Levítico 22

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Levítico 22: Instrucciones más específicas para los sacerdotes

A. Cosas que pueden profanar a un sacerdote

1. (1-3) La necesidad de una pureza ceremonial.

Habló Jehová a Moisés, diciendo: Di a Aarón y a sus hijos que se abstengan de las cosas santas que los hijos de Israel me han dedicado, y no profanen mi santo nombre. Yo Jehová. Diles: Todo varón de toda vuestra descendencia en vuestras generaciones, que se acercare a las cosas sagradas que los hijos de Israel consagran a Jehová, teniendo inmundicia sobre sí, será cortado de mi presencia. Yo Jehová.

a. Que se abstengan de las cosas santas que los hijos de Israel me han dedicado: Los sacerdotes de Israel a menudo se ocupaban de objetos que habían sido declarados santos. El altar, la mesa del pan de la proposición, el candelero de oro y el altar del incienso eran todas cosas santas. Ellas no pertenecían a los sacerdotes. Estas cosas pertenecían al Señor, por lo que existía un sentido de separación de las cosas santas que el sacerdote debía cumplir. No cumplir con esto constituía profanar el santo nombre de Dios.

i. La frase que se abstengan es difícil de traducir. «Una gran variedad de traducciones concuerdan con la Nueva Versión Internacional (NVI) en que aquí el significado del verbo es “tratar con respecto”, “tener cuidado”, “ser cuidadosos con”». (Peter-Contesse)

ii. «La palabra traducida como “abstenerse” [nzr] pertenece a la familia morfológica del sustantivo del cual se deriva la palabra “nazareo”; de ahí la connotación de “guardar para su uso separado” o “tratar como distinto”». (Rooker)

iii. En el contexto de este capítulo, «cosas santas» también se refiere a la carne y otros productos de los sacrificios que eran hechos santos porque se ofrecían al Señor.

b. Que se acercare a las cosas sagradas que los hijos de Israel consagran a Jehová, teniendo inmundicia sobre sí, será cortado de mi presencia: Por lo tanto, el servicio en el templo tenía que llevarse a cabo cuando el sacerdote estaba ritualmente puro. La porción que pertenecía al sacerdote de lo que se ofrecía al Señor como sacrificio debía comerse si se estaba ritualmente puro. Si un sacerdote (o su familia, o cualquier otro) se acercaba a las cosas sagradas, y tenía inmundicia sobre sí, debía ser cortado de la presencia de Dios.

i. Será cortado de mi presencia: «El significado de esta expresión se aclara en otra que se utiliza con frecuencia en el Antiguo Testamento: “estar delante de alguien” (ver Deuteronomio 10:8, por ejemplo), y que significa “servir a alguien”. Por lo tanto, la frase “ser cortado de la presencia de alguien” significa “no permitir servirle a esa persona nunca más”». (Peter-Contesse)

ii. Todas las ceremonias y rituales del Viejo Pacto apuntaban al perfecto cumplimiento en Jesús el Mesías bajo el Nuevo Pacto (Colosenses 2:16-17; Hebreos 8:4-5, 10:1). Por consiguiente, la idea de que un sacerdote no podía servir si se encontraba en una condición ceremonialmente inmunda (impura) era importante. La comunión con Dios debía hacerse sobre la base de ser declarado limpio y justo por Dios.

2. (4-8) Ejemplos de cosas que podían profanar a un sacerdote.

