Joel 2




Joel 2 – El día de Jehová y la restauración de Jehová

A. Un poderoso ejército para invadir Judá.

1. (1-5) Cómo se ve el ejército poderoso.

Tocad trompeta en Sion, y dad alarma en mi santo monte; tiemblen todos los moradores de la tierra, porque viene el día de Jehová, porque está cercano. Día de tinieblas y de oscuridad, día de nube y de sombra; como sobre los montes se extiende el alba, así vendrá un pueblo grande y fuerte; semejante a él no lo hubo jamás, ni después de él lo habrá en años de muchas generaciones. Delante de él consumirá fuego, tras de él abrasará llama; como el huerto del Edén será la tierra delante de él, y detrás de él como desierto asolado; ni tampoco habrá quien de él escape. Su aspecto, como aspecto de caballos, y como gente de a caballo correrán. Como estruendo de carros saltarán sobre las cumbres de los montes; como sonido de llama de fuego que consume hojarascas, como pueblo fuerte dispuesto para la batalla.

a. Tiemblen todos los moradores de la tierra, porque viene el día de Jehová, porque está cercano: En Joel 1, el profeta habló del juicio que había llegado a Judá (una plaga de langostas y sequía). En Joel 2, comienza describiendo el juicio que vendrá: un poderoso ejército se enfrentará a Judá. Ya que todo esto es parte del “día de Dios” y no del “día del hombre”, se describe como el día de Jehová.

i. Cuando estamos bien con Dios, queremos el día de Jehová. Anhelamos que Él muestre su fuerza porque sabemos que permanecemos en Él. Cuando no estamos bien con Dios, tememos el día de Jehová, porque cuando Dios se muestra fuerte, su fuerza puede obrar contra nosotros. En los días de Joel, Judá no estaba bien con Dios, por lo que el día de Jehová no sería más que tinieblas y oscuridad para ellos.

b. Así vendrá un pueblo grande y fuerte: Es difícil saber qué invasión predijo Joel aquí. Probablemente Joel advirtió de una invasión que nunca sucedió porque Judá respondió a la invitación de arrepentirse y Dios detuvo a este ejército. El reinado piadoso de 40 años del rey Joás en Judá comenzó poco después del tiempo de la profecía de Joel.

i. Hay algunos comentaristas que creen que Joel se refiere al ejército de langostas y las describe poéticamente. Esto es posible, pero en general parece mejor decir que él escribió sobre un ejército humano literal listo para enfrentarse a una Judá impenitente. Como un ejército de langostas, si vinieran, serían masivos, destructivos e imparables.

c. Delante de él consumirá fuego, tras de él abrasará llama: La naturaleza urgente de esta profecía probablemente motivó a Joiada a deponer a la malvada reina Atalía y a poner a Joás en el trono, aunque solo tenía siete años (2 Reyes 11:4-21). Tal vez Joiada hubiera esperado hasta que Joás fuera mayor, pero la profecía de Joel le mostró que tenía que hacerlo de inmediato.

2. (6-11) Lo que hará el poderoso ejército.

Delante de él temerán los pueblos; se pondrán pálidos todos los semblantes. Como valientes correrán, como hombres de guerra subirán el muro; cada cual marchará por su camino, y no torcerá su rumbo. Ninguno estrechará a su compañero, cada uno irá por su carrera; y aun cayendo sobre la espada no se herirán. Irán por la ciudad, correrán por el muro, subirán por las casas, entrarán por las ventanas a manera de ladrones. Delante de él temblará la tierra, se estremecerán los cielos; el sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas retraerán su resplandor. Y Jehová dará su orden delante de su ejército; porque muy grande es su campamento; fuerte es el que ejecuta su orden; porque grande es el día de Jehová, y muy terrible; ¿quién podrá soportarlo?

a. No torcerá su rumbo… cada uno irá por su carrera: Con un estilo poético escalofriante, Joel describe la disciplina y la eficacia de este ejército. Debido a que mantienen filas y trabajan con energía (irán por la ciudad) provocan un ataque devastador sobre Judá.

i. Si consideramos que el pueblo de Dios es como un ejército tal vez basándonos en las imágenes militares que Pablo esparció en sus cartas entonces este pasaje nos muestra dos cosas que pueden hacer que el pueblo de Dios sea más efectivo. Primero, deben mantener el orden, con cada soldado manteniendo filas. Segundo, deben trabajar duro, con cada soldado sirviendo con energía.

b. Jehová dará su orden delante de su ejército: Tan impresionante como es este ejército, Joel no quiere que Judá olvide que su verdadero poder radica en que Dios los ha enviado. Estos serán su instrumento de juicio contra Judá a menos que se arrepientan.

i. Cuando la plaga de langostas y la sequía devastaron a Judá, podríamos haber pensado que Joel alentaría a la gente. Podría haber dicho: “¡Aguanten! Las cosas están mal, pero mejorarán. Los tiempos difíciles no duran, pero la gente resistente sí”. En cambio, Joel dijo: “¿Crees que eso fue malo? Lo peor está por venir si no nos arrepentimos”.

