Salmo 107 – Aprendizaje de la liberación de Dios a los cautivos que regresan
Este notable salmo alaba la liberación de Dios en cuatro imágenes maravillosas. Derek Kidner tituló este salmo “Dios al rescate”. Las cuatro imágenes muestran que la historia de todos es diferente y, sin embargo, la historia de todos es la misma.
“Considere las sucesivas viñetas de este salmo. El amor se cierne sobre la caravana cansada que desmaya en el desierto; visita la prisión con sus cautivos; vigila junto a nuestros lechos de dolor; nota cada sacudida de la embarcación impulsada por la tempestad; lleva las huestes fatigadas del desierto a la tierra fértil”. (F.B. Meyer)
A. Dedicación del cántico.
1. (1) Dedicación en gratitud a Dios.
Alabad a Jehová, porque él es bueno;
Porque para siempre es su misericordia.
a. Alabad a Jehová: La exhortación se expresa como una exclamación. El cantor del salmo suplica apasionadamente a sus lectores que den gracias a Dios, y por una buena razón. Esta alabanza está dirigida a Dios porque Él es bueno. Su bondad se revelará a lo largo del resto de este salmo.
b. Porque para siempre es su misericordia: En los salmos en su conjunto, esta frase tiene casi una cualidad litúrgica. Se usa más de 30 veces y es una declaración de agradecimiento del pueblo de Dios, alabando la gran misericordia – el amor de pacto – de Dios.
i. “Las palabras para siempre han sido proporcionadas apropiadamente por los traductores, pero aun así restringen un poco el sentido, que se verá mejor si las leemos, ‘por su misericordia para siempre’. Esa misericordia no tuvo principio, y nunca conocerá un final”. (Spurgeon)
2. (2-3) Dedicación a la luz de la reunificación y el regreso del pueblo de Dios.
Díganlo los redimidos de Jehová,
Los que ha redimido del poder del enemigo,
Y los ha congregado de las tierras,
Del oriente y del occidente, del norte y del sur.
a. Díganlo los redimidos de Jehová: Específicamente, el salmista invita al pueblo de Dios – a los redimidos por su eterna misericordia – a declarar que son redimidos. Sería ingrato y erróneo guardar silencio sobre una obra tan grande. El salmista describirá cuatro aspectos distintos del rescate redentor de Dios – a los perdidos, a los culpables, a los enfermos y a los azotados por la tormenta. Estos redimidos de Jehová deben de decirlo.
i. “Moisés nos ha dado en la ley una idea clara y completa de lo que debemos entender por la palabra goel, aquí traducida como ‘redimidos’. Si alguna persona fue vendida como esclava o llevada cautiva, entonces su pariente, quien estaba más cerca de él por sangre, tenía el derecho de redención”. (Romaine, citado en Spurgeon)
b. Los que ha redimido del poder del enemigo: Podríamos ser redimidos del mundo, la carne, el diablo o innumerables otras trampas. Aquí, el salmista tiene en mente la redención del poder del enemigo, probablemente relacionada con el exilio del pueblo de Dios.
c. Y los ha congregado de las tierras: Esta sería una declaración apropiada en boca de Daniel, Esdras o Nehemías, quienes tuvieron la ocasión de agradecer a Dios por reunificar a un remanente del pueblo de Dios de sus tierras de cautiverio.
i. Del sur: “hebreo, del mar”. (Poole)
B. La bondad de Dios vista en Su liberación a los cautivos que regresan.
1. (4-9) Liberación para los perdidos en el desierto.
Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino,
Sin hallar ciudad en donde vivir.
Hambrientos y sedientos,
Su alma desfallecía en ellos.
Entonces clamaron a Jehová en su angustia,
Y los libró de sus aflicciones.
Los dirigió por camino derecho,
Para que viniesen a ciudad habitable.
Alaben la misericordia de Jehová,
Y sus maravillas para con los hijos de los hombres.