Cualquier varón de la descendencia de Aarón que fuere leproso, o padeciere flujo, no comerá de las cosas sagradas hasta que esté limpio. El que tocare cualquiera cosa de cadáveres, o el varón que hubiere tenido derramamiento de semen, o el varón que hubiere tocado cualquier reptil por el cual será inmundo, u hombre por el cual venga a ser inmundo, conforme a cualquiera inmundicia suya; la persona que lo tocare será inmunda hasta la noche, y no comerá de las cosas sagradas antes que haya lavado su cuerpo con agua. Cuando el sol se pusiere, será limpio; y después podrá comer las cosas sagradas, porque su alimento es. Mortecino ni despedazado por fiera no comerá, contaminándose en ello. Yo Jehová.

a. Cualquier varón de la descendencia de Aarón: Esta era otra manera de referirse a los sacerdotes y sus familias. Todos los sacerdotes descendían de la familia de Aarón.

b. Que fuere leproso, o padeciere flujo, no comerá de las cosas sagradas hasta que esté limpio: En el versículo 3 se establece que nadie podía acercarse a las cosas sagradas si se encontraba ritualmente impuro. A continuación se exponen algunos aspectos específicos que podían hacer a una persona ritualmente impura hasta la noche:

· Podía ser por una enfermedad o la evidencia de una enfermedad (fuere leproso, o padeciere flujo).

· Podía ser algo que tuviera relación con la muerte (cualquiera cosa de cadáveres).

· Podía ser algo que volviera a una persona impura de manera temporal (derramamiento de semen).

· Podía ser por el contacto con algo impuro (que hubiere tocado cualquier reptil).

i. Las violaciones de estos ejemplos no separarían completamente a un hombre de su función como sacerdote. Una violación volvería al sacerdote ceremonialmente impuro hasta la noche. Una vez que la limpieza ceremonial fuera restaurada, la persona podía reasumir su servicio como sacerdote como lo hacía antes.

c. No comerá de las cosas sagradas antes que haya lavado su cuerpo con agua: Volverse ritualmente impuro no ponía fin al servicio de un hombre como sacerdote, ni impedía para siempre que comiera la porción de los sacrificios que recibían los sacerdotes. Si un sacerdote se volvía impuro, debía realizar un lavado ceremonial y permanecía ritualmente impuro hasta la noche.

d. Cuando el sol se pusiere, será limpio: El pueblo judío comenzaba su día al anochecer, no al amanecer, ni a medianoche. Con esta descripción, Dios indicaba que la persona podía comenzar limpia y pura el nuevo día delante del Señor. No importa cuánto hubieran fallado el día anterior, podían comenzar cada día puros y cercanos a Dios. Sus misericordias son nuevas cada mañana (Lamentaciones 3:23).

e. Mortecino ni despedazado por fiera no comerá: Esto ya estaba establecido como ley para Israel en general (Levítico 17:15-16). Aquí la ley se repite con énfasis para los sacerdotes.

3. (9) Resumen de la ordenanza para la pureza ritual entre los sacerdotes.

Guarden, pues, mi ordenanza, para que no lleven pecado por ello, no sea que así mueran cuando la profanen. Yo Jehová que los santifico.

a. Para que no lleven pecado por ello, no sea que así mueran: Este castigo más severo por la impureza ritual intencionada de los sacerdotes resultaba apropiado si se tiene en cuenta el mayor conocimiento de las cosas de Dios y su mayor responsabilidad.

i. Guarden, pues, mi ordenanza: «Esta era una palabra más bien técnica, que se refería a los deberes ceremoniales que se exigían a los sacerdotes y levitas». (Peter-Contesse)

b. Yo Jehová que los santifico: Dios apartaba a los sacerdotes para su propia complacencia y propósito. Esta gran bendición traía consigo una gran responsabilidad: « […] todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará […] » (Lucas 12:48).

4. (10-13) Solo el sacerdote y su casa podían comer de las ofrendas.

Ningún extraño comerá cosa sagrada; el huésped del sacerdote, y el jornalero, no comerán cosa sagrada. Mas cuando el sacerdote comprare algún esclavo por dinero, éste podrá comer de ella, así como también el nacido en su casa podrá comer de su alimento. La hija del sacerdote, si se casare con varón extraño, no comerá de la ofrenda de las cosas sagradas. Pero si la hija del sacerdote fuere viuda o repudiada, y no tuviere prole y se hubiere vuelto a la casa de su padre, como en su juventud, podrá comer del alimento de su padre; pero ningún extraño coma de él.