B. Una promesa de ayuda a un Judá arrepentido.

1. (12-17) El profeta llama al pueblo de Dios al arrepentimiento.

Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. ¿Quién sabe si volverá y se arrepentirá y dejará bendición tras de él, esto es, ofrenda y libación para Jehová vuestro Dios? Tocad trompeta en Sion, proclamad ayuno, convocad asamblea. Reunid al pueblo, santificad la reunión, juntad a los ancianos, congregad a los niños y a los que maman, salga de su cámara el novio, y de su tálamo la novia. Entre la entrada y el altar lloren los sacerdotes ministros de Jehová, y digan: Perdona, oh Jehová, a tu pueblo, y no entregues al oprobio tu heredad, para que las naciones se enseñoreen de ella. ¿Por qué han de decir entre los pueblos: Dónde está su Dios?

a. Por eso pues, ahora… convertíos a mí con todo vuestro corazón con ayuno y lloro y lamento: Debido a que escucharon la advertencia del juicio, el pueblo de Dios debe arrepentirse. Su arrepentimiento no pierde validez solo por haber llegado a él a través del miedo. Lo importante es que se vuelvan a Jehová con sinceridad, y Dios les dice cómo.

i. El arrepentimiento sincero es convertirse a Dios y, por lo tanto, alejarse del propio pecado.

ii. El arrepentimiento sincero se hace con todo vuestro corazón, dando todo lo que podemos en entrega a Dios.

iii. El arrepentimiento sincero está marcado por la acción (con ayuno) y emoción (con lloro y lamento) No todos los actos de arrepentimiento incluirán ayuno y lloro, pero si la acción y la emoción están ausentes, no es un arrepentimiento real.

b. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos: Una expresión de luto en la cultura judía era y es rasgar las vestiduras. Era una forma de decir: “Estoy tan abrumado por el dolor que no me importa si mi ropa está arruinada y me veo mal”. Joel sabía que alguien podía rasgar sus vestidos sin rasgar su corazón, y describió el tipo de arrepentimiento de corazón que realmente agrada a Dios.

i. Spurgeon cuenta la historia de una mujer que vino y parecía sentirse muy mal, diciendo que era una gran pecadora, pero Spurgeon sospechaba que su arrepentimiento no era sincero. Él dijo: “Bueno, si eres una pecadora, por supuesto que has quebrantado las leyes de Dios. Leamos los Diez Mandamientos y veamos cuáles has quebrantado”. Comenzaron con el primero: “No tendrás dioses ajenos delante de mí”, y Spurgeon le preguntó si alguna vez quebrantó ese mandamiento. “Oh, no”, dijo, “no que yo sepa”. “‘No harás ninguna imagen tallada’ ¿alguna vez rompiste ese?” “Nunca, señor”, respondió ella. Como pueden suponer, Spurgeon revisó los Diez Mandamientos y no pudo encontrar ni uno solo que hubiera quebrantado, y lo que él sospechaba era cierto. Ella realmente no se consideraba una pecadora, y estaba haciendo alarde de arrepentimiento porque pensaba que eso se esperaba de ella.

c. Convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo: Conocer la bondad y la misericordia de Dios es otro motivo para el verdadero arrepentimiento. Acudimos a Él confiados en que sanará y perdonará, y que se arrepentirá del juicio que anunció.

i. No nos arrepentimos con la idea de que “Dios es tan malo que si no vuelvo a Él, me destruirá”. En cambio, la idea es “Dios es tan misericordioso y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia que me librará de lo que merezco si me vuelvo a Él”. En última instancia, es su bondad la que nos lleva al arrepentimiento (Romanos 2:4).

