Génesis 29 — Los matrimonios de Jacob y sus hijos
A. Jacob conoce a Raquel.
1. (1-3) Jacob llega a un pozo de agua cubierto.
Siguió luego Jacob su camino, y fue a la tierra de los orientales. Y miró, y vio un pozo en el campo; y he aquí tres rebaños de ovejas que yacían cerca de él, porque de aquel pozo abrevaban los ganados; y había una gran piedra sobre la boca del pozo. Y juntaban allí todos los rebaños; y revolvían la piedra de la boca del pozo, y abrevaban las ovejas, y volvían la piedra sobre la boca del pozo a su lugar.
a. Fue a la tierra de los orientales: Porque el Señor bendijo su viaje, Jacob vuelve a la tierra de donde su madre vino, la cual también era la tierra de su abuelo Abraham.
b. Y miró, y vio un pozo en el campo: Como Jacob llegó cerca del hogar de la familia de su madre, se percató de un pozo que era usado para darles agua a las ovejas. El pozo estaba cubierto y protegido por una gran piedra.
2. (4-10) Jacob se encuentra con Raquel en el pozo.
Y les dijo Jacob: Hermanos míos, ¿de dónde sois? Y ellos respondieron: De Harán somos. Él les dijo: ¿Conocéis a Labán hijo de Nacor? Y ellos dijeron: Sí, le conocemos. Y él les dijo: ¿Está bien? Y ellos dijeron: Bien, y he aquí Raquel su hija viene con las ovejas. Y él dijo: He aquí es aún muy de día; no es tiempo todavía de recoger el ganado; abrevad las ovejas, e id a apacentarlas. Y ellos respondieron: No podemos, hasta que se junten todos los rebaños, y remuevan la piedra de la boca del pozo, para que abrevemos las ovejas. Mientras él aún hablaba con ellos, Raquel vino con el rebaño de su padre, porque ella era la pastora. Y sucedió que cuando Jacob vio a Raquel, hija de Labán hermano de su madre, y las ovejas de Labán el hermano de su madre, se acercó Jacob y removió la piedra de la boca del pozo, y abrevó el rebaño de Labán hermano de su madre.
a. Hermanos míos, ¿de dónde sois?: En épocas anteriores los caminos no estaban claramente marcados ni había señalamientos; Jacob no sabía dónde estaba hasta que les preguntó a algunos de los lugareños y descubrió que había llegado a su destino.
b. ¿Conocéis a Labán hijo de Nacor?: Jacob supo contactar con su tío Labán, el hermano de su madre. Los pastores no solo conocían a Labán, sino que también le dijeron a Jacob que Raquel, la hija de Labán, se aproximaba.
c. Abrevad las ovejas, e id a apacentarlas: Jacob, definitivamente, parece que está tratando de deshacerse de los jóvenes pastores; quizás, para poder estar a solas con Raquel.
d. Se acercó Jacob y removió la piedra de la boca del pozo: Jacob también sabía que él había venido a casarse con una de las hijas de Labán (Génesis 28:2), por lo que está más que dispuesto a mostrar amabilidad (y tal vez su fuerza) a Raquel, la hija de Labán.
3. (11-14) Raquel arregla un encuentro para que Labán conozca a Jacob.
Y Jacob besó a Raquel, y alzó su voz y lloró. Y Jacob dijo a Raquel que él era hermano de su padre, y que era hijo de Rebeca; y ella corrió, y dio las nuevas a su padre. Así que oyó Labán las nuevas de Jacob, hijo de su hermana, corrió a recibirlo, y lo abrazó, lo besó, y lo trajo a su casa; y él contó a Labán todas estas cosas. Y Labán le dijo: Ciertamente hueso mío y carne mía eres. Y estuvo con él durante un mes.
a. Jacob besó a Raquel, y alzó su voz y lloró: En un principio, Raquel debe haber estado muy sorprendida al ver a un hombre al que nunca había visto, llorar y aparecer saludándola con un beso.
b. Y Jacob dijo a Raquel que él era hermano de su padre: A Raquel le habían contado sobre su tía Rebeca, quien se casó con un pariente rico y lejano de la familia.
c. Y estuvo con él durante un mes: Labán mostró esta gran hospitalidad, no solamente porque era la costumbre, ni porque Jacob era su sobrino; Labán también sabía que Jacob heredaría una significativa fortuna de su padre Isaac.