a. Ningún extraño comerá cosa sagrada: La carne y los productos que constituían la porción de los sacerdotes de cada sacrificio que se hacía al Señor estaban reservados solamente para el hogar extendido del sacerdote. Un simple visitante (huésped), o un jornalero, no podían comer cosa sagrada. Sí lo podía hacer un esclavo de la casa del sacerdote (cuando el sacerdote comprare algún esclavo por dinero), así como una hija adulta que volviera a la casa de su padre.

i. El precepto contra dar de la porción del sacerdote a un visitante que se encontrara en la casa iba de alguna manera en contra de la fuerte costumbre de hospitalidad de esa cultura, que comúnmente insistía en dar a los huéspedes lo mejor que se podía ofrecer en el hogar.

ii. Extraño: «Sin embargo, la palabra también se utilizaba para aquellos que no pertenecían al sacerdocio (Éxodo 29:33; Números 3:10; 18:4,7). También se puede traducir como “lego”». (Rooker)

iii. Pero si la hija del sacerdote […] se hubiere vuelto a la casa de su padre, como en su juventud: «La hija tendría el estatus legal que tenía antes del matrimonio, al vivir bajo el techo de su padre y depender de su padre para su sustento». (Rooker)

iv. «El cambio de estatus de la hija indicaba que la santidad de un sacerdote se extendía a toda su casa. Un paralelo en el Nuevo Testamento se aplica a aquellos que residen en el hogar de un creyente (1 Corintios 7:14)». (Rooker)

b. Mas cuando el sacerdote comprare algún esclavo por dinero, éste podrá comer de ella: Un jornalero (un trabajador temporal) no se consideraba parte del hogar del sacerdote. Sin embargo, un esclavo, o el hijo de un esclavo que hubiera nacido en la casa del sacerdote era considerado parte de su familia y, por lo tanto, podía comer de la ofrenda sagrada.

i. Esto demuestra que un esclavo era considerado parte de la casa o la familia de un sacerdote y que tenía el derecho a comer cosa sagrada. En el antiguo Israel, los esclavos eran comúnmente considerados como parte de la familia.

ii. El tema de la esclavitud se tratará con mayor detalle en el capítulo 25. Sin embargo, los comentarios de Adam Clarke resultan útiles: «Vemos que era lícito, bajo la economía mosaica, tener esclavos bajo ciertas restricciones; pero estos se tomaban de entre los gentiles y se les instruía en la religión verdadera; de ahí que veamos, como en el caso mencionado arriba, que ellos eran considerados como parte de la propia familia del sacerdote, y eran tratados como tal. Ciertamente, ellos tenían privilegios que no se aplicaban a los residentes temporales ni a los jornaleros».

iii. «Por consiguiente, su situación era incomparablemente mejor que la situación de los esclavos bajo diferentes gobiernos europeos. De las almas de estos esclavos, sus crueles dueños no se preocupaban de manera general, y se atrevían a profesar la religión cristiana y citaban la ley mosaica como justificación por su sistema de esclavitud. ¡Qué conducta más absurda! ¡Y cuán intolerable!». (Clarke)

5. (14-16) Restitución por comer accidentalmente cosa sagrada.

Y el que por yerro comiere cosa sagrada, añadirá a ella una quinta parte, y la dará al sacerdote con la cosa sagrada. No profanarán, pues, las cosas santas de los hijos de Israel, las cuales apartan para Jehová; pues les harían llevar la iniquidad del pecado, comiendo las cosas santas de ellos; porque yo Jehová soy el que los santifico.

b. Y el que por yerro comiere cosa sagrada: Era posible que alguien que era considerado extraño comiere la porción reservada para el sacerdote y su familia. Cuando esto sucedía, se le exigía realizar una restitución común en lo que respecta a las cosas sagradas: restituirla, y añadir a ella una quinta parte (Levítico 5:16, 6:5, 27:13-15).

i. «Se da a entender que la persona en cuestión es un “extraño”, o alguien a quien no se le permite comer la comida designada para la familia sacerdotal». (Peter-Contesse)

ii. La necesidad de hacer una restitución nos recuerda: «Toda el agua del Jordán, y las ceremonias en Levítico, no pueden limpiar a un hombre mientras la cosa contaminada permanezca en su mano». (Trapp)

b. Porque yo Jehová soy el que los santifico: Esto demuestra por qué las ofrendas tenían que tratarse con un cuidado especial. Estas ofrendas eran santificadas por el Señor mismo.

