Hebreos 7 – Un mejor sacerdocio, un mejor sumo sacerdote
A. El tema de Hebreos 7.
1. El escritor de los Hebreos ahora explica un tema que había introducido antes en Hebreos 2:17: Jesús como nuestro sumo sacerdote.
a. Él había comenzado a tratar el tema en Hebreos 5:10, pero tuvo que pasar un tiempo advirtiendo a estos cristianos desalentados acerca del peligro de no continuar y progresar en su vida cristiana.
b. Como un autor de una buena historia de detectives, el autor de Hebreos señala a un personaje del Antiguo Testamento que muchos podrían considerar insignificante, y le da a ese personaje una prominencia real.
2. Estos cristianos judíos estaban interesados en Jesús como sumo sacerdote, pero tenían una objeción intelectual ante la idea. Esto es porque Jesús no venía de una tribu sacerdotal (la tribu de Leví) o de la familia sacerdotal (la familia de Aarón).
a. El autor a los hebreos quiere eliminar estos problemas intelectuales que los cristianos judíos tenían con el evangelio. Estos problemas intelectuales les estorbaban para poder continuar madurando en Jesús.
b. De la misma manera, muchos cristianos se traban en cuestiones intelectuales que podrían ser resueltas para que puedan seguir adelante con Jesús. Si un cristiano está trabado con cuestiones como la creación y la evolución, la validez de los milagros u otras cosas por el estilo, ellos necesitan solucionar sus dudas para que puedan avanzar con Jesús.
3. Este capítulo también es importante porque nos muestra cómo debemos pensar acerca de las instituciones del Antiguo Testamento del sacerdocio y la Ley.
B. Melquisedec y su relación con el sacerdocio Aarónico.
1. (1-3) Lo que sabemos de Melquisedec según Génesis 14:18-20.
Porque este Melquisedec, rey de Salem, sacerdote del Dios Altísimo, que salió a recibir a Abraham que volvía de la derrota de los reyes, y le bendijo, a quien asimismo dio Abraham los diezmos de todo; cuyo nombre significa primeramente Rey de justicia, y también Rey de Salem, esto es, Rey de paz; sin padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene principio de días, ni fin de vida, sino hecho semejante al Hijo de Dios, permanece sacerdote para siempre.
a. Que salió a recibir a Abraham que volvía de la derrota de los reyes: Después de que Abraham derrotó a la alianza de reyes que tomó cautivo a su sobrino Lot, se encontró con un sacerdote misterioso llamado Melquisedec, que también era rey en la ciudad de Salem (un nombre antiguo para la ciudad de Jerusalén).
i. La historia nos muestra el peligro de combinar la autoridad civil con la religiosa. Por eso Dios les prohibió a los reyes de Israel que fueran sacerdotes y a los sacerdotes que fueran reyes. Melquisedec, que era rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo es una excepción única.
b. Sacerdote del Dios Altísimo: Melquisedec no era solamente un adorador del Dios verdadero. Tenía el título de honor sacerdote del Dios Altísimo. La grandeza de Dios magnifica la grandeza del sacerdocio de Melquisedec.
i. “Cualquier sacerdocio es evaluado de acuerdo al estatus de la deidad a la cual servían, lo que significa que Melquisedec debe haber sido de un tipo de sacerdocio altamente exaltado”. (Guthrie)
c. Y le bendijo: Melquisedec bendijo a Abraham, y Abraham le dio a Melquisedec el diezmo: los diezmos de todo (como se menciona en Génesis 14:20)
d. Cuyo nombre significa primeramente Rey de justicia, y también Rey de Salem, esto es, Rey de paz: El nombre Melquisedec significa Rey de Justicia y también era Rey de Paz (porque el nombre Salem significa “paz”).
