Isaías 45 – “Mírenme a mí y sean salvos”

A. Mirar al Dios que escogió a Ciro.

1. (1-3) El llamado de Dios y la misión para Ciro.

Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha, para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir delante de él puertas, y las puertas no se cerrarán: Yo iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y cerrojos de hierro haré pedazos; y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre.

a. Así dice Jehová a su ungido, a Ciro: Isaías lleva a cabo esta notable profecía del capítulo anterior. En ella, Dios anuncia – por nombre – al libertador de su pueblo de un cautiverio venidero, y lo hace 200 años antes de que el hombre Ciro naciera.

i. A su ungido significa que Ciro tenía una unción particular de Dios para su obra. Dios derramó Su Espíritu sobre un rey pagano porque Dios quería usar a ese hombre para bendecir y liberar a Su pueblo.

ii. “Existe un precedente para la unción divina de un rey no israelita, aunque en un solo pasaje (1 Reyes 19:15-16). Aunque el Dios viviente normalmente empleó a los israelitas para tales propósitos, él es soberano y puede usar a quien quiera”. (Grogan)

iii. Así dice Jehová a su ungido significa que esta palabra estaba dirigida particularmente a Ciro. Este era el mensaje de Dios para él, y Ciro aparentemente lo escuchó. “Estas cosas supo Ciro al leer el libro de profecía que Isaías había dejado doscientos diez años antes”. (Josefo, Antigüedades judías XI, 5 [i.2], citado en Grogan)

b. Al cual tome yo por su mano derecha: Como muchos de nosotros, Ciro podría mirar hacia atrás en su vida y carrera y ver cómo el Señor sostuvo su mano todo el tiempo. Para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes: Ciro tuvo una notable carrera militar.

i. “Al que ha sido designado y empoderado, para someter a muchas naciones. Jenofonte, en su primer libro… nos da una lista de ellas. Ciro sometió, dice él, a los sirios, asirios, árabes, capadocios, frigios, lidios, carios, fenicios, babilonios, bactrianos, indios, cilicios, sacios, patagones, mariandinos y muchas otras naciones. También tuvo dominio sobre los asiáticos, griegos, chipriotas, egipcios … Él venció, dice Herodoto, todo país que invadió”. (Trapp)

c. Para abrir delante de él puertas, y las puertas no se cerrarán… quebrantaré puertas de bronce: Los ejércitos de los medos y persas, bajo el gobierno de Ciro, conquistaron la ciudad de Babilonia en una incursión notable descrita en Daniel 5. Según el historiador antiguo Herodoto, mientras el rey Belsasar de Babilonia celebraba una fiesta imprudente, Ciro conquistó la ciudad desviando el flujo del Éufrates hacia un pantano cercano; y así, bajar el nivel del río para que sus tropas pudieran marchar a través del agua y bajo las puertas del río. Pero aún así no habrían podido entrar si las puertas de bronce de las paredes interiores no se hubieran dejado inexplicablemente abiertas. Dios abrió las puertas de la ciudad de Babilonia para Ciro y lo puso por escrito 200 años antes de que sucediera.

i. “En octubre del 539 a.C., Ciro avanzó hacia la baja Mesopotamia y, dejando a Babilonia para el final, conquistó y ocupó el territorio circundante. Al ver en qué dirección soplaba el viento, Nabonido de Babilonia abandonó su ciudad, dejándola a cargo de su hijo Belsasar … la toma de Babilonia fue tan incruenta y sin esfuerzo como lo implica Daniel 6”. (Motyer)

d. Y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados: La noche que conquistaron la ciudad, Ciro y sus ejércitos se llevaron todos los asombrosos tesoros de Babilonia – y era importante que Ciro supiera que el Señor se lo había dado.

i. La noche en que cayó Babilonia, Ciro probablemente no tenía un gran sentido de la guía o presencia del Señor. Probablemente se consideró a sí mismo brillante y afortunado. A menudo, logramos algo solo por la bendición y la voluntad de Dios y nunca vemos la mano milagrosa de Dios detrás de todo.

ii. Dios ciertamente le dio tesoros a Ciro. Clarke cita a Plinio: “Cuando Ciro conquistó Asia, encontró treinta y cuatro mil libras de oro, además de vasijas y artículos de oro”.

e. Para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel: Dios anunció todo esto 200 años antes de su cumplimiento para que Ciro conociera y glorificara al Señor. Pero el Señor también lo hizo para que Ciro mostrara bondad al pueblo de Dios y les otorgara permiso para regresar a la Tierra Prometida del cautiverio que les impusieron los babilonios.

i. Los decretos reales de Ciro que cumplen esta profecía se encuentran en Esdras 1:2 y 2 Crónicas 36:23.

