hay circunstancias donde no podemos hacer más que poner nuestra familia a un lado por la gloria de Dios.

ii. Dios quiere que seamos despiadados con la carne: «Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos» (Gálatas 5:24).

d. Tomó pan, y un odre de agua: Abraham era un hombre rico y seguramente podría haberles dados mucho más, quizás un burro o varios animales de carga; pero Abraham se dio cuenta de que sin la ayuda de Dios no importaba lo que les diera, pues no sería suficiente. Mas con Dios, todo saldría bien.

3. (15-21) Dios preserva a Ismael y a Agar en el desierto.

Y le faltó el agua del odre, y echó al muchacho debajo de un arbusto, y se fue y se sentó enfrente, a distancia de un tiro de arco; porque decía: No veré cuando el muchacho muera. Y cuando ella se sentó enfrente, el muchacho alzó su voz y lloró. Y oyó Dios la voz del muchacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está. Levántate, alza al muchacho, y sostenlo con tu mano, porque yo haré de él una gran nación.

a. Y le faltó el agua del odre: Como Agar e Ismael se fueron lejos de Abraham, sus suministros finalmente se agotaron. Su agua se agotó y Agar abandonó a Ismael debajo de un arbusto, esperando su rápida muerte en el desierto.

i. «Mirad la compasión de una madre por su hijo expirando por la sed, y recordad que tal compasión debe sentir todo cristiano por las almas que perecen por falta de Cristo, perecen eternamente, perecen sin esperanza de salvación». (Spurgeon)

b. Dios ha oído la voz del muchacho: Como levantó su voz y lloró, Dios respondió. Curiosamente, Dios contestó en respuesta a la voz del muchacho, en lugar de responder al llanto de Agar específicamente. De algún modo, Ismael gritó por misericordia y ayuda.

c. No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está: De la misma manera que Dios los protege y los preserva en el desierto, les contesta escuchando la voz del niño. Dios estaba mostrando un favor especial hacia Ismael por ser descendiente de Abraham.

d. Yo haré de él una gran nación: Aunque Ismael no era el hijo de la promesa, Dios no tenía nada contra él. Los descendientes de Ismael se convertirían en una gran nación, el pueblo árabe.

4. (19-21) La provisión de Dios para Agar e Ismael.

Entonces Dios le abrió los ojos, y vio una fuente de agua; y fue y llenó el odre de agua, y dio de beber al muchacho. Y Dios estaba con el muchacho; y creció, y habitó en el desierto, y fue tirador de arco. Y habitó en el desierto de Parán; y su madre le tomó mujer de la tierra de Egipto.

a. Entonces Dios le abrió los ojos, y vio una fuente de agua: Si el milagro estuvo en la creación de una fuente de agua o en la revelación de una fuente de agua ya existente, no importa. Lo importante es que Dios proveyó para Agar e Ismael.

i. Spurgeon explicó la semejanza entre Agar y uno que necesita a Dios. «Como en el caso de Agar, el suministro de sus necesidades estaba cercano a su mano: “el pozo está cerca”. En segundo lugar, existe tanto suministro que pareciera haber sido proporcionado para ellos y solo para ellos, como parecía haber sido este pozo. En tercer lugar, no se necesita un gran esfuerzo para obtener del suministro ya hecho por Dios todo lo que queremos. Ella llenó su botella con agua —una tarea feliz para ella— y le dio de beber al muchacho».

b. Entonces Dios estaba con el muchacho: La idea es enfatizar que Dios no estaba contra Ismael y su descendencia. Dios estaba con Ismael, y tenía una promesa para su futuro.

C. Abraham hace un pacto con un rey filisteo.

1. (22-24) Abraham hace una tregua de cesación de hostilidad con Abimelec.

Aconteció en aquel mismo tiempo que habló Abimelec, y Ficol príncipe de su ejército, a Abraham, diciendo: Dios está contigo en todo cuanto haces. Ahora, pues, júrame aquí por Dios, que no faltarás a mí, ni a mi hijo ni a mi nieto, sino que conforme a la bondad que yo hice contigo, harás tú conmigo, y con la tierra en donde has morado. Y respondió Abraham: Yo juraré.

a. Habló Abimelec, […] a Abraham: ¿Cómo puede ser este el mismo Abimelec de Génesis 20? No es el mismo. Abimelec es el título de un gobernador entre los canaanitas, no un nombre específico. Este gobernante y Ficol, príncipe de su ejército, se encontraron con Abraham.

b. Dios está contigo en todo cuanto haces: Abimelec se dio cuenta de esto por razón de la bendición evidente en la vida de Abraham. Abraham tenía la más grande de las bendiciones: la presencia de Dios en su vida.

i. «Pienso que la más grande bendición de Dios dada a un hombre es su propia presencia. Si pudiera elegir todas las bendiciones de esta vida, ciertamente, no pediría riqueza, porque eso no puede traer ningún alivio; ciertamente, no pediría popularidad, porque no hay descanso para el hombre en cuyas palabras los hombres esperan constantemente, y es una dura tarea tener que actuar en tal caso; sino elegiría, como mi más alto honor, tener siempre a Dios conmigo». (Spurgeon)

c. Júrame aquí por Dios, que no faltarás a mí: Porque Dios había bendecido tanto a Abraham, él fue un hombre de grandes riquezas, influencia, y poder. Abimelec sabía que era muy importante que su descendencia y él tuvieran el favor de Abraham. Abraham concertó diciendo: «juraré».