i. El orden es sutil pero importante. Primero Melquisedec en su mismo nombre es llamado rey de justicia. Luego es llamado rey de paz. Como siempre, la justicia viene antes que la paz. La justicia es el único camino verdadero hacia la paz. La gente busca esa paz en el escape, la evasión o el compromiso, pero solamente la encontrará en la justicia. “La paz sin justicia es como la superficie lisa del arroyo antes de caer en el Niágara”. (Spurgeon)
ii. El hecho que estos nombres tienen significado, y que el Espíritu Santo nos explica este significado muestra que cada palabra tiene importancia y es inspirada por Dios. “El Espíritu Santo destinaba una enseñanza en los nombres: así nos instruye el apóstol en el pasaje que tenemos ante nosotros. Creo en la inspiración verbal de la Escritura; por tanto, puedo ver cómo puede haber instrucción para nosotros incluso en los nombres propios de personas y lugares. Los que rechazan la inspiración verbal deben en efecto condenar al gran apóstol de los gentiles, cuya enseñanza se basa tan frecuentemente en una palabra. Él hace más de palabras y nombres de lo que cualquiera de nosotros debería haber pensado en hacer, y fue guiado por el Espíritu del Señor, por lo tanto, estaba correcto. Por mi parte, temo más hacer muy poco de la Palabra que de ver demasiado en ella”. (Spurgeon)
e. Sin padre, sin madre: No se dice nada acerca de la genealogía de Melquisedec en el pasaje de Génesis 14 o en ningún otro lado. En lo que se refiere al registro bíblico, él no tiene padre ni madre, ni principio de días, ni fin de vida. “Vemos pero muy poco de él, sin embargo, no vemos nada poco en él”. (Spurgeon)
i. A pesar de que casi todos los comentadores están en desacuerdo unos con otros en este punto, algunos piensan que sin padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene principio de días, ni fin de vida, sino hecho semejante al Hijo de Dios significa que Melquisedec era un ser celestial, si no una apariencia preencarnada de Jesús mismo.
f. Hecho semejante al Hijo de Dios: Melquisedec fue hecho semejante al Hijo de Dios. En realidad no es que Jesús tenga un tipo de sacerdocio como el de Melquisedec. En vez, Melquisedec tuvo un tipo de sacerdocio como el de Jesús.
i. Hecho semejante en Hebreos 7:3 es aphomoiomenos, una palabra griega antigua que no es usada en ninguna otra parte del Nuevo Testamento. “Es una palabra sugerente que se utiliza en el activo de ‘una copia facsímil o modelo’ y en el pasivo de ‘hecho semejante a’”. (Guthrie)
ii. “Era como si el Padre no pudiera esperar por el día de la entrada sacerdotal de su Hijo dentro del velo; pero debe anticipar las maravillas de su ministerio, al personificar sus rasgos principales en miniatura”. (Meyer)
g. Permanece sacerdote para siempre: O esto se refiere a la continuación del orden sacerdotal de Melquisedec, o es evidencia de que Melquisedec fue en realidad Jesús apareciendo en el Antiguo Testamento. El sacerdocio de Jesús permanece hasta este día y por la eternidad.
2. (4-10) Melquisedec es superior a Abraham porque Abraham le dio diezmos a Melquisedec y porque Melquisedec bendijo a Abraham.
Considerad, pues, cuán grande era éste, a quien aun Abraham el patriarca dio diezmos del botín. Ciertamente los que de entre los hijos de Leví reciben el sacerdocio, tienen mandamiento de tomar del pueblo los diezmos según la ley, es decir, de sus hermanos, aunque éstos también hayan salido de los lomos de Abraham. Pero aquel cuya genealogía no es contada de entre ellos, tomó de Abraham los diezmos, y bendijo al que tenía las promesas. Y sin discusión alguna, el menor es bendecido por el mayor. Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien se da testimonio de que vive. Y por decirlo así, en Abraham pagó el diezmo también Leví, que recibe los diezmos; porque aún estaba en los lomos de su padre cuando Melquisedec le salió al encuentro.
a. Abraham el patriarca dio diezmos del botín… los hijos de Leví… tienen mandamiento de tomar del pueblo los diezmos según la ley: El sacerdocio de Leví recibía diezmos de Israel como un mandamiento. Abraham dio voluntariamente el diezmo a Melquisedec. Esto hace que lo que Abraham dio a Melquisedec sea más grande que el pago del diezmo por parte de Israel al sacerdocio instituido por Moisés.
i. Diezmos del botín: Botín es literalmente la parte superior del montón, refiriéndose al mejor botín de guerra. Cuando Abraham dio el diezmo a Melquisedec, literalmente “lo tomó de arriba”.
b. También Leví, que recibe los diezmos; porque aún estaba en los lomos de su padre cuando Melquisedec le salió al encuentro: Debido a que toda la tribu de Leví estaba genéticamente en los lomos de Abraham cuando él hizo esto, vemos al sacerdocio del Antiguo Testamento pagando el diezmo al sacerdocio de Melquisedec. Esto muestra que Melquisedec está en una posición de autoridad sobre Abraham y su descendiente Leví.
