Nehemías 2 – La Comisión de Nehemías

A. Nehemías el copero.

1. (1-2) Naehemías delante del rey.

Sucedió en el mes de Nisán, en el año veinte del rey Artajerjes, que estando ya el vino delante de él, tomé el vino y lo serví al rey. Y como yo no había estado antes triste en su presencia,me dijo el rey: ¿Por qué está triste tu rostro? pues no estás enfermo. No es esto sino quebranto de corazón. Entonces temí en gran manera.

a. Tomé el vino y lo serví al rey: EL último versículo de Nehemías 1 nos dice que Nehemías era elcopero del rey– una posición importante en cualquier corte real. El copero era un guardaespaldas personal para el rey, al ser el que probaba el vino y la comida antes de que el rey lo hiciera – asegurándose de que nadie pudiera envenenar al rey.

i. “Elcoperoera un alto oficial en la casa real, cuya responsabilidad de escoger y probar el vino para demostrar que no estaba envenenado, y de presentarlo al rey, le daba acceso frecuente a la presencia del rey y lo hizo potencialmente un hombre de influencia.” (Kidner)

ii. El rey, por lo tanto, tenía que tener una tremenda cantidad de confianza en su copero, quien tenía que ser un hombre de carácter fiel e impresionante. Si se podía poner al copero en contra del rey, el asesinato sería sencillo.

iii. El copero era también unsiervodel rey; él era responsable de escoger casi todas las comidas y los vinos que el rey y la corte desfrutarían.

iv. El copero también era unconsejero confiable para el rey; como estaba constantemente en la presencia del rey, y se confiaba mucho en él, y era un hombre de carácter, era natural que al copero a menudo se le preguntara su opinión sobre diferentes asuntos que llegaban ante el rey.

b. En el mes de Nisán, en el año veinte del rey Artajerjes: Mientras Nehemías daba vino al rey, se tuvo cuidado de mencionar el día específico en el que comienzan los eventos de Nehemías 2.

i. ¿Por qué era tan importante para Dios el decir la fecha en la que sucedieron estas cosas? Primero, para mostrar que Nehemías oró y esperó por cuatro meses con el tipo de corazón descrito previamente en Nehemías 1. Durante esos cuatro meses, la oración de Nehemías era probablemente, “Jehová, quita esta carga de mi corazón o muéstrame como ser el hombre que responda a esta carga.”

ii. La fecha también es importante, porque establece la fecha dada para restablecer Jerusalén y sus muros. Daniel 9:25 dice que 173,880 días desde este día – el cual fue el 14 de Marzo del 445A.C.- el Mesías príncipe de este mundo sería presentado a Israel. Sir Robert Anderson, el eminente astrónomo y matemático presenta un fuerte caso de que Jesús cumplió esta profecía exactamente, al día, entrando a Jerusalén el 6 de Abril del 32D.C., precisamente 173,880 días desde Nehemías 2:1.

c. Yo no había estado antes triste en su presencia: En ese día en particular, Nehemías señala que nunca había estado triste o deprimido en la presencia del rey, y en este día que el rey lo notó, Nehemías temió en gran manera. Como fue cierto en las cortes de muchos reinos antiguos, estaba prohibido estar triste en la presencia del rey. La idea era que el rey era una persona tan maravillosa que con tan solo estar en su presencia te hacía olvidar todos tus problemas. Cuando Nehemías se vio triste, se pudo haber tomado como un terrible insultó para el rey.

i. Cuando el rey dijo “No es esto sino quebranto de corazón,” Nehemías supo que el rey había notado su tristeza, y que el rey la tomó en serió. Nehemías debió haberse preguntado si las siguientes palabras del rey serían, “¡córtenle la cabeza!”

ii. Nehemías también temía porque sabía que iba con el rey por algo muy importante. Había mucho en juego en lo que sucedería en respuesta a esta pregunta.

iii. Nehemías entendió que no era su responsabilidad cambiar el corazón del rey. Él oró y lo dejó a Jehová, en vez de lanzar indirectas y tratar de manipular la situación. Entonces un día, cuatro meses después, el corazón del rey fue diferente. ¿Estamos cometiendo el error de tratar de cambiar el corazón de una persona, en vez de dejar que Jehová lo haga?

2. (3) La respuesta de Nehemías.

Y dije al rey: Para siempre viva el rey. ¿Cómo no estará triste mi rostro, cuando la ciudad, casa de los sepulcros de mis padres, está desierta, y sus puertas consumidas por el fuego?

a. Para siempre viva el rey: Nehemías probablemente había dicho esto muchas veces con anterioridad. Este era probablemente casi un lema entre los coperos; ya que ellos probaban el vino y la comida antes que el rey, naturalmente deseaban al rey una buena y larga vida.

b. La ciudad, casa de los sepulcros de mis padres, está desierta, y sus puertas consumidas por el fuego: Con esto, Nehemías explicó por qué estaba triste. Jerusalén era una ciudad destruida y en desgracia.

i. Nadie necesitaba decirle al rey que este era un estado lamentable; él inmediatamente simpatizaría con la preocupación de Nehemías por la dignidad, la seguridad, y el bienestar de su pueblo.

ii. También vemos el gran tacto y la sabiduría de Nehemías, porque habla de su preocupación sin mencionar específicamente el nombre de la ciudad. El rey naturalmente tendría una mala asociación con el nombre “Jerusalén,” conociendo por la historia que era una ciudad rebelde contra los Persas y que se resistían a su gobierno. ¡Nehemías pone la simpatía del rey de su lado antes de revelar la ciudad!