2. (4-7) El propósito detrás del llamado y la misión de Dios para Ciro.

Por amor de mi siervo Jacob, y de Israel mi escogido, te llamé por tu nombre; te puse sobrenombre, aunque no me conociste. Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí. Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste, para que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo, que formo la luz y creo las tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo esto.

a. Por amor de mi siervo Jacob: A Ciro le gustaría pensar que Dios lo eligió porque era el hombre disponible más inteligente, talentoso o fuerte. Realmente, el enfoque de Dios estaba en Su pueblo. No fue Ciro lo que movió a Dios a actuar, sino la condición y el clamor de su pueblo. Fue por amor a ellos.

i. “Que todas estas victorias fueron por el bien del pequeño Israel es una de las ironías del control de la historia por parte de Dios”. (Grogan)

ii. “Se prefiere a Ciro para que Israel pueda ser liberado. Ciro tendrá un reino, pero solo para que el pueblo de Dios tenga su libertad. El Señor levanta a uno y derriba a otro. Detrás de todo el drama de los acontecimientos humanos de hoy, hay un Dios que está planeando que su iglesia – a través de la aflicción y la persecución, el castigo y la tribulación – sea perfeccionada y preparada para heredar el Reino de Dios”. (Redpath)

b. Te puse sobrenombre, aunque no me conociste… Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste: Ciro ni siquiera conocía al Señor, pero Dios podía ungirlo, guiarlo, bendecirlo y usarlo. ¿Cuánto más debería poder hacer Dios a través de aquellos que tienen al menos una semilla de mostaza de fe en Él?

i. Proverbios 21:1 dice: Como los repartimientos de las aguas, Así está el corazón del rey en la mano de Jehová; A todo lo que quiere lo inclina. Dios puede obrar en a través de otros de formas muy inesperadas.

c. Para que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo: Esto se cumplió maravillosamente en Esdras 1:1-3. Ese pasaje muestra cómo cuando Ciro proclamó su edicto para que el pueblo de Dios regresara a la Tierra Prometida, reconoció al mundo entero la grandeza y singularidad de Jehová de Israel.

i. En el primer año de Ciro rey de Persia, para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de Jeremías, despertó Jehová el espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo pregonar de palabra y también por escrito por todo su reino, diciendo: Así ha dicho Ciro rey de Persia: Jehová el Dios de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá. Quien haya entre vosotros de su pueblo, sea Dios con él, y suba a Jerusalén que está en Judá, y edifique la casa a Jehová Dios de Israel (él es el Dios), la cual está en Jerusalén.

d. Que formo la luz y creo las tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo esto: En pocas palabras, Isaías sabe, Ciro sabría y declararía al mundo entero, y nosotros deberíamos saber hoy, que Dios tiene el control. Dado que esta profecía fue dada mucho antes de que el pueblo de Dios fuera al cautiverio, Isaías ahora anuncia su liberación, ellos podrían ser consolados durante el cautiverio al saber que Dios tiene el control.

i. El punto de Isaías es que no hay dos dioses o fuerzas en el cielo, uno bueno y otro malo, como en un sentido dualista “yin y yang”. “Ciro era persa y los persas tenían un concepto dualista de Dios y el mundo. A su dios bueno lo llamaban Ahura Mazda y al dios maligno, Angra Mainyu. El primero había creado la luz, el segundo la oscuridad”. (Bultema)

ii. Pero Dios no tiene opuesto. Satanás no es y nunca ha sido el opuesto de Dios. Hay un solo Dios. Él no es el autor del mal; el mal nunca es “original”, sino siempre una perversión de un bien existente. Sin embargo, Dios permite el mal y lo usa para lograr Su propósito eterno de unir todas las cosas en Jesús (Efesios 3:8-11 y 1:9-10). Si Dios pudo promover Su propósito eterno al permitir que Su Hijo muriera una muerte inicua e injusta en una cruz, entonces Él sabe cómo usar lo que Él permite para Su propósito eterno.