i. La frase “y por decirlo así” en Hebreos 7:9 es importante. El autor de Hebreos sabe que está usando un punto alegórico, por lo que no quiere que se le tome demasiado literalmente.
c. El menor es bendecido por el mayor: Por lo tanto Melquisedec mostró que era mayor que Abraham porque lo bendijo. Por su parte, Abraham aceptó que Melquisedec era mayor cuando recibió la bendición.
i. “La bendición de la que se habla aquí… no es el simple desear el bien a otros, lo cual puede ser hecho por menores a mayores; pero es la acción de una persona autorizada para declarar la intención de Dios de otorgarle cosas buenas a otro”. (Macknight, citado por Clarke)
C. La necesidad de un nuevo sacerdocio.
1. (11) El sacerdocio levítico nunca hizo nada perfecto.
Si, pues, la perfección fuera por el sacerdocio levítico (porque bajo él recibió el pueblo la ley), ¿qué necesidad habría aún de que se levantase otro sacerdote, según el orden de Melquisedec, y que no fuese llamado según el orden de Aarón?
a. Si, pues, la perfección fuera por el sacerdocio levítico: Esto muestra la necesidad de un orden de sacerdocio diferente. Si la perfección pudiera venir por el sacerdocio levítico, no hubiera necesidad de otro sacerdocio. Pero Dios describió otro sacerdocio en Salmos 110:4.
i. El simple hecho de que Dios describe a un sacerdote, según el orden de Melquisedec en el Salmo 110:4 muestra que hay algo que falta en el sacerdocio según el orden de Aarón. Dios nunca establecería un sacerdocio innecesario.
ii. El término sacerdocio levítico simplemente describe el sacerdocio judío del Antiguo Testamento. Se le llama levítico porque la mayoría de las instrucciones para el sacerdocio del Antiguo Testamento se encuentran en el libro de Levítico.
b. Porque bajo él recibió el pueblo la ley: El sacerdocio del Antiguo Testamento es el sacerdocio asociado con la Ley de Moisés. El sacerdocio de Melquisedec es asociado con Abraham, no con Moisés.
2. (12) El cambio de sacerdocio y el cambio de lugar de la Ley de Moisés.
Porque cambiado el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley.
a. Cambiado el sacerdocio: Esto se desarrolla lógicamente a partir del Salmo 11:4. Dios nunca introduciría un nuevo sacerdocio si no fuera necesario, y nunca introduciría un sacerdocio inferior. La mera mención del orden de Melquisedec (en Salmos 110:4 y Hebreos 7:11) muestra que Dios quería que se cambiara el sacerdocio.
b. Necesario es: El sacerdocio de Aarón estaba conectado a la Ley de Moisés. Así que si es cambiado el sacerdocio, debemos anticipar algún cambio en el estatus o lugar de la Ley.
3. (13-14) De acuerdo con la Ley Mosaica, Jesús no podía ser sacerdote, ya que es de la tribu equivocada.
Y aquel de quien se dice esto, es de otra tribu, de la cual nadie sirvió al altar. Porque manifiesto es que nuestro Señor vino de la tribu de Judá, de la cual nada habló Moisés tocante al sacerdocio.
a. De otra tribu, de la cual nadie sirvió al altar: Bajo la Ley de Moisés, Dios ordenó específicamente que solo aquellos de la familia de Aarón podían servir en el altar en sacrificio.
b. De quien se dice esto, es de otra tribu: Jesús obviamente no es de la familia de Aarón, ni siquiera de la tribu de Leví. La tribu de Judá (la tribu del linaje de Jesús) no tenía nada que ver con el sacerdocio de Aarón, el sacerdocio asociado con la Ley de Moisés. Por lo tanto, de acuerdo con el sacerdocio de Aarón y la Ley de Moisés, Jesús nunca podría ser un sacerdote. Si Él es nuestro sumo sacerdote, debe ser bajo otro principio.
4. (15-17) La declaración de Dios de que el Mesías pertenece a otra orden del sacerdocio en Salmos 110:4.