Porque sacia al alma menesterosa,
Y llena de bien al alma hambrienta.
a. Anduvieron perdidos por el desierto: Cuando Dios reunificó a Su pueblo (versículos 2-3), tuvieron que venir a la Tierra Prometida desde todas las direcciones. Algunos vinieron del desierto, y anduvieron perdidos en su soledad.
i. Anduvieron perdidos: “Su paso por el desierto no fue un viaje, como cuando los hombres pasan por un camino hacia algún lugar habitado; sino un vagar arriba y abajo lejos de todo camino y vereda, y así en un laberinto interminable de desolación”. (Hammond, citado en Spurgeon)
ii. “Estuvieron perdidos en el peor lugar posible, así como el pecador está perdido en el pecado; vagaron arriba y abajo en vanas búsquedas e investigaciones como lo hace un pecador cuando despierta y ve su estado perdido; pero terminó en nada”. (Spurgeon)
b. Hambrientos y sedientos, su alma desfallecía en ellos: En la angustia del desierto, los redimidos clamaron a Jehová en su angustia, y Dios respondió (y los libró de sus aflicciones).
c. Los dirigió por camino derecho: Mejor que los sistemas de navegación modernos, Dios dirigió a sus redimidos al lugar correcto, para que viniesen a ciudad habitable.
i. “Su liberación está llena de sorpresas, ya que suple todas las necesidades de su pueblo. Endereza el camino; los lleva a la ciudad; y les proporciona refugio, comida y bebida”. (VanGemeren)
d. Alaben… oh hijos de los hombres: La bondad de Dios para con los que regresan por el desierto debería dar a todos una razón para agradecerle por sus maravillas para con los hijos de los hombres. Deberíamos poder agradecer a Dios por algo más que su obra en nuestra vida personal, sino también por lo que hace por los demás.
e. Porque sacia al alma menesterosa: El salmo habla de los hambrientos y sedientos en el desierto, pero también hay un anhelo en el alma del hombre. La guía y liberación literal de Dios para sus redimidos en el desierto se convierte en una imagen de cómo Él libera al alma perdida, sedienta y hambrienta, y la llena de bien.
i. Parece que María, la madre de Jesús, citó el versículo 9 (y llena de bien al alma hambrienta) en su canto: A los hambrientos colmó de bienes (Lucas 1:53). Esta es una de las muchas citas y alusiones de las Escrituras que se encuentran en el canto de María registrado en Lucas 1:46-55, que muestra que ella era una mujer que conocía y amaba la palabra de Dios”.
2. (10-16) Liberación de los cautivos.
Algunos moraban en tinieblas y sombra de muerte,
Aprisionados en aflicción y en hierros,
Por cuanto fueron rebeldes a las palabras de Jehová,
Y aborrecieron el consejo del Altísimo.
Por eso quebrantó con el trabajo sus corazones;
Cayeron, y no hubo quien los ayudase.
Luego que clamaron a Jehová en su angustia,
Los libró de sus aflicciones;
Los sacó de las tinieblas y de la sombra de muerte,
Y rompió sus prisiones.
Alaben la misericordia de Jehová,
Y sus maravillas para con los hijos de los hombres.
Porque quebrantó las puertas de bronce,
Y desmenuzó los cerrojos de hierro.
a. Algunos moraban en tinieblas y sombra de muerte, aprisionados en aflicción y en hierros: Cuando Dios reunió a Su pueblo (versículos 2-3), tuvieron que venir a la Tierra Prometida de todas direcciones. Algunos procedían de cárceles y cadenas.
i. En aflicción y en hierros: “Con hierros afligidos o dolorosos. O, en las cuerdas de la aflicción, como se les llama, Job 36:8, y particularmente con grilletes de hierro”. (Poole)
b. Por cuanto fueron rebeldes a las palabras de Jehová: El salmista entendía que algunos fueron encarcelados porque fueron rebeldes a Dios. Esto no debe entenderse en el sentido de que el salmista creía que todos los encarcelados de Dios estaban allí porque aborrecieron el consejo del altísimo, pero al menos en un sentido general era cierto.
i. El apóstol Pablo más tarde se refirió a sí mismo como preso en el Señor (Efesios 4:1). Estas personas también eran presas en el Señor, pero en un sentido muy diferente.
