Éxodo 38 – Más sobre la construcción del Tabernáculo
A. Artículos asociados con el atrio.
1. (1-7) El altar de las ofrendas quemadas (de acuerdo con el mandato y descripción de Éxodo 27:1-8).
Igualmente hizo de madera de acacia el altar del holocausto; su longitud de cinco codos, y su anchura de otros cinco codos, cuadrado, y de tres codos de altura. E hizo sus cuernos a sus cuatro esquinas, los cuales eran de la misma pieza, y lo cubrió de bronce. Hizo asimismo todos los utensilios del altar; calderos, tenazas, tazones, garfios y palas; todos sus utensilios los hizo de bronce. E hizo para el altar un enrejado de bronce de obra de rejilla, que puso por debajo de su cerco hasta la mitad del altar. También fundió cuatro anillos a los cuatro extremos del enrejado de bronce, para meter las varas. E hizo las varas de madera de acacia, y las cubrió de bronce. Y metió las varas por los anillos a los lados del altar, para llevarlo con ellas; hueco lo hizo, de tablas.
2. (8) La fuente de bronce (de acuerdo con el mandato y descripción de Éxodo 30:17-21).
También hizo la fuente de bronce y su base de bronce, de los espejos de las mujeres que velaban a la puerta del tabernáculo de reunión.
a. De los espejos de las mujeres que velaban: Éxodo 30:17-21 dio el mandato original de construir este recipiente para el agua del lavado ceremonial. Aquí solo se nos dice que el bronce usado para hacer la fuente provino, al menos en parte, de los espejos de metal pulido de algunas de las mujeres de Israel.
i. Es maravilloso pensar que estas mujeres renunciaron a su capacidad de medir su propia belleza física para hacer este depósito para el agua del lavado ceremonial. Por analogía, se puede decir que algunos están tan concentrados en mirarse a sí mismos que no miran a Jesús. Siempre es el momento de entregarle ese espejo a Jesús.
ii. Desde la perspectiva del Nuevo Testamento, se puede decir que los creyentes experimentaron el lavamiento del agua por la palabra (Efesios 5:26), y que la palabra de Dios es como un espejo (Santiago 1:22-25).
iii. “Era muy significativo que el bronce de estos espejos se empleara para construir esa fuente en la que los sacerdotes deben lavarse al acercarse al altar o al entrar al Tabernáculo. Es en la belleza de la santidad que los hombres deben adorar, y mediante la entrega de todo lo carnal”. (Morgan)
iv. “Que los que se ven a sí mismos con frecuencia en sus espejos sigan su consejo que dijo: ‘¿Eres hermoso? No seas como un templo egipcio, barniz por fuera y alimañas por dentro. ¿Eres inmundo? Deja que tu alma sea como una rica perla en una concha burda’”. (Trapp)
b. Las mujeres que velaban a la puerta del tabernáculo de reunión: Aparentemente, había un grupo de mujeres en Israel que servían a Dios reuniéndose regularmente para ayudar a los sacerdotes y la obra del tabernáculo.
i. “El verbo traducido como ministrar es raro e interesante, y solo se usa en otro lugar para las mujeres al servicio del santuario (1 Samuel 2:22). En realidad significa ‘organizados en bandas para la guerra’, pero se usa para el servicio levítico ordinario (Números 4:23, etc.)”. (Cole)
3. (9-20) El atrio con sus pilares y la cerca de lino (de acuerdo con el mandato y descripción de Éxodo 27:9-19).
