Josué 24 – El pacto renovado

A. Josué rememora las grandes obras de Dios a favor de Israel.

1. (1) Josué le habla a la nación nuevamente, a través de sus líderes.

Reunió Josué a todas las tribus de Israel en Siquem, y llamó a los ancianos de Israel, sus príncipes, sus jueces y sus oficiales; y se presentaron delante de Dios.

a. Reunió Josué a todas las tribus de Israel en Siquem: Esta fue una dramática última reunión de Israel antes del fallecimiento de Josué. Puede o no ser parte de la misma despedida descrita en Josué 23. No se menciona ningún lugar específico de reunión en Josué 23, por lo que podría haber sido parte de esta misma reunión en Siquem.

i. Siquem es Tell Balata en la actualidad. “Esta antigua ciudad estaba situada en el suelo de un valle cerca de su entrada, el monte Gerazim y el monte Ebal formaban los respectivos muros. El contorno de la tierra resultaba en un anfiteatro natural, cuya acústica era tan buena que la voz humana llegaba a distancias excepcionales”. (Pink)

b. En Siquem: Siquem fue un lugar de rica historia para Israel. Hubo al menos cuatro eventos notables allí en la vida de los patriarcas. En los dos primeros casos, vemos que Siquem fue un lugar de llamado y compromiso. En los segundos dos, vemos que Siquem fue un lugar de vergüenza.

i. Abraham llegó a la Tierra Prometida y acampó primero en Siquem. Allí Dios se apareció a Abraham y confirmó Su promesa; Abraham edificó un altar al Señor allí (Génesis 12:6-7).

ii. Cuando Jacob regresó a la Tierra Prometida, primero acampó en Siquem. Compró tierra en Siquem y construyó un altar allí, llamando al lugar, El-Elohe-Israel (Dios, el Dios de Israel, Génesis 33:16-20).

iii. Los hijos de Jacob: Simeón y Leví, engañaron a los hombres de Siquem para masacrarlos, asesinando a todos los hombres de la ciudad (Génesis 34).

iv. En una temporada de compromiso con Dios en la vida de Jacob, Dios le dijo que fuera a Betel. Jacob así lo hizo y ordenó a todos en su casa que se desecharan de sus ídolos. Jacob tomó esos ídolos y los enterró debajo de una encina cerca de Siquem (Génesis 35:1-5).

c. Y llamó a los ancianos de Israel, sus príncipes, sus jueces y sus oficiales; y se presentaron delante de Dios: Esta fue una reunión impresionante. Los líderes de la nación se reunieron en este lugar significativo, reuniéndose en la presencia consciente de Dios.

i. Hay algunas personas que creen que se presentaron delante de Dios significa que lo hicieron ante el tabernáculo, que parece haber estado en este momento en Silo (Josué 18:1). O se presentaron delante de Dios sin el tabernáculo, o fue trasladado a Siquem para esta ocasión.

ii. El pueblo también se presentó a Dios para hacer el pacto en Éxodo 19:17.

2. (2-4) La fidelidad de Dios a los patriarcas.

Y dijo Josué a todo el pueblo: Así dice Jehová, Dios de Israel: Vuestros padres habitaron antiguamente al otro lado del río, esto es, Taré, padre de Abraham y de Nacor; y servían a dioses extraños. Y yo tomé a vuestro padre Abraham del otro lado del río, y lo traje por toda la tierra de Canaán, y aumenté su descendencia, y le di Isaac. A Isaac di Jacob y Esaú. Y a Esaú di el monte de Seir, para que lo poseyese; pero Jacob y sus hijos descendieron a Egipto.

a. Así dice Jehová, Dios de Israel: Aunque no hay nada profético en este pasaje de apertura. Profecía no es necesariamente una predicción del futuro. Simplemente puede ser una palabra única, directa y espontanea de parte de Dios.

b. Vuestros padres habitaron antiguamente al otro lado del río… y servían a dioses extraños: A través de Josué, el Señor le recuerda a Israel que sus antepasados vinieron del otro lado del Éufrates (del río) y adoraban a dioses paganos allí.