iii. “Indudablemente, el Señor no es representante del mal como tal, pero sí hace uso del mal para que produzca el bien”. (Calvin, citado en Bultema)

iv. Cuando Dios hace cosas grandes y milagrosas, es fácil creer que Él tiene el control. Cuando los tiempos son difíciles y las pruebas pesadas, debemos creerlo aún más.

B. Mirar al Dios que lo creó todo.

1. (8) Dios llama a la creación.

Rociad, cielos, de arriba, y las nubes destilen la justicia; ábrase la tierra, y prodúzcanse la salvación y la justicia; háganse brotar juntamente. Yo Jehová lo he creado.

a. Rociad, cielos: El gran Dios descrito en el pasaje anterior puede hablar a los cielos y traer lluvia. Esto es cierto en el sentido literal natural; pero también es cierto en un sentido literal espiritual. Dios puede enviar un diluvio del cielo y también dejar quelas nubes destilen la justicia.

b. Ábrase la tierra, y prodúzcanse la salvación: Dios puede enviar Su bendición desde todas las direcciones. Desciende de los cielos y sube de la tierra.

c. Y prodúzcanse la salvación y la justicia; háganse brotar juntamente: Es importante ver que la salvación y la justicia siempre brotan juntamente. Cuando Dios trae salvación a una vida, también trae justicia a esa vida. Ellas brotan juntamente.

d. Yo Jehová lo he creado: ¿De qué está hablando Dios aquí? ¿De que creó el mundo físico natural? ¿o de que creó el mundo espiritual invisible? Ambos son ciertos, por lo que se puede tener a ambos en mente aquí.

2. (9-10) La necedad de resistir a nuestro Creador.

¡Ay del que pleitea con su Hacedor! ¡El tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el barro al que lo labra: Qué haces? o tu obra: ¿No tiene manos? ¡Ay del que dice al padre: ¿Por qué engendraste? y a la mujer: ¿Por qué diste a luz?!

a. ¡Ay del que pleitea con su Hacedor! Saber que Dios es el Creador de todas las cosas debería hacernos vacilar en oponernos a Él de cualquier forma. Es tan tonto como que diga el barro al que lo labra: ¿Qué haces?

i. Es una tontería oponerse a nuestro Creador porque, como Él nos hizo, puede quebrantarnos. Es una tontería oponerse a nuestro Creador porque, ya que Él nos hizo, Él sabe lo que es mejor para nosotros. Es una tontería oponerse a nuestro Creador porque le debemos la mayor obligación.

ii. “La idea es ampliamente sostenida de que los judíos murmuraron sobre el decreto de Dios de que un pagano los libraría, y que estas palabras son una reprensión”. (Butlema)

b. O tu obra: ¿No tiene manos?: La única cosa más tonta que la criatura resistiendo y oponiéndose al Creador ¡es que la criatura crea que no hay Creador! Isaías describe a una vasija de barro, la obra del alfarero diciendo, “Mi alfarero no tiene manos. ¡Yo no tengo ningún creador!”.

c. Ay del que dice al padre: ¿Por qué engendraste?: El engendrado no tiene voz en cómo llegó a ser. Es simplemente tonto y contraproducente para nosotros cuestionar y acusar a Dios sobre cómo nos hizo. Cada uno de nosotros tiene sus fortalezas y debilidades, y cada uno tiene sus triunfos y desafíos. Simplemente necesitamos aceptar lo que somos ante Dios y buscar Su poder redentor y transformador para conformarnos a la imagen de Su Hijo, Jesucristo (Romanos 8:29).

3. (11-13) El Dios de toda la creación levantará a Ciro y liberará a su pueblo.