c. Cómo no estará triste mi rostro: La respuesta de Nehemías no solo fue sabia, fue honesta. A menudo, cuando estamos visiblemente deprimidos o afligidos, y cuando alguien nos pregunta algo al respecto, simplemente respondemos, “¡Nada malo!” o “Oh, estoy bien” En esas veces, no somoshonestos.

i. Muchas personas son afligidas por este dilema. Nadie quiere ser un llorón, molestando a otros con nuestros problemas cuando la otra persona tal vez esté preguntando solo por cortesía común. Por otro lado, conocemos el tremendo valor que puede haber en compartir nuestras preocupaciones con alguien más que puede orar con nosotros y tal vez compartir algo de sabiduría de la Biblia.

ii. Una manera de vivir en este tipo de honestidad es buscar a otros que conozcamos y en quienes confiemos, y compartamos con ellos nuestras luchas y necesidades. Pero si no conocemos lo suficientemente bien a una persona como para sentirnos con la confianza de compartir nuestra vida personal, aún así podemos pedirles que oren por nosotros en general. No necesitan saber todos los detalles para orar, porque Dios conoce todos los detalles. También, cuando alguien pregunta si estamos afligidos, podemos estar abiertos a la idea de que esta persona es un regalo especial para nosotros en ese momento.

iii. Sin embargo, debemos evitar dos trampas. Primero, debemos evitar andar “de compras” buscando consejo – preguntándole a muchas personas, diciéndole a todos ellos nuestros problemas hasta que finalmente encontramos el consejo que queremos. Segundo, debemos ser especialmente cuidadosos de hablar con los demás de una manera que ponga el problema en otras personas – personas que no estén ahí para dar su versión de la historia. Nehemías no le dijo al rey, “Estoy triste porque esos incompetentes de Jerusalén han tenido 100 años para reconstruir los muros y no han hecho nada. Son una bola de personas endurecidas, indiferentes y sin valor.” Él describió el problema sin poner a nadie a quien culpar. Cuando fallamos al hacer esto, hay una palabra para eso:chisme.

iv. Cuando somos la persona a quien otros piden oración, o a quien otros vienen por ayuda, es útil cuidarnos de la tentación de de conocer cada detalle del problema. Claro que es interesante escuchar los detalles de los problemas de otros, pero no necesitamos conocer todos los pequeños detalles. Nuestra oración aún es valiosa aunque no conozcamos todos los detalles. No somos menos capaces de guiarlos a Jesús con amoroso cuidado. Algunas cosas necesitan hablarse más que otras, pero algunas veces queremos que la persona hable más por nosotros que por ellos.

3. (4-8) La petición de Nehemías.

Me dijo el rey: ¿Qué cosa pides? Entonces oré al Dios de los cielos, y dije al rey: Si le place al rey, y tu siervo ha hallado gracia delante de ti, envíame a Judá, a la ciudad de los sepulcros de mis padres, y la reedificaré. Entonces el rey me dijo (y la reina estaba sentada junto a él): ¿Cuánto durará tu viaje, y cuándo volverás? Y agradó al rey enviarme, después que yo le señalé tiempo. Además dije al rey: Si le place al rey, que se me den cartas para los gobernadores al otro lado del río, para que me franqueen el paso hasta que llegue a Judá; y carta para Asaf guarda del bosque del rey, para que me dé madera para enmaderar las puertas del palacio de la casa, y para el muro de la ciudad, y la casa en que yo estaré. Y me lo concedió el rey, según la benéfica mano de mi Dios sobre mí.

a. ¿Qué cosa pides? Inmediatamente, Nehemías supo que Dios le dio favor delante del rey. Su respuesta no fue “¡córtenle la cabeza!” sino “¿qué puedo hacer para ayudar?” Nehemías supo que cuatro meses de oración fueron contestados.

b. Entonces oré al Dios de los cielos: sabiendo que su oración había sido contestada, Nehemías oró otra vez. Esta no fue una oración larga y extendida (él pudo haber dicho, “Bueno rey, déjame orar por esto por unos días y regreso contigo”). En vez de eso, esta fue una inmediata y silenciosa oración de, “¡Ayúdame Jehová!”. Nehemías supo que esta era una gran oportunidad, y no quiso perder la oportunidad.

i. Es maravilloso poder durar un buen tiempo en oración; pero la oración no tiene que ser larga para ser efectiva. Esto es especialmente verdad cuando la situación no permitirá una oración larga.

c. Envíame a Judá: Nehemías mostró una vez más gran sabiduría cuando pidió respetuosamente un permiso para ausentarse y ser enviado (envíame) por el rey. Él le pidió al rey que compartiera su preocupación por Jerusalén y que se asociara con él para regresar a la ciudad y su pueblo a ser lo que deberían ser.

i. La visión de Nehemías también fue revelada: la reedificaré. Ese era un trabajo enorme y una gran meta. Nehemías no va en una simple expedición de investigación, ni a decirles a los líderes de Jerusalén que estaban haciendo un mal trabajo. Él va para terminar el trabajo, ¡confiando en Dios todo el camino!

