Levítico 7: Más instrucciones para los sacerdotes

A. El sacrificio por la culpa

1. (1-2) La matanza del sacrificio por la culpa.

Asimismo esta es la ley del sacrificio por la culpa; es cosa muy santa. En el lugar donde degüellan el holocausto, degollarán la víctima por la culpa; y rociará su sangre alrededor sobre el altar.

a. Asimismo esta es la ley del sacrificio por la culpa: El procedimiento para la ofrenda por la culpa fue descrito anteriormente en el capítulo 5. Aquí se añade un detalle específico que explica que la ofrenda por la culpa tenía que hacerse en el altar del holocausto, el altar central del tabernáculo y después en el templo.

i. La culpa es un tipo particular de pecado. La «culpa» es el cruce ilegal de un límite. Dios tiene ciertos límites para la humanidad en general y para su pueblo en particular, y cuando estos cruzan esos límites, es un pecado de culpa. En Levítico 5:5 también se explica que el sacrificio por la culpa debe comenzar con la confesión del pecado.

b. Rociará su sangre alrededor sobre el altar: La sangre del sacrificio por la culpa no necesitaba ser traída al tabernáculo o al templo. Simplemente podía ser rociada alrededor sobre el altar.

i. Degollarán la víctima por la culpa: «El verbo degollar en realidad significa “decapitar”, es decir, cortar la garganta del animal». (Peter-Contesse)

2. (3-5) La ofrenda de la grosura del sacrificio por la culpa.

Y de ella ofrecerá toda su grosura, la cola, y la grosura que cubre los intestinos, los dos riñones, la grosura que está sobre ellos, y la que está sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de sobre el hígado. Y el sacerdote lo hará arder sobre el altar, ofrenda encendida a Jehová; es expiación de la culpa.

a. Y de ella ofrecerá toda su grosura: Cuando se describe el sacrificio por la culpa en el capítulo 5, este se centra en las razones por las que sería necesario hacer la ofrenda. No dice nada sobre qué hacer con la sangre o la grosura del animal sacrificado. Aquí el sacerdote es instruido para ofrecer las porciones de grosura del animal.

i. Adam Clarke aclaró el sentido de la frase «toda su grosura»: «Principalmente la grasa que se encontraba en estado de desprendimiento, no mezclada con los músculos».

b. El sacerdote lo hará arder sobre el altar, ofrenda encendida a Jehová: Como se hacía normalmente, las porciones grasas del sacrificio por la culpa se quemaban sobre el altar.

3. (6-10) Las partes de las ofrendas que pertenecen a los sacerdotes.

Todo varón de entre los sacerdotes la comerá; será comida en Lugar Santo; es cosa muy santa. Como el sacrificio por el pecado, así es el sacrificio por la culpa; una misma ley tendrán; será del sacerdote que hiciere la expiación con ella. Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, la piel del holocausto que ofreciere será para él. Asimismo toda ofrenda que se cociere en horno, y todo lo que fuere preparado en sartén o en cazuela, será del sacerdote que lo ofreciere. Y toda ofrenda amasada con aceite, o seca, será de todos los hijos de Aarón, tanto de uno como de otro.

a. Todo varón de entre los sacerdotes la comerá: El sacrificio por la culpa siguió un patrón similar al de los sacrificios anteriores. La sangre y la grosura pertenecían a Dios y las porciones de carne podían ser compartidas entre los sacerdotes, y su distribución era determinada por el sacerdote que realmente realizaba el sacrificio por la culpa o el sacrificio expiatorio (será del sacerdote que hiciere la expiación con ella).

b. Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, la piel del holocausto que ofreciere será para él: Con el holocausto (también descrito en el capítulo 1), al sacerdote que hacía el sacrificio también se le daba la piel del animal para usarla como cuero o en cualquier otro propósito.

c. Toda ofrenda que se cociere en horno, y todo lo que fuere preparado en sartén o en cazuela: Las ofrendas de vianda preparadas en horno, sartén cubiertay cazuela fueron mencionadas por primera vez en Levítico 2:4-7. Aquí se aclara que una parte de esas ofrendas pertenece al sacerdote.