B. Acuerdo de Labán con Jacob.
1. (15-20)Jacob se ofrece para trabajar durante siete años, como dote, para recibir a Raquel en matrimonio.
Entonces dijo Labán a Jacob: ¿Por ser tú mi hermano, me servirás de balde? Dime cuál será tu salario. Y Labán tenía dos hijas: el nombre de la mayor era Lea, y el nombre de la menor, Raquel. Y los ojos de Lea eran delicados, pero Raquel era de lindo semblante y de hermoso parecer. Y Jacob amó a Raquel, y dijo: Yo te serviré siete años por Raquel tu hija menor. Y Labán respondió: Mejor es que te la dé a ti, y no que la dé a otro hombre; quédate conmigo. Así sirvió Jacob por Raquel siete años; y le parecieron como pocos días, porque la amaba.
a. ¿Cuál será tu salario?: Esto puede escucharse como una buena oferta, pero lo que Labán realmente le decía a Jacob era que, si se quería quedar ahí, debería permanecer como un sirviente. Jacob era el hijo de un hombre de una enorme riqueza. Ciertamente, él no era perezoso, pero no estaba acostumbrado al trabajo duro. Los sirvientes de su casa hacían el trabajo duro, pero ahora Jacob era el sirviente.
i. La reacción de Jacob ante esta situación revela mucho de su carácter. Esto demuestra el principio de que nunca se sabe qué tipo de sirviente eres hasta que los demás te tratan como uno.
b. Y Jacob amó aRaquel: Raquel no sólo era de lindo semblante y de hermoso parecer, sino que también era la primera cara amigable que Jacob conoció en esa área. Es comprensible el porqué tuvo un «amor a primera vista» hacia Raquel.
c. Y los ojos de Lea eran delicados: Hay controversia en cuanto al significado de esta frase. Algunos piensan que no podía ver bien. Otros piensan que significa que sus ojos eran «opacos», que no eran bellos ni llenos de vida como lo eran los ojos de su hermana Raquel.
i. La comparación entre Raquel y Lea de sus respectivas bellezas es una pequeña pista de lo que, probablemente, fue una complicada vida familiar llena de conflictos y competitiva.
d. Yo te serviré siete años por Raquel, tu hija menor: La oferta para trabajar durante siete años fue, esencialmente, una dote. Aunque Jacob provenía de una familia con una gran riqueza, salió de casa sin un centavo. Antes de que se pudiera tomar a una mujer en matrimonio, se tenía que aportar un dote, para demostrar que se estaba en condiciones de mantener una familia y para compensar por haber tomado la hija.
i. Siete años era una oferta muy generosa, muy por encima de un dote normal. Jacob no quería arriesgarse a una negativa. Cuando Labán vio lo mucho que Jacob quería a Raquel, supo que podía sacar provecho de él.
e. Le parecieron como pocos días, porque la amaba: Nos damos cuenta del gran amor que sentía por ella. Los siete años de trabajo sin goce de sueldo (a excepción de alojamiento y comida) parecían pasar tan rápidamente como si fueran unos pocos días.
i. En esta antigua cultura a Jacob no se le permitió pasar tanto tiempo como él quería con Raquel. Había estrictas normas sociales para que los hombres y mujeres solteros, se mantuvieran separados unos de otros.
ii. Esto demuestra claramente un principio importante: el verdadero amor espera. Jacob estaba dispuesto a esperar siete años por Raquel.
iii. En la década de 1990 también hubo una campaña de éxito entre los adolescentes, titulada «True Love Waits» [El verdadero amor espera]. Se les convenció para que hicieran la siguiente promesa: «Creo que el verdadero amor espera, hago un compromiso con Dios, yo, mi familia, mis relaciones, mi futuro cónyuge y mis futuros hijos, a ser sexualmente puro para el día en que entre en una relación con un verdadero pacto matrimonial». Uno puede debatir sobre el éxito de la campaña, pero el principio permanece. Jacob tuvo la voluntad de esperar por Raquel porque la amaba.
