Josué 2

Josué 2 – La salvación de Rahab

A. Se envían espías a la ciudad de Jericó.

1. (1a) Josué envía espías.

Josué hijo de Nun envió desde Sitim dos espías secretamente, diciéndoles: Andad, reconoced la tierra, y a Jericó.

a. Josué hijo de Nun envió desde Sitim dos espías secretamente: Este tipo de preparación cuidadosa muestra fidelidad, no falta de fe. Las promesas de éxito que Dios nos ha hecho nunca deberían dejarnos sin acción. Deben impulsarnos a dar un paso hacia actividad piadosa.

i. No se nos dice quiénes eran los dos espías, pero la tradición judía – especulación, en realidad – dice que eran los fieles Caleb y el sumo sacerdote Eliezer.

ii. Recuerden que todo esto ocurre durante los tres días que Josué ha ordenado a la nación que espere a orillas del Jordán (Josué 1:11). Dios tiene un propósito especial para estos tres días.

b. A espiar secretamente: Josué también muestra sabiduría al enviarlos secretamente. La última vez que espías que salieron públicamente resultó mal para Israel; cuando la mayoría de los espías regresaron con un informe desalentador (Números 13).

c. Andad, reconoced la tierra, y a Jericó: Dios tiene cosas más grandes en mente para esta misión de espionaje; fracasará como misión de reconocimiento militar, pero tendrá éxito en el propósito de Dios.

2. (1b) Los espías en la casa de Rahab.

Y ellos fueron, y entraron en casa de una ramera que se llamaba Rahab, y posaron allí.

a. Entraron en casa de una ramera que se llamaba Rahab: A lo largo de la historia del cristianismo, ha avergonzado a algunos intérpretes de la biblia que estos dos espías fueran a la casa de una prostituta. Algunos han tratado de decir que Rahab era simplemente un “mesonera” pero el lenguaje es lo suficientemente claro. Ella era una ramera.

i. En el siglo II, Orígenes escribió: “Así como el primer Josué envió a sus espías delante de él y fueron recibidos en la casa de la ramera, así el segundo Josué envió a sus precursores, a quienes los publicanos y las rameras recibieron con gusto”.

ii. Es grandioso cuando los pecadores reciben a Jesús; no aquellos que niegan su pecaminosidad o no saben de lo que son capaces sin Jesús – el evangelio es para aquellos que saben que son pecadores.

b. Y posaron allí: ¿Por qué fueron a la casa de una ramera? Aunque era un lugar incómodo, hay que admitir que era un lugar perfecto para esconderse y permanecer en el anonimato, y esto era necesario porque la ciudad estaba en estricta vigilancia.

i. Ni siquiera hay un indicio de inmoralidad con Rahab. Cualquiera que asuma que hubo una conducta inmoral fuerza su propio prejuicio en el texto.

3. (2-7) Rahab oculta y protege a los espías.

Y fue dado aviso al rey de Jericó, diciendo: He aquí que hombres de los hijos de Israel han venido aquí esta noche para espiar la tierra. Entonces el rey de Jericó envió a decir a Rahab: Saca a los hombres que han venido a ti, y han entrado a tu casa; porque han venido para espiar toda la tierra. Pero la mujer había tomado a los dos hombres y los había escondido; y dijo: Es verdad que unos hombres vinieron a mí, pero no supe de dónde eran. Y cuando se iba a cerrar la puerta, siendo ya oscuro, esos hombres se salieron, y no sé a dónde han ido; seguidlos aprisa, y los alcanzaréis. (Mas ella los había hecho subir al terrado, y los había escondido entre los manojos de lino que tenía puestos en el terrado.) Y los hombres fueron tras ellos por el camino del Jordán, hasta los vados; y la puerta fue cerrada después que salieron los perseguidores.

a. Pero la mujer había tomado a los dos hombres y los había escondido: En la cultura de ese tiempo, había una fuerte tradición de hospitalidad. Si alguien era un invitado en tu casa, tenías el deber de protegerlo y cuidarlo. Incluso considerando esto, Rahab fue mucho más allá del respeto de las tradiciones culturales con respecto a la hospitalidad. Ella arriesgó su propia vida por estos hombres.

b. Es verdad que unos hombres vinieron a mí, pero no supe de dónde eran: La biblia simplemente reporta la mentira de Rahab; no la elogia ni la disculpa. Quizás si ella hubiera decidido de antemano en su corazón no mentir en obediencia a Dios, Él le habría abierto un camino para preservar la vida de los espías sin mentir.

c. Esos hombres se salieron: La mentira de Rahab no está justificada, pero demuestra coraje. Considera que ella era una pecadora pagana en una ciudad y cultura totalmente entregadas a la adoración de dioses falsos y la inmoralidad, sin contacto previo con la palabra de Dios o las cosas de Dios. ¿Cuál es tu excusa?

B. Salvación para Rahab.

1. (8-14) La confesión de fe de Rahab.