ii. “Los entregó en manos de sus enemigos y, como no quisieron estar sujetos a Dios, los entregó como esclavos a hombres inicuos… Dios los había abandonado porque ellos lo habían abandonado a él”. (Clarke)
c. Cayeron, y no hubo quien los ayudase: Sus prisiones fueron difíciles, con trabajos forzados y penurias.
i. “En las prisiones orientales, los hombres suelen trabajar como bestias del campo. Pues no tienen libertad, no tienen descanso. Esto pronto somete al corazón más valiente y hace que el orgulloso fanfarroneador cante otra melodía”. (Spurgeon)
d. Clamaron a Jehová en su angustia: En sus cadenas y dificultades, el pueblo prisionero de Dios le suplicó ayuda, y Él respondió. Los libró de sus aflicciones y rompió sus prisiones. Esta fue pura gracia y misericordia de Dios; estos prisioneros estaban bajo la propia disciplina de Dios. Sin embargo, cuando clamaron a Dios, Él respondió misericordiosamente.
i. “Esto es consuelo para los más grandes pecadores; si pueden encontrar un corazón que ora, Dios encontrará un corazón compasivo, y los rebeldes serán recibidos con toda dulzura, si finalmente regresan, aunque traídos por la cruz”. (Trapp)
e. Alaben la misericordia de Jehová: El estribillo se repite (anteriormente en el versículo 8). Ver el poder misericordioso de Dios en acción debería impulsar a los hombres a alabar. Dios desmenuzó los cerrojos de hierro para que su pueblo pudiera regresar cuando los reuniera.
i. “El Señor rompe las puertas y los cerrojos más fuertes cuando llega el momento de liberar a sus prisioneros: y espiritualmente, el Señor Jesús ha roto los lazos espirituales más poderosos y nos ha hecho verdaderamente libres. El latón y el hierro se [consumen rápidamente] ante la llama del amor de Jesús. Las puertas del infierno no prevalecerán contra nosotros, ni los cerrojos del sepulcro nos detendrán”. (Spurgeon)
3. (17-22) Liberación para los enfermos y cercanos a la muerte.
Fueron afligidos los insensatos, a causa del camino de su rebelión
Y a causa de sus maldades;
Su alma abominó todo alimento,
Y llegaron hasta las puertas de la muerte.
Pero clamaron a Jehová en su angustia,
Y los libró de sus aflicciones.
Envió su palabra, y los sanó,
Y los libró de su ruina.
Alaben la misericordia de Jehová,
Y sus maravillas para con los hijos de los hombres;
Ofrezcan sacrificios de alabanza,
Y publiquen sus obras con júbilo.
a. Fueron afligidos los insensatos, a causa del camino de su rebelión y a causa de sus maldades: Cuando Dios reunificó a Su pueblo (versículos 2-3), tuvieron que venir a la Tierra Prometida de todas direcciones. Algunos vinieron de enfermedades y aflicciones, y Dios los rescató y redimió – aunque su problema se puede atribuir a su necedad, rebelión, e iniquidad.
i. A causa de sus maldades: “El verbo, así como sus frases complementarias, señalan que su problema es autoinfligido. En tal contexto, el versículo 18 bien podría recordar en los tiempos modernos al drogadicto, pero solo como un ejemplo de la determinación perenne del hombre de salir lastimado”. (Kidner)
ii. “El pecado está en el fondo de todo dolor, pero algunos dolores son el resultado inmediato de la maldad; los hombres por un curso de transgresión se afligen a sí mismos y son necios por sus dolores”. (Spurgeon)
b. Llegaron hasta las puertas de la muerte: El salmista describe a los que estaban muy enfermos y cerca de la muerte. Ellos no tenían apetito (su alma abominó todo alimento) y se consumían.
i. “Su ‘aflicción’ es una enfermedad mortal, cuando la comida y el placer ya no son relevantes. Ellos ‘abominan’ su ‘alimento’, ya que sienten que la muerte está cerca”. (VanGemeren)
ii. Por analogía espiritual, cuando un alma enferma no tiene apetito por la leche o la carne de la palabra de Dios, muestra que la muerte espiritual está cerca.