2. (21-25) Labán cambia a Lea por Raquel en la noche de bodas.
Entonces dijo Jacob a Labán: Dame mi mujer, porque mi tiempo se ha cumplido, para unirme a ella. Entonces Labán juntó a todos los varones de aquel lugar, e hizo banquete. Y sucedió que a la noche tomó a Lea su hija, y se la trajo; y él se llegó a ella. Y dio Labán su sierva Zilpa a su hija Lea por criada. Venida la mañana, he aquí que era Lea; y Jacob dijo a Labán: ¿Qué es esto que me has hecho? ¿No te he servido por Raquel? ¿Por qué, pues, me has engañado?
a. Dame mi mujer, porque mi tiempo se ha cumplido, para unirme a ella: Estas palabras son lo suficientemente claras. A pesar de que Jacob esperaba y el tiempo pasó rápidamente por amor, cuando el tiempo se cumplió ya no quiso esperar. Él quería tomar a Raquel como su esposa. Labán respondió invitando a los huéspedes y haciendo una boda (juntó a todos los varones de aquel lugar, e hizo banquete).
b. Tomó a Lea su hija, y se la trajo, y él se llegó a ella: Era posible que Jacob fuera engañado por las costumbres de las bodas de la época. De acuerdo a las costumbres, la mujer era cubierta con un velo hasta que finalmente estuviera a solas con su marido en la «alcoba de luna de miel». Ya estaba oscuro para el tiempo que Jacob y su nueva esposa estuvieran a solas (algo que Labán no tendría dificultad para arreglar), esto ayuda a explicar cómo Jacob fue engañado.
c. Tomó a Lea su hija, y se la trajo:Suponemos queLea estaba de acuerdo con esto. Sin embargo, incluso aunque no hubiera estado de acuerdo, ella estaba bajo la autoridad absoluta de su padre.
i. «Ella pudo haber amado a Jacob en secreto. Pudo haber considerado esta su única oportunidad para conseguir un marido. Ella pudo haber pensado que esto no lo había buscado y, por lo tanto, era justificable la oportunidad de adelantarse a su hermana. (Leupold)
ii. La autoridad absoluta del padre en la casa en esa cultura también explica el porqué Raquel «accedió» a esto.
d. Venida la mañana, he aquí que era Lea:Podemos imaginar cómo se sentía Jacob, cómo se sentía Lea y, por supuesto, lo que la pobre Raquel sintió. Todo esto fue a causa del pecado de Labán o, tal vez, habría que decir que fue a causa del pecado de Jacob. Ahora, el engañador, era engañado.
e. ¿Por qué, pues, me has engañado?: Significativamente, el engaño de Labán a Jacob es similar al engaño de Jacob a Isaac, su padre, y a su hermano Esaú. Este es un ejemplo de Jacob cosechando lo que sembró. Jacob intercambió el menor por el mayor, y Labán la mayor por la menor.
i. Cuando Jacob engañó a su padre y también le hizo trampa a su hermano, Dios no cambió su plan para elegir a Jacob para que recibiera el derecho de nacimiento; pero se llevó a Jacob a la escuela de la vida para disciplinarlo. Esto demuestra que tu desobediencia no puede desviar el plan de Dios para tu vida, pero determinará en gran medida la forma en que termines experimentándolo. Puede que pases 20 años trabajando para alguien como Labán, mientras que Dios te enseña muchas cosas.
ii. Aunque podemos ver esto como la corrección de Dios a Jacob, de ninguna manera justifica el engaño de Labán. El hecho de que Dios hace que todas las cosas nos ayuden para bien, nunca excusa los actos malvados del hombre.
3. (26-30) Labán se compromete a darle a Raquel a Jacob a cambio de otros siete años de trabajo.