Antes que ellos se durmiesen, ella subió al terrado, y les dijo: Sé que Jehová os ha dado esta tierra; porque el temor de vosotros ha caído sobre nosotros, y todos los moradores del país ya han desmayado por causa de vosotros. Porque hemos oído que Jehová hizo secar las aguas del Mar Rojo delante de vosotros cuando salisteis de Egipto, y lo que habéis hecho a los dos reyes de los amorreos que estaban al otro lado del Jordán, a Sehón y a Og, a los cuales habéis destruido. Oyendo esto, ha desmayado nuestro corazón; ni ha quedado más aliento en hombre alguno por causa de vosotros, porque Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra. Os ruego pues, ahora, que me juréis por Jehová, que como he hecho misericordia con vosotros, así la haréis vosotros con la casa de mi padre, de lo cual me daréis una señal segura; y que salvaréis la vida a mi padre y a mi madre, a mis hermanos y hermanas, y a todo lo que es suyo; y que libraréis nuestras vidas de la muerte. Ellos le respondieron: Nuestra vida responderá por la vuestra, si no denunciareis este asunto nuestro; y cuando Jehová nos haya dado la tierra, nosotros haremos contigo misericordia y verdad.

a. Sé que Jehová os ha dado esta tierra: Este sorprendente estallido de fe muestra que Dios tenía un plan al unir a Rahab y a los espías. Es el mismo tipo de cosas que vemos cuando Dios sobrenaturalmente nos lleva a personas que son creyentes o están abiertas al evangelio.

b. Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra: La declaración de Rahab era prueba de su fe. No era una fe fuerte y no era una fe perfecta, no obstante, su fe era encomiable (Hebreos 11:31 y Santiago 2:25).

i. Puede que nos horrorice el hecho de que Rahab fuera una prostituta o que fuera una mentirosa. A pesar de esos hechos, no fue salvada por sus obras, sino por su fe. Sabía quién era Dios, sabía quién era ella y le confió a Dios su vida.

c. Como he hecho misericordia con vosotros, así la haréis vosotros con la casa de mi padre: El deseo de Rahab de ver a su familia salvada, y lo mucho que hizo para salvar sus vidas, muestra que su amor debe ser notado, así como su fe.

d. Que me juréis por Jehová: Esto muestra que Rahab, al pedir un juramento, buscaba una garantía. Quería dejar su vida y cultura pecaminosas e irse con el pueblo de Dios.

2. (15-21) El medio de la salvación de Rahab: Un cordón de grana.

Entonces ella los hizo descender con una cuerda por la ventana; porque su casa estaba en el muro de la ciudad, y ella vivía en el muro. Y les dijo: Marchaos al monte, para que los que fueron tras vosotros no os encuentren; y estad escondidos allí tres días, hasta que los que os siguen hayan vuelto; y después os iréis por vuestro camino. Y ellos le dijeron: Nosotros quedaremos libres de este juramento con que nos has juramentado. He aquí, cuando nosotros entremos en la tierra, tú atarás este cordón de grana a la ventana por la cual nos descolgaste; y reunirás en tu casa a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre. Cualquiera que saliere fuera de las puertas de tu casa, su sangre será sobre su cabeza, y nosotros sin culpa. Mas cualquiera que se estuviere en casa contigo, su sangre será sobre nuestra cabeza, si mano le tocare. Y si tú denunciares este nuestro asunto, nosotros quedaremos libres de este tu juramento con que nos has juramentado. Ella respondió: Sea así como habéis dicho. Luego los despidió, y se fueron; y ella ató el cordón de grana a la ventana.

a. Tú atarás este cordón de grana a la ventana: Esta era la señal para el ejército de Israel de que la gente en este hogar debía ser perdonada. A pesar del deseo de Rahab, a pesar de su fe, a pesar de las promesas de estos espías, habría perecido a menos que hubiera puesto su confianza en un cordón rojo sangre colgado desde su ventana. Sin el cordón de grana, no podría haberse salvado.

i. Ya en el siglo I, comentaristas como Clemente de Roma, Justino Mártir, Ireneo, Orígenes y más vieron este cordón de grana como un símbolo de la sangre de Jesús.

b. Y ella ató el cordón de grana a la ventana: Rahab inmediatamente puso su fe tanto en la identificación como en la garantía del cordón de grana. Ella también confió en los que hicieron la promesa sobre el cordón de grana (sea así como habéis dicho).

i. Josué sería un salvador para Rahab, pero un juez para el resto de Jericó. De la misma manera, Jesús es un salvador para quienes confían en Él, pero un juez para quienes lo rechazan.

c. Sea así como habéis dicho: El destino de Rahab era casarse con uno de los príncipes de Judá y formar parte del linaje del rey David y del mismo Jesús.

3. (22-24) Misión cumplida.

Y caminando ellos, llegaron al monte y estuvieron allí tres días, hasta que volvieron los que los perseguían; y los que los persiguieron buscaron por todo el camino, pero no los hallaron. Entonces volvieron los dos hombres; descendieron del monte, y pasaron, y vinieron a Josué hijo de Nun, y le contaron todas las cosas que les habían acontecido. Y dijeron a Josué: Jehová ha entregado toda la tierra en nuestras manos; y también todos los moradores del país desmayan delante de nosotros.

a. Y le contaron todas las cosas que les habían acontecido: Considerando cómo Dios los hará conquistar la ciudad de Jericó, ¿cómo ayudó la información de estos espías en la batalla por Jericó? Jericó era una de las ciudades más fuertes y fortificadas de Canaán; si Israel pudiera conquistarla, toda la tierra estaría delante ellos – pero ¿cómo les ayudó este reconocimiento con la batalla final? ¡No les ayudó en absoluto!

b. Jehová ha entregado toda la tierra en nuestras manos; y también todos los moradores del país desmayan delante de nosotros: La misión de reconocimiento no ayudó con la estrategia militar, pero sí ayudó a alentar la fe de estos espías y la de toda la nación. Esto era mucho más importante que un buen plan de batalla.

i. Había otro propósito en acción al enviar a los espías: salvar a Rahab. En esto, vemos hasta dónde llega Dios para traer a una mujer y la casa de su padre a la salvación – alguien aparentemente “imposible” de salvar.

ii. Es posible que conozcan a algunas personas que parecen “imposibles” de salvar, pero la mano de Dios no es demasiado corta ni demasiado débil para salvar a personas como Rahab, y Él puede obrar de maneras asombrosas para traer salvación.

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