2 Crónicas 4 – El mobiliario para el templo y sus atrios
A. El mobiliario del templo.
1. (1) El altar de bronce.
Hizo además un altar de bronce de veinte codos de longitud, veinte codos de anchura, y diez codos de altura.
a. Hizo además un altar de bronce: La idea detrás de la palabra hebrea para altar es esencialmente, “lugar de sacrificio”. Este era el lugar de sacrificio, el centro de adoración y servicio para los sacerdotes y el pueblo.
i. “Al igual que en el tabernáculo, el altar fue el primer objeto principal que se encontraba al entrar al patio del santuario. Demuestra que sólo se puede acercar a Dios a través de sacrificios”. (Payne)
ii. Nosotros también tenemos un altar: Tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo (Hebreos 13:10). Nuestro altar – nuestro “lugar de sacrificio” – es la cruz donde Jesús murió por nuestros pecados y nosotros lo seguimos al morir a nosotros mismos y vivir por Jesús.
b. Veinte codos: Esencialmente, este altar era grande (aproximadamente 30 pies o 10 metros cuadrados) y aproximadamente dos veces más grande que el altar construido originalmente para el tabernáculo (Éxodo 27:1-2).
c. Diez codos de altura: El altar fue elevado significativamente. El altar se erigió en alto, “para que todo el pueblo viera los holocaustos y se acordara de sus pecados y de su Salvador; porque la ley ceremonial era su evangelio”. (Trapp)
2. (2-6) Los lavabos para el templo.
También hizo un mar de fundición, el cual tenía diez codos de un borde al otro, enteramente redondo: su altura era de cinco codos, y un cordón de treinta codos lo ceñía alrededor. Y debajo del mar había figuras de calabazas que lo circundaban, diez en cada codo alrededor; eran dos hileras de calabazas fundidas juntamente con el mar. Estaba asentado sobre doce bueyes, tres de los cuales miraban al norte, tres al occidente, y tres al sur, y tres al oriente: y el mar descansaba sobre ellos, y las anclas de ellos estaban hacia adentro. Y tenía de grueso un palmo menor, y el borde tenía la forma del borde de un cáliz, o de una flor de lis. Y le cabían tres mil batos. Hizo también diez fuentes, y puso cinco a la derecha y cinco a la izquierda, para lavar y limpiar en ellas lo que se ofrecía en holocausto; pero el mar era para que los sacerdotes se lavaran en él.
a. También hizo un mar de fundición, el cual tenía diez codos de un borde al otro: La enorme fuente tenía más de 15 pies (5 metros) de ancho y se usaba para los lavados ceremoniales relacionados con los sacerdotes mismos.
i. “Los sacerdotes que no se lavaban para purificarse morían (Éxodo 30:20)”. (Selman)
ii. Wiseman explica en su comentario sobre 1 Reyes: “Los sacerdotes lo usaban para limpiar sus manos y pies y quizás también para suministrar agua a los lavabos para enjuagar las ofrendas (2 Crónicas 4:10)”. Poole cree que tal vez salía agua de los toros que formaban la base del mar.
b. Estaba asentado sobre doce bueyes: Este gran estanque de agua se colocó sobre bueyes esculpidos. “Prefigurando, dicen algunos, a los doce apóstoles, que llevaron el agua de la vida por todo el mundo”. (Trapp)
i. Y le cabían tres mil batos: “En 1 Reyes 7:26, se dice que le cabían solo dos mil batos. Dado que este libro fue escrito después del cautiverio en Babilonia, es muy posible que aquí se haga referencia al bato de Babilonia, que podría haber sido menor que el de los judíos”. (Clarke)
c. Hizo también diez fuentes: Estos lavabos adicionales se usaban para lavar y limpiar las partes de los animales en los rituales del sacrificio.
3. (7-8) Los candeleros las mesas y los tazones.
Hizo asimismo diez candeleros de oro según su forma, los cuales puso en el templo, cinco a la derecha, y cinco a la izquierda. Además hizo diez mesas y las puso en el templo, cinco a la derecha, y cinco a la izquierda: igualmente hizo cien tazones de oro.
a. Hizo asimismo diez candeleros… Además hizo diez mesas: El trabajo del templo requería candeleros para iluminación y mesas para sostener el pan de la proposición, el pan que representaba la comunión continua de Israel con Dios. En particular, el tabernáculo antiguo tenía un candelabro y una mesa. El templo mostró adecuadamente una mayor luz y una mayor dinámica de compañerismo.
b. Igualmente hizo cien tazones de oro: “Los ‘tazones de oro’ no estaban particularmente asociados con las mesas, sino que parecen haber sido utilizados para recolectar la sangre de los sacrificios, que luego se rociaba sobre el altar en los servicios de expiación del templo”. (Payne)
4. (9-10) El atrio del templo.
También hizo el atrio de los sacerdotes, y el gran atrio, y las portadas del atrio, y cubrió de bronce las puertas de ellas. Y colocó el mar al lado derecho, hacia el sureste de la casa.
a. También hizo el atrio de los sacerdotes: Este también era conocido como el atrio interior, el atrio del templo abierto solo a los sacerdotes.
b. Y el gran atrio: Este era el atrio exterior, el lugar en el recinto del templo abierto a la asamblea de Israel en su conjunto.
i. “Sin embargo, esta misma división en dos atrios (2 Reyes 23:12) dio una expresión concreta al hecho de que bajo el antiguo testamento aún no se había logrado ese sacerdocio universal de los creyentes que vendría a través de Jesucristo. En él todo el pueblo de Dios tiene acceso directo al Padre”. (Payne)
B. La obra de Hiram de Tiro.
1. (11-17) El mobiliario de Hiram para el templo.
Hiram hizo también calderos, y palas, y tazones; y acabó Hiram la obra que hacía al rey Salomón para la casa de Dios; Dos columnas, y los cordones, los capiteles sobre las cabezas de las dos columnas, y dos redes para cubrir las dos esferas de los capiteles que estaban encima de las columnas; Cuatrocientas granadas en las dos redes, dos hileras de granadas en cada red, para que cubriesen las dos esferas