i. Hay leyendas antiguas (solo leyendas) que dicen que Abraham [Abram] sirvió al Señor Dios entre los adoradores de ídolos entre los que se crio. Una leyenda dice que el padre de Abraham, Taré, era un fabricante y vendedor de ídolos con su propia tienda. Un día, Taré tenía un negocio que hacer, así que dejó a Abram a cargo de la tienda de ídolos. Mientras su padre no estaba, Abram tomó el ídolo más grande y lo puso en medio del taller. Luego puso a todos los demás ídolos en un círculo alrededor del ídolo más grande. Entonces Abram tomó un martillo, rompió todos los ídolos más pequeños y puso el martillo frente al gran ídolo que todavía estaba en pie. Cuando su padre llegó a casa, Taré se enojó y le preguntó a Abram por qué rompió todos sus ídolos. Abram explicó que no fue él quien lo hizo; que fue el ídolo grande con el martillo. Taré se enojó aún más y dijo: “Abram, sabes que ese ídolo no es más que una estatua y no puede hacer nada como eso”. Abram respondió: “Sí, padre, eso es cierto. Si no pueden hacer nada, ¿por qué los fabricamos y vendemos para que la gente los adore como dioses?”.

ii. Vale la pena señalar la verdad – que Abraham, el padre del pueblo judío y el primer judío, no nació judío. Creció en un hogar pagano e idólatra.

iii. “Sabemos que Ur y Harán eran centros de adoración a la luna. Josué le estaba diciendo al pueblo: ‘Tu herencia pasada es un pueblo que no era el pueblo de Dios’”. (Schaeffer)

iv. Y di: Así ha dicho Jehová el Señor sobre Jerusalén: Tu origen, tu nacimiento, es de la tierra de Canaán; tu padre fue amorreo, y tu madre hetea (Ezequiel 16:3).

c. Y yo tomé a vuestro padre Abraham del otro lado del río: Antes de que Dios desafiara a Israel, les recuerda su fidelidad. Su bondad se mostró desde el comienzo mismo de Su trato con Abraham y los descendientes de Abraham.

3. (5-7a) La fidelidad de Dios en el escape de Egipto.

Y yo envié a Moisés y a Aarón, y herí a Egipto, conforme a lo que hice en medio de él, y después os saqué. Saqué a vuestros padres de Egipto; y cuando llegaron al mar, los egipcios siguieron a vuestros padres hasta el Mar Rojo con carros y caballería. Y cuando ellos clamaron a Jehová, él puso oscuridad entre vosotros y los egipcios, e hizo venir sobre ellos el mar, el cual los cubrió; y vuestros ojos vieron lo que hice en Egipto.

a. Y yo envié a Moisés y a Aarón, y herí a Egipto: Dios no dejó a Israel en esclavitud en Egipto para siempre. Cuando fue el momento adecuado, envió un libertador a su pueblo.

b. Vuestros ojos vieron lo que hice en Egipto: Todavía había muchos entre los líderes y ancianos de Israel que eran niños cuando Israel salió de Egipto, y que vieron a Dios destruir al ejército egipcio en el Mar Rojo.

4. (7b-10) La fidelidad de Dios en el desierto.

Después estuvisteis muchos días en el desierto. Yo os introduje en la tierra de los amorreos, que habitaban al otro lado del Jordán, los cuales pelearon contra vosotros; mas yo los entregué en vuestras manos, y poseísteis su tierra, y los destruí de delante de vosotros. Después se levantó Balac hijo de Zipor, rey de los moabitas, y peleó contra Israel; y envió a llamar a Balaam hijo de Beor, para que os maldijese. Mas yo no quise escuchar a Balaam, por lo cual os bendijo repetidamente, y os libré de sus manos.

a. Después estuvisteis muchos días en el desierto: A través de Josué, el Señor resume la mayor parte del viaje del Éxodo con esta frase.

i. Es notable que en esta revisión de la historia de Israel falte toda mención del pecado, la rebelión y el fracaso de Israel. Aunque Dios registró esas cosas en ese momento (en Éxodo, Números y Deuteronomio), cuando revisa su historia a través de Josué, no las menciona. Más adelante, Dios dijo no me acordaré más de su pecado (Jeremías 31:34). Aquí, fue como si hubiera “olvidado” el pecado pasado de Israel.

b. Peleó contra Israel: Números 22-25 deja en claro que la guerra que Balac hizo contra Israel fueron de naturaleza espiritual. Quiso destruirlos mediante la maldición de Balaam (que no funcionó) o mediante la seducción y la idolatría de las mujeres moabitas (que funcionó un poco). Aunque no fue una guerra peleada con espadas y lanzas, fue una guerra de todos modos.

5. (11-13) La fidelidad de Dios en la tierra de Canaán.