ii. Una vez más, Nehemías muestra sabiduría al referirse a Jerusalén sin mencionar específicamente la ciudad (envíame a Judá, a la ciudad de los sepulcros de mis padres). Aunque, también podemos decir que Nehemías no estaba siendo engañoso. A pesar de que Jerusalén podía ser históricamente una ciudad rebelde a Persia, ya no lo era – y no lo sería.

d. Y agradó al rey enviarme: El compasivo corazón de Nehemías, sus meses de oración, su momento de oración, su gran fe, su gran visión, y sus sabias respuestas fueron todas respondidas positivamente. El rey estaba entusiasmado con apoyar a Nehemías en esta aventura.

e. Le señalé tiempo: Como un líder capaz, Nehemías evidentemente tenía un plan. Los cuatro meses de oración no solamente fueron empleados en hablarle a Dios sino en escucharle y desarrollando un plan dirigido por el Espíritu sobre qué hacer cuando Dios abriera la puerta.

i. Nehemías sabía cuánto tiempo necesitaría estar fuera (le señalé tiempo). Sabía que necesitaría cartas de salvoconducto del rey (que se me den cartas). Sabía que tipo de materiales se necesitarían (madera). Sabía qué trabajo necesitaría hacerse (las puertas del palacio de la casa. . . el muro de la ciudad. . . la casa en que yo estaré). ¡Nehemías sabía todo esto sin haber visto nunca antes por sí mismo la condición de Jerusalén! Nehemías conocía las necesidades al buscar cuidadosa y pacientemente a Dios.

ii. Nehemías tenía un plan, y Dios siempre trabaja con un plan. Jehová nuestro Dios es un Dios planeador:El consejo de Jehová permanecerá para siempre; Los pensamientos de su corazón por todas las generaciones (Salmos 33:11). Desde el inicio del plan de salvación en eternidad pasada, Dios tiene un plan y los está llevando a cabo.

iii. Algunas veces pudiera parecer que Dios bendice la falta de planeación, y algunas veces parece que Dios sí bendice un trabajo completamente diferente de lo que habíamos planeado. Pero en cada caso, Dios trabajó por medio de planeación – si no por nuestros planes, entonces por sus planes. Pero como principio general, Dios quiere entrenarnos en el trabajo de ser planeadores, así como él es un planeador.

iv. Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abundancia;Mas todo el que se apresura alocadamente, de cierto va a la pobreza(Proverbios 21:5). La fe no es el substituto de la planeación. No somos más espirituales por dejar de planear y actuar precipitadamente. Puede haber algunas veces en las que simplemente no podemos planear, pero nunca debemos rechazar la planeación.

f. Para que me dé madera: Nehemías fue también un hombre osado, sin miedo de pedirle ayuda a otros cuando sabía que ellos tenían los recursos para ayudar. Una vez que el rey estuvo dispuesto a ser parte de la meta de Nehemías (agradó al rey enviarme), fuer directamente a pedir un sello de aprobación oficial del proyecto (cartas para los gobernadores) y que el rey financiara el proyecto (para que me dé madera).

i. Nehemías no pidió porque quisiera tomar ventaja del rey. Más bien, le mostró honra y respeto invitándolo a participar en un trabajo digno. Él sabía que el rey era capaz de proveer estas cosas; él sintió que el corazón del rey estaba dispuesto, y le muestra al rey cómo puede hacer lo que su corazón dispuesto quiere hacer.

g. Y me lo concedió el rey, según la benéfica mano de mi Dios sobre mí: A pesar de que este era un rey pagano, Nehemías aún así entendió que Dios podía trabajar a través de él en una manera poderosa. Dios puede proveer para nuestras necesidades en formas totalmente inesperadas o improbables.

B. Nehemías viene a Jerusalén.

1. (9-10) Llegada y oposición.

Vine luego a los gobernadores del otro lado del río, y les di las cartas del rey. Y el rey envió conmigo capitanes del ejército y gente de a caballo. Pero oyéndolo Sanbalat horonita y Tobías el siervo amonita, les disgustó en extremo que viniese alguno para procurar el bien de los hijos de Israel.

a. Vine luego: Este es otro ejemplo del consagrado liderazgo de Nehemías. El realmente fue – viajó las 800 millas (1287 km) de Persia a Jerusalén para hacer la obra de reconstruir los muros y al pueblo.

i. Muchas personas tienen un corazón sensible como Nehemías. Tal vez también tengan el corazón para la oración, la sabiduría, la visión, el plan y la fe de un Nehemías – pero se detienen de realmente ir y hacer algo que necesita hacerse para que la meta se convierta en una realidad.

ii. Algunas veces substituimoshablar sobre algo con realmente hacerlo. Una cosa es cuando uno piensa en quedarse con otros creyentes y hablar sobre hacer algo de evangelismo, orando por ello, planeándolo, hablándolo – y otra cosa es realmente ir y hacerlo. Dios está en el hacer de las cosas.

iii. A nuestros enemigos espirituales no les importa siempre y cuando todo lo que hagamos sea planear, orar y hablar; pero cuando el pueblo de Dios comienza a hacer algo, ellos prestan atención.

b. Del otro lado del río: Esto significa “más allá del Rio Éufrates,” un punto de referencia importante que separaba a una región de otra. Una vez que un viajero cruzaba el rio, estaban en camino a la región de Judea y a la ciudad de Jerusalén. En este punto Nehemías habló a los gobernadores de esta región que gobernaban bajo los Persas.