Y esto es aun más manifiesto, si a semejanza de Melquisedec se levanta un sacerdote distinto, no constituido conforme a la ley del mandamiento acerca de la descendencia, sino según el poder de una vida indestructible. Pues se da testimonio de él:
Tú eres sacerdote para siempre,
Según el orden de Melquisedec.
a. No constituido conforme a la ley del mandamiento acerca de la descendencia: El sacerdocio de Jesús no está basado en una ley o en una herencia (la ley del mandamiento acerca de la descendencia), sino en el poder de la vida indestructible de Dios.
b. Tu eres sacerdote para siempre: Esto podía ser dicho del Mesías, que era un sacerdote según el orden de Melquisedec. Nunca podría ser dicho de un sacerdote según el orden de Aarón, pues ninguno de ellos tenía el poder de una vida indestructible, y cada uno de ellos sirvió como sacerdote por un período limitado, limitado a su propia vida.
c. Según el poder de una vida indestructible: Mateo 27:1 dice: Venida la mañana, todos los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo entraron en consejo contra Jesús, para entregarle a muerte. Entre aquellos que conspiraron para matar a Jesús, había sacerdotes de la orden de Aarón. Pero Jesús, por el poder de una vida indestructible, les mostró que Él era superior, cuando triunfó sobre la muerte.
5. (18-19) Porque la ley es anulada como medio para establecer nuestra relación y acceso a Dios.
Queda, pues, abrogado el mandamiento anterior a causa de su debilidad e ineficacia (pues nada perfeccionó la ley), y de la introducción de una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios.
a. A causa de su debilidad e ineficacia: En su debilidad e ineficacia, nada perfeccionó la ley. La ley establece los estándares perfectos de Dios, pero no da el poder para cumplirlos.
i. “Que todos los legalistas recuerden esto: nada perfeccionó la ley. Que los adventistas recuerden esto: nada perfeccionó la ley. Que todos aquellos que sueñan con la ley como la regla de la vida recuerden esto: nada perfeccionó la ley”. (Newell)
b. Nada perfeccionó la ley: Por lo tanto, la ley es valiosa porque nos muestra los estándares perfectos de Dios, pero no fue hecha con el propósito de ser la base del caminar del hombre con Dios. Esto es porque la ley es débil e ineficaz cuando se trata de salvar mi alma o de darme poder sobre el pecado.
i. La ley nos da un diagnóstico experto de nuestro problema con el pecado, lo cual es esencial. Pero la ley no da la cura para nuestro problema con el pecado. Solo Jesús puede salvarnos del pecado.
c. Queda, pues: Como ahora, en Jesús, tenemos una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios, estamos equivocados al querer regresar a construir nuestro caminar cristiano en la ley. Por lo tanto, la ley es “anulada” en el sentido de que ya no es el principio dominante de nuestra vida, especialmente de nuestra relación con Dios.
i. “La palabra griega traducida como anular [abrogado], athetesis, es la misma que parece en Hebreos 9:26 para quitar de en medio el pecado ‘por el sacrificio de sí mismo’. ¡La desaparición de la Ley es tan absoluta, por tanto, como la eliminación del pecado!” (Newell)
ii. La ley no te da una mejor esperanza. La ley no te acerca a Dios como lo hace la gracia de Dios dada en Jesús. Sin embargo, muchos cristianos viven una relación legal con Dios en lugar de una relación de gracia con Él.
iii. “Aunque la ley llevó a cabo una función valiosa, su debilidad principal era que no podía dar vida y vitalidad ni siquiera a quienes la cumplían, y mucho menos a quienes no la cumplían. De hecho, su función no era proporcionar fuerza, sino proporcionar estándares por los cuales el hombre pudiera medir su propio estado moral. Su ineficacia no se debe considerar en el sentido de ser totalmente inútil, sino en el sentido de ser ineficaz para proporcionar un medio constante de acercamiento a Dios basado en un sacrificio totalmente adecuado”. (Guthrie)
d. Abrogado el mandamiento anterior… la introducción de una mejor esperanza:El autor llega a la misma conclusión acerca de la ley a la que Pablo llegó en Gálatas 3:19-25, pero llega ahí de una forma totalmente diferente. En Gálatas, Pablo muestra a la ley como un tutor que nos lleva a Jesús; en Hebreos, la ley es asociada con un sacerdocio que fue hecho obsoleto por un sacerdocio superior.
i. “Dejen de pensar en la purificación, y consideren al Purificador; absténganse de especular sobre el rescate, y traten con el Rescatador”. (Meyer)
e. Una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios: Pero nosotros tenemos una mejor esperanza y nos acercamos a Dios a través de un mejor sacerdocio y Sumo Sacerdote. Nuestra esperanza está en Jesús, no en la Ley de Moisés o en nuestra capacidad para cumplirla.
i. Esto debería atenuar nuestro entusiasmo por la reconstrucción del templo en Jerusalén. El pequeño grupo de judíos dedicados absolutamente comprometidos con la reconstrucción del templo tienen un lugar emocionante en el plan profético de Dios. Pero cualquiera que restaure el sacerdocio aarónico y reanude el sacrificio levítico (especialmente para la expiación del pecado) se rehúsa a reconocer el sacerdocio superior y el sacrificio máximo de Jesús.