2. (25-31) A cambio de la tregua Abraham arregla una discusión acerca de un pozo importante.

Y Abraham reconvino a Abimelec a causa de un pozo de agua, que los siervos de Abimelec le habían quitado. Y respondió Abimelec: No sé quién haya hecho esto, ni tampoco tú me lo hiciste saber, ni yo lo he oído hasta hoy. Y tomó Abraham ovejas y vacas, y dio a Abimelec; e hicieron ambos pacto. Entonces puso Abraham siete corderas del rebaño aparte. Y dijo Abimelec a Abraham: ¿Qué significan esas siete corderas que has puesto aparte? Y él respondió: Que estas siete corderas tomarás de mi mano, para que me sirvan de testimonio de que yo cavé este pozo. Por esto llamó a aquel lugar Beerseba; porque allí juraron ambos.

a. Y Abraham reconvino a Abimelec a causa de un pozo: Como Canaán no tenía ríos significativos y tenía una gran dependencia de la lluvia, un pozo era una importante y estratégica propiedad. Aparentemente, Abraham tuvo la posesión de un pozo de agua del cual los siervos de Abimelec se habían apoderado. El hombre de fe no solo aceptó este error; él reconvino a Abimelec a causa del pozo.

b. Y tomó Abraham ovejas y vacas, y dio a Abimelec; e hicieron ambos pacto: Las ovejas y vacas fueron probablemente usadas para hacer el sacrificio o cortar el pacto, como en Génesis 15:7-21.

c. Que estas siete corderas tomarás de mi mano: Las siete corderas eran un regalo especial de Abraham a Abimelec para mostrar favor y ofrecer alguna compensación por su pérdida de acceso al pozo. Abraham comprendió sus derechos de propiedad, pero él no era avaro ni miserable. La aceptación de las siete corderas fue el reconocimiento de Abimilec de que Abraham había cavado este pozo y le pertenecía a él.

d. Por esto llamó a aquel lugar Beerseba: Este era un nombre descriptivo. Beerseba significa «lugar de riego», «pozo de agua subterránea». Algunos entienden el nombre bíblico Beerseba como «pozo de siete» o «pozo del juramento». Beerseba se convertiría en un notable lugar en la historia de Israel, y continúa hoy como una importante ciudad en el Israel moderno (Beer-Sheva):

·Isaac, el hijo de Abraham, cavó este pozo nuevamente, y construyó un altar en Beerseba (Génesis 26:23–33).

·Jacob, el nieto de Abraham, se detuvo en Beerseba mientras dejaba la tierra prometida (Génesis 28:10–15, 46:1–7).

·Cuando Israel tomó posesión de la tierra prometida, Beerseba se convirtió en el territorio de las tribus de Simeón y Judá (Josué 15:28, 19:2).

·Los hijos de Samuel fueron jueces en Beerseba (1 Samuel 8:2).

·El rey Saúl fortificó Beerseba en sus batallas contra los amalecitas (1 Samuel 14:48, 15:2–9).

·El profeta Elías encontró refugio en Beerseba cuando Jezabel ordenó su muerte (1 Reyes 19:3).

·El profeta Amós mencionó Beerseba respecto a la idolatría (Amós 5:5 y 8:14).

i. La frase «de Dan a Beerseba» se convertiría en una frase proverbial para describir toda la tierra de Israel: del norte (Dan) al sur (Beerseba). Esto se puede ver en pasajes como: Jueces 20:1, 1 Samuel 3:20, 2 Samuel 3:10, 1 Reyes 4:25, y mucho otros.

3. (32-34) Abraham invoca el nombre de Jehová.

Así hicieron pacto en Beerseba; y se levantó Abimelec, y Ficol príncipe de su ejército, y volvieron a tierra de los filisteos. Y plantó Abraham un árbol tamarisco en Beerseba, e invocó allí el nombre de Jehová Dios eterno. Y moró Abraham en tierra de los filisteos muchos días.

a. Y plantó Abraham un árbol tamarisco en Beerseba: Después de este exitoso trato, Abraham hizo algo que miraba décadas y generaciones hacia adelante. Un árbol tamarisco requería un largo tiempo para crecer, pero Abraham sabía que Dios les había prometido la tierra a él y a sus descendientes para siempre.

b. Invocó allí el nombre de Jehová Dios eterno: Aun en este tiempo de conflicto en su familia y entre sus vecinos, Abraham mantuvo un caminar real y vivo con Dios. El conflicto no lo alejó de Dios, sino que lo impulsó a estar más cerca de Él.

©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com