c. Les di las cartas del rey: Nehemías vino preparado. Tenía cartas que mostraban que realmente había sido enviado por el rey. Tenía capitanes del ejército y gente de a caballo que iban con él. También tenía sustanciales provisiones de madera del bosque del rey. Verdaderamente, el rey de Persia había respondido a la invitación de Nehemías de asociarse en el trabajo de reconstruir los muros de Jerusalén.

d. Sanbalat horonita. . . Tobías el siervo amonita: En la estación del gobernador, Nehemías se reunió con estos dos enemigos de Jerusalén y de todo el que se interesara por el bienestar de la ciudad. Les disgustó en extremo que viniese alguno para procurar el bien de los hijos de Israel.

i. A estos dos no les afectaba en nada siempre y cuando Jerusalén estuviera débil y vulnerable; Aunque el templo estaba ahí, y se llevaba cabo adoración, eso estaba bien, siempre y cuando el pueblo de Dios no estuviera fuerte, seguro y libre de estrés.

ii. Noten cuándo llegó esta oposición: no en la etapa del corazón, no en la etapa de la visión, no en la etapa de la oración, no en la etapa de la planeación, sino cuando llegó el progreso al hacer algo.

iii. Algunas personas tienen miedo de tener que levantarse alguna vez para Jehová, porque saben que vendrá la oposición. De alguna forma piensan que su vida será mejor o más fácil si se quedan en su estado bajo y mediocre delante de Dios. ¡Qué engaño! ¿Una vida de nunca entregarlo todo por Jesucristo? Tiempos difíciles vendrán de todas formas; pero cuando estamos creciendo y avanzando en el Señor, estamos mucho más equipados para lidiar con ellos.

2. (11-16) Nehemías da un recorrido secreto por Jerusalén y sus muros.

Llegué, pues, a Jerusalén, y después de estar allí tres días,me levanté de noche, yo y unos pocos varones conmigo, y no declaré a hombre alguno lo que Dios había puesto en mi corazón que hiciese en Jerusalén; ni había cabalgadura conmigo, excepto la única en que yo cabalgaba.Y salí de noche por la puerta del Valle hacia la fuente del Dragón y a la puerta del Muladar; y observé los muros de Jerusalén que estaban derribados, y sus puertas que estaban consumidas por el fuego.Pasé luego a la puerta de la Fuente, y al estanque del Rey; pero no había lugar por donde pasase la cabalgadura en que iba.Y subí de noche por el torrente y observé el muro, y di la vuelta y entré por la puerta del Valle, y me volví.Y no sabían los oficiales a dónde yo había ido, ni qué había hecho; ni hasta entonces lo había declarado yo a los judíos y sacerdotes, ni a los nobles y oficiales, ni a los demás que hacían la obra.

a. Llegué, pues, a Jerusalén: Después de estar en Jerusalén por tres días, Nehemías aún no le había dicho a nadie por qué estaba ahí, ni lo que Dios había puesto en su corazón: no declaré a hombre alguno lo que Dios había puesto en mi corazón que hiciese en Jerusalén.

i. Cuando Nehemías entró a Jerusalén con una escolta militar y madera del bosque del rey de Persia, la gente lo notó – pero no dijo nada acerca de su misión hasta que llegó el momento correcto. Los buenos líderes desarrollan un sentido del tiempo de Dios.

ii. Nehemías vino a Jerusalén, lleno de pasión, lleno de oración, lleno de fe, lleno de sabiduría, lleno de una gran visión, lleno del apoyo del rey, y finalmente llega a su destino – y no hizo nada por tres días.

iii. No declaré a hombre alguno: “Es bueno tener amigos Cristianos, pero es peligroso llevar el corazón en la manga. Tenga un lugar secreto del cual nadie sepa sino solo usted y Dios.” (Redpath).

iv. “A menudo usted encontrará mejor no comentar su plan con otros. Si usted quiere servir a Dios, vaya y hágalo, y luego deje que otras personas se enteren después. Usted no tiene necesidad de decir lo que va a hacer, y, si puedo agregar, no hay necesidad de que usted siga contando lo que ha hecho, porque con mucha, mucha frecuencia Dios se retira cuando nos jactamos de lo que se está haciendo.” (Spurgeon).

b. Y salí de noche por la puerta del Valle: Parece que Nehemías salió por el lado oeste de la ciudad, y giró hacia la izquierda rumbo al sur, continuando en sentido contrario a las manecillas del reloj alrededor de los escombros de los muros de la ciudad, hasta que regresó a su punto de origen.

c. Y observé los muros de Jerusalén que estaban derribados, y sus puertas que estaban consumidas por el fuego: Nehemías no andaba solo de turista. En vez de eso, cuidadosamente estudió los muros destruidos y las puertas consumidas por el fuego La palabra observé en Nehemías 2:13 y 2:15 es un término médico para “sondear una herida para observar la magnitud de los daños.”

i. Por primera vez, Nehemías vio con sus ojos lo que se le había reportado, y lo que Dios le había llamado a reparar. No hay forma de que hubiera podido hacer este recorrido sin lágrimas en los ojos, conociendo la magnitud del daño y el miedo, pobreza e inseguridad que los muros destruidos significaban en las vidas de las personas.

d. Los muros de Jerusalén que estaban derribados, y sus puertas que estaban consumidas por el fuego: Nehemías sabía que el trabajo de reconstruir los muros no podría avanzar a menos de que viera exactamente qué tan mal estaba la situación.