iii. “Podemos orar por nuestros dolores y debilidades corporales, y también podemos buscar respuestas. Cuando no tenemos apetito por la carne, podemos tener apetito por la oración”. (Spurgeon)
c. Pero clamaron a Jehová en su angustia: Esta frase se repite nuevamente (antes en los versículos 6 y 13). Incluso cuando el pueblo de Dios está en problemas debido a su propia maldad, Dios responde cuando claman a Él.
d. Envió sus palabras y los sanó: Ellos fueron sanados por el poder de la palabra de Dios, recordándonos las muchas veces que Jesús sanó a las personas simplemente con decir una palabra. Estos enfermos y afligidos fueron librados de su ruina por la poderosa palabra de Dios.
i. “Cuando George Wishart llegó a Dundee, donde la plaga estaba arrasando [1545], hizo que se hiciera un indicio de que predicaría; y para ese propósito eligió su posición en la cabecera de la puerta este, las personas que estaban infectadas afuera y las que estaban sanas adentro. Su texto fue el Salmo 107:20, ‘Envió sus palabras y los sanó’, etc., en el que se refirió al beneficio y el consuelo de la palabra de Dios, el castigo que viene por despreciarla, la disposición de la misericordia de Dios a los que verdaderamente se vuelven a él, y la felicidad de aquellos a quienes Dios libra de esta miseria, etc. Con este sermón levantó tanto el corazón de los que le oyeron, que no consideraron la muerte, sino que juzgaron más felices a los que debían partir, en lugar de a los que debían quedarse atrás, considerando que no sabían si debían tener tal consolador con ellos”. (Samuel Clarke, citado en Spurgeon)
ii. “Todo lo que Dios tiene que hacer para salvarnos es enviarnos su palabra. Lo ha hecho enviando a su amado Hijo, que es el Verbo encarnado. Nos envía la palabra en forma de las Sagradas Escrituras; nos envía la palabra en la predicación de sus siervos; pero lo que más queremos es que esa palabra sea enviada a casa por el poder del Espíritu Santo”. (Spurgeon)
e. Alaben la misericordia de Jehová, y sus maravillas para con los hijos de los hombres: Una vez más, el salmista anima a todos los hombres a dar gracias a Dios por su liberación.
4. (23-32) Liberación para los que están en mares peligrosos.
Los que descienden al mar en naves,
Y hacen negocio en las muchas aguas,
Ellos han visto las obras de Jehová,
Y sus maravillas en las profundidades.
Porque habló, e hizo levantar un viento tempestuoso,
Que encrespa sus ondas.
Suben a los cielos, descienden a los abismos;
Sus almas se derriten con el mal.
Tiemblan y titubean como ebrios,
Y toda su ciencia es inútil.
Entonces claman a Jehová en su angustia,
Y los libra de sus aflicciones.
Cambia la tempestad en sosiego,
Y se apaciguan sus ondas.
Luego se alegran, porque se apaciguaron;
Y así los guía al puerto que deseaban.
Alaben la misericordia de Jehová,
Y sus maravillas para con los hijos de los hombres.
Exáltenlo en la congregación del pueblo,
Y en la reunión de ancianos lo alaben.
a. Los que descienden al mar en naves: Cuando Dios reunificó a Su pueblo (versículos 2-3), tuvieron que venir a la Tierra Prometida desde todas direcciones. Algunos llegaron desde el mar en naves.
b. Ellos han visto las obras de Jehová y sus maravillas en las profundidades: En los mares, los cautivos que regresan ven la grandeza de Dios. También ven las grandes tormentas que encrespan sus ondas que suben hasta los cielos y después descienden hasta los abismos. No es de extrañarse que las almas de los desafortunados viajeros en el mar tempestuoso se derriten con el mal.