Pasasteis el Jordán, y vinisteis a Jericó, y los moradores de Jericó pelearon contra vosotros: los amorreos, ferezeos, cananeos, heteos, gergeseos, heveos y jebuseos, y yo los entregué en vuestras manos. Y envié delante de vosotros tábanos, los cuales los arrojaron de delante de vosotros, esto es, a los dos reyes de los amorreos; no con tu espada, ni con tu arco. Y os di la tierra por la cual nada trabajasteis, y las ciudades que no edificasteis, en las cuales moráis; y de las viñas y olivares que no plantasteis, coméis.

a. Pasasteis el Jordán, y vinisteis a Jericó… y yo los entregué en vuestras manos: Hablando a través de Josué, Dios vincula la historia antigua de Israel (desde Abraham) con su historia actual. Esto es lo que Dios había hecho entre ellos en su propio tiempo.

b. No con tu espada, ni con tu arco. Y os di la tierra por la cual nada trabajasteis… viñas y olivares que no plantasteis: Hay un sentido en el que toda bendición es inmerecida, pero algunas lo son más evidentemente. Cuando Israel disfrutó de las viñas y olivares en Canaán, debería haberlo hecho especialmente agradecidos por las bendiciones inmerecidas.

i. También deberían haber recordado que aquellos que plantaron las viñas y los olivares fueron removidos por el justo juicio de Dios, y si ellos desobedecían y rechazaban a Dios, también podrían ser juzgados.

B. Elegir hacer un pacto con el Señor.

1. (14) El desafío: servir a Dios exclusivamente.

Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová.

a. Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad: Este no era un acto ciego de fe. Ellos vieron las obras de Dios y experimentaron sus bendiciones, por lo que tenía sentido para ellos servir exclusivamente a un Dios que había hecho tanto por ellos.

i. “Josué hizo una promesa para el futuro que tenía sus raíces en un pasado espacio-temporal. No pidió al pueblo que hiciera un acto de fe kierkegaardiano. Este énfasis en la acción de Dios en la historia se repite a lo largo de su despedida”. (Schaeffer)

b. Servid a Jehová: En el resumen de la historia de Israel, podríamos decir que Dios contrastó Su gran obra con tres conjuntos de dioses, asociados con tres cuerpos de agua.

·Josué 24:2-4 muestra que al otro lado del Éufrates estaban los dioses de la cultura sumeria y babilónica – dioses heredados.

·Josué 24:5-7a muestra que al otro lado del Mar Rojo estaban los dioses del antiguo Egipto – dioses de la crianza.

·Josué 24:7b-13 y 24:15 muestra que cuando cruzaron el Jordán estaban los dioses de los amorreos – dioses de la cultura.

i. Josué aplicó el principio. El Señor Dios de Israel es mayor que todos estos ídolos; por lo tanto, servid a Jehová.

c. Servidle con integridad y en verdad: Josué pidió osadamente un compromiso profundo y un compromiso verdadero.

i. “La mejor prueba de sinceridad no es siempre la abierta hostilidad de los enemigos, ya que esto a menudo refuerza las energías del combate, mientras que al mismo tiempo aclara el camino del deber. Menos aún es en la hora del triunfo sobre nuestros enemigos, entonces no hay tentación de rebelarse. La verdadera prueba de nuestra fidelidad a Dios es, en la mayoría de los casos, nuestro poder para continuar con firmeza en un curso de conducta cuando se quita la excitación del conflicto, y los enemigos con los que tenemos que lidiar son los insidiosos atractivos de la facilidad o la costumbre en medio de los deberes cotidianos de la vida”. (Spence en El comentario del púlpito)

2. (15) Escojan a Dios o escojan su alternativa.

Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.

a. Escogeos hoy a quién sirváis: Josué acaba de dar una fuerte exhortación a servir al Señor (Josué 24:14.) Quizás algunos de ellos no querían servir al Señor. ¿Qué hay de ellos?

b. Escogeos hoy a quién sirváis: Si optaban por no servir al Señor, entonces eran responsables de elegir a qué deidad servirían. Podían elegir servir a los dioses que les habían heredado (los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río) o podrían elegir servir a los dioses de Canaán (los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis). Sin embargo, tenían que tomar una decisión. Todos sirven a algún tipo de dios (o Dios).

i. Nuestra elección por Dios se hace teniendo en cuenta las alternativas. Algunos sienten que una vida vivida para Dios es una mala elección, pero ¿con qué la comparan? Las otras opciones son mucho peores. Como dijo Pedro: “Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna (Juan 6:68).

c. Pero yo y mi casa serviremos a Jehová: Josué ofrece una alternativa para aquellos que no querían servir a Jehová, como los exhortó en Josué 24:14. Sin embargo, su proceder fue claro y sensato – él escogió servir a Jehová.

i. “El español usa un tiempo futuro aquí, pero el tiempo hebreo tiene un significado más completo. Expresa acción continua. Implica el futuro, pero también puede apuntar al pasado. Sin duda, Josué estaba afirmando: ‘He escogido y escogeré’”. (Schaeffer)

ii. Josué pudo hacer esta declaración porque había vivido una vida que continuamente eligió servir a Jehová.