i. John Trapp observó cómo el antiguo escritor cristiano Orígenes pensó en estos tres artículos (el horno, la sarténcubiertay la cazuela) de una manera excesivamente alegórica: «Aquí Orígenes, según su manera, convierte todo en alegorías y misterios, y nos habla de que la Escritura tiene un triple sentido: (1.) literal; (2.) moral; (3.) místico; comparándolos con la parrilla, la sartén y el horno, utilizados para aliñar la ofrenda de carne. Pero esta propensión a alegorizar textos oscuros y difíciles tiene no poco peligro. Y puedo dudar de Orígenes, como uno puede hacerlo de Jerónimo, si le hizo más daño que bien a la Iglesia».

d. Será de todos los hijos de Aarón, tanto de uno como de otro: Con la ofrenda de vianda (anteriormente descrita en el capítulo 2), la distribución era responsabilidad del sacerdote que hacía la ofrenda, pero debía asegurarse de que las porciones se distribuyeran equitativamente.

B. El sacrificio de paz

1. (11-14) Pan y tortas dados con el sacrificio de paz.

Y esta es la ley del sacrificio de paz que se ofrecerá a Jehová: Si se ofreciere en acción de gracias, ofrecerá por sacrificio de acción de gracias tortas sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untadas con aceite, y flor de harina frita en tortas amasadas con aceite. Con tortas de pan leudo presentará su ofrenda en el sacrificio de acciones de gracias de paz. Y de toda la ofrenda presentará una parte por ofrenda elevada a Jehová, y será del sacerdote que rociare la sangre de los sacrificios de paz.

a. La ley del sacrificio de paz: Los sacrificios de pazfueron mencionados anteriormente en el capítulo 3. El sacrificio de paz normalmente era el sacrificio de un animal (Levítico 3:1-2), y a menudo se hacía como acción de gracias.

b. Ofrecerá […] tortas sin levadura amasadas con aceite: Junto con el sacrificio animal del sacrificio de paz, se debía hacer algún tipo de ofrenda bien cocida al horno, ya fuera tortas sin levadura u hojaldres, cada una hecha con aceite.

c. Tortas de pan leudo presentará: Además de las tortas sin levadurau hojaldres, la ofrenda de paz debía hacerse con pan leudado.

i. La prohibición de la levadura en cualquier ofrenda (Levítico 2:11) aparentemente solo era relevante para aquellas cosas que se quemaban en el altar. Este pan leudado que era parte de la ceremonia del sacrificio de paz no se ofrecía sobre el altar, sino que se presentaba en una ofrenda elevada. Levítico 23:17 también describe el pan leudado usado en una ofrenda mecida.

ii. En el simbolismo del sistema de sacrificios, esto es fascinante. El sacrificio de paz era acompañado por el sacerdote que sostenía ante Dios pan sin levadura en una mano y pan leudado en la otra. De alguna manera ritual, el pan sin levadura y el leudado se mecían ante el Señor. Desde la perspectiva del Nuevo Testamento, podemos conectar esto con el hecho de que Jesucristo ha hecho la paz entre judíos y gentiles, derribando el muro que anteriormente los separaba (Efesios 2:11-18), y el mismo Jesucristo esnuestra paz (Efesios 2:14) debido al sacrificio que hizo en su propia carne (Efesios 2:15).

iii. «El sacrificio de paz es el símbolo supremo de la comunión basada en la reconciliación. Es la ofrenda que simboliza dos lados de una gran transacción: uno de ellos es el de Dios; el otro, es el del hombre. Dios y el hombre están en paz. El lado de Dios solo puede ser simbolizado por lo que está sin levadura, libre de todo mal, separado de todo lo que tiende a la corrupción. Por otro lado, queda en el hombre mucha imperfección. Esto está simbolizado por las tortas leudadas». (Morgan)

d. De toda la ofrenda presentará una parte por ofrenda elevada a Jehová: Aparentemente, cuando se hacía el sacrificio de paz (especialmente como sacrificio de acción de gracias), también debía hacerse esta ofrenda elevadahecha con una torta u hojaldre sin levadura y con pan leudado.