i. Nehemías pudo haberse enfocado en todo lo que estaba bien en Jerusalén. Estaban de regreso en Judá y el exilio forzado había terminado. El templo había sido reconstruido. Se realizaban sacrificios y adoración. Se estaba progresando, aunque lentamente. Había mucho por lo qué estar agradecido en Jerusalén – pero a veces, uno debe ver lo que está mal, y eso fue lo que hizo Nehemías.

ii. Nos engañamos a nosotros mismos si solo vemos lo que está bien. Algunos no tienen problema con esto; siempre les resulta fácil ver lo que está mal. Están llenos de crítica. Creen que tienen el don espiritual único de señalar lo que está mal. Pero Nehemías nos enseña con su ejemplo – que debemos ver las torres destruidas, y estudiar cuidadosamente lo que está mal – pero solo si tenemos el corazón, la oración, la visión y la pasión de ser usados por Dios para solucionarlo. Hay poca utilidad en el reino de Dios para los críticos laterales, los críticos del asiento trasero y los mariscales de campo de los lunes por la mañana.

iii. Pero con los corazones correctos – corazones listos para actuar – necesitamos echar una mirada honesta. “Es una completa locura negarse a creer que las cosas están tan mal como realmente lo están. Es vital en cualquier empresa para Dios conocer lo peor, pues cuando sea que vaya a haber un maravilloso movimiento del Espíritu Santo, empieza con alguien como Nehemías que fue lo suficientemente osado como para ver los hechos, diagnosticarlos, y luego levantarse a hacer la tarea.” (Redpath)

iv. Cuando vemos a otros Cristianos a nuestro alrededor, vemos que muchos son fuertes, gozosos, en crecimiento, en su relación con Jesucristo. Muchos tienen victoria sobre el pecado y estamos agradecidos por ello. Pero también podemos ver los muros figurados de su vida, ver algunas porciones derrumbadas. Algunos entre nosotros estamos desesperadamente lastimados o estamos atrapados en un círculo de pecado y queremos salir, pero no sabemos cómo pedir ayuda. Algunos sienten como que están afuera pero viendo hacia adentro. Algunos respetan a Dios, pero aún no han entregado sus vidas a Jesucristo. Dios puede, y lo hará, reconstruir todas las porciones derrumbadas de estos muros figurativos.

v. Cuando echamos un vistazo a nuestros hijos, sabemos que los amamos y nos preocupamos por ellos. Pero cuando los vemos con honestidad vemos sus debilidades de carácter y las áreas donde se quedan cortos. Sobriamente consideramos lo que será de ellos si esas debilidades dominan su personalidad completa. Consideramos lo que sucederá si crecen rechazando a Jesús, y su futura ruina a menos de que Dios nos use para entrenar y educar su carácter.

vi. De la misma manera, cuando vemos nuestros negocios, nuestras relaciones, nuestras amistades, deberíamos echar una mirada honesta, y no solo ver lo que es bonito.

vii. Cuando vemos a la iglesia, amamos a la iglesia y estamos agradecidos por lo que Dios hace ahí. Pero cuando vemos honestamente, probablemente no estamos satisfechos con el impacto que hemos tenido en la comunidad. No podemos decir que es suficiente o que no debería haber mucho más. Pensamos en el apoyo financiero, el compromiso con la comunidad y el esparcimiento de la Palabra de Dios a través de la iglesia, y aún así saber que podría haber más y que el ministerio podría crecer más y más.

viii. Si alguien diera un recorrido por su vida de la misma manera en que Nehemías tomó un recorrido por Jerusalén podrían notar muchas porciones derrumbadas en los muros figurativos de su vida. Proverbios 25:28 dice: Como ciudad derribada y sin muro Es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.Muchas vidas con como ciudades con muros derrumbados – viviendo con una sensación de miedo constante, pobreza e inseguridad. No deberíamos esconder nuestra mirada de estos lugares derrumbados; Dios quiere cambiarlos, y tomar los primeros pasos de cambio inmediatamente.

e. Los muros de Jerusalén que estaban derribados, y sus puertas que estaban consumidas por el fuego: Al igual que con lo demás, Nehemías se tomó el tiempo de calcular el costo antes de iniciar la obra. El tenía un corazón, tiene fe, tiene una visión – pero antes de que esa visión se vuelva una realidad, él tiene que ver exactamente lo que se tiene que hacer, y lo que costará – en términos de tiempo, esfuerzo, dinero y liderazgo.

3. (17-18) Nehemías se reúne con los líderes de Jerusalén.