i. “He estado en el mar durante la tormenta, y en las circunstancias que describo; y, habiendo clamado al Señor en mi angustia, me reservo para describir la tormenta y contar la historia de su misericordia. Nadie más que un hombre inspirado por Dios, al describir, mostrará las cosas como son, o uno que haya estado realmente en estas circunstancias, puede decirte con qué propiedad habla el salmista, o expresar la milésima parte de los peligros y ¡Temibles aprensiones de los involucrados en una tempestad en el mar, donde todos los vientos del cielo parecen reunidos para empujar a un barco ya loco entre las rocas más tremendas a la costa de sotavento! ¡Dios salve al lector de tales circunstancias!”. (Clarke)
ii. Tiemblan y titubean como ebrios: “El movimiento violento de la embarcación les impide mantener las piernas, y sus miedos les hacen perder todo el poder para usar su cerebro, y por lo tanto parecen hombres ebrios”. (Spurgeon)
iii. Y toda su ciencia es inútil: “Todas sus habilidades de navegación son ineficaces, por lo que se vuelven desesperados (‘y toda su ciencia es inútil’, literalmente, ‘toda su sabiduría es tragada’)”. (VanGemeren)
iv. Escribiendo en el siglo XVII, Trapp describió estas misericordias y maravillas: “… en monstruos marinos, como ballenas y remolinos, y cambios repentinos de clima, y cosas por el estilo, no pocos; reflujos y flujos, perlas, islas, etc. Estas son solo maravillas, y pueden convencer completamente al ateo más obstinado que exista”.
c. Entonces claman a Jehová en su angustia: Una vez más, el salmista describe cómo el pueblo clama a Jehová, y los libra de sus aflicciones.
i. “No podemos dejar de reflexionar, que hay un barco en el que estamos todos embarcados; hay un mar revuelto en el que todos navegamos; hay tormentas que a menudo nos sobrepasan a todos; y hay un puerto en el que todos deseamos contemplar y entrar”. (Horne)
d. Cambia la tempestad en sosiego y se apaciguan sus ondas: Dios hace lo que solo Dios puede hacer – calmar el mar tempestuoso con Su mandato. Esto nos recuerda una vez más lo que hizo Jesús para calmar el tormentoso mar de Galilea con su propia palabra y voluntad.
i. Por salvaje que sea, el mar obedece al mandato de Dios. Trapp observó que si nosotros “… no somos pacificados cuando el Señor nos diga: ‘Estad quietos’; cada gota de agua en el mar será testigo de nuestra monstruosa rebelión y desobediencia
e. Luego se alegran, porque se apaciguaron: Por cuarta y última vez, el salmista anima a todos los hombres a dar gracias a Dios por su liberación. Esta vez se anima al pueblo de Dios a exaltarlo en la congregación del pueblo y a alabarlo entre el pueblo de Dios.
i. En la reunión de ancianos: “No se avergüencen ni tengan miedo de hablar de las maravillas y alabanzas de Dios ante el más grande de los hombres”. (Poole)
C. La bondad de Dios vista en sus transformaciones.
1. (33-38) La obra de Dios en la transformación de la tierra.
El convierte los ríos en desierto,
Y los manantiales de las aguas en sequedales;
La tierra fructífera en estéril,
Por la maldad de los que la habitan.
Vuelve el desierto en estanques de aguas,
Y la tierra seca en manantiales.
Allí establece a los hambrientos,
Y fundan ciudad en donde vivir.
Siembran campos, y plantan viñas,
Y rinden abundante fruto.
Los bendice, y se multiplican en gran manera;
Y no disminuye su ganado.
a. El convierte los ríos en desierto: El Dios que tiene autoridad sobre los mares tormentosos también puede transformar la creación misma. La transformación puede ser de buena a mala (la tierra fructífera en estéril) si la meta es el juicio por la maldad de los que la habitan.
i. “La llanura del Jordán, que, antes del derrocamiento de Sodoma y Gomorra, estaba bien regada por todas partes, ‘como el huerto de Jehová’, Génesis 13:10, ha sido, desde ese derrocamiento, una tierra de sal y azufre, y perpetua esterilidad”. (Horne)
ii. Charles Spurgeon escribió en el siglo XIX, antes de que Israel se reuniera nuevamente como nación en su tierra: “Esto se ha hecho en muchos casos, y notablemente en el caso del propio país del salmista, que una vez fue la gloria de todas las tierras y es ahora casi un desierto”. (Spurgeon)
b. Vuelve el desierto en estanques de aguas: El poder de Dios para transformar también puede usarse para transformar de malo a bueno. El desierto puede ser convertido en estanques de agua, en lugares de fecundidad y civilización.