i. Trapp dice sobre la ofrenda elevada que es «llamada así porque era elevada y levantada ante el Señor, en señal de que lo recibían todo de Él, y de que reconocían que todo se debía a Él».

ii. Adam Clarke dice esto con respecto a la ofrenda elevada indicando que viene de la palabra hebrea «levantar, porque la ofrenda era levantada hacia el cielo, como la ofrenda mecida, en señal de la bondad de Dios al conceder la lluvia y las estaciones fructíferas, y llenar el corazón de alimento y alegría. Como la ofrenda mecida se movía de derecha a izquierda, así la ofrenda elevada se movía hacia arriba y hacia abajo; y en ambos casos esto se hacía varias veces».

2. (15-18) ¿Cuándo comer la carne del sacrificio de paz?

Y la carne del sacrificio de paz en acción de gracias se comerá en el día que fuere ofrecida; no dejarán de ella nada para otro día. Mas si el sacrificio de su ofrenda fuere voto, o voluntario, será comido en el día que ofreciere su sacrificio, y lo que de él quedare, lo comerán al día siguiente; y lo que quedare de la carne del sacrificio hasta el tercer día, será quemado en el fuego. Si se comiere de la carne del sacrificio de paz al tercer día, el que lo ofreciere no será acepto, ni le será contado; abominación será, y la persona que de él comiere llevará su pecado.

a. La carne del sacrificio de paz en acción de gracias se comerá en el día que fuere ofrecida: El sacrificio de paz podía hacerse por diferentes razones, incluyendo por acción de graciaso para un voto o una ofrenda voluntaria.

b. Se comerá en el día que fuere ofrecida: Cuando el sacrificio de paz se hacía por acción de gracias, la carne debía comerse el día del sacrificio. Cuando se hacía por un voto o una ofrenda voluntaria, también se podía comer al día siguiente.

i. «Las gracias deben ser devueltas mientras las misericordias estén frescas; no sea que, como el pescado, se pudran al guardarse». (Trapp)

c. Si se comiere de la carne del sacrificio de paz al tercer día, el que lo ofreciere no será acepto: La carne de un sacrificio de paz nunca podría ser comida al tercer díadel sacrificio. Cualquier carne sobrante debía serquemada en el fuego. Tal vez esta era la forma en que Dios enfatizaba su deseo de una relación «fresca» y vigente con Él.

i. «Porque en un país tan cálido bien podía deteriorarse, y como era considerada santa, hubiera sido impropio exponer a la putrefacción lo que había sido consagrado al Ser Divino». (Clarke)

3. (19-21) ¿Quién puede comer del sacrificio de paz?

Y la carne que tocare alguna cosa inmunda, no se comerá; al fuego será quemada. Toda persona limpia podrá comer la carne; pero la persona que comiere la carne del sacrificio de paz, el cual es de Jehová, estando inmunda, aquella persona será cortada de entre su pueblo. Además, la persona que tocare alguna cosa inmunda, inmundicia de hombre, o animal inmundo, o cualquier abominación inmunda, y comiere la carne del sacrificio de paz, el cual es de Jehová, aquella persona será cortada de entre su pueblo.

a. La carne que tocare alguna cosa inmunda, no se comerá: La carne proveniente del sacrificio de paz que se podía comer debía mantenerse ceremonialmente limpia.

b. Toda persona limpia podrá comer la carne: La pureza ceremonial se requería de cualquiera que quisiera participar en la comida de comunión asociada con el sacrificio de paz. Esto ilustra el principio de que no podemos disfrutar de la paz de Dios hasta que hayamos recibido su gracia purificadora.

c. La persona que tocare alguna cosa inmunda […] y comiere: Si una persona que era ceremonialmente impura comía de la carne de un sacrificio de paz, esto era un pecado grave. Tal desprecio por la santidad del sacrificio de Dios significaba que aquella persona sería cortada de entre su pueblo.

i. Presumiblemente, la fuerte pena de excomunión se reservaba para aquellos que «a sabiendas» comían del sacrificio de paz mientras estaban ceremonialmente inmundos. Si lo hacían accidentalmente o sin saberlo, había un sacrificio específicamente aceptado para ello (Levítico 5:2).