Les dije, pues: Vosotros veis el mal en que estamos, que Jerusalén está desierta, y sus puertas consumidas por el fuego; venid, y edifiquemos el muro de Jerusalén, y no estemos más en oprobio. Entonces les declaré cómo la mano de mi Dios había sido buena sobre mí, y asimismo las palabras que el rey me había dicho. Y dijeron: Levantémonos y edifiquemos. Así esforzaron sus manos para bien.

a. Vosotros veis el mal en que estamos: Los ciudadanos y los líderes de Jerusalén no estaban sentados esperando a que superman viniera y reconstruyera sus muros. Con toda probabilidad, habían llegado a captar que era un trabajo imposible. Parecía que nadie podría solucionar un problema de 100 años. Años atrás, cuando alguien lo intentó, lo enemigos simplemente los detuvieron. Así que lo sobrellevaron.

b. Les dije, pues: Ahora, cuando Nehemías llegó y explicó su visión de reconstruir los muros a los líderes de la ciudad, había una tremenda cantidad de importancia adjunta a esta reunión. Nehemías no podía hacer el trabajo solo, y estaría en muchos problemas si los líderes no lo ayudaban.

i. Sin duda, esto es algo por lo que Nehemías oró mucho. Tal vez haya orado algo así, “Oh Jehová, prepara los corazones de los líderes de Jerusalén para apoyar este trabajo que me has llamado a hacer. Déjalos ver que no vengo condenando o criticándolos, solo vengo para ayudar. Dame las palabras correctas a usar, y háblales con anticipación sobre esta obra a la cual me has llamado.”

c. El mal en que estamos: Nehemías se acercó sabiamente a los líderes de Jerusalén. Tenía que hacerlo así. En el cumplimiento de cualquier visión o meta – o por lo menos una visión o meta del tamaño de Dios, habrá ciertas personas esencialespara cumplir la meta – usted necesitarásu ayuda. El sabio acercamiento de Nehemías nos da un ejemplo a seguir.

· Sabiamente, Nehemías les pidió que notaran lo evidente: veis el mal; algunas veces lo evidente es lo más difícil de ver.

· Sabiamente, Nehemías, no llegó como si estuviera ahí para arreglar el problema de ellos: el mal en que estamos. Nehemías se apropió del problema como si también fuera suyo, a pesar de que tal vez no tuviera que hacerlo. Nehemías no empleó el juego de la culpa. No criticó a los líderes de Jerusalén. Simplemente se identificó junto con ellos en relación con el problema.

· Sabiamente, Nehemías pidió su apoyo: venid, y edifiquemos el muro de Jerusalén. Nehemías se imaginó que si Dios podía mover el corazón de un rey pagano para involucrarlo en su obra, ¡ciertamente podía mover los corazones de su propio pueblo para que se unieran! Nehemías no estaba ahí para hacerlo por ellos, sino para asociarse con ellos en la obra de restaurar a Jerusalén y su pueblo.

· Sabiamente, Nehemías les señaló el resultado: y no estemos más en oprobio. Esto no se trataba realmente de ladrillos y morteros; se trataba sobre remover una condición de pena, miedo, pobreza e inseguridad entre el pueblo de Dios. El duro trabajo que involucra ladrillos y morteros valdría la pena, porque tendría un verdadero impacto espiritual tanto en los individuos como en la comunidad. Cuando David vio a Goliat y se enfureció de que este monstruo arrojando desgracia sobre el pueblo de Dios, simplemente dijo, “¿No es esto mero hablar?” (1 de Samuel 17:29). Todos los demás estaban enfocados en sí mismos y calculando las probabilidades, y David dijo, “Arreglemos esto. Estoy dispuesto a que Dios me use para hacerlo”.

· Sabiamente, Nehemías los animó en el Señor: les declaré cómo la mano de mi Dios había sido buena sobre mí. Nehemías aseguró a los líderes que este no era su proyecto, era el proyecto de Dios. Si las personas sienten que su visión reamente solo se trata de usted, de exaltarlo a usted, de hacerlo a usted grande,titubearán con justa razón. Pero si es de Dios, y ellos pueden verlo, estarán encantados de asociarse con usted.

· Sabiamente, Nehemías les dio confianza al decirles lo que Dios ya había hecho: les declaré. . . las palabras que el rey me había dicho. Nehemías podía decir, “Miren, ustedes pueden saber que esto es de Dios; ¡el corazón del rey de Persia ha sido tocado por el Señor para apoyar este proyecto!” Si algo tiene las huellas dactilares de Dios, las personas querrán apoyarlo; si solo tiene las huellas del hombre, titubearán con justa razón.

d. Entonces les declaré cómo la mano de mi Dios había sido buena sobre mí: También notamos lo que Nehemías no hizo; no rogó ni hizo tratos. Nehemías tenía un alto llamado de Dios, y le pedía a otros que fueran parte de esta visión, pero nunca dejó de tratarlo como un alto llamado. El no actuaría como gritón de feria intentando manipular a las personas a que tumben botellas de leche incluso cuando realmente no quieren hacerlo

i. Nehemías no ofreció recompensas, incentivos, o vacaciones en el Mar de Galilea para los que realizaran el trabajo. Esas son motivaciones externas, y no son el más alto llamado de Dios. Nehemías simplemente dijo, “Dejemos de perder el tiempo. Sabemos que hay un trabajo que hacer, y Dios nos está guiando a hacerlo ahora.” Él confió en Jehová y en los líderes para crear una verdadera motivación interna. La motivación externa –manipulación, culpa, presión y recompensas carnales, pueden funcionar por un tiempo, pero nunca son parte de la visión de Dios para hacer las cosas.

e. Levantémonos y edifiquemos: Esta respuesta de los líderes de Jerusalén venía de Dios. Ellos dijeron, “¡Sí Nehemías, estamos contigo!” Esto era aún más notable considerando las formas en las que pudieron haber respondido – formas en las que podemos responder cuando somos retados a hacer equipo en una obra.