d. Salga de su cámara el novio, y de su tálamo la novia: Además del mismo patrón de arrepentimiento que presentó en Joel 1:14, Joel agrega las ideas relevantes del novio y la novia. La idea con estas imágenes es que en un tiempo de arrepentimiento el pueblo de Dios no puede continuar “como de costumbre”. Por lo general, el novio debe estar en su cámara y la novia en su vestidor, pero no esta vez es hora de arrepentirse. El verdadero arrepentimiento no continúa como de costumbre.

e. Entre la entrada y el altar lloren los sacerdotes, ministros de Jehová: Los líderes entre el pueblo de Dios deben guiar especialmente en el arrepentimiento. No pueden venir con la actitud de que “el pueblo” debe arrepentirse. Deben considerarse a sí mismos como el pueblo y al pueblo como ellos mismos y conducirlos al arrepentimiento.

f. Perdona, oh Jehová a tu pueblo, y no entregues al oprobio tu heredad: Joel pone una rica oración de arrepentimiento en la boca de los sacerdotes de Dios. Es como si los sacerdotes oraran con el pensamiento: “¿Cómo podemos persuadir a Dios para que tenga misericordia de nosotros?”.

i. Perdona: Esto implica que el pueblo de Dios merece juicio, pero suplican misericordia.

ii. Tu pueblo: Esto le recuerda a Dios que le pertenecen y proporciona otra motivación para la misericordia.

iii. No entregues al oprobio tu heredad: Esto le dice a Dios que la misericordia hacia su pueblo le traerá gloria entre las naciones y que el juicio puede desacreditar su nombre.

2. (18-20) Dios promete defender a su pueblo arrepentido contra el ejército poderoso.

Y Jehová, solícito por su tierra, perdonará a su pueblo. Responderá Jehová, y dirá a su pueblo: He aquí yo os envío pan, mosto y aceite, y seréis saciados de ellos; y nunca más os pondré en oprobio entre las naciones. Y haré alejar de vosotros al del norte, y lo echaré en tierra seca y desierta; su faz será hacia el mar oriental, y su fin al mar occidental; y exhalará su hedor, y subirá su pudrición, porque hizo grandes cosas.

a. Y Jehová, solícito por su tierra, perdonará a su pueblo: Judá podía saber que cuando el pueblo de Dios se arrepiente sinceramente, Él lo nota desde el cielo. Su celo y piedad se vuelven entonces hacia su pueblo.

b. Yo os envío pan, mosto y aceite… haré alejar de vosotros al del norte: Dios prometió restaurar la prosperidad material a un Judá arrepentido, y derrotar al poderoso ejército del norte. Debido a que este poderoso ejército había hecho grandes cosas, Dios desviaría la atención de su juicio de su pueblo y ahora la pondría contra este poderoso ejército.

3. (21-27) Confianza en la promesa de restauración de Dios.

Tierra, no temas; alégrate y gózate, porque Jehová hará grandes cosas. Animales del campo, no temáis; porque los pastos del desierto reverdecerán, porque los árboles llevarán su fruto, la higuera y la vid darán sus frutos. Vosotros también, hijos de Sion, alegraos y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo, y hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía como al principio. Las eras se llenarán de trigo, y los lagares rebosarán de vino y aceite. Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros. Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado. Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado.

a. Alégrate y gózate, porque Jehová hará grandes cosas: Joel anhelaba la restauración que Dios prometió, y le dijo a Judá que viera hacia adelante con fe y que alabara a Dios por la restauración que prometió incluso antes de que la vieran con sus propios ojos.

b. Los pastos del desierto reverdecerán, los árboles llevarán fruto: Con el ojo de la fe, Joel ya podía ver que sucedía. A su alrededor estaban los pastos y árboles exuberantes y fructíferos que Dios había restaurado después de la destrucción de las langostas.

c. Os ha dado la primera lluvia a su tiempo… y tardía como al principio: Al final de Joel 1, el profeta vio la destrucción que trajo la sequía. Ahora, con el ojo de la fe, ve a Dios restaurando tanto la lluvia temprana como la tardía en Israel.

i. El antiguo Israel no tenía sistema de riego y dependía de la lluvia para regar sus cultivos. En tiempos de sequía, nada crecía. Dios promete restaurar tanto la lluvia temprana (que cae en otoño) como la lluvia tardía (que cae en primavera). Cuando Dios restaure estas lluvias, Judá tendrá eras y tinajas de vino llenas.