B. Ejemplos de sacrificios inaceptables

1. (17-21) El principio: Las ofrendas deben hacerse sin mancha o defecto.

También habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a Aarón y a sus hijos, y a todos los hijos de Israel, y diles: Cualquier varón de la casa de Israel, o de los extranjeros en Israel, que ofreciere su ofrenda en pago de sus votos, o como ofrendas voluntarias ofrecidas en holocausto a Jehová, para que sea aceptado, ofreceréis macho sin defecto de entre el ganado vacuno, de entre los corderos, o de entre las cabras. Ninguna cosa en que haya defecto ofreceréis, porque no será acepto por vosotros. Asimismo, cuando alguno ofreciere sacrificio en ofrenda de paz a Jehová para cumplir un voto, o como ofrenda voluntaria, sea de vacas o de ovejas, para que sea aceptado será sin defecto.

a. Macho sin defecto de entre el ganado vacuno: En varias ocasiones antes que esta, Dios declaraba que los animales con defectos o deformados no eran aceptos para el sacrificio al Señor (Éxodo 12:5, Levítico 1:3, 3:1). Los sacerdotes eran responsables de asegurarse que cada animal que se traía para el sacrificio no tuviera ningún defecto observable.

i. Dios no quería lo desechado como sacrificio de parte de su pueblo. Él tenía el derecho de recibir lo mejor que ellos podían ofrecer. Deuteronomio 17:1 expone: «No ofrecerás en sacrificio a Jehová tu Dios, buey o cordero en el cual haya falta o alguna cosa mala, pues es abominación a Jehová tu Dios».

ii. «Traer un presente con defectos a un superior no solo sería ridículo, sino también ofensivo». (Rooker)

iii. «En el servicio a Dios, según la ley, no se admitía ni una ofrenda imperfecta, ni un oferente imperfecto». (Clarke)

iv. Desafortunadamente, en los días de Jesús se hacía un uso abusivo de esta ley, cuando los sacerdotes a veces declaraban no apto a un animal por una razón insignificante. Entonces, el sacerdote corrupto exigía a la persona comprar un animal aprobado para el sacrificio a un precio exageradamente elevado (Mateo 21:12-13).

v. Macho sin defecto: «Siempre se debía ofrecer un macho para el holocausto; pero las hembras se aceptaban en las ofrendas de paz (Levítico 3:1) y en las ofrendas por el pecado (Levítico 4:32, 5:6)». (Poole)

b. Ninguna cosa en que haya defecto ofreceréis, porque no será acepto por vosotros: El profeta Malaquías habló contra aquellos que traían a Dios animales con defectos o deformados: «En que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo. Y dijisteis: ¿En qué te hemos deshonrado? En que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable. Y cuando ofrecéis el animal ciego para el sacrificio, ¿no es malo? Asimismo cuando ofrecéis el cojo o el enfermo, ¿no es malo? Preséntalo, pues, a tu príncipe; ¿acaso se agradará de ti, o le serás acepto? dice Jehová de los ejércitos» (Malaquías 1:7-8).

c. Para que sea aceptado será sin defecto: Esta es una declaración fuerte en lo que respecta a lo que Dios consideraba como un sacrificio acepto. No dice: «debes ser mayoritariamente bueno». No dice: «debes ser sincero en tu intento por ser bueno». No dice: «necesitas ser cada día mejor y mejor». Dice: «sin defecto». Dios puso el estándar alto por una razón.

i. Sin defecto: «La palabra hebrea que se utiliza aquí significa en realidad “pleno, completo, sano, intacto”. En este contexto es lo opuesto de “imperfecto”». (Peter-Contesse)

ii. Esta también era una representación del Mesías que vendría, y del sacrificio que Él ofrecería y sería: un sacrificio sin defecto.

