2 Corintios 6 – El resumen de Pablo

A. La seriedad y el carácter del ministerio de Pablo

1. (1-2) La responsabilidad de la gran oferta de Dios

Así, pues, nosotros, como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios. Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.

a. Como colaboradores suyos: Pablo se ve a sí mismo como un colaborador de Cristo Jesús. Ellos son compañeros, Jesús ha dado «el ministerio de la reconciliación» (2 Corintios 5:18). Y ya que Pablo está entre los «embajadores en nombre de Cristo» (2 Corintios 5:20), él trabaja con Jesús.

i. ¡Qué trabajo tan sorprendente!: ¡Colaboradores suyos! No es que Dios necesitara de Pablo, o de cualquiera de nosotros. Pero Dios quiere que nosotros seamos colaboradores suyos para nuestro bien. Es como el niño pequeño, quien sigue a su papá con su podadora de juguete mientras poda el pasto. Por el bien de la eficiencia, le debiera de decir el papá al hijo que se quite, solamente porque está en el camino. ¡Pero le hace bien al hijo que trabaje con el papá! Y debido a que el papá ama a su hijo, quiere que sea colaborador suyo.

ii. La palabra «colaboradores» es en sí misma importante. Hay algo bueno y significativo en el trabajo, tanto es así que Dios quiere que seamos colaboradores suyos. Lo mejor de Dios para nuestra vida jamás es un estado de facilidad, confort e inactividad indulgente —aun si hiciéramos todas esas cosas como colaboradores suyos. Dios quiere que seamos colaboradores suyos, no que estemos pasivos y adictos solo a observar y no a actuar.

iii. Somos colaboradores suyos. Pablo nunca dijo que Dios colabora junto con nosotros. No es nuestro trabajo, en el cual Dios nos ayuda. Es su obra, en la cual Él nos pide que seamos sus colaboradores. En lugar de intentar que Dios nos ayude con nuestro trabajo, necesitamos averiguar cuál es la obra de Dios, y trabajar junto con Él.

iv. La ilustración de «embajadores en nombre de Cristo» (2 Corintios 5:20), nos ayuda especialmente a entender la naturaleza de ser colaboradores suyos. Un embajador puede ser correctamente descrito como el que trabaja en conjunto con su rey. Pero, el embajador mismo no tiene poder o autoridad u orden del día propios, todo está ligado a su rey. El rey delega poder y autoridad y revela sus órdenes al embajador, y luego el rey espera que el embajador cumpla estas órdenes.

b. Os exhortamos también: Pablo nos dijo que Dios estaba rogando por medio del ministerio de los apóstoles (2 Corintios 5:20). Ahora Pablo también exhortará a los corintios cristianos. El exhortar es «rogar», y Pablo no tiene orgullo para rogar sin tardanza.

c. A que no recibáis en vano la gracia de Dios: Los corintios cristianos habían recibido la gracia de Dios. No serían cristianos si no hubieran recibido la gracia de Dios. Pero habiéndola recibido, eran culpables potenciales de haber recibido la gracia de Dios en vano, así que Pablo les exhorta a que no hagan eso.

i. ¿Qué significa el recibir la gracia de Dios en vano? Significa recibir la bondad y el favor de Dios, pero estorbar la obra de la gracia en la vida de uno. Significa recibir el favor de Dios y fracasar en lo que Pablo dijo en 1 Corintios 15:10: «Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo».

ii. De acuerdo con 1 Corintios 15:10, si Pablo no hubiera trabajado tan duro como lo hizo, aún la gracia de Dios le hubiera sido dada, pero en alguna medida hubiera sido dada en vano. La gracia, por definición, es dada libremente, pero el cómo recibimos la gracia ayudará a determinar qué tan efectivo es el don de la gracia. El término «gracia» es «utilizado frecuentemente por Pablo para expresar los favores y privilegios ofrecidos a los miembros de la iglesia de Cristo; no para referirse a una gracia limitada dada en momentos especiales (como la salvación) […]. Es ofrecida, independientemente de la fe y obediencia del hombre, pero no tendrá ganancia sin estas». (Bernard)

iii. La gracia no es dada debido a ninguna obra, ya sea pasada, presente o futura; es dada para animar a hacer la obra, y no por la obra en sí misma. Dios no quiere que recibamos su gracia y seamos pasivos. Pablo sabía que Dios da su gracia, nosotros trabajamos duro, y la obra de Dios está hecha.