·Josué eligió luchar contra los amalecitas – eligiendo cuándo podría haberle costado todo.

·Josué eligió rechazar el becerro de oro – eligiendo cuándo podría haber satisfecho a la carne.

·Josué eligió servir al Señor sirviendo a Moisés – eligiendo una posición humilde.

·Josué eligió creer en la promesa de Dios sobre la Tierra Prometida – eligiendo en contra de la mayoría.

·Josué eligió reconocer el liderazgo del Príncipe del ejército del Señor – eligiendo rendirse a Dios.

·Josué eligió tomar el liderazgo de Israel y guiarlos a la tierra – eligiendo la fe en lugar de la incredulidad.

iii. Dios nos da opciones. Dios es un Dios que elige; estamos hechos a su imagen. Quiere que nosotros también elijamos.

d. Pero yo y mi casa: Esto muestra que Josué también entendía que él, como sacerdote de su familia, tenía la responsabilidad de ver que toda su casa sirviera a Jehová. Tenía el trabajo de representar a toda su casa delante de Dios.

i. El sentido es que Josué haría todo lo correcto y piadoso para asegurarse de que su familia sirviera a Jehová. Le servirían juntos; fue serviremos a Jehová.

e. Pero yo y mi casa: La palabra contrastante “pero” da la sensación de que Josué estaba decidido a seguir este camino sin importar lo que pensaran los demás. Su relación con Dios no se basaba en ningún hombre, sino solo en el Señor, y él serviría a Dios sin importar lo que hicieran los demás.

·La decisión de Josué significaba que la duda se había ido.

·La decisión de Josué significaba que vivía por encima de la influencia maligna de los demás.

·La decisión de Josué fue profunda, tranquila, clara, fija, bien fundamentada y solemnemente tomada.

·La decisión de Josué fue tomada abiertamente.

·La decisión de Josué fue llevada a cabo con seriedad.

·La decisión de Josué fue mantenida durante toda su vida.

f. Serviremos a Jehová: Inherente a la declaración de Josué es que él solo serviría a Jehová; no serviría a Jehová y a alguien o a algo más. Había un Dios en su vida, y ese Dios era Jehová.

3. (16-18) Israel responde: ellos también servirán a Jehová.

Entonces el pueblo respondió y dijo: Nunca tal acontezca, que dejemos a Jehová para servir a otros dioses; porque Jehová nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre; el que ha hecho estas grandes señales, y nos ha guardado por todo el camino por donde hemos andado, y en todos los pueblos por entre los cuales pasamos. Y Jehová arrojó de delante de nosotros a todos los pueblos, y al amorreo que habitaba en la tierra; nosotros, pues, también serviremos a Jehová, porque él es nuestro Dios.

a. Porque Jehová nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto: Significativamente, su declaración se basa en los tratos pasados de Dios con ellos. ¿Cómo podrían no servir a un Dios tan grande?

b. También serviremos a Jehová, porque él es nuestro Dios: Esta es esencialmente la misma actitud reflejada por los discípulos de Jesús en Juan 6:66-69: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Si servir a Dios a veces parece difícil, piensa en las alternativas.

4. (19-21) Josué advierte contra un compromiso hecho a la ligera.

Entonces Josué dijo al pueblo: No podréis servir a Jehová, porque él es Dios santo, y Dios celoso; no sufrirá vuestras rebeliones y vuestros pecados. Si dejareis a Jehová y sirviereis a dioses ajenos, él se volverá y os hará mal, y os consumirá, después que os ha hecho bien. El pueblo entonces dijo a Josué: No, sino que a Jehová serviremos.

a. No podréis servir a Jehová, porque él es Dios santo: Josué no está tratando de desanimar su fe, sino tratando de desanimar un compromiso hecho a la ligera de seguir al Señor. Ellos necesitan que se les recuerde que están sirviendo a Dios bajo un pacto que prometía que serían maldecidos por desobediencia.

i. Jesús expresó el mismo tipo de advertencia, explicando que seguirlo implicaba un compromiso total (Lucas 14:25-33). No es que Jesús no quisiera seguidores, pero no quería compromisos que se hicieran a la ligera y se rompieran fácilmente.

ii. “Así que nos conviene hablar con mucha reverencia y con indulgencia de nuestra capacidad para obedecer. Probablemente estemos sobreestimando nuestros poderes”. (Meyer)

b. No, sino que a Jehová serviremos: Esta era la respuesta que Josué quería: un compromiso, pero hecho con pleno entendimiento de las consecuencias.