Así dice Jehová, el Santo de Israel, y su Formador: Preguntadme de las cosas por venir; mandadme acerca de mis hijos, y acerca de la obra de mis manos. Yo hice la tierra, y creé sobre ella al hombre. Yo, mis manos, extendieron los cielos, y a todo su ejército mandé. Yo lo desperté en justicia, y enderezaré todos sus caminos; él edificará mi ciudad, y soltará mis cautivos, no por precio ni por dones, dice Jehová de los ejércitos.

a. Yo hice la tierra, y creé sobre ella al hombre: Repetidamente a través de esta sección extendida de Isaías, Dios enfatiza Su lugar como Creador. La importancia que se le da a esta idea aquí nos muestra que conocer a Dios como Creador no es una opción, ni simplemente una cuestión de peleas de libros de texto en los tribunales y las escuelas públicas. Cuando rechazamos a Dios como Creador, rechazamos al Dios de la biblia y servimos a un dios de nuestra propia imaginación. Él realmente nos creó y realmente importa.

i. “En el Antiguo Testamento, el Creador no es solo Aquel que comenzó todo, sino también Aquel que mantiene todo lo que existe, controla y guía todo”. (Motyer)

b. Enderezaré todos sus caminos; él edificará mi ciudad, y soltará mis cautivos: El Dios de todo poder y creación usa ese poder en nombre de su pueblo. Él dirigirá los caminos del liberador anunciado – Ciro – y hará que reconstruya Jerusalén y libere al pueblo de Dios cautivo en una tierra extranjera. Y Ciro lo hará, no por precio ni por dones, sino por la convicción de Dios de que debe hacerlo (Esdras 1:1-3).

C. Mirar al Señor que está por encima de todos los dioses.

1. (14-17) Cuando el Señor se revela como el Dios verdadero, los idólatras se someten y el pueblo de Dios se salva.

Así dice Jehová: El trabajo de Egipto, las mercaderías de Etiopía, y los sabeos, hombres de elevada estatura, se pasarán a ti y serán tuyos; irán en pos de ti, pasarán con grillos; te harán reverencia y te suplicarán diciendo: Ciertamente en ti está Dios, y no hay otro fuera de Dios. Verdaderamente tú eres Dios que te encubres, Dios de Israel, que salvas. Confusos y avergonzados serán todos ellos; irán con afrenta todos los fabricadores de imágenes. Israel será salvo en Jehová con salvación eterna; no os avergonzaréis ni os afrentaréis, por todos los siglos.

a. Irán en pos de ti, pasarán con grillos: Así como Israel fue llevado al cautiverio por medio de una reubicación forzada, así un día Israel será supremo entre las naciones y las guiará como a ellos y al Señor les plazca.

b. Te harán reverencia… Ciertamente en ti está Dios, y no hay otro fuera de Dios: La sumisión de las naciones a Israel no es tanto a Israel mismo, sino al Dios de Israel.

c. Verdaderamente tú eres Dios: Isaías derrama aquí un diluvio inspirado de alabanza, describiendo a Dios, exaltando a Dios, declarando confianza en Dios, recibiendo de Dios.

i. Verdaderamente tú eres Dios que te encubres: No es que Dios se esconda del pecador que lo busca. Isaías simplemente declara lo que Pablo diría más tarde en 1 Timoteo 1:17: Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

ii. Bultema sobre Verdaderamente tú eres Dios que te encubres, Dios de Israel, que salvas: “Cuando él ve cómo Dios durante muchos siglos oculta su rostro de Israel, grita estas palabras, vencido por el éxtasis y la emoción. El Señor se esconde de Israel durante los tiempos de los gentiles (18:4; 40:27; 49:14; Oseas 3:3-5)... Así que está claro que no podemos aplicar estas palabras a un pecador que busca. De tal, Dios no se esconde. Pero cuando en los últimos días Israel lo busque, lo encontrará”.

2. (18-21) El Señor declara Su grandeza y la necedad de la idolatría.

Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro. No hablé en secreto, en un lugar oscuro de la tierra; no dije a la descendencia de Jacob: En vano me buscáis. Yo soy Jehová que hablo justicia, que anuncio rectitud. Reuníos, y venid; juntaos todos los sobrevivientes de entre las naciones. No tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su ídolo, y los que ruegan a un dios que no salva. Proclamad, y hacedlos acercarse, y entren todos en consulta; ¿quién hizo oír esto desde el principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo Jehová? Y no hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador; ningún otro fuera de mí.

a. Porque así dijo Jehová, que creó los cielos: Por pura repetición, Isaías virtualmente lo martillea en nuestra conciencia – que Dios es nuestro Creador y que tenemos obligaciones para con Él como nuestro Creador.

b. No la creó en vano, para que fuese habitada: Esta breve declaración – no la creó en vano – es la base bíblica de una doctrina especulativa conocida como la “Teoría de la brecha”.

i. La teoría de la brecha se basa en una comparación entre Isaías 45:18 y Génesis 1:2, que se traducen como la tierra se volvió desordenada y vacía. Aquí en Isaías 45:18, Dios dice que Él no la creó en vano, y vano es la misma palabra hebrea para vacía que se encuentra en Génesis 1:2. La idea es que Dios no la creo en vano (vacía), sino que se volvió desordenada y vacía a través del ataque satánico y los años de desolación, lo que explica las vastas edades geológicas y los restos fósiles que parecen datar mucho más allá de la historia de la biblia. Según la teoría de la brecha, Génesis 1:3 y los versículos siguientes describen la re–creación de un mundo que ha sido hecho vacío por Satanás.

ii. Lo primero que se puede decir en contra de la teoría de la brecha es que, traducir Génesis 1:2 (La tierra estaba desordenada y vacía) como la tierra se volvió desordenada y vacía, no sigue la comprensión más clara de la gramática hebrea aquí. Está permitido, pero un poco exagerado. La forma más natural de traducir el pasaje es decir que la tierra estaba desordenada y vacía en vez de la tierra se volvió desordenada y vacía.

iii. La otra cosa que se puede decir en contra de la teoría de la brecha es su uso como respuesta a las interpretaciones del registro fósil. Aquellos que creen en la teoría de la brecha asignan fósiles viejos y extintos a esta larga e indefinida “brecha” entre Génesis 1:1 y 1:2. Pero cualquiera que sea el mérito que pueda tener la teoría de la brecha, no puede explicar la extinción y fosilización de animales antiguos. La biblia dice claramente que la muerte vino de Adán (Romanos 5:12) y, dado que los fósiles son el resultado de la muerte, no podrían haber sucedido antes de la época de Adán.

iv. Bultema sobre este versículo y la teoría de la brecha: “Solo deseamos afirmar que este texto por sí solo no es prueba suficiente para ella. En cualquier caso, está claro que el propósito final de la tierra no es ser vacía, sino ser habitada por el Israel convertido y las naciones convertidas”.

c. No dije a la descendencia de Jacob: En vano me buscáis. Es algo perverso pensar que Dios en algún momento le dijo a su pueblo, “En vano me buscáis”. Cuando busquemos al señor con todo nuestro corazón, lo encontraremos. Jeremías 29:13 dice, y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Hebreos 11:6 dice, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.

d. No tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su ídolo, y los que ruegan a un dios que no salva: Cuando el Señor declara Su propia grandeza, fidelidad y poder salvador, naturalmente contrasta con los necios ídolos de la nación – los cuales deben de ser sostenidos, en lugar de poder sostener ellos a los que los adoran.

e. Quién hizo oír esto desde el principio: El asombroso fenómeno de la profecía predictiva muestra que Dios es quien dice ser y que no hay otro Dios además de Él.

f. Dios justo y Salvador: Tanto como cualquier otra cosa, esto muestra el asombroso poder, sabiduría y amor de Dios. A primera vista, es imposible ver cómo un Dios justo puede ser un salvador cuando la justicia exige que los pecadores sean condenados. Pero impulsado por Su gran amor, Dios cumplió las justas demandas de Su justicia en la cruz, para poder extenderse a nosotros como Salvador y aun así seguir siendo un Dios justo.

i. Como dijo Pablo en Romanos 3:26: A fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.

3. (22-25) Mirar al Señor y encontrar la salvación en la entrega.

Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más. Por mí mismo hice juramento, de mi boca salió palabra en justicia, y no será revocada: Que a mí se doblará toda rodilla, y jurará toda lengua. Y se dirá de mí: Ciertamente en Jehová está la justicia y la fuerza; a él vendrán, y todos los que contra él se enardecen serán avergonzados. En Jehová será justificada y se gloriará toda la descendencia de Israel.

a. Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra: Esta simple pero poderosa declaración muestra el plan de salvación.

i. Esto muestra la sencillez de la salvación: todo lo que debemos hacer es mirar. “Se pueden leer muchos libros de teología que exponen todo tipo de cosas en un intento de mostrar cómo puede llegar el hombrea Dios, pero estas teorías están lejos de la verdad. El Espíritu Santo necesita exactamente cinco letras, para decirnos qué hacer: m-i-r-a-d. Eso es todo. Es lo más simple y básico que cualquier persona puede hacer, pero es lo más difícil de hacer en la vida diaria”. (Redpath)

ii. Esto nos muestra el enfoque de la salvación: debemos de mirar a Dios y nunca a nosotros mismos ni a ninguna otra cosa del hombre. “Mírenme a Mí, es Su Palabra, lo que significa apartar la mirada de la iglesia porque eso no salvará a nadie; apartarla del predicador porque puede decepcionarte y desilusionarte; apartarla de toda forma y ceremonia externa. Debes apartar tu mirada de todo esto y ver hacia el trono y allí, en tu corazón, mirar al Señor Jesucristo resucitado y reinante”. (Redpath)

iii. Esto muestra el amor detrás de la salvación: Dios suplica al hombre, “Mirad a mí”.

iv. Esto muestra la seguridad de la salvación: y sed salvos.

v. Esto muestra la extensión del amor salvador de Dios: Todos los términos de la tierra.

b. Mírad a mí: En Números 21, el pueblo de Israel fue golpeado por mordeduras de serpientes mortales.Y Moisés levantó la imagen de una serpiente de bronce, levantada sobre un asta, y la gente que la miró vivió. La gente se salvó no por hacer algo, sino simplemente por mirara la serpiente de bronce. Tenían que confiar en que algo tan aparentemente tonto como mirar tal cosa sería suficiente para salvarlos, y seguramente, algunos perecieron porque pensaron que era demasiado tonto hacer tal cosa.

i. Por eso dice aquí en Isaías: Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra. Podemos estar dispuestos a hacer cientos de cosas para ganarnos la salvación, pero Dios nos manda que solo confiemos en Él – que lo miremos a Él.

ii. “Dondequiera que esté, por muy lejos que esté, solo dice ‘¡Mirad!’ No dice que debo ver; sólo dice “¡Mirad!”. Si miramos algo en la oscuridad no podemos verlo, pero hemos hecho lo que nos dijeron. Entonces, si un pecador solo mira a Jesús, Él lo salvará; porque Jesús en la oscuridad es tan bueno como Jesús en la luz, y Jesús cuando no puedes verlo es tan bueno como Jesús cuando puedes. Es sólo ‘¡mirad!’, ‘¡Ah!’, dice uno, ‘he estado tratando de ver a Jesús este año, pero no lo he visto’. No dice que lo veas, sino ‘¡mírad!’”. (Spurgeon)

c. Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra: El domingo 6 de enero de 1850, un joven de menos de dieciséis años caminaba por la calle de una aldea en una pequeña ciudad a unas cincuenta millas de Londres, Inglaterra. En ese día terriblemente frío, la nieve cayó pesadamente; pero él estaba más preocupado por encontrar una iglesia, porque estaba profundamente consciente de su necesidad de Dios y del colapso, el pecado y el fracaso de su vida incluso a esa temprana edad. Mientras caminaba por la calle con la nieve cayendo, sintió que aún estaba demasiado lejos de llegar a la iglesia que tenía la intención de visitar, así que caminó por una vía trasera y entró en una pequeña capilla metodista. Se sentó en un asiento cerca de la parte de atrás, y hacía tanto frío por dentro como por fuera. Solo había unas trece personas allí.

Cinco minutos después de que el servicio comenzara a las once en punto, el predicador habitual de la mañana no había llegado. El clima lo había retrasado. Entonces uno de los diáconos vino al rescate y comenzó a conducir el servicio, y después de un rato anunció su texto: ‘Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más’ El diácono no sabía mucho, por lo que sólo habló durante unos diez minutos.