ii. No es que Dios exija perfección; la presencia del pan leudado demuestra que eso no es cierto. Pero cuando un creyente hoy trata de recibir cosas espirituales sabiéndose inmundo, hay una cierta separación con respecto a su comunión con Dios. 1 Juan 1:6 dice: «Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad».

iii. «Además, en la participación de la Cena del Señor, que se aproxima mucho a la comida de la ofrenda de la comunión, el creyente no debe participar si hay un pecado no confesado en su vida. Al igual que el israelita que comió el sacrificio en estado de impureza, el creyente que participa de la Cena del Señor en un estado indigno puede esperar el juicio directo de Dios (1 Corintios 11:27-32)». (Rooker)

C. Lo concerniente a la grosura y la sangre de los animales

1. (22-25) La grosura no se puede comer.

Habló más Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel, diciendo: Ninguna grosura de buey ni de cordero ni de cabra comeréis. La grosura de animal muerto, y la grosura del que fue despedazado por fieras, se dispondrá para cualquier otro uso, mas no la comeréis. Porque cualquiera que comiere grosura de animal, del cual se ofrece a Jehová ofrenda encendida, la persona que lo comiere será cortada de entre su pueblo.

a. Ninguna grosura de buey ni de cordero ni de cabra comeréis: Bajo el Antiguo Pacto, un israelita no podía comer las grandes porciones de grasa de un animal. Esto era así para los animales ofrecidos en sacrificio e incluso para un animal que muriera de causas naturaleso que estuviera muerto y desgarrado por las bestias salvajes. La ley era la misma: «no la comeréis».

i. La grosura del animal representaba su bondad y abundancia, y eso pertenecía a Dios. Además, la grasa es la energía almacenada del animal, que también pertenece a Dios.

b. Cualquiera que comiere grosura de animal, del cual se ofrece a Jehová ofrenda encendida: Esto demuestra que la prohibición de comer las porciones de grasa solo se aplicaba a los animales sacrificados, y a aquellos animales que de otra manera era prohibido comer.

i. Levítico 22:8 prohibía comer cualquier tipo de animal que fuera matado por otro animal (como uno muerto, desgarrado por bestias salvajes).

c. La persona que lo comiere será cortada de entre su pueblo: Al igual que la ley anterior contra las personas ceremonialmente impuras que comían la carne de los sacrificios, el castigo por violar esta ley era severo: la excomunión de la comunidad del pueblo de Dios.

i. «Diecinueve ofensas resultaban en que una persona recibiera el castigo de “ser cortado” en el Antiguo Testamento. Las ofensas que resultaban en que el ofensor fuera “cortado” incluían: violar los días santos (incluyendo el Sabbat), cometer ofensas morales, violar leyes de pureza como la de comer la sangre, y no circuncidarse en el octavo día». (Rooker)

2. (26-27) La sangre no se puede comer.

Además, ninguna sangre comeréis en ningún lugar en donde habitéis, ni de aves ni de bestias. Cualquiera persona que comiere de alguna sangre, la tal persona será cortada de entre su pueblo.

a. Ninguna sangre comeréis: La ley del Antiguo Pacto también prohibía al israelita comer directamente sangre de cualquier tipo (ni de aves ni de bestias). La sangre representa la vida del animal o de la persona (Levítico 17:11-14), y la vida pertenece a Dios.

b. La tal persona será cortada de entre su pueblo: Como en las leyes anteriores, la pena por desobediencia era severa: ser cortado de la comunidad del pueblo de Dios.

i. «Uno pensaría que esto no es más que un pecadillo; sin embargo, ningún pecado puede ser pequeño, porque no hay un Dios pequeño contra el cual pecar». (Trapp)

D. Las porciones específicas del sacrificio de paz

1. (28-31) La porción del pecho.