Y Labán respondió: No se hace así en nuestro lugar, que se dé la menor antes de la mayor. Cumple la semana de ésta, y se te dará también la otra, por el servicio que hagas conmigo otros siete años. E hizo Jacob así, y cumplió la semana de aquélla; y él le dio a Raquel su hija por mujer. Y dio Labán a Raquel su hija su sierva Bilha por criada. Y se llegó también a Raquel, y la amó también más que a Lea; y sirvió a Labán aún otros siete años.
a. No se hace así en nuestro lugar: La excusa de Labán, básicamente, dice: «Bueno, ¿no te lo había dicho? No lo hacemos de esta manera por aquí. Pensé que lo sabías». La única razón por la que Jacob se somete al truco de Labán, es porque no tenía otra opción. Pero la supuesta razón de Labán en realidad no es otra cosa que una excusa.
b. Por el servicio que hagas conmigo otros siete años: Los siguientes siete años hicieron el trabajo de posgrado en la escuela de la vida de Jacob, su especialidad fue: «Usted cosecha lo que siembra».
c. Y sirvió a Labán aún otros siete años: Labán es una imagen perfecta de un manipulador engañoso. Él termina consiguiendo exactamente lo que quería (el casamiento de sus hijas). Sin embargo, las cosas no terminan bien ni para él ni para sus hijas. A menudo, Dios juzga a los manipuladores concediéndoles sus deseos pecaminosos y permitiendo que sean una pérdida para ellos.
i. Los problemas de esta familia se pueden ver inmediatamente. Jacob no solo se casó con dos hermanas, sino que también permite que todos sepan que una es más favorecida y amada que la otra. Todos estos problemas se derivan del engaño manipulador de Labán, y del pecado previo que Jacob trajo consigo.
ii. Bueno, entonces, ¿qué debió de haber hecho Jacob? Algunos dicen que Jacob debía haber ido con Labán y pedirle que corrigiera todo el problema que formó y, simplemente, casarse con Raquel y dejar que Lea fuera problema de Labán. Otros creen que, de acuerdo con las normas de la cultura, no debía haber hecho a un lado a Lea, porque ella no podría casarse con otro hombre después de haber sido dada a Jacob. Tal vez, debía haber hecho lo mejor que se podía hacer en esta situación, que era amar a sus dos mujeres por igual.
d. Él le dio a Raquel su hija por mujer: En la cultura occidental no practicamos la poligamia, pero sí practicamos «el matrimonio en serie». Cuando usamos este término podemos pensar en la poligamia como un «matrimonio en serie», en el mismo sentido en que hablamos al referirnos a un asesinato en serie. Es alguien que se ha casado más de una vez, pero no al mismo tiempo. El asesino en serie mata a muchos, pero uno a la vez. En nuestra cultura moderna se multiplican las esposas de un mismo hombre, solo que una a la vez.
i. No podemos hacer nada acerca de nuestros matrimonios que se han roto en el pasado, pero podemos hacer todo lo que se pueda ante Dios para asegurarnos de que, de ahora en adelante, será para toda la vida.
C. Los primeros cuatro hijos de Jacob, nacidos a través de Lea.
1. (31) El amor misericordioso de Dios hacia Le.
Y vio Jehová que Lea era menospreciada, y le dio hijos; pero Raquel era estéril.
a. Y vio Jehová que Lea era menospreciada: La compasión de Dios tocó a Lea. Ella es realmente la parte inocente en todo este asunto. Dios puede ministrar a una mujer y satisfacer sus necesidades, incluso cuando el marido actúa de una manera impía.
i. «Lea se sienta tristemente en su tienda con su criada y pasa su tiempo hilando lana y llorando. El resto de la familia y, especialmente, Raquel, la desprecia porque ha sido despreciada por su marido, quien prefiere a Raquel y la ama perdidamente. Ella no es bonita ni agradable; no, es desagradable y odiada […]. La pobre mujer está sentada, nadie le presta atención. Raquel no se digna a mirarla. «Yo soy la señora de la casa, Lea es una esclava» —piensa. Estas son las cosas verdaderamente carnales de los santos padres y madres, como las cosas que suelen ocurrir en nuestras casas». (Lutero, citado en Boice)
b. Y vio Jehová que Lea era menospreciada, y le dio hijos: Dios fue bueno con Lea, aun cuando su esposo y su hermana no lo fueron.
i. Isaías 54:5 dice: «Porque tu marido es tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre». Los maridos son responsables de cuidar a sus esposas. Pero aun cuando ellos no lo hacen, Dios puede satisfacer las necesidades de una esposa, las necesidades que el esposo ha descuidado.