5. (22-28) Un pacto renovado.

Y Josué respondió al pueblo: Vosotros sois testigos contra vosotros mismos, de que habéis elegido a Jehová para servirle.” Y ellos respondieron: Testigos somos. Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová Dios de Israel. Y el pueblo respondió a Josué: A Jehová nuestro Dios serviremos, y a su voz obedeceremos. Entonces Josué hizo pacto con el pueblo el mismo día, y les dio estatutos y leyes en Siquem. Y escribió Josué estas palabras en el libro de la ley de Dios; y tomando una gran piedra, la levantó allí debajo de la encina que estaba junto al santuario de Jehová. Y dijo Josué a todo el pueblo: He aquí esta piedra nos servirá de testigo, porque ella ha oído todas las palabras que Jehová nos ha hablado; será, pues, testigo contra vosotros, para que no mintáis contra vuestro Dios. Y envió Josué al pueblo, cada uno a su posesión.

a. Vosotros sois testigos… esta piedra nos servirá de testigo: Josué pidió que el pacto fuera confirmado por el testimonio de dos testigos: el pueblo y la piedra. Por lo tanto, este fue un pacto vinculante delante de Dios (Deuteronomio 19:15).

i. Como señala Hess, hay algunos puntos de similitud entre este pacto y la práctica normal de hacer pactos en el mundo antiguo entre un rey o gobernante y su pueblo, especialmente entre los hititas.

b. Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová Dios de Israel: Dijeron que estaban dispuestos a entrar y obedecer al pacto de Dios. Josué los llamó inmediatamente a actuar de acuerdo con sus palabras.

i. “Ahora que has prometido reformar, comienza instantáneamente la obra de reforma. La promesa de un hombre de servir a Dios pronto pierde el control moral de su conciencia si no comienza instantáneamente a ponerla en práctica. La gracia que le permite prometer es aquella con la fuerza con la que debe comenzar el desempeño”. (Clarke)

c. Entonces Josué hizo pacto con el pueblo el mismo día: “Literalmente, Josué cortó el pacto, aludiendo al sacrificio ofrecido en la ocasión”. (Clarke)

C. La muerte de Josué y Eleazar.

1. (29-31) Un bello epitafio para Josué.

Después de estas cosas murió Josué hijo de Nun, siervo de Jehová, siendo de ciento diez años. Y le sepultaron en su heredad en Timnat-sera, que está en el monte de Efraín, al norte del monte de Gaas. Y sirvió Israel a Jehová todo el tiempo de Josué, y todo el tiempo de los ancianos que sobrevivieron a Josué y que sabían todas las obras que Jehová había hecho por Israel.

a. Siendo de ciento diez años: Josué murió a una edad avanzada y fue sepultado en la tierra de su heredad. No parece que haya habido un gran funeral o duelo por él, como seguramente fue su deseo – simplemente ser conocido como el siervo de Jehová.

b. Y sirvió Israel a Jehová todo el tiempo de Josué: Este fue el mayor tributo a Josué. Su influencia piadosa fue comunicada eficazmente a toda la nación y a través de ella.

2. (32) El entierro de los huesos de José.

Y enterraron en Siquem los huesos de José, que los hijos de Israel habían traído de Egipto, en la parte del campo que Jacob compró de los hijos de Hamor padre de Siquem, por cien piezas de dinero; y fue posesión de los hijos de José.

a. Los huesos de José: Esto puede parecer un punto intrascendente, pero cumple con Génesis 50:25. A Dios le gusta atar cabos sueltos. Esto también se menciona en Hebreos 11:22 como un ejemplo de la fe de José.

3. (33) La muerte y entierro de Eleazar.

También murió Eleazar hijo de Aarón, y lo enterraron en el collado de Finees su hijo, que le fue dado en el monte de Efraín.

a. También murió Eleazar hijo de Aarón: La muerte de Eleazar significó que había pasado otro vínculo con la generación del desierto. Ahora Finees era sumo sacerdote.

b. Lo enterraron: A medida que pasan las generaciones, cada una de ellas tiene el desafío de conquistar la tierra de bendición y promesa que Dios tiene para ellos – y lo haremos, mientras prestamos mucha atención a nuestro Josué, a Jesucristo.

©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com