· Pudieron haber negado la necesidad de muros. “Sabes, ¡nos las hemos arreglado sin esos muros por cien años ya! ¡Después de todo, ya tenemos el templo!” Pero queremos hacer algo más que solo “arreglárnosla.” Dios tiene más para nosotros, y ahora es el tiempo de involucrarnos. · Pudieron haber visto el proyecto comodemasiado trabajo. “Bueno Nehemías, es un buen trabajo, y esperamos que todo te salga bien. Pensamos que no podemos ayudarte por ahora.” Pero estamos dispuestos a pagar el precio por algo que realmente viene de Dios.

· Pudieron haber visto a laoposición como demasiado fuerte. “Nehemías, ¿por qué empezar siquiera? Lo intentamos antes y nuestros enemigos nos detuvieron. Simplemente volverá a suceder.” Pero tenemos más fe que eso.

f. Así esforzaron sus manos para bien: Esto muestra la mano de Dios en acción aquí. El corazón de Nehemías, suoración, suaudacia, sugran visión, suacción, y su sabiduría, todos fueron recompensados. Esto era algo inspirado por Dios; Dios movió los corazones de los líderes a hacer esto.

i. Sabemos que Nehemías fue un gran líder porque las personas lo siguieron. Las personas que estaban destinadas a seguirlo fueron genuinamente influenciadas por su liderazgo.

4. (19) La oposición se levanta en respuesta a la obra de Dios.

Pero cuanto lo oyeron Sanbalat horonita, Tobías el siervo amonita, y Gesem el árabe, hicieron escarnio de nosotros, y nos despreciaron, diciendo: ¿Qué es esto que hacéis vosotros? ¿Os rebeláis contra el rey?

a. Pero cuanto lo oyeron Sanbalat horonita, Tobías el siervo amonita, y Gesem el árabe: Las cosas habían estado yendo extraordinariamente bien, así que no nos sorprendemos de que la oposición se levantara otra vez. Sanbalat horonita y Tobías el siervo amonita, ambos vinieron a oponerse a la obra.

i. La oposición espiritual a la obra que Dios quiere lograr es una realidad que muchos Cristianos fallan en tener en cuenta, y por lo tanto son derrotados en lo que Dios quería que hicieran.

ii. La Segunda Persona de la Trinidad, Jesucristo, tomó la humanidad para experimentar la batalla espiritual incluso como usted lo hace; Él sabe lo que es estar bajo ataque, cómo alcanzar la victoria, y por lo tanto sabe cómo llevar a su pueblo a la victoria.

b. Sanbalat. . . Tobías: Estos dos aparecen en Nehemías 2:10;les disgustó en extremo que viniese alguno para procurar el bien de los hijos de Israel. Ya habían hecho saber su opinión con anterioridad; ahora buscarán hacer algo al respecto del progreso que está haciendo Nehemías.

i. Tobías (un nombre Judío) era un hombre de influencia, al estar asociado con la familia del sumo sacerdote, y al obtener ayuda de los sacerdotes (Nehemías 13:4). “Tobías” fue un nombre prominente en las familias sacerdotales para las generaciones venideras. El nombre “Tobías” significa “Yahvé es bueno” – un nombre extraño para un hombre que se oponía a la obra de Dios.

ii. Sanbalat estaba conectado por matrimonio a familias sacerdotales (Nehemías 13:28). Un documento antiguo de este periodo se refiere a Sanbalat como “gobernador de Samaria.” (Kidner)

iii. Estos hombres eran Judíos – eran hermanos – de Nehemías y de los ciudadanos de Jerusalén. Podríamos pensar que deberían haber apoyado su trabajo, pero no lo hicieron. La oposición siempre es difícil, pero cuando se trata de hermanos, se combina entonces también con dolor y traición.

iv. La Biblia deja claro que tenemos enemigos y oponentes también; pero principalmente son enemigos espirituales:Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra. . . huestes espirituales de maldad en las regiones celestes (Efesios 6:12). Sin embargo, también nos damos cuenta que los ataques de los enemigos espirituales pueden venir a través de personas de carne y hueso (Mateo 16:23). Podemos experimentar un ataque espiritual en un nivel interno directo de enemigos espirituales, o a través de personas que están, consciente o inconscientemente, siendo usadas como herramientas por nuestros enemigos espirituales.

c. Hicieron escarnio de nosotros: Sanbalat y Tobías utilizaron el escarnio en su ataque. Querían que Nehemías se sintiera burlado, tonto, y ridículo. Hicieron escarnio de nosotros nos da a entender que mostraron su desprecio (nos despreciaron) con un toque humorístico.

i. Este escarnio puede llegar a nosotros en un sentimiento interno (“¿A quién intento engañar? ¡Debo ser una especie de tonto!”). O puede llegar a través de las palabras de esos que, sabiéndolo o no, están siendo usados por nuestros enemigos espirituales.

ii. Muchos son desviados de la voluntad de Dios porque experimentan o temen el escarnio. Hombres que no temieron a la muerte han sido manipulados porque no querían recibir burlas. Parece que tarde o temprano, Dios permitirá que todo Cristiano sea probado en este punto; en cuanto a quién dan más importancia, a Dios o al hombre. Nunca debemos estar más preocupados por lo que la gente puede decir de nosotros que por lo que Dios requiere de nosotros.

iii. La manera en que Sanbalat y Tobías usaron la burla y el escarnio como armas en contra de la obra de Dios también debería hacernos reflexionar sobre nuestro propio uso del humor. Algunos Cristianos que de otra manera son bienintencionados son herramientas del enemigo, todo por lograr unas cuantas risas.