ii. Este pasaje junto con otros (Deuteronomio 11:14, Oseas 6:3) fueron tomados para dar el nombre del “Movimiento de la Lluvia Tardía” a partir de 1948 por William Branham. Branham influyó en una generación de predicadores pentecostales, incluido un joven protegido llamado Oral Roberts. Marcado por prácticas y doctrinas extrañas y aberrantes, el movimiento finalmente se desvaneció y el mismo Branham murió en un accidente de tráfico con un conductor ebrio en 1965. Murió en la víspera de Navidad, y sus fieles seguidores creían que resucitaría de entre los muertos, así que retrasaron su entierro varios días. Pero la influencia del movimiento Lluvia Tardía perduró. Lluvia Tardía popularizó muchas actitudes y doctrinas populares en los movimientos de avivamiento de hoy:

·El “ministerio quíntuple” y la “restauración de apóstoles y profetas”.

·Las “verdades fundamentales” de Hebreos 6:1-2.

·Un énfasis en señales y prodigios como marcas de un verdadero avivamiento.

·Un fuerte énfasis en la unidad.

·La teología del remplazo, remplazando a Israel con la iglesia.

·La teología del dominio, diciendo que la iglesia conquistará y gobernará al mundo.

·Una actitud elitista, promoviendo la idea de un grupo de “supercristianos”.

iii. Muchos investigadores, y muchos dentro de estos grupos modernos hoy en día, creen que muchos movimientos modernos de “avivamiento” son en realidad solo una continuación del movimiento de Lluvia Tardía. Movimientos como el “Ejército de Joel”, los Hijos de Dios manifiestos, el Movimiento del Dominio, los Profetas de Kansas City, la Bendición de Toronto, el Avivamiento de Pensacola están conectados de alguna manera con el movimiento de Lluvia Tardía. Por ejemplo, Paul Cain, que luego resurgió como líder de los Profetas de Kansas City en 1989, viajó con William Branham y lo llamó “el profeta más grande que jamás haya existido”.

d. Os restituiré los años que comió la oruga: Dios prometió restituir lo que fue quitado en el castigo. Cuando las langostas hicieron su trabajo, parecía completo y final, pero Dios prometió que Él podría incluso restaurar los años que se comió la oruga.

i. “Te sorprenderá en seguida que las langostas no se comieron los años: las langostas se comieron los frutos del trabajo de los años, las cosechas de los campos; de modo que el significado de la restauración de los años debe ser la restauración de aquellos frutos y de aquellas cosechas que las langostas consumieron. No puedes recuperar tu tiempo; pero hay una forma extraña y maravillosa en la que Dios puede devolverte las bendiciones desperdiciadas, los frutos no maduros de años por los que te lamentaste. Los frutos de los años desperdiciados aún pueden ser tuyos”. (Spurgeon)

4. (28-32) La máxima restauración y el día final del Señor.

Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días. Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo. El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y espantoso de Jehová. Y todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo; porque en el monte de Sion y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Jehová, y entre el remanente al cual él habrá llamado.

a. Después de esto: Después de la restauración de la que Joel habló previamente en el capítulo, vendrá un tiempo de restauración y bendición final. Este último tiempo estará marcado por un derramamiento del Espíritu sobre toda carne – no solo hombres seleccionados en tiempos seleccionados para deberes seleccionados.

i. El Antiguo Testamento tiene un rico registro de la obra del Espíritu, pero Él no fue derramado sobre toda carne bajo el Antiguo Pacto. En cambio, ciertos hombres fueron llenos del Espíritu en ciertos momentos y solo para ciertos deberes. Fue bastante selectivo:

·José fue lleno del Espíritu de Dios (Génesis 41:38).

·Los artesanos que construyeron el tabernáculo fueron llenos del Espíritu de Dios (Éxodo 31:3).

·Josué fue lleno del Espíritu de Dios (Números 27:18).

·El juez Otoniel fue lleno del Espíritu de Dios (Jueces 3:10).

·El juez Gedeón fue lleno del Espíritu de Dios (Jueces 6:34).

·El juez Jefté fue lleno del Espíritu de Dios (Jueces 11:29).

·El juez Sansón fue llenó del Espíritu de Dios (Jueces 13:5, 14:6, 14:19, 15:14).

·Saúl fue lleno del Espíritu de Dios (1 Samuel 10:9-10).