· Jesús fue sin defecto en su naturaleza de Dios y hombre.

· Jesús fue sin defecto en sus motivos.

· Jesús fue sin defecto en su actitud.

· Jesús fue sin defecto en su obediencia.

· Jesús fue sin defecto en su sacrificio por el pecado en favor de nosotros.

2. (22-23) Defectos específicos de nacimiento o por enfermedad, que eran rechazados.

Ciego, perniquebrado, mutilado, verrugoso, sarnoso o roñoso, no ofreceréis éstos a Jehová, ni de ellos pondréis ofrenda encendida sobre el altar de Jehová. Buey o carnero que tenga de más o de menos, podrás ofrecer por ofrenda voluntaria; pero en pago de voto no será acepto.

a. Ciego, perniquebrado, mutilado: Estos son defectos que pueden suceder de nacimiento, como un animal que nace mutilado de alguna manera. El animal enfermo verrugoso, sarnoso o roñoso tampoco era acepto para el sacrificio.

i. «Este versículo enumera seis defectos que hacían a un animal no acepto para el sacrificio. Sin embargo, no resulta fácil identificar el significado de cada uno con exactitud […], pero esto tiene pocas consecuencias en la traducción real». (Peter-Contesse)

ii. La Biblia dice que debemos ofrecernos a nosotros mismos como sacrificio vivo (Romanos 12:1-2). Este pasaje nos recuerda qué tipo de sacrificio debemos ser:

· Nuestro sacrificio vivo no debe ser ciego; debe tener los ojos bien abiertos a la misericordia y la gloria de Dios.

· Nuestro sacrificio vivo no debe ser perniquebrado; debe ser pleno y completo para Dios.

· Nuestro sacrificio vivo no debe ser deformado o mutilado; debe ser con brazos y pies pasivos, pero dispuestos a servir.

· Nuestro sacrificio vivo no debe ser verrugoso o roñoso, ni con una carne enferma y atormentada para que todos la vean.

iii. «¡Ojalá que le diéramos a Dios los mejor de nuestras vidas, las mejores horas de la mañana, las mejores habilidades de nuestras manos, los mejores pensamientos de nuestras mentes, la flor misma de nuestro ser!». (Spurgeon)

b. Buey o carnero que tenga de más o de menos, podrás ofrecer por ofrenda voluntaria: Algunos defectos eran aceptados como ofrenda que no se hacía para expiación de pecado, o que no se hacía en pago de voto.

i. Buey: «La palabra que originalmente se utiliza aquí no se limita en significado al macho de la especie, sino que también podía incluir a las hembras». (Peter-Contesse)

3. (24-25) Los defectos por castración se rechazaban.

No ofreceréis a Jehová animal con testículos heridos o magullados, rasgados o cortados, ni en vuestra tierra lo ofreceréis. Ni de mano de extranjeros tomarás estos animales para ofrecerlos como el pan de vuestro Dios, porque su corrupción está en ellos; hay en ellos defecto, no se os aceptarán.

a. No ofreceréis a Jehová animal con testículos heridos o magullados: Si un animal estaba castrado de alguna manera (con testículos heridos o magullados, rasgados o cortados), no era acepto para el sacrificio. No importaba si la castración sucedía de manera accidental o intencionada.

i. La idea de la castración queda clara en la Reina Valera 1960, así como en muchas otras versiones. La Nueva Versión Internacional (NVI) expone: «No ofrecerán al Señor ningún animal con los testículos heridos o magullados, cortados o arrancados. No harán esto en su tierra».La mayoría de las versiones modernas concuerdan con esta traducción.

b. Ni de mano de extranjeros tomarás estos animales para ofrecerlos: Dios no aceptaría esos sacrificios con defectos de parte de un israelita, ni de extranjeros. Si un israelita traía un animal castrado de mano de extranjeros, no podía ofrecerlo.