Habló más Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: El que ofreciere sacrificio de paz a Jehová, traerá su ofrenda del sacrificio de paz ante Jehová. Sus manos traerán las ofrendas que se han de quemar ante Jehová; traerá la grosura con el pecho; el pecho para que sea mecido como sacrificio mecido delante de Jehová. Y la grosura la hará arder el sacerdote en el altar, mas el pecho será de Aarón y de sus hijos.

a. El que ofreciere sacrificio de paz: Las siguientes instrucciones se refieren a las porciones de carne del sacrificio de paz. El individuo que traía el sacrificio a los sacerdotes en realidad traía su ofrenda al Señor.

b. Sus manos traerán las ofrendas: Un israelita no podía delegar esto en otra persona. El sacrificio de paztenía que ser traído al sacerdote con sus propias manos.

c. El pecho para que sea mecido como sacrificio mecido delante de Jehová: Esto era un mecer específico de la porción de carne o de pan dedicados a Jehová; la mecían delante de Jehová según un patrón específico. De esta manera, aunque el sacerdote guardara la porción, el que traía la ofrenda la dedicaba a Dios.

i. Poole señala que era el israelita que traía la ofrenda el que hacía este movimiento ondulante con el pecho del sacrificio: «de un lado a otro con sus manos, que eran apoyadas y dirigidas por las manos del sacerdote».

ii. Adam Clarke dice esto con respecto a la ofrenda mecida, indicando que viene de la palabra hebrea usada para «extenderse»; una ofrenda de las primicias se extendía ante Dios, en reconocimiento de su bondad providencial. Esta ofrenda se movía de la mano derecha a la izquierda.

iii. En su comentario sobre Éxodo 29:27, Clarke escribió esto con respecto a las ofrendas elevadas y las mecidas: «Como la ofrenda mecida se agitaba de un lado a otro, y la ofrenda elevada de arriba abajo, algunos han concebido que esta doble acción representaba la figura de la cruz, en la que se ofreció el gran sacrificio de paz entre Dios y el hombre en el sacrificio personal de nuestro bendito Redentor». Para esta idea, Clarke citó el trabajo de Charles Houbigant, un estudioso francés de la Biblia del siglo XVIII.

2. (32-34) La porción de la espaldilla.

Y daréis al sacerdote para ser elevada en ofrenda, la espaldilla derecha de vuestros sacrificios de paz. El que de los hijos de Aarón ofreciere la sangre de los sacrificios de paz, y la grosura, recibirá la espaldilla derecha como porción suya. Porque he tomado de los sacrificios de paz de los hijos de Israel el pecho que se mece y la espaldilla elevada en ofrenda, y lo he dado a Aarón el sacerdote y a sus hijos, como estatuto perpetuo para los hijos de Israel.

a. Daréis al sacerdote la espaldilla derecha: Esta parte del animal pertenecía al sacerdote que realizaba el sacrificio. Presumiblemente, la espaldilla izquierda del animal se le daba al israelita que traía la ofrenda para que pudiera disfrutar de la carne del sacrificio en una comida de comunión.

b. El pecho que se mece y la espaldilla elevada en ofrenda: Había cierta distinción entre la presentación ceremonial entre el pecho y la espaldilla del animal. El pecho se presentaba en una ofrenda meciday la espaldilla en una ofrenda elevada.

c. He tomado: Ambas porciones pertenecían al Señor. Dios no estaba visiblemente presente en el sacrificio, pero aun así Dios recibía la ofrenda a través del trabajo del sacerdote designado y ungido. Dios recibió la ofrenda, y luego la dio al sacerdote (lo he dado a Aarón el sacerdote y a sus hijos).

3. (35-36) El principio de las porciones dadas al sacerdote.