d. ¿Os rebeláis contra el rey? Esto muestra que Sanbalat y Tobías tenían una baja percepción de la autoridad de Dios. Su pregunta mostró que ellos consideraban al rey de Persia como la máxima autoridad en la tierra.

i. Primero, eran completamente ignorantes. No sabían de lo que hablaban. El rey había dado permiso, incluso si ellos no lo sabían, el rey se habíaasociadoen la obra. Muchas veces, esos que están siendo usados por nuestros enemigos espirituales en nuestra contra simplemente no saben de lo que están hablando.

ii. Segundo, no estaban preocupados por la autoridad de Dios. Realmente, no importaba si el rey de Persia estaba en contra de esta obra, si el Dios del cielo y la tierra era por ella. Uno con Dios hace una mayoría. Nehemías pudo haberles regresando la pregunta: ¿Se rebelarán ustedes contra el Rey de Reyes y Señor de Señores?

8. (20) La respuesta de Nehemías a sus oponentes.

Y en respuesta les dije: El Dios de los cielos, él nos prosperará, y nosotros sus siervos nos levantaremos y edificaremos, porque vosotros no tenéis parte ni derecho ni memoria en Jerusalén.

a. Y en respuesta les dije: Nehemías ignoró su escarnio. Sus osadas y directas palabras mostraron que no había sido puesto a la defensiva por su burlesco y escarnecedor ataque.

i. Cuando se enfrentó con la elección de agradar al hombre o agradar a Dios, Nehemías sabía exactamente lo que haría. Déjenlos que se burlen – el serviría a Jehová.

b. Les dije: Nehemías no les contestó punto por punto. No les mostró el documento que proveía del apoyo del rey al proyecto. Si lo hubiera hecho, Sanbalat y Tobías simplemente hubieran alegado que era falso, o hubieran salido con otra objeción. Nehemías sabía que los corazones que se niegan a ser convencidos, nunca serán convencidos.

c. El Dios de los cielos, él nos prosperará: En su lugar, Nehemías proclamó su confianza en Dios. “No importa si ustedes están en nuestra contra. La obra de Dios tendrá éxito.”

i. Nehemías no puso la obra en espera mientras un equipo de respuesta a emergencias encontraba la mejor manera de responder a Sanbalat y Tobías. Él no iba a dejar que lo desviaran. El tenía un trabajo que hacer e iba a hacerlo. Si usted permite a sus enemigos que lo detengan de lo que debería estar haciendo y les entrega toda su atención, entonces sus enemigos habrán ganado.

ii. Hay un toque de osadía santa en la respuesta de Nehemías. “Adelante, tomen su mejor tiro. No funcionará. Dios está con nosotros. No está con ustedes. Ustedes fracasarán. Nosotros prosperaremos bajo la mano del Dios del cielo.

d. Nosotros sus siervos nos levantaremos y edificaremos: Nehemías proclamóquién era él y lo que haría.

i. Nehemías y sus seguidores eran siervos de Dios. Sanbalat y Tobías se sentían confiados porque eran siervos del rey; pero Nehemías es un siervo de Dios.

ii. Nehemías y sus seguidores tenían un trabajo que hacer. Ni por un momento dijo, “¡Cielos, tal vez esto no es la voluntad de Dios!” Ellos habían acordado levantarse y edificar(Nehemías 2:18), y lo harán.

iii. Al enfrentar a nuestros enemigos, siempre debemos mantener el enfoque enquiénes somosylo que debemos hacer. Fallar al ver esto siempre nos guiará a la derrota. ¡Estas son exactamente las cosas que nuestros enemigos espirituales quieren que olvidemos! ¡Y algunas veces, usted solo tiene que proclamarlo!

e. Porque vosotros no tenéis parte ni derecho ni memoria en Jerusalén: Nehemías proclamó la verdad sobre sus enemigos. Tal vez hayan sido Judíos por nacimiento; tal vez hayan sido ciudadanos legales de Jerusalén; tal vez hayan tenido propiedades en la ciudad. Pero sus corazones mostraban que no tenían parte ni derecho ni memoria en la ciudad de Dios.

i. Nehemías les tomó la medida a estos dos con más rapidez de lo que a menudo lo hacemos nosotros. Él sabía que ellos no estaban en pos de él o de Jerusalén, o de Dios en absoluto – aunque tal vez hayan afirmado serlo. Fue como si Nehemías hubiera dicho, “Usted no pertenece aquí. Dios está haciendo una gran obra aquí, y ustedes no quieren ser parte de ella. Simplemente supérenlo.”

ii. Podemos decir lo mismo a nuestros enemigos espirituales: “Ustedes no tienen herencia, ni derecho ni memoria en mi. Yo pertenezco a Cristo Jesús. Ustedes no pertenecen aquí. Así que pueden ir dejándolo porque no me iré a ninguna parte.”

iii. Esta oposición no se deshizo inmediatamente. A menudo deseamos que si hicimos todo bien al igual que Nehemías aquí, entonces la oposición simplemente se irá. Pero no lo hizo. Estos dos se opusieron a la obra durante todo el trayecto hasta que fue terminada. Pero no la detuvieron. La obra de Dios se terminó, y se les demostró que estaban equivocados.

©2020 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com