A. La parábola del banquete de bodas.
1. (1-3) La primera invitación es rechazada.
Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo; y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas éstos no quisieron venir.
a. Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas: Jesús continuó explicando a los líderes religiosos y a las multitudes que escuchaban el peligro de rechazarlo.
b. Un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo: Una boda era (y a menudo es en la actualidad) el evento social más significativo en la vida de una persona. La boda de un príncipe, y una invitación normalmente serían apreciadas.
i. Esta parábola es similar en muchas formas a la que se encuentra en Lucas 14:15-24. Sin embargo las diferencias entre las dos parábolas son incluso más evidentes. “La mayoría de los predicadores usarían una buena historia más de una vez, y en formas diferentes para adecuarlas a diferentes contextos, y no hay improbabilidad en Jesús haciendo lo mismo.” (France)
c. Mas éstos no quisieron venir: Parece extraño que los invitados rechazaran una invitación a una boda real. Esto ilustra el principio de que no hay una razón lógica de que los buenos regalos de Dios sean rechazados.
2. (4-7) La segunda invitación es rechazada y el rey reacciona.
Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas. Mas ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios; y otros, tomando a los siervos, los afrentaron y los mataron. Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad.
a. Decid a los convidados: He aquí, he preparado: El rey insistió en hacer la invitación lo más atractiva posible. Realmente quería que esos invitados vinieran.
i. Barclay dice que cuando una gran evento se llevaba a cabo en la cultura Judía de aquel tiempo, la gente era invitada pero sin una fecha establecida. En el día apropiado, cuando el anfitrión estaba listo para recibir a los invitados, enviaban mensajeros para avisar que todo estaba listo y que era tiempo de venir al banquete.
ii. “Así que, entonces, el rey de la parábola había enviado sus invitaciones mucho tiempo atrás; pero no fue hasta que todo estuvo preparado que la convocatoria oficial era publicada – e insultantemente rechazada.” (Barclay)
iii. Todo está dispuesto es el mensaje del evangelio. Usted no viene al banquete de Dios y se prepara su propia comida. El ha dejado todo listo para usted, usted viene a recibir.
b. Mas ellos, sin hacer caso, se fueron: La reacción de los que fueron invitados no tenía sentido, pero si da una descripción precisa de la reacción de muchos al evangelio. Muchos no hicieron caso; otros regresaron a sus negocios.
i. “El rebelde parecía decir, ‘Dejen que el Rey haga lo que quiera con sus bueyes y sus lechones; yo voy a cuidar de mi granja, o atender mi mercancía.” (Spurgeon)
c. Se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas: El Rey con todo derecho trajo juicio sobre los infractores. No solo rechazaron su invitación, sino que asesinaron a sus mensajeros.
i. Esta era una profecía de lo que le sucedería a Jerusalén, la ciudad de cuyos líderes religiosos habían rechazado tan fuertemente a Jesús y su evangelio.
3. (8-10) La tercera invitación.
Entonces dijo a sus siervos: Las bodas a la verdad están preparadas; mas los que fueron convidados no eran dignos. Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis. Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos; y las bodas fueron llenas de convidados.
a. Llamad a las bodas a cuantos halléis: El rey estaba decidido a no tener un salón de banquetes vacío, así que les fue dada invitación todos los que escucharan.
b. Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos: Cuando las primeras y las segundas invitaciones fueron tan dramáticamente rechazadas, la tercera invitación fue hecha más abiertamente. Todos fueron invitados, fueran malos o buenos.
i. En este sentido, podemos decir que esta es una parábola sobre la gracia. Los que fueron invitados – y los que fueron – eran totalmente indignos de la invitación, mucho menos del banquete de bodas.
4. (11-14) El hombre que no estaba vestido de boda.
Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de boda. Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Mas él enmudeció. Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. Porque muchos son llamados, y pocos escogidos.
a. Y entró el rey para ver a los convidados: El rey cuidadosamente examinó a sus invitados para ver si todos vestían las prendas que por costumbre eran ofrecidas a los que asistían al banquete de bodas.
b. Un hombre que no estaba vestido de boda: El hombre sin vestido sobresalió por su diferencia. El vino vestido inapropiadamente y el rey se dio cuenta.
i. Hay un debate entre los comentaristas sobre si era costumbre que un rey o un noble ofrecieran a sus invitados una prenda para vestir en una ocasión tan especial. Parece haber habido alguna tradición de éstas entre los Griegos, pero no hay evidencia de la práctica en los días de Jesús.
ii. Aparte de quién suministró las prendas apropiadas, el hombre claramente estaba fuera de lugar. “¿Es oportuno ir a semejante banquete en tus peores ropas? En los abrigos de cuero, en trapos andrajosos y los sayos inmundos del desgraciado viejo Adán?” (Trapp)
iii. “Él vino porque fue invitado, pero solo vino en apariencia. El banquete fue hecho con la intención de honrar al hijo del Rey, pero este hombre no intención parecida; estaba dispuesto a comer las cosas buenas puestas delante de él, pero en su corazón no había amor ni por el rey ni por su bien amado hijo.” (Spurgeon)
iv. Mas él enmudeció: “Estaba amordazado o tenía puesto un ronzal, eso es, se mantuvo quieto, como si tuviera una brida o ronzal en su boca. Esta es la importación de la palabra Griega usada aquí.” (Trapp)
c. Echadle en las tinieblas de afuera: El hombre que hizo como quiso en el banquete de bodas, en vez de honrar al rey y conformarse a sus expectativas, sufrió un terrible destino.
i. “Él había, por sus acciones, si no por sus palabras, dicho, ‘Soy un hombre libre, haré lo que quiera.’ Así que el rey les dijo a sus siervos, ‘Átenlo.’ Amárrenlo, que nunca vuelva a ser libre. El había actuado demasiado libre con las cosas santas; había insultado activamente al Rey.” (Spurgeon)
ii. Esta parábola demuestra que los que son indiferentes al evangelio, los que antagonizan contra el evangelio, y los que no son cambiados por el evangelio comparten el mismo destino. Ninguno de ellos disfrutó del banquete del rey.
d. Porque muchos son llamados, y pocos escogidos: Esta declaración de Jesús, en este contexto, toca el gran trabajo que hacen juntas las decisiones del hombre y la elección de Dios. ¿Por qué ellos no fueron al banquete de bodas? Porque rechazaron la invitación. ¿Por qué no fueron al banquete de bodas? Porque fueron llamados pero no escogidos.
B. Pregunta de los Fariseos.
1. (15-17) Después de una halagadora introducción, los Fariseos le hacen a Jesús una problemática pregunta.
Entonces se fueron los fariseos y consultaron cómo sorprenderle en alguna palabra. Y le enviaron los discípulos de ellos con los herodianos, diciendo: Maestro, sabemos que eres amante de la verdad, y que enseñas con verdad el camino de Dios, y que no te cuidas de nadie, porque no miras la apariencia de los hombres. Dinos, pues, qué te parece: ¿Es lícito dar tributo a César, o no?
a. consultaron cómo sorprenderle en alguna palabra: Aquí los Fariseos y los Herodianos trabajaron juntos. Esto era evidencia de su gran odio hacia Jesús, porque estuvieron dispuestos a dejar de lado sus propias diferencias con tal de unirse contra Jesús.
i. Los herodianos: “El nombre de este partido probablemente se originó en una especie de adoración heroica para Herodes el Grande.” (Bruce)
ii. Jesús había estado acusando y exponiendo directamente a los líderes religiosos; ahora contraatacan. “Ahora vemos a los líderes judíos lanzando su contraataque; y lo hacen dirigiéndole a Jesús preguntas cuidadosamente formuladas.” (Barclay)
b. Sabemos que eres amante de la verdad, y que enseñas con verdad el camino de Dios, y que no te cuidas de nadie, porque no miras la apariencia de los hombres: Su conspiración los llevó a acercarse a Jesús con halagos. Ellos esperaban que él fuera inseguro o lo suficientemente necio como para impresionarse con sus vacías alabanzas.