El propio Charles Spurgeon cuenta lo que sucedió: “Había estado deambulando, buscando alivio y no encontrando nada, hasta que un predicador laico sencillo, iletrado, entre los metodistas primitivos se levantó en el púlpito y dio este pasaje como su texto: ‘mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra’. No tenía mucho que decir, gracias a Dios, porque eso lo obligó a seguir repitiendo su texto, y no hubo nada que necesitara – para mí, al menos – excepto su texto. Recuerdo cómo dijo: ‘Es Cristo el que habla. “Estoy en el huerto en agonía, derramando mi alma hasta la muerte; Estoy en el madero, muriendo por los pecadores; ¡Mírenme! ¡Mírenme!”. Eso es todo lo que tienen que hacer. Un niño puede mirar. Alguien que sea casi idiota puede mirar. Por débil o pobre que sea un hombre, puede mirar; y si mira, la promesa es que vivirá’. Luego, deteniéndose, señaló el lugar donde yo estaba sentado debajo de la galería, y dijo: ‘Ese joven de allí se ve muy miserable’. Supongo que así me veía, pues así es como me sentía. Luego dijo: ‘No hay esperanza para ti, joven, ni ninguna posibilidad de deshacerte de tu pecado, mas que mirando a Jesús’, y gritó, como creo que solo un metodista primitivo puede hacerlo: ‘¡Mira! ¡Mira, joven! ¡Mira ahora!’ Y yo miré; y cuando cantaron un aleluya antes de irse a casa, a su propia manera sincera, estoy seguro de que me uní a ellos. Resultó ser un día en el que la nieve caía profundamente y caía más; así que, mientras volvía a casa, las palabras de David seguían resonando en mi corazón: ‘Lávame, y seré más blanco que la nieve’; y parecía como si toda la naturaleza estuviera de acuerdo con esa bendita liberación del pecado que había yo encontrado en un solo momento, mirando a Jesucristo”.

De alguna manera, de una manera muy extraña y asombrosa, ese joven miró desde lo más profundo de su alma al corazón de Dios. Salió de la iglesia y cuenta que mientras caminaba por las calles, su carga se había levantado para no volver nunca más. Caminaba con una nueva primavera en su paso, una nueva alegría en su rostro, una nueva sensación de paz en su corazón. Había mirado y vivido.

d. Porque yo soy Dios, y no hay más: Por eso debemos mirar al Señor y solo al Señor. Solo Él es Dios. Las instituciones no son Dios. La Iglesia no es Dios. Los pastores no son Dios. Los hermanos y hermanas en Cristo no son Dios. No los miramos a ellos; miramos al Señor, porque solo Él es Dios.

e. Por mí mismo hice juramento: Cuando Dios confirma un juramento, ¿por quién jura? Jura por sí mismo. No hay nadie más grande, así que jura por su propio santo nombre y carácter.

i. Como dice Hebreos 6:13, porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo.

f. Que a mí se doblará toda rodilla, y jurará toda lengua: El Señor aquí declara que llegará un día cuando se doblará toda rodilla delante de él, y toda lengua jurará por su grandeza. Pablo evidentemente citó este pasaje en Filipenses 2:10-11.

i. La cita de Pablo de Isaías 45:23 en Filipenses 2:10-11 es una evidencia abrumadora de la deidad de Jesucristo. Claramente, en Isaías 45:23 es el Señor Dios hablando (Yo soy Jehová que hablo, Isaías 45:19). Ahora, Pablo claramente pone estas altas palabras y esta gran alabanza hacia Jesús: para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. Además, se confiesa que Jesucristo es el Señor – y la palabra Señor es la misma que se usa en la antigua biblia de Pablo para “Señor” en el Antiguo Testamento.

g. Ciertamente en Jehová está la justicia y la fuerza: Esta es la declaración de cada creyente. La justicia y la fuerza las encontramos en Jehová, no en nosotros mismos ni en nadie más. Sin duda, en Jehová será justificada y se gloriará toda la descendencia de Israel.

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