4. (26-30) Cuestiones que se debían tener en cuenta al ofrecer un animal como sacrificio.

Y habló Jehová a Moisés, diciendo: El becerro o el cordero o la cabra, cuando naciere, siete días estará mamando de su madre; mas desde el octavo día en adelante será acepto para ofrenda de sacrificio encendido a Jehová. Y sea vaca u oveja, no degollaréis en un mismo día a ella y a su hijo. Y cuando ofreciereis sacrificio de acción de gracias a Jehová, lo sacrificaréis de manera que sea aceptable. En el mismo día se comerá; no dejaréis de él para otro día. Yo Jehová.

a. Desde el octavo día en adelante será acepto para ofrenda: También se prohibía ofrecer un animal de menos de ocho días de nacido. Esto representaba una crueldad innecesaria hacia un animal recién nacido, y esta práctica probablemente se realizaba en los sacrificios paganos a los ídolos.

b. No degollaréis en un mismo día a ella y a su hijo: Sacrificar un animal recién nacido o joven y la madre de ese animal en un mismo día era imitar el ritual cananeo de fertilidad. Esto estaba prohibido para Israel.

i. «Estas leyes podían haber tenido una función argumentativa contra las prácticas paganas, o sencillamente promovían la sensibilidad y la alta estima por la vida». (Rooker)

ii. «El precepto estaba ciertamente orientado a inculcar la misericordia y el afecto; y así lo entendían los judíos. Cuando sea necesario tomar las vidas de animales inocentes para nuestro sustento, deberíamos hacerlo de manera que no entorpezcamos nuestros sentimientos morales; y a la vez debemos sentir una gratitud manifiesta a Dios por el permiso para hacerlo». (Clarke)

iii. Oveja: «La palabra aquí se utiliza para referirse realmente a una oveja o una cabra». (Peter-Contesse)

c. Y cuando ofreciereis sacrificio de acción de gracias a Jehová, lo sacrificaréis de manera que sea aceptable: Cuando se trataba de una ofrenda de acción de gracias, Dios solamente deseaba una gratitud sincera. Esta tenía que venir por voluntad propia del que la ofrecía.

d. En el mismo día se comerá: Cuando se hacía un sacrificio de acción de gracias, una parte del animal era para el Señor, y se quemaba en el altar. Una parte era para el sacerdote, y se le daba a este. La carne restante del animal era para el que traía la ofrenda, y este celebraba una comida con los miembros de su casa. Esta carne restante tenía que comerse en el mismo día que se ofrecía el sacrificio.

5. (31-33) Resumen.

Guardad, pues, mis mandamientos, y cumplidlos. Yo Jehová. Y no profanéis mi santo nombre, para que yo sea santificado en medio de los hijos de Israel. Yo Jehová que os santifico, que os saqué de la tierra de Egipto, para ser vuestro Dios. Yo Jehová.

a. Guardad, pues, mis mandamientos y cumplidlos: Aquí Dios daba a Israel, y especialmente a los sacerdotes, cuatro razones para guardar sus mandamientos y honrar su nombre.

· Debido a quién Dios es (Yo Jehová).

· Debido a lo que Él es (mi santo nombre).

· Debido a lo que Él hace (Yo Jehová que os santifico).

· Debido a lo que Él hizo (que os saqué de la tierra de Egipto).

i. «No profanarás mi santo nombre, ya sea al despreciar mis mandamientos o a mí mismo, o al ocasionar que otros los profanen». (Poole)

b. Para ser vuestro Dios. Yo Jehová: Debido a que Jehová era el Dios de Israel, y debido a todo lo que Él había hecho por ellos, la obediencia a Él era correcta. Estas mismas razones se mantienen válidas para todos los creyentes en la actualidad.

i. «Jehová es el Dios de santidad porque Él es, en esencia, el Dios de amor». (Morgan)

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