i. “Aquí hay un guante justo, puesto sobre una mano repugnante.” (Trapp)
ii. “El cumplido, además de ser traicionero, era ofensivo, insinuando que Jesús era un simplón descuidado que se descubriría solo, y un hombre vano que podía ser halagado.” (Bruce)
c. ¿Es lícito dar tributo a César, o no? El dilema de Jesús con esta pregunta era simple. Si decía que los impuestos deberían ser pagados, podía ser acusado de negar la soberanía de Dios sobre Israel (volviéndose poco popular entre el pueblo Judío). Si decía que los impuestos no deberían ser pagados, se hacía a sí mismo enemigo de Roma.
i. “Lícito no se refiere a la ley Romana (¡No había pregunta sobre eso!), sino a la ley de Dios; ¿es lícito para el pueblo de Dios expresar lealtad al emperador pagano?” (France)
ii. Barclay afirma que había tres impuestos regulares. Estaba el impuesto del suelo, el cual era el 10% de impuesto de la producción de grano y 20 % de impuesto del aceite y el vino. Estaba el impuesto de la renta, el cual era el 1% de los ingresos de un hombre. Y estaba el impuesto al sufragio, pagado por todo hombre desde los 14 hasta los 65 años de edad y toda mujer desde los 12 hasta los 65 años de edad; este impuesto era de un denario al año.
iii. Este impuesto particular era el impuesto al sufragio. “Pagar el impuesto al sufragio era la señal más evidente de la sumisión a Roma… Los celotes afirmaban que el impuesto al sufragio era un emblema que deshonraba a Dios de esclavitud a los paganos.” (Carson)
2. (18-22) Jesús responde: dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios.
Pero Jesús, conociendo la malicia de ellos, les dijo: ¿Por qué me tentáis, hipócritas? Mostradme la moneda del tributo. Y ellos le presentaron un denario. Entonces les dijo: ¿De quién es esta imagen, y la inscripción? Le dijeron: De César. Y les dijo: Dad, pues, a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios. Oyendo esto, se maravillaron, y dejándole, se fueron.
a. ¿De quién es esta imagen, y la inscripción?: Una vez más, con su sabia respuesta, Jesús mostró que Él estaba completamente en control. Reprendió la perversidad y la hipocresía de los Fariseos y los Herodianos.
b. Dad, pues, a César lo que es de César: Jesús afirmó que el gobierno nos hace solicitudes legítimas. Somos responsables ante Dios en todas las cosas, pero debemos ser obedientes al gobierno en cuestiones civiles y nacionales.
i. Pedro lo dijo así: Temed a Dios. Honrad al rey. (1 Pedro 2:17)
ii. “Cada Cristiano tiene doble ciudadanía. El ciudadano del país en donde vive. A él debe muchas cosas. Debe la seguridad contra los hombres sin ley que solo un gobierno establecido puede ofrecer, debe todos los servicios públicos.” (Barclay)
iii. “La palabra utilizada por la Nueva versión King James es Render (N. del T.), la cual generalmente significa ‘regresar’ (mientras que el verbo que habían usado en el versículo 17 era simplemente ‘give’ o dar). Es el verbo usado para pagar una factura, o liquidar una deuda; ellos se lo deben.” (France)
c. Y a Dios lo que es de Dios: Todos tienen la imagen de Dios impresa sobre ellos. Esto significa que pertenecemos a Dios, no al César, ni siquiera a nosotros mismos.
i. “Al tratarlos como distintos Jesús dijo en efecto: El reino de Dios no es de este mundo, es posible ser un verdadero ciudadano del reino y aún así someterse tranquilamente al gobierno civil de un soberano extranjero.” (Bruce)
ii. “Establece límites, regula los derechos, y distingue la jurisdicción de los dos imperios del cielo y de la tierra. La imagen del príncipe acuñada en su moneda denota que las cosas temporales pertenecen todas a su gobierno. La imagen de Dios acuñada en el alma denota que todas sus facultades y poderes pertenecen al Altísimo, y deben ser empleadas en su servicio.” (Clarke)
iii. Si los Judíos hubieran entregado a Dios lo debido, nunca hubieran tenido que entregar nada a César. En los tiempos del Nuevo Testamento, nunca hubieran soportado la ocupación opresora del Imperio Romano si hubieran sido obedientes a su pacto con Dios.