i. “El himno de alabanza atribuye al Señor el poder de cambiar las cosas. Su autoridad es ilimitada… ¡Puede revertir la condición de cualquier cosa y, por lo tanto, la forma de vida de todos!”. (VanGemeren)
c. Los bendice, y se multiplican en gran manera: El salmista confiaba en Dios no solo para la reunificación del pueblo de Dios del cautiverio, sino para Su bendición y buena transformación de la tierra cuando regresaran a ella. Tenía que ser la bendición de Dios continuamente.
i. “Las cosas que parecen contradictorias se ven como evidencias de coherencia. Jehová convierte los lugares fértiles en un desierto; Convierte el desierto en un lugar fértil… Él bendice y multiplica a un pueblo”. (Morgan)
2. (39-42) La obra de Dios al transformar a los menoscabados y abatidos.
Luego son menoscabados y abatidos
A causa de tiranía, de males y congojas.
El esparce menosprecio sobre los príncipes,
Y les hace andar perdidos, vagabundos y sin camino.
Levanta de la miseria al pobre,
Y hace multiplicar las familias como rebaños de ovejas.
Véanlo los rectos, y alégrense,
Y todos los malos cierren su boca.
a. El esparce menosprecio sobre los príncipes: De la misma manera que Dios puede convertir un río en un desierto seco, puede tomar a los príncipes de este mundo y humillarlos, haciéndolos vagabundos y sin camino. Esto es especialmente cierto en el caso de los gobernantes que someten al pueblo de Dios a menosprecio, tiranía, y congojas.
b. Levanta de la miseria al pobre: De la misma manera que Dios puede convertir un desierto en estanques de agua, también puede levantar al pobre, alejándolo de la miseria y haciendo a sus familias como rebaños de ovejas.
i. “La sección final refleja de una manera distante y firme las obras soberanas de Dios mediante las cuales su pueblo a veces es elevado y otras veces humillado”. (Boice)
c. Véanlo los rectos, y alégrense: Los justos de Dios se alegran de que Él sepa humillar a los soberbios y opresores, y de que sepa levantar a los pobres y afligidos. Cuando los juicios de Dios operan de esta manera, la gente se da cuenta y todos los malos cierran su boca.
i. Y todos los malos cierren su boca: Como dice Job 5:16, Y la iniquidad cerrará su boca. Será un día maravilloso cuando la iniquidad y la injusticia callen.
3. (43) Conclusión: sabiduría y entendimiento.
¿Quién es sabio y guardará estas cosas,
Y entenderá las misericordias de Jehová?
a. Quién es sabio y guardará estas cosas: El salmista nos invita a ver la forma en que Dios obra en el mundo, tanto en cómo responde a los que claman a Él como en Su capacidad para humillar y elevar. La sabiduría nos dice que prestemos atención.
i. “Es a sí mismo lo que el lector debe reconocer en la cuádruple imagen de la difícil situación y la salvación, y es la firmeza de Dios lo que ahora debe alabar con una nueva perspectiva”. (Kidner)
ii. “Es un gran cántico de la misericordia de Dios. Que su mensaje sea escuchado, y entonces, clamaremos a Dios en nuestra angustia, y al encontrar liberación a través de su bondad, le daremos gracias y lo alabaremos”. (Morgan)
iii. “La conclusión de este salmo transforma el himno de acción de gracias y alabanza en un salmo de sabiduría. Los justos se volverán sabios al estudiar los actos del Señor en los asuntos del hombre”. (VanGemeren)
b. Y entenderá las misericordias de Jehová: Entendemos el hesed (misericordia, amor leal, amor de pacto) de Dios por las declaraciones y promesas de Su palabra. Pero también lo entendemos por cómo actúa entre los hombres y en la historia, si tenemos la sabiduría para verlo. Con esta sabiduría, entenderemos las misericordias de Jehová.
i. Y entenderá: “‘A los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien’; y cuanto más lo amen, más claramente lo verán, y más felices se sentirán, que así es. ¿Cómo puede un hombre contemplar el doloroso enigma del mundo y mantener la cordura sin esa fe? El que la tiene por su fe, la tendrá por su experiencia”. (Maclaren)
©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com