iv. Muchos cristianos batallan en este punto. ¿Se supone que Dios lo tiene que hacer, o yo lo debo de hacer? La respuesta es: «¡Sí! Dios lo hace, y nosotros también lo hacemos». Confía en Dios, espera en Él, ¡y luego ponte a trabajar tan duro como puedas! Así es como vemos la obra de Dios completada. Si yo descuido mi parte en la colaboración, la gracia de Dios no cumple todo su propósito y, por lo tanto, es dada en vano.

v. «La gracia de Dios siempre está viniendo a mi corazón y a mi vida a través de experiencias muy maravillosas y bendecidas en el día de hoy. La gracia de ayer es totalmente inadecuada para las cargas de hoy, y si no aprendo a tomar los recursos celestiales cada día de mi vida, tanto para las cosas pequeñas como para las cosas grandes, como cristiano, pronto me viciaré, seré estéril y sin frutos para el servicio del Señor». (Redpath)

d. Ahora el tiempo aceptable […] ahora el día de salvación: Al citar y aplicar Isaías 49:8, Pablo quiere dar a los corintios cristianos un sentido de urgencia. Dios tiene un tiempo aceptable para que nosotros trabajemos. Dios tiene un día de salvación, el cual no durará por siempre. Este no es el tiempo para que los cristianos estén llenos de facilidad y confort, y enfocados en sí mismos. Es el tiempo para trabajar para el Señor y para ser colaboradores suyos.

2. (3) ¿Cómo afecta esta responsabilidad a Pablo? En su pasión por ser irreprochable como siervo del evangelio

No damos a nadie ninguna ocasión de tropiezo, para que nuestro ministerio no sea vituperado;

a. No damos a nadie ninguna ocasión de tropiezo: Pablo estaba dispuesto a hacer casi de todo para asegurarse de que a nadie diera ninguna ocasión de tropiezo. Estaba dispuesto a renunciar a su salario como ministro del evangelio (1 Corintios 9:3-15). Estaba dispuesto a permitir que otros fueran más prominentes. Estaba dispuesto a trabajar duro para soportar las luchas. Pablo no tenía miedo de ofender a nadie por causa del evangelio de Cristo Jesús (1 Corintios 1:18-25), pero no permitiría que su estilo de ministerio ofendiera a nadie.

b. Para que nuestro ministerio no sea vituperado: Por supuesto, el ministerio de Pablo era vituperado y desacreditado por los corintios cristianos. Lo que Pablo quiere decir es que nuestro ministerio no es correctamente vituperado. Pablo no podía hacer nada acerca de las falsas acusaciones, excepto el vivir en tal manera que cualquier persona imparcial pudiera ver que tales acusaciones eran falsas.

3. (4-10) Las credenciales de Pablo como un ministro sin culpa

[…] antes bien, nos recomendamos en todo como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias; en azotes, en cárceles, en tumultos, en trabajos, en desvelos, en ayunos; en pureza, en ciencia, en longanimidad, en bondad, en el Espíritu Santo, en amor sincero, en palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra y a siniestra; por honra y por deshonra, por mala fama y por buena fama; como engañadores, pero veraces; como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, mas he aquí vivimos; como castigados, mas no muertos; como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, mas poseyéndolo todo.

a. Nos recomendamos en todo: Pablo volverá a hacer un resumen de su currículum a los corintios cristianos. Aquí están las cosas que enunciará para recomendarse a sí mismo delante de ellos.

b. En mucha paciencia: La primera aptitud de Pablo era la paciencia. La antigua palabra griega utilizada aquí es hupomone, la cual tiene la idea de «soportar» en lugar de «esperar».

i. Muy seguido pensamos que la paciencia se refiere a la pasividad, que es la habilidad de sentarse y esperar a que algo suceda. Pero esa no es la idea de la palabra que Pablo utiliza aquí. La idea expresada por Pablo es poder «soportar activamente» en lugar de «esperar pasivamente». La antigua palabra griega hupomone «no describe la disposición del ánimo de sentarse con los brazos cruzados y permitir que el torrente de problemas sean barridos por medio de la resignación pasiva. Describe la habilidad de soportar las cosas de una manera tan triunfante que las transfigura». (Barclay)

c. Tribulaciones, necesidades y angustias: En el recuento de Pablo como un apóstol, embajador, y colaborador de Jesús, pone después de la paciencia el motivo por el que él tiene la necesidad de soportar. Fundamentalmente, era por las tribulaciones generales y pruebas de la vida. Pablo estaba muy a menudo estresado y bajo presión (esta idea está detrás de la palabra tribulaciones), a menudo en necesidad, y a menudo en angustias.