C. Preguntas de los Saduceos.
1. (23-28) Los Saduceos intentan ridiculizar la idea de la resurrección.
Aquel día vinieron a él los saduceos, que dicen que no hay resurrección, y le preguntaron, diciendo: Maestro, Moisés dijo: Si alguno muriere sin hijos, su hermano se casará con su mujer, y levantará descendencia a su hermano. Hubo, pues, entre nosotros siete hermanos; el primero se casó, y murió; y no teniendo descendencia, dejó su mujer a su hermano. De la misma manera también el segundo, y el tercero, hasta el séptimo. Y después de todos murió también la mujer. En la resurrección, pues, ¿de cuál de los siete será ella mujer, ya que todos la tuvieron?
a. Los saduceos, que dicen que no hay resurrección: Los Saduceos eran una antigua versión de los teólogos liberales modernos. Estaban en contra de lo sobrenatural, solo aceptando los primeros cinco libros de Moisés como auténticos – e ignorando lo que fue escrito en esos libros cuando les apetecía hacerlo.
i. “Los Saduceos no eran muchos en número; pero eran los ricos, los aristócratas, y la clase gobernante.” (Barclay)
ii. “En el tiempo de Jesús el Judaísmo como un todo mantenía diversos sorprendentes puntos de vista de la muerte y lo que había después de ella.” (Carson)
b. Hubo, pues, entre nosotros siete hermanos: Los Saduceos le hicieron a Jesús una pregunta hipotética – y ridícula -, esperando demostrar que la idea de la resurrección era una tontería. Según Deuteronomio 25:5-10, si un hombre casado moría sin hijos, era responsabilidad de su hermano fecundar a su viuda y entonces contar al hijo como descendiente del esposo fallecido. Los Fariseos imaginaron circunstancias elaboradas junto con estas líneas y plantearon la pregunta “En la resurrección, pues, ¿de cuál de los siete será ella mujer“
i. Esta práctica de que el cuñado se casara con la viuda de su hermano es conocida como Levirato. El término viene del latín “lavir,” que significa “cuñado.” Ésta es la idea específica en la pregunta. “Casar no es la palabra Griega normal, sino un término técnico para el desempeño de la responsabilidad del Levirato.” (France)
ii. “Probablemente, esta era una de las historias de las que tenían el hábito de contar para poder dejar en ridículo a la resurrección.” (Spurgeon)
2. (29) La respuesta de Jesús: ustedes no conocen las escrituras, y no conocen el poder de Dios.
Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Erráis, ignorando las Escrituras y el poder de Dios.
a. Erráis: Los Saduceos conectaron sus ideas con un pasaje Bíblico, pero no analizaron correctamente el pasaje. Estos hombres altamente entrenados estaban equivocados en su comprensión básica de la verdad Bíblica.
b. Ignorando las Escrituras y el poder de Dios: Su error estaba arraigado en dos razones. Primero, no conocían las Escrituras (aunque pensaban que lo hacían). Segundo, no conocían el poder de Dios, estando básicamente en contra de lo sobrenatural. Esto era verdad sobre ellos, a pesar de que la religión era su carrera y estaban altamente entrenados.
i. Ignorando las escrituras: Es posible que una persona tenga mucho conocimiento Bíblico, y sin embargo no conocer fundamentalmente las escrituras. Pablo más adelante le dijo a Timoteo: Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste (2 Timoteo 1:13). Esto sugiere que la verdad Bíblica tiene un patrón, un patrón que puede ser detectado discerniendo el corazón. También sugiere que uno puede perder ese patrón (es por eso que se ordena retener). Los Saduceos tenían conocimiento de la Biblia, pero no retuvieron la forma de las sanas palabras; muchos en la actualidad son como ellos en ese aspecto.
ii. Y el poder de Dios: Los Saduceos negaban las verdades sobrenaturales tales como la existencia de seres angelicales y la resurrección del cuerpo. Tenían una duda fundamental del poder de Dios para hacer más allá de lo que ellos podían medir y entender en el mundo material; muchos en la actualidad son como los Saduceos en este aspecto.
iii. “Si ustedes conocieran el poder de Dios, ustedes sabrían que Dios es capaz de resucitar a los muertos… si ustedes conocieran las Escrituras, sabrían que Dios resucitará a los muertos.” (Poole)
3. (30-33) Jesús responde: la resurrección es diferente.