D. La superioridad de nuestro sumo sacerdote.
1. (20-21) Jesús fue hecho sumo sacerdote por un juramento directo de Dios.
Y esto no fue hecho sin juramento; porque los otros ciertamente sin juramento fueron hechos sacerdotes; pero éste, con el juramento del que le dijo:
Juró el Señor, y no se arrepentirá:
Tú eres sacerdote para siempre,
Según el orden de Melquisedec.
a. Y esto no fue hecho sin juramento: El sacerdocio de Jesús fue establecido con un juramento. Está registrado en Salmos 110:4: Juró Jehová, y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec.
b. Sin juramento fueron hechos sacerdotes: El sumo sacerdote del orden de Aarón fue designado por herencia, no por carácter personal o un juramento de Dios. Pero no fue así con Jesús y el orden sacerdotal de Melquisedec. Dios incluso selló Su elección con un juramento.
2. (22) Jesús: nuestra garantía de un mejor pacto.
Por tanto, Jesús es hecho fiador de un mejor pacto.
a. Jesús es hecho fiador: La palabra griega antigua para fiador (egguos) describía a alguien que daba una garantía o seguridad. Era una persona que podría servir de fiador para un préstamo o alguien que pagaría la fianza para un prisionero. Jesús mismo es la garantía de un mejor pacto.
b. Un mejor pacto: El Antiguo Pacto tenía un mediador (Moisés), pero nadie para garantizar el lado del pacto del pueblo; por lo tanto, fallaban continuamente. Pero el Nuevo Pacto – un mejor pacto – tiene un consignatario que lo garantiza en nuestro nombre. Por lo tanto, el Nuevo Pacto se sustenta en lo que hizo Jesús, no en lo que nosotros hacemos. Él es el fiador, no nosotros.
c. Pacto: La palabra usada para pacto (la palabra griega antigua diatheke) no es el término usado comúnmente para “pacto” (syntheke). El significado literal de diatheke se acerca más a la idea de “testamento” en el sentido de una “última voluntad y testamento”. Tal vez el autor está intentando de enfatizar que, si bien un pacto podría considerarse como un acuerdo al que llegan dos partes, el testamento es dictado solo por el testador. El “acuerdo” bajo el que nos encontramos con Dios a través de Jesús no es algo que nosotros hayamos negociado con Él. Él nos ha dictado los términos y nosotros los aceptaremos o rechazaremos.
d. De un mejor: Este mejor – la abrumadora superioridad de Jesucristo – prueba que Él es digno y capaz de ser nuestra garantía, nuestro cosignatario por un mejor pacto.
3. (23-25) Un sacerdocio inmutable significa una salvación perpetua.
Y los otros sacerdotes llegaron a ser muchos, debido a que por la muerte no podían continuar; mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable; por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.
a. Los otros sacerdotes llegaron a ser muchos: El sacerdocio bajo la Ley de Moisés cambiaba constantemente, por lo que podía ser mejor o peor a través de los años dependiendo del carácter del sacerdote. Mas éste… tiene un sacerdocio inmutable. Jesús nunca morirá y tiene un sacerdocio permanente. No tenemos que preocuparnos porque vaya a ser reemplazado por un mal sacerdote.
b. Permanece para siempre: Esto lleva la idea de “permaneciendo como siervo”. Jesús permanece para siempre, y Él permanece como siervo, incluso después de haber ascendido al cielo.
c. Por lo cual puede también salvar perpetuamente: La naturaleza inmutable del sacerdocio de Jesús significa que la salvación que ofrece también es inmutable, permanente y segura. Ya que Jesús es nuestro sumo sacerdote por siempre, Él puede salvar para siempre.
i. El evangelista Billy Sunday tuvo un gran sermón, donde habló apasionadamente acerca de cómo Dios lo salvó “desde lo más bajo” porque él estaba en el punto más bajo del alcoholismo cuando Dios lo salvó. Esta fue una gran frase de un gran predicador, pero no aplica a lo que la Biblia dice: no somos salvados desde lo peor sino para lo mejor.