·David fue lleno del Espíritu de Dios (1 Samuel 16:13).

ii. Aquí, Joel anhelaba el glorioso Nuevo Pacto, cuando el Espíritu de Dios sería derramado sobre toda carne. Pues, aun vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos y vuestros jóvenes serán llenos con el Espíritu de Dios.

iii. Esto se cumplió el día de Pentecostés cuando los discípulos se reunieron en el aposento alto, esperando en Jerusalén la efusión del Espíritu Santo que Jesús prometió que vendría (Hechos 1:4-5). Cuando vino el derramamiento del Espíritu, los 120 seguidores de Jesús fueron todos llenos del Espíritu y comenzaron a alabar a Dios en otras lenguas. Jerusalén estaba abarrotada en ese momento, debido a la fiesta de Pentecostéspor lo que una multitud se reunió rápidamente debido a la conmoción. Los que escucharon a los discípulos alabar a Dios en estos idiomas milagrosos comenzaron a burlarse de ellos, alegando que estaban borrachos. Pedro se puso de pie y audazmente dejó las cosas claras: los discípulos no estaban borrachos, sino que esto era un cumplimiento de la gran profecía de Joel sobre el derramamiento del Espíritu.

iv. Al principio, cualquier judío podía burlarse de la idea de que 120 seguidores de un hombre crucificado fueran llenos del Espíritu Santo. Según su comprensión del Antiguo Testamento, podían pensar: “Estas 120 personas no son reyes ni profetas ni sacerdotes; Dios solo derrama su Espíritu sobre personas especiales para deberes especiales. Estos son gente común, y Dios no derrama su Espíritu sobre ellos”. Pedro usa la profecía de Joel para mostrarles que las cosas ahora son diferentes, tal como Dios dijo que serían. Ahora, el Espíritu Santo se derrama sobre todos los que creen y reciben, incluso la gente común. Ahora Dios ofrece una relación del Nuevo Pacto, y parte del Nuevo Pacto era el derramamiento del Espíritu para todos los que reciben en fe.

v. El sermón de Pedro del Día de Pentecostés también nos muestra que nunca hay ninguna disparidad entre la obra del Espíritu y la obra de la Palabra. Cuando Pedro fue lleno del Espíritu de Dios en medio de señales y prodigios como nunca antes había experimentado, ¿qué hizo? Él dijo: “Abramos nuestras biblias en el libro de Joel”. Tenía un estudio bíblico, uno que enseñó a los 120 discípulos (ellos entendieron mejor su experiencia según las Escrituras) y llamó a los perdidos a la salvación.

vi. También notamos que la aplicación de Pedro fue exactamente la misma que la aplicación hecha por el profeta Joel: arrepentirse. Joel dijo: Por eso pues, ahora, dice Jehová convertíos a mí con todo vuestro corazón con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios (Joel 2:12-13). Pedro dijo: Arrepentíos, y bautícese cado uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo (Hechos 2:38).

b. Y también sobre los siervos y sobre las siervas: En este último tiempo, todos los siervos de Jehová serán llenos de su Espíritu de esta manera única y poderosa. Bajo el Nuevo Pacto, cada creyente puede recibir la medida completa del Espíritu y ser usado de una manera especial y maravillosa.

i. A veces, el feligrés común simplemente quiere un edificio para adorar, un buen servicio que no sea demasiado ofensivo y un buen sermón después de eso, piensa, déjenme en paz. Ese no es el cristianismo del Nuevo Pacto, que considera que la obra del ministerio pertenece al pueblo, no al “clero”.

ii. Algunas personas han tomado esta idea y la han llevado demasiado lejos diciendo: “Por lo tanto, no necesitamos ministros ni clérigos. Creemos en el sacerdocio de todos los creyentes, por lo que no hay lugar para oficios de ningún tipo en la iglesia”. Esto ignora la clara enseñanza de las Escrituras, que dice que la obra del ministerio pertenece a todo el pueblo de Dios, pero la obra de equipar a los santos pertenece a los oficios y ministerios señalados por Dios (Efesios 4:7-16). Debido a que el ministerio pertenece a todos los cristianos, Dios ha designado oficios y ministerios para equipar a cada santo para cumplir su función. Hechos 2:42-47 describe un maravilloso cumplimiento de este ideal.

c. Daré prodigios en el cielo y en la tierra: Este tiempo de gran derramamiento del Espíritu de Dios culminará con señales catastróficas en los cielos y el día grande y espantoso de Jehová.