Porque en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento, sino serán como los ángeles de Dios en el cielo. Pero respecto a la resurrección de los muertos, ¿no habéis leído lo que os fue dicho por Dios, cuando dijo: Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? Dios no es Dios de muertos, sino de vivos. Oyendo esto la gente, se admiraba de su doctrina.
a. En la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento: Primero, Jesús les recordó que la vida en la resurrección es bastante diferente de esta vida. No continúa solamente con este mundo sus arreglos, sino que es una vida de un orden totalmente diferente.
i. Este pasaje ha hecho que muchos se pregunten si las relaciones de matrimonio aún existirán en el cielo, o si aquellos que son esposo y esposa en la tierra no tendrán una relación especial en el cielo. No se nos dice lo suficiente sobre el mundo del más allá como para contestar con muchos detalles, pero podemos entender unos pocos principios.
· Las relaciones familiares seguirán siendo conocidas en el mundo del más allá. El hombre rico que Jesús describió en el más allá estaba consciente de sus relaciones familiares (Lucas 16:27-28).
· La gloria del cielo será una relación y conexión con Dios que sobrepasa todo lo demás, incluyendo las relaciones familiares presentes (Apocalipsis 21:22-23).
ii. Si parece que la vida en la resurrección de la que Jesús habló aquí no incluye algunos de los placeres de la vida que conocemos en la tierra, es solo porque los gozos y las satisfacciones del cielo sobrepasan por mucho lo que conocemos en la tierra. No podemos saber con certeza cómo será la vida en la gloria del más allá, pero podemos saber con certeza que nadie estará decepcionado de los arreglos (Apocalipsis 22:1-5).
iii. Esta pregunta no es solamente teórica. Habrá muchos en el cielo que habrán tenido más de un cónyuge, por diferentes motivos. Jesús aquí nos dijo que el celo y la exclusión no tendrán parte en el cielo.
iv. Esta comprensión Bíblica del cielo es dramáticamente diferente de los sueños más sensuales del cielo, como los que se encuentran en la teología Islámica o Mormona. “Mahoma, como profesó que él mismo tenía una licencia especial que le fue dada por Dios de conocer a las mujeres que quisiera, y apartarlas cuando quisiera; así le prometió a todos sus devotos y adherentes los mismos placeres carnales en la resurrección.” (Trapp)
b. Serán como los ángeles de Dios en el cielo: Jesús aquí dijo que los ángeles de Dios en el cielo no se casan; asumimos que esto incluye que no tienen relaciones sexuales.
i. El punto más evidente no debe ser descuidado: Jesús le dijo a los Saduceos que los ángeles eran reales. “De hecho, que Jesús haya usado a los ángeles tiene doble intención ya que los Saduceos negaban su existencia.” (Carson)
ii. Los ángeles son representados consistentemente en la Biblia como figuras masculinas, y nunca específicamente como figuras femeninas (Génesis 18:2, 16; Génesis 19:1-11).
iii. Esto plantea una pregunta debido a la probable conexión entre los seres angelicales caídos y la sexualidad humana descrita en Génesis 6:1-8 y Judas 6-7. Sin embargo las palabras de Jesús no excluyen tal conexión por varias razones.
· Jesús habló de los ángeles de Dios en el cielo, no de los seres angelicales caídos mencionados en los pasajes de génesis y Judas.
· Jesús no dijo que los seres angelicales eran incapaces de la expresión sexual, sólo que tales relaciones no existían entre los ángeles en el cielo.