i. «Angustias significa, propiamente, un hombre que está siendo restringido, o apretado en un lugar, para que aprenda a no mantenerse a sí mismo; y, metafóricamente, es una necesidad de consejo, al no saber qué hacer, o hacia qué lugar voltear». (Poole)

d. Azotes, cárceles,y tumultos: Mientras Pablo continúa con su recuento, escribe de los padecimientos que son «infligidos directamente por el hombre». Azotes eran las heridas en la espalda después de ser latigueado, cárceles se refiere al tiempo frecuente que Pablo permaneció en prisión, y los tumultos hablan de la violencia de cualquier multitud enardecida.

i. «Hoy día no es la violencia, sino la burla o el desprecio de la multitud en contra de la cual el cristiano debe estar firme». (Barclay)

e. Trabajos, desvelos, y ayunos: Pablo continúa su resumen al describir los «sufrimientos infligidos por él mismo». Nadie le hacía que trabajara tan duro, que se mantuviera tantas noches en desvelo, o que estuviera sin comer tan seguido. Estos eran padecimientos reales, pero padecimientos que Pablo eligió voluntariamente como colaborador de Cristo Jesús. Pablo no se estaba quejando de estos padecimientos, porque eran infligidos por él mismo; los menciona por ser relevantes para mostrar su necesidad de paciencia.

i. Pablo sabía que necesitaba paciencia y sabía que muchas cosas en su vida lo impulsaban a buscar paciencia. Algunas de ellas eran las pruebas comunes de la vida, otras eran padecimientos traídos directamente por agentes externos, y algunas eran infligidas por él mismo. Ninguna prueba era la misma, pero todas hacían que necesitara paciencia.

f. En pureza, en ciencia, en longanimidad, en bondad, en el Espíritu Santo, en amor sincero, en palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra y a siniestra: Aquí Pablo empieza a describir los recursos de los que se apropió para triunfar sobre la adversidad. Si él honestamente enumeraba sus pruebas, también honestamente podía enumerar los frutos del Espíritu y el poder de Dios en su vida.

i. Sí, Pablo tenía las pruebas de 2 Corintios 6:4-5 en una medida más grande que la mayoría de los hombres. Pero él también tenía las bendiciones de 2 Corintios 6:6-7 en una medida más grande que la mayoría de los hombres.

ii. La idea de a diestra y a siniestra es la de tomar las armas ofensivas y defensivas. Probablemente, Pablo quiere transmitir la idea de «ir avanzando mientras es atacado». «En particular, el escudo y la espada; el primero, en el brazo izquierdo; el último, en la mano derecha. Tenemos la doctrina de la verdad, y el poder de Dios, como una armadura que nos protege por todos lados, en cualquier parte, y en todas las ocasiones». (Clarke)

g. Por honra y por deshonra, por mala fama y por buena fama; como engañadores, pero veraces; como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, mas he aquí vivimos; como castigados, mas no muertos; como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, mas poseyéndolo todo: Al concluir su resumen, Pablo enumerará sus referencias, describiendo tanto lo que el mundo pensaba de él como lo que Dios pensaba de él.

i. El mundo (incluyendo a los corintios cristianos carnales) describió a Pablo con palabras como: deshonra […] mala fama […] engañadores […] desconocidos […] moribundos […] castigados […] entristecidos […] pobres […] no teniendo nada.

ii. Por el contrario, en su referencia, Dios describió a Pablo con palabras como: honor […] buena fama […] veraces […] bien conocidos […] he aquí vivimos […] no muertos […] siempre gozosos […] enriqueciendo a muchos […] poseyéndolo todo.

iii. ¿Cuál descripción era verdad, la del mundo, o la de Dios? La Palabra de Dios en 2 Corintios 4:18 nos da la respuesta. De acuerdo con las cosas que se ven, la estimación del mundo era la correcta. De acuerdo con las cosas que no se ven, la estimación de Dios era la correcta. ¿Cuál estimación es más importante para ti?

B. Pablo les habla a los corintios como un padre

1. (11-13) El deseo de Pablo de reconciliarse

Nuestra boca se ha abierto a vosotros, oh corintios; nuestro corazón se ha ensanchado. No estáis estrechos en nosotros, pero sí sois estrechos en vuestro propio corazón. Pues, para corresponder del mismo modo (como a hijos hablo), ensanchaos también vosotros.

a. Oh corintios: Pablo ha pasado el tiempo suficiente exponiendo los principios. Ahora hace una apelación a los corintios cristianos. Podemos percibir la profundidad y pasión de su corazón cuando exclama: «¡Oh corintios!».

b. Nuestra boca se ha abierto a vosotros […] nuestro corazón se ha ensanchado: Pablo está practicando lo que predicó en Efesios 4:15: «siguiendo la verdad en amor». Él genuinamente amaba a los corintios con un corazón abierto, y les habla abiertamente.