i. El día de Pentecostés se cumplió la profecía de Joel, pero no se consumó. Pedro vio correctamente que se trataba de un derramamiento notable del Espíritu de Dios, dado gratuitamente sobre todos los que creen y reciben como fue prometido en el Nuevo Pacto (Ezequiel 11:19, 36:24-28). La profecía de Joel también fue especialmente apropiada porque el Día de Pentecostés marcó el comienzo de los últimos días, con la historia ahora moviéndose al borde de la consumación de todas las cosas, no apresurándose hacia ella como un punto distante.

d. Todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo: Esta es otra promesa gloriosa asociada con el tiempo que Joel dijo que sucedería después de esto. En este tiempo del Espíritu de Dios derramado, la salvación ya no será un asunto de asociación con la nación de Israel. En cambio, todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo – sin importar de qué nación venga.

i. Este es un llamado amplio todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo. “‘¡Ah!’ dices, ‘Ojalá mi nombre estuviera escrito en la biblia’. ¿Te consolaría en algo? Si estuviera escrito en las Escrituras, ‘Charles Haddon Spurgeon será salvo’, me temo que no obtendría mucho consuelo de la promesa, porque debería ir a casa, buscar el Directorio de Londres y ver si no hay otra persona de ese nombre, o muy parecida. ¡Cuánto peor sería para los Smiths y los Browns! No, hermanos míos, no pidan ver su nombre en el volumen inspirado; ¡sino conténtense con lo que ven, es decir, su carácter! Cuando la Escritura dice: ‘Cualquiera’, no pueden excluirse de eso”. (Spurgeon)

ii. Este es un llamado a la oración –todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo. “No pueden orar ya muertos; nadie lo ha hecho nunca. Si pudieran orar ya muertos, serían una nueva maravilla en el universo. Un alma que ora en el infierno es una absoluta imposibilidad. ¡Un hombre que invoca a Dios y es rechazado por Dios! – la suposición no debe soportarse. ‘Todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo’”. Dios mismo debe mentir, debe renunciar a su naturaleza, perder su derecho a la misericordia, destruir su carácter de amor, si dejara que un pobre pecador invocara su nombre. y, sin embargo, se negara a escucharlo”. (Spurgeon)

iii. Este es un llamado a venir al Dios verdadero – todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo – Venir a un dios falso, un dios de tu propia imaginación no te hará ningún bien. El dios de tu opinión no existe y no puede salvarte. Debes venir al Dios de la biblia. “Lo triste es que la mayoría de las personas en estos días adoran a un dios de su propia invención. No hacen una imagen de barro o de oro, sino que construyen una deidad en sus mentes de acuerdo con sus propios pensamientos. Juzgan con orgullo lo que Dios debería ser, y no quieren recibir a Dios como realmente es. ¿Qué es esto sino una creación de dioses tan grotesca como la que realizan los paganos? ¿Qué puede ser más perverso que intentar imaginar un dios mejor que el único Dios vivo y verdadero? Como la deidad de tu fantasía no existe, no te recomendaría que confíes en él”. (Spurgeon)

iv. Este es un llamado a venir a Dios con inteligencia – Todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo. “Ahora, por la palabra ‘nombre’ entendemos la persona, el carácter del Señor. Entonces, cuanto más sepas acerca del Señor, y cuanto mejor conozcas su nombre, más inteligentemente invocarás ese nombre. Si conoces su poder, llamarás a ese poder para que te ayude. Si conoces su misericordia, lo invocarás en su gracia para que te salve. Si conoces su sabiduría, sientes que él conoce tus dificultades y puede ayudarte a superarlas”. (Spurgeon)

v. Esta es una promesa cierta –todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo. Es un profundo misterio por qué no todos reciben esta gran invitación, pero el mismo texto nos dice que solo un remanente la recibe (entre el remanente al cual él habrá llamado). Sin embargo, todos los que vienen son ciertamente salvos. “Supongamos que nosotros, que confiamos solo en Jesús, perecemos, ¿entonces qué? Bueno, sería para la eterna deshonra del Señor en quien confiamos. Ciertamente perderíamos nuestras almas, pero él perdería su honor. Piensen en uno de nosotros que pudiera decir en el infierno: ‘Confié en la ayuda del Salvador jactancioso, y me apoyé en Dios, y sin embargo estoy perdido’. Señores, el cielo mismo se oscurecería y las joyas de la corona de Dios perderían su brillo, si ese pudiera ser el caso alguna vez! Pero no puede ser. Si confías en el Señor Dios Todopoderoso, Él te salvará tan ciertamente como que Él es Dios”. (Spurgeon)

©2022 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com

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