· No podemos estar seguros del tipo de conexión sexual indicada en los pasajes de Génesis y Judas. Es totalmente posible que la conexión no haya sido entre las apariencias materiales de estos seres angelicales y las de los humanos, sino que los malvados seres angelicales se expresaron a través de humanos únicos poseídos por demonios.
c. Pero respecto a la resurrección de los muertos, ¿no habéis leído lo que os fue dicho por Dios: Jesús demostró la realidad de la resurrección usando únicamente la Torá; los cinco libros de Moisés, los cuales eran los únicos libros que los Saduceos aceptaban como acreditados. Si Abraham, Isaac y Jacob no vivían en resurrección, entonces Dios hubiera dicho que Él fue el Dios de Abraham, en vez de decir “Yo soy el Dios de Abraham.”
i. “El Dios viviente es el Dios de los hombres vivientes; y Abraham, Isaac y Jacob aún están vivos y son identificados como las mismas personas que vivieron en la tierra.” (Spurgeon)
ii. “Como ningún hombre puede ser padre sin hijos, ni un rey sin un pueblo, así, estrictamente hablando, el Señor no puede ser llamado el Dios de nada sino de los vivos.” (Calvin, citado por France)
D. La pregunta de un escriba.
1. (34-36) Pregunta de un abogado entre los Fariseos: ¿Cuál es el gran mandamiento?
Entonces los fariseos, oyendo que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una. Y uno de ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo: Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley?
a. Entonces los fariseos, oyendo que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una: Mateo nos da una escena fascinante de los oponentes de Jesús trabajando duro para avergonzarlo – y trabajando sin éxito.
i. “Se juntaron a una probablemente hace eco deliberadamente a las maquinaciones de los paganos contra el ungido de Dios en Salmos 2:2.” (France)
b. Preguntó por tentarle: Esta pregunta también fue planeada como una trampa. Al pedirle a Jesús que escogiera un gran mandamiento, esperaban hacer que Jesús descuidara otra área de la ley.
i. “Los Rabinos tomaban en cuenta 613 mandamientos de la ley; y los distinguían del más grande al menos. Estos últimos ellos consideraban que podían ser ignorados o violados con poca o sin ninguna culpa.” (Trapp)
2. (37-40) Jesús responde: Ama a Dios y a tu prójimo.
Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.
a. Jesús le dijo: Comprendiendo perfectamente la esencia de la ley, Jesús no tuvo dificultad en responder. En vez de promover un mandamiento sobre otro, Jesús definió la ley en sus principios centrales: Amarás al Señor con todo lo que tienes y amarás a tu prójimo como a ti mismo.
i. Es suficientemente claro lo que significa que amar al Señor con todo lo que tenemos, aunque es imposible hacerlo a la perfección. Pero ha habido mucha confusión sobre lo que significa amar al prójimo como a uno mismo. Esto no significa que debemos amarnos a nosotros mismos antes de poder amar a alguien más; significa que de la misma forma en que cuidamos de nosotros mismos y nos preocupamos por nuestros propios intereses, debemos cuidar e interesarnos por los intereses de otros.
ii. El primero y grande mandamiento: “Con respecto al orden, cantidad, y dignidad.” (Trapp)
b. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas: La expectativa moral de Dios acerca del hombre puede ser breve y poderosamente dicha en estas dos oraciones. Si la vida de Dios es real en nuestras vidas, se mostrará por la prescencia de este amor hacia Dios y hacia los demás.
i. “Moisés resumió todo en los diez mandamientos, a los cuales, verdaderamente interpretados, todos los preceptos de las Escrituras son reducidos. Aquí Cristo convierte los diez en dos.” (Poole)
E. Jesús hace una pregunta a sus oponentes.
1. (41-42a) Jesús pregunta sobre el linaje del Mesías.
Y estando juntos los fariseos, Jesús les preguntó, diciendo: ¿Qué pensáis del Cristo? ¿De quién es hijo?
a. Y estando juntos los fariseos: Antes de que pudieran pensar en otra pregunta para probarlo, Jesús les hizo una pregunta.
b. ¿Qué pensáis del Cristo? ¿De quién es hijo? Esto era similar a la pregunta que Jesús les hizo a sus discípulos en Mateo 16:13-15 (¿quién dicen ustedes que soy yo?). Jesús confrontó a sus oponentes con la necesidad de decidir quién era él, conectándose a sí mismo con la comprensión del Antiguo Testamento del Mesías (el Cristo).