Esta es la porción de Aarón y la porción de sus hijos, de las ofrendas encendidas a Jehová, desde el día que él (Moisés) los consagró para ser sacerdotes de Jehová, la cual mandó Jehová que les diesen, desde el día que él los ungió de entre los hijos de Israel, como estatuto perpetuo en sus generaciones.

a. Esta es la porción de Aarón y la porción de sus hijos: Para enfatizar, Dios repitió la idea de que aunque estos sacrificios eran dados al Señor, porciones de esos sacrificios pertenecían a los sacerdotes por derecho y por mandato (la cual mandó Jehová que les diesen […] de entre los hijos de Israel).

i. Alguien podría objetar que esto era un gran beneficio para los sacerdotes, y tal vez incluso un beneficio excesivo. La carne era un lujo en el mundo antiguo, y los sacerdotes tenían más carne para comer que la mayoría de las personas. Sin embargo, debe recordarse que los sacerdotes (de la tribu de Leví) no tenían ninguna asignación de tierra dada a ellos (Números 18:20). Dios era su herencia, y se les proveía de las ofrendas y regalos del pueblo de Dios.

ii. De manera similar, Dios dice en el Nuevo Testamento que aquellos que sirven a Dios y a su pueblo de manera espiritual tienen derecho a ser apoyados de manera material (1 Corintios 9:12). Este es un derecho que puede y debe ser dejado de lado cuando es de mayor ventaja para la causa del evangelio dejarlo de lado; sin embargo, esto no implica que el derecho no permanece. Como escribió Pablo: «Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio». (1 Corintios 9:14)

b. Desde el día que él (Moisés) los consagró para ser sacerdotes de Jehová: Esa ceremonia fue descrita en Éxodo 29 y llevada a cabo en Levítico 8. Esta fue la ceremonia que oficialmente designó y ungió a Aarón y sus hijos como sacerdotes de Israel.

4. (37-38) Posdata sobre los sacrificios.

Esta es la ley del holocausto, de la ofrenda, del sacrificio por el pecado, del sacrificio por la culpa, de las consagraciones y del sacrificio de paz, la cual mandó Jehová a Moisés en el monte de Sinaí, el día que mandó a los hijos de Israel que ofreciesen sus ofrendas a Jehová, en el desierto de Sinaí.

a. Esta es la ley del holocausto: Es una declaración resumen sobre los siete capítulos anteriores con las instrucciones para los sacrificios de Israel. Estas instrucciones incluyen:

· El holocausto: Levítico 1 y 6:8-13.

· La ofrenda de vianda: Levítico 2 y 6:14-23.

· El sacrificio por el pecado: Levítico 4 y 6:24-30.

· El sacrificio por la culpa: Levítico 5 y 7:1-10.

· Las consagraciones: Tal vez una referencia a las ofrendas de restitución descritas en Levítico 5:14-6:7, y a las porciones reservadas para Dios y los sacerdotes en Levítico 7:22-36.

· El sacrificio de paz: Levítico 3 y 7:11-21.

b. La cual mandó Jehová a Moisés en el monte de Sinaí: Moisés recibió todas estas leyes para Israel en el Monte Sinaí y las trajo al pueblo de Israel. Fueron una parte adicional e importante del Antiguo Pacto, establecido por primera vez en el desierto de Sinaí.

i. «Estas leyes probablemente fueron dadas a Moisés mientras estaba en el monte con Dios; el tiempo fue bastante suficiente, ya que estuvo allí con Dios no menos de ochenta días en total; cuarenta días para dar, y cuarenta días para renovar la ley». (Clarke)

Jesucristo y el cumplimiento del sistema de sacrificios

«Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios». (Hebreos 10:12)

Jesús consumó el holocausto (Levítico 1)

«Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante». (Efesios 5:2)

Jesús consumó la ofrenda de la vianda y de las primicias (Levítico 2)

«Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho». (1 Corintios 15:20)

Jesús consumó el sacrificio de paz (Levítico 3)

«Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo». (Romanos 5:1)

Jesús consumó el sacrificio por el pecado (Levítico 4)

«Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él». (2 Corintios 5:21)

Jesús consumó el sacrificio por la culpa (Levítico 5)

«El cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación». (Romanos 4:25)

«Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado». (Isaías 53:10)

¡Jesucristo ha consumado todos los sacrificios por su pueblo!

«Él es el holocausto, la ofrenda de carne, el sacrificio de paz, el sacrificio por el pecado y el sacrificio por la culpa de su pueblo. Por su única ofrenda de sí mismo una vez ofrecida, Él se ha mantenido en todas estas diferentes relaciones». (Jukes)

«En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre». (Hebreos 10:10)

©2020 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com