ii. “El verbo ‘salvar’ es utilizado absolutamente, lo que significa que Cristo dará salvación en el sentido más amplio; Él salva a la humanidad de todo aquello de lo que necesita ser salvada”. (Morris)
d. A los que por él se acercan a Dios: Esto nos dice a quién puede salvar Jesús. Se refiere a aquellos que permanecen en el Hijo y tienen comunión con el Padre. También nos dice a dónde tenemos que llegar para hallar salvación: a Dios. Una cosa es ir a la iglesia; otra cosa es ir a Dios.
i. Esto muestra el lugar de permanecer en la seguridad del creyente. Cuando por él nos acercamos a Dios, Él nos salva perpetuamente. En Jesús hay seguridad total de salvación.
e. Viviendo siempre para interceder por ellos: Ciertamente, esto nos da fuerza: el saber que Jesús está orando por nosotros, y que Él vive siempre para interceder por nosotros. Esto es un gran estímulo para cualquiera que sienta ganas de renunciar a la vida cristiana.
i. Romanos 8:33-34 refleja lo importante que el apóstol Pablo considera esta obra de intercesión de Jesús por nosotros. Ahí, él se imagina a Jesús defendiéndonos contra cualquier acusación o condena a través de Su intercesión por nosotros.
ii. “Nuestro bendito Señor está intercediendo por nosotros, pero de ninguna forma intenta apaciguar a Dios. Todo lo que el santo Ser de Dios y su gobierno justo pudieran pedir fue satisfecho en la cruz, completamente y para siempre”. (Newell)
iii. La intercesión de Jesús por nosotros no es una cuestión de aplacar a un Padre enojado que quiere destruirnos. Tampoco se trata de recitar oraciones continuamente para interceder por su pueblo. Significa que nos representa continuamente ante el Padre para que podamos acercarnos a través de Él, y que nos defiende contra las acusaciones y los ataques de Satanás.
iv. Lucas 22:31-32 nos da un ejemplo de la intercesión de Jesús por su pueblo: Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos. Jesús ruega para fortalecernos en las pruebas y temporadas de ataque, y contra las acusaciones de Satanás.
4. (26-28) Jesús está mejor calificado para ser un sumo sacerdote que cualquier otro sacerdote de la orden de la Ley de Moisés.
Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los cielos; que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres; pero la palabra del juramento, posterior a la ley, al Hijo, hecho perfecto para siempre.
a. Porque tal sumo sacerdote nos convenía: Los sacerdotes bajo la Ley de Moisés no tenían el carácter personal del Hijo de Dios. Jesús es santo, inocente (sin malicia ni engaño) sin mancha, apartado de los pecadores (en el sentido de no compartir su pecado). Jesús es superior en su carácter personal que cualquier sacerdote terrenal.
i. El creyente debe gloriarse en estos pasajes que exaltan a Jesús y muestran Su superioridad. “La superioridad de nuestro Señor Jesucristo es un tema que no interesará a todos. A muchas personas les parecerá un éxtasis devocional, si no un cuenta ocioso. Sin embargo, siempre habrá un remanente según la elección de la gracia para quien esta meditación sea inexpresablemente dulce”. (Spurgeon)
b. Hecho más sublime que los cielos: El carácter perfecto de Jesús se demuestra por dos hechos. Primero, por su exaltación en el cielo. Segundo, por el hecho de que no necesitaba ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, lo que los otros sacerdotes necesitaban hacer cada día.
c. Ofreciéndose a sí mismo: Esto es totalmente único. Un sacerdote puede traer un sacrificio y ofrecerlo en el altar. Pero Jesús fue tanto el sacerdote como el sacrificio. Este es el mejor sacrificio entregado a Dios el Padre por el mejor sacerdote.
i. Cuando se ofreció a sí mismo fue una ofrenda voluntaria. “¡Oh, esto hace que el sacrificio de Cristo sea tan bendito y glorioso! Arrastraron los bueyes y llevaron las ovejas al altar; ataron los becerros con cuerdas, incluso con cuerdas al cuerno del altar; pero no fue así con el Cristo de Dios. Ninguno lo obligó a morir; entregó su vida voluntariamente, porque tenía poder para entregarla y volver a tomarla”. (Spurgeon)
d. Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres: Bajo la ley de Moisés, los sacerdotes siempre eran hombres débiles. Pero Jesús, es el Hijo, hecho perfecto para siempre. Como Él es el sumo sacerdote perfecto, pudo ofrecerse a sí mismo como un sacrificio perfecto por nuestros pecados. Jesús está perfectamente calificado para ser nuestro sumo sacerdote perfecto, ¡perfecto para siempre!
©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com