2. (42b) Los fariseos identifican el linaje del Mesías.
Le dijeron: De David.
a. De David: Este es uno de los grandes títulos del Antiguo Testamento para el Mesías. Basado en el pacto que Dios hizo con el rey David en 2 Samuel 7, identifica al Cristo como el descendiente escogido del linaje real del Rey David (Vea también Jeremías 23:5-6, Isaías 9:6-7, y Lucas 1:31-33).
b. De David: Es posible que los Fariseos no conocieran o se hubieran olvidado de que Jesús era del linaje del Rey David y que incluso había nacido en Belén, la ciudad de David. Cuando Jesús recién entró en Jerusalén se destacó que era de Nazaret, y tal vez su conexión con el Rey David era desconocida o había sido olvidada (Mateo 21:11).
3. (43-45) Jesús no solamente es el hijo de David, también es el Señor de David.
El les dijo: ¿Pues cómo David en el Espíritu le llama Señor, diciendo: Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies? Pues si David le llama Señor, ¿cómo es su hijo?
a. Pues cómo David en el Espíritu le llama Señor: Los Fariseos estaban parcialmente en lo correcto al decir que el Mesías es el Hijo de David. Pero no tenían un entendimiento completo sobre quién era el Mesías. Él no solamente es el Hijo de David (una referencia a su humanidad), sino que también es el Señor de David (una referencia a la deidad de Jesús, el).
i. “La fuerza del argumento de Jesús depende de su uso en Salmos 110, el capítulo del AT citado con más frecuencia en el NT.” (Carson)
ii. Esta es la idea comunicada en Apocalipsis 22:16: Yo soy la raíz y el linaje de David, y Romanos 1:4, el cual muestra a Jesús como el Hijo de David y él Hijo de Dios. No debemos descuidar ninguna de las facetas de la persona de Jesús. Él es verdaderamente hombre y verdaderamente Dios, y solo puede ser nuestro Salvador si es ambos.
b. Pues si David le llama Señor, ¿cómo es su hijo? La brillante y sencilla explicación de Jesús sobre las Escrituras puso a los Fariseos a la defensiva. Ellos no querían admitir que el Mesías era también Jehová Dios, pero Jesús mostró que esto era verdadero con las Escrituras.
i. “¿Qué quiso decir Jesús? Solo pudo haber querido decir una cosa – que la verdadera descripción sobre su persona es Hijo de Dios. Hijo de David no es un titulo apropiado; solo Hijo de Dios bastará.” (Barclay)
4. (46) Los enemigos de Jesús en retirada.
Y nadie le podía responder palabra; ni osó alguno desde aquel día preguntarle más.
a. Y nadie le podía responder palabra: Los líderes religiosos esperaban atrapar a Jesús y avergonzarlo en frente de los peregrinos de la Pascua que atestaban Jerusalén y lo escuchaban enseñar. Sin embargo Jesús terminó avergonzándolos a ellos.
i. “Sin embargo incluso su silencio fue un tributo. El maestro que nunca fue a las escuelas correctas (Juan 7:15-18) confunde a los más grandes teólogos de la tierra. Y si su pregunta (Mateo 22:45) era imposible de responder en ese momento, un joven Fariseo, que pudo haber estado en Jerusalén en ese momento, la respondería en su momento (Romanos 1:1-4; 9:5).” (Carson)
b. Ni osó alguno desde aquel día preguntarle más: La lógica y la retórica probaron ser inútiles para atacar a Jesús. Ahora sus enemigos usarían en su lugar la traición y la violencia.
i. Jesús había terminado de debatir con los líderes religiosos. “De ahora en adelante no debatiría con las autoridades, sino que los pasaría de largo y se dirigiría a las multitudes.” (France)
©1996-presente The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com