Hizo asimismo el atrio; del lado sur, al mediodía, las cortinas del atrio eran de cien codos, de lino torcido. Sus columnas eran veinte, con sus veinte basas de bronce; los capiteles de las columnas y sus molduras, de plata. Y del lado norte cortinas de cien codos; sus columnas, veinte, con sus veinte basas de bronce; los capiteles de las columnas y sus molduras, de plata. Del lado del occidente, cortinas de cincuenta codos; sus columnas diez, y sus diez basas; los capiteles de las columnas y sus molduras, de plata. Del lado oriental, al este, cortinas de cincuenta codos; a un lado cortinas de quince codos, sus tres columnas y sus tres basas; al otro lado, de uno y otro lado de la puerta del atrio, cortinas de quince codos, con sus tres columnas y sus tres basas. Todas las cortinas del atrio alrededor eran de lino torcido. Las basas de las columnas eran de bronce; los capiteles de las columnas y sus molduras, de plata; asimismo las cubiertas de las cabezas de ellas, de plata; y todas las columnas del atrio tenían molduras de plata. La cortina de la entrada del atrio era de obra de recamador, de azul, púrpura, carmesí y lino torcido; era de veinte codos de longitud, y su anchura, o sea su altura, era de cinco codos, lo mismo que las cortinas del atrio. Sus columnas eran cuatro, con sus cuatro basas de bronce y sus capiteles de plata; y las cubiertas de los capiteles de ellas, y sus molduras, de plata. Todas las estacas del tabernáculo y del atrio alrededor eran de bronce.
B. Un inventario de los materiales para la construcción del Tabernáculo.
1. (21-23) Los líderes de la obra.
Éstas son las cuentas del tabernáculo, del tabernáculo del testimonio, las que se hicieron por orden de Moisés por obra de los levitas bajo la dirección de Itamar hijo del sacerdote Aarón. Y Bezaleel hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá, hizo todas las cosas que Jehová mandó a Moisés. Y con él estaba Aholiab hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan, artífice, diseñador y recamador en azul, púrpura, carmesí y lino fino.
a. Bajo la dirección de Itamar hijo del sacerdote Aarón: Este sacerdote llamado Itamar supervisó a los levitas que tenían la responsabilidad de administrar todos estos recursos. Ellos tenían un gran trabajo que hacer y parecían hacerlo bien.
b. Las que se hicieron por orden de Moisés: Según algunas estimaciones, el valor actual de los materiales usados en el tabernáculo daría un total de más de $ 13 millones (DeWitt). Su peso combinado sería de casi 19.000 libras (más de 9 toneladas o 8.500 kilogramos). Este era un proyecto importante que gestionar.
i. “El cálculo exacto enseña la necesidad de minuciosidad y precisión en todo lo relacionado con el dinero para el trabajo religioso”. (Thomas)
ii. Algunos se preguntan de dónde sacó Israel todos estos recursos en medio del desierto. Pero Éxodo 12:36 nos recuerda que los hijos de Israel salieron de Egipto con grandes recursos porque habían saqueado a los egipcios, quienes voluntariamente dieron a Israel lo que equivalía a salarios atrasados por sus años de esclavitud.
2. (24) El inventario del oro.
Todo el oro empleado en la obra, en toda la obra del santuario, el cual fue oro de la ofrenda, fue veintinueve talentos y setecientos treinta siclos, según el siclo del santuario.
a. Veintinueve talentos: Algunos estiman que un talento equivale a unas 70 libras (32 kilogramos). Esto significa que hubo algo así como 2,030 libras (920 kilogramos) de oro usados en el tabernáculo.
3. (25-28) El inventario de la plata.
Y la plata de los empadronados de la congregación fue cien talentos y mil setecientos setenta y cinco siclos, según el siclo del santuario; medio siclo por cabeza, según el siclo del santuario; a todos los que pasaron por el censo, de edad de veinte años arriba, que fueron seiscientos tres mil quinientos cincuenta. Hubo además cien talentos de plata para fundir las basas del santuario y las basas del velo; en cien basas, cien talentos, a talento por basa. Y de los mil setecientos setenta y cinco siclos hizo los capiteles de las columnas, y cubrió los capiteles de ellas, y las ciñó.
a. La plata de los empadronados: Éxodo 30:13-16 describe cómo los israelitas debían dar plata como parte de un censo, un recuento de la nación. Esto explica la gran cantidad de plata entregada.
4. (29-31) El inventario del bronce.
El bronce ofrendado fue setenta talentos y dos mil cuatrocientos siclos, del cual fueron hechas las basas de la puerta del tabernáculo de reunión, y el altar de bronce y su enrejado de bronce, y todos los utensilios del altar, las basas del atrio alrededor, las basas de la puerta del atrio, y todas las estacas del tabernáculo y todas las estacas del atrio alrededor.
©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com