2. (32) El nacimiento de Rubén.
Y concibió Lea, y dio a luz un hijo, y llamó su nombre Rubén, porque dijo: Ha mirado Jehová mi aflicción; ahora, por tanto, me amará mi marido.
a. Llamó su nombre Rubén: El primer niño que le nació a Jacob, a través de Lea, ella lo llamó Rubén, y su significado es: «He aquí, un hijo». Esta fue su declaración a Jacob y a todos los otros, porque dijo: «ha mirado Jehová mi aflicción».
i. Rubén es el primogénito de Jacob, que por lógica heredará la promesa que Dios había hecho a Abraham y que se transmitió a Isaac y luego a Jacob.
b. Ahora, por tanto, me amará mi marido: Jacob, a pesar de que no amaba a Lea, todavía tenía intimidad sexual con ella. Por desgracia, los hombres son mucho más capaces de separar el sexo del amor que las mujeres. Peor aún, Lea era dolorosamente conciente del hecho de que Jacob no la amaba; aunque, obviamente, tenía sexo con ella.
3. (33) El nacimiento de Simeón.
Concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Por cuanto oyó Jehová que yo era menospreciada, me ha dado también éste. Y llamó su nombre Simeón.
a. Llamó su nombre Simeón: El segundo hijo de Jacob, a través de Lea, lleva el nombre de Simeón, Y su significado es: «escuchando». Lea espera que todos se den cuenta de que el Señor la ha escuchado.
b. Por cuanto oyó Jehová que yo era menospreciada: Aparentemente, el nacimiento de Rubén no volvió el corazón de Jacob hacia Lea. Ella sigue siendo conciente de que no la ama, a pesar de que sigue teniendo relaciones sexuales con ella.
i. Por supuesto,Jacob y Lea estaban casados, así que no había nada pecaminoso en la relación sexual. Pero esto muestra claramente que Jacob, al igual que la mayoría de los hombres carnales, era capaz y estaba dispuesto a tener sexo con alguien a quien no amaba.
ii. En una encuesta realizada en 1995 se hizo la siguiente pregunta: ¿Alguna vez has tenido relaciones sexuales con una mujer que sea desagradable? El 58% de los hombres respondió que «sí».
4. (34) El nacimiento de Leví.
Y concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Ahora esta vez se unirá mi marido conmigo, porque le he dado a luz tres hijos; por tanto, llamó su nombre Leví.
a. Por tanto, llamó su nombre Leví: El tercer hijo de Jacob nacido una vez más a través de Lea, se llama Leví, que significa: «apego». Lea todavía vive con la esperanza de que su esposo Jacob la ame y se apegue a ella por el nacimiento de sus hijos.
b. Ahora esta vez se unirá mi marido conmigo: El dolor en el corazón de Lea es tan evidente como la dureza del corazón de Jacob y como su actitud carnal hacia ella.
5. (35) El nacimiento de Judá.
Concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabaré a Jehová; por esto llamó su nombre Judá; y dejó de dar a luz.
a. Llamó su nombre Judá: Le nació a Jacob el cuarto hijo, nuevamente a través de Lea. El significado de su nombre es «alabanza». Al parecer, Lea ha dejado de nombrar a sus hijos para reflejar el dolor y el anhelo de su corazón. Ahora se centra en Dios y puede alabarlo.
b. Esta vez alabaré a Jehová: Hasta cierto punto, y por un periodo de tiempo, Lea ha permitido que el Señor satisfaga su necesidad, y ahora ella puede alabar a Dios. Lea llegó a conocer mejor al Señor al ser impulsada hacia Él por el abandono de su marido.
i. Lea, a pesar de que fue descuidada por Jacob y despreciada por Raquel, tenía un gran propósito en el plan de Dios. Las dos mayores tribus provienen de Lea, y no de Raquel: Leví (la tribu sacerdotal) y Judá (la tribu real). Y lo más importante es que el Mesías vino a través de Lea, la hermana más fea, la abandonada y despreciada; pero que aprendió a mirar al Señor y a alabarlo.
©2021 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com