c. No estáis estrechos en nosotros, pero sí sois estrechos en vuestro propio corazón: Los corintios cristianos tomaron el rol de la «víctima» delante de Pablo. Y por necesidad piadosa él fue firme con ellos en las ocasiones previas (1 Corintios 4:18-21, 2 Corintios 1:23). Ahora ellos, probablemente, decían que estaban estrechos por el «dolor» que Pablo les causó. Ellos, seguramente, dijeron: «Nos gustaría reconciliarnos contigo, Pablo, pero el dolor que nos causaste nos impide hacerlo. Simplemente, no podemos superarlo».

i. Pero el problema real era que los corintios cristianos estaban estrechos [en su] propio corazón. No era que Pablo no los amara lo suficiente (el cual era su reclamo como «víctimas»). ¡Era que ellos amaban demasiadas cosas! Su propio corazón les ponía restricciones.

ii. ¿Qué es lo que amaban tanto? Primero, amaban mucho al mundo, y Pablo lidiaría con ese amor en los versículos siguientes. Ellos también se amaban demasiado a sí mismos, para tratar de lidiar realmente con sus actitudes egoístas y carnales hacia Pablo.

d. Ensanchaos también vosotros: Pablo quería ver en los corintios cristianos la misma autobúsqueda honesta que él les había demostrado. Ellos debían hacer esto para poder ser reconciliados. La grieta entre Pablo y la iglesia de los corintios podía ser sanada, pero estaba en manos de los corintios cristianos hacerlo. Ellos también debían de ser abiertos.

2. (14-18) Pablo les dice que estrechen su amor

No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo. Por lo cual, Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, Y no toquéis lo inmundo; Y yo os recibiré, Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso.

a. No os unáis en yugo desigual con los incrédulos: Pablo está hablando del afecto demasiado amplio de los corintios cristianos. Ellos se habían unido con los incrédulos, y esto impedía su reconciliación con Pablo.

i. La idea de «no os unáis en yugo desigual»está basada en Deuteronomio 22:9, en donde se prohibía unir con yugo a dos animales distintos. Habla de dos cosas que se unen que no debieran de estar unidas.

ii. ¿En qué sentido los corintios cristianos se unieron en yugo desigual con los incrédulos? ¿Cómo podemos hacer esto? Ciertamente, al casarnos con un incrédulo, es este el principio de aplicación más común de este pasaje. «Un hombre muy sabio y santo dio su juicio acerca de este punto: ‟Un hombre que realmente es piadoso, si se casa con una mujer que no se ha convertido, o se alejará hacia la perdición, o tendrá una cruz de por vida”. Lo mismo se puede decir de una mujer piadosa que se casa con un hombre que no se ha convertido. Tales personas no pueden decir la petición de la oración del Señor: ‟No nos metas en tentación”. Ellos se desploman por su propia cuenta». (Clarke)

iii. Sin embargo, Pablo quiere decir aquí mucho más que solamente casarse con un incrédulo. En realidad, este pasaje se aplica a cualquier ambiente en donde dejamos que el mundo influya en nuestra mente. Cuando estamos siendo conformados a este mundo, y no estamos siendo transformados por medio de la renovación de vuestro entendimiento (Romanos 12:2), entonces nos unimos con los incrédulos de una manera impía.

iv. Esto habla especialmente del asunto de la «influencia». Pablo no está sugiriendo que los cristianos jamás se deban de asociar con los incrédulos (él pone esto en claro en 1 Corintios 5:9-13). El principio es que nosotros debemos estar en el mundo, pero no somos del mundo; de la misma manera que un barco debe estar en el agua, pero el agua no debe de entrar en el barco. Si el mundo nos está influenciando, entonces está claro que estamos unidos en yugo desigual con los incrédulos. Y este yugo desigual, o influencia impía, puede venir por medio de un libro, una película, un programa de televisión, una revista, o aun por medio de amigos cristianos carnales. La mayoría de los cristianos son bastante permisivos sobre las cosas que permiten que influencien sus mentes y vidas.

v. A todos nos gusta pensar que podemos estar alrededor de las cosas impías tanto como queramos, y que somos lo suficientemente fuertes para defendernos contra su influencia. Pero debemos de tomar en serio las palabras de la Escritura: «No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres» (1 Corintios 15:33). Debemos de regresar a la sencilla pregunta de Romanos 12:2: ¿Estás siendo conformado a este siglo, o estás siendo transformado por medio de la renovación de tu entendimiento?

vi. Los corintios cristianos pensaban como las personas del mundo, no como personas piadosas. Ellos se ganaron esta forma de ver la vida —o al menos permanecieron en ella— debido a sus asociaciones impías. Pablo les dice que rompan esos yugos de compañerismo con lo impío.

b. ¿Qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? Los corintios cristianos eran muy afectuosos y demasiado cariñosos, en el sentido que pensaban que era «aceptable» mezclar la justicia con la injusticia, las tinieblas con la luz, y admitir a Belial junto con Cristo.

i. Belial es una palabra tomada del hebreo y significa «inutilidad o iniquidad». Aquí se utiliza para hacer referencia a Satanás. «El término es utilizado únicamente en esta parte del Nuevo Testamento, pero muy a menudo en el Antiguo Testamento, para describir a hombres que son notoriamente inicuos y escandalosos». (Poole)

c. ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? Al utilizar el término de comunión, Pablo indica que él en realidad habla de la «influencia» más que de la «presencia». «Se dice que los grupos están en comunión cuando la unidad es tal que lo que le pertenece a uno le pertenece también a otro». (Hodge)

d. ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Aparentemente, los corintios cristianos aún batallaban con el problema de la idolatría a la cual Pablo se refirió en 1 Corintios 8-10. Su asociación con los ídolos influenciaba su modo de pensar, haciéndolos cada vez más mundanos.

e. Vosotros sois el templo del Dios viviente: En 1 Corintios 6:19-20, Pablo escribió sobre los cristianos individuales, como templos de Dios. Aquí, se refiere a la iglesia en su conjunto como el templo. Debido a que los templos son lugares sagrados, y que debieran de ser protegidos en contra de todo aquello que pueda profanar el lugar santo, nosotros debemos de proteger nuestro corazón y nuestra mente delante del Señor tanto como lo hacemos con los lugares santos.

i. Ezequiel 37:26-27 nos dice que Dios está en medio de su templo (Habitaré y andaré entre ellos) e Isaías 52:11 nos dice cómo debemos de hacer el templo un lugar santo (Salid de en medio de ellos, y apartaos […] no toquéis lo inmundo). La promesa de: «y yo os recibiré», nos recuerda que esto no es solamente una separación dela iniquidad, sino una separación para Dios. «No es una cuestión de simplemente tratar de vaciar tu corazón y tu vida de cualquier deseo mundano. Es abrir ampliamente tu corazón para todo el amor de Dios en Cristo, y dejar que ese te limpie y que ejercite su poder en ti hasta que tu corazón esté lleno de amor». (Redpath)

ii. Pablo cita a Jeremías 31:9 para mostrar el beneficio de separarse de la influencia del mundo: una relación más íntima con Dios (Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas). Siempre hay una promesa gloriosa para aquellos que están dispuestos a separarse de la influencia del mundo, por el bien de la santidad.

iii. Mientras Pablo cita estos pasajes, no está necesariamente citándolos palabra por palabra del hebreo o de la Septuaginta. Cuando Pablo cita las Escrituras, generalmente las parafrasea. «Una comparación de textos revela que él no se sintió atado a citar exactamente palabra por palabra, sino de acuerdo al sentido y con el propósito de aplicar y mostrar la relevancia de la revelación para las circunstancias de sus lectores». (Hughes)

f. Salid de en medio de ellos, y apartaos: Este llamado trata con el problema de «demasiado afecto», el cual Pablo mencionó en 2 Corintios 6:12. En realidad, podemos amar mucho, pensando que podemos solamente añadir el amor de Dios sin renunciar a las ideas de Satanás y de este mundo. Recuerde, que una de las semillas que fracasó en la parábola del sembrador tenía una tierra que era muy fértil. Podría haber crecido completamente.

g. Dice el Señor Todopoderoso: El título de Todopoderoso utiliza la antigua palabra griega pantokrater, que significa «aquel que tiene su mano en todo». En todo el Nuevo Testamento, la palabra es utilizada únicamente aquí y en el libro de Apocalipsis. Pablo quiere que entendamos que es el Dios soberano del cielo quien nos ofrece adopción como sus hijos, mientras nos separamos para Él.

i. El llamado a la pureza y la separación para Dios fluye de la oferta de reconciliación mencionada al final de 2 Corintios 5. «Un hombre no puede aceptar reconciliación con Dios y vivir en pecado, debido a que el renunciar al pecado está envuelto en la aceptación de la reconciliación. Pablo nunca asume que los hombres puedan aceptar un beneficio de la redención, y rechazar otro. Ellos no pueden tomar el perdón y rechazar la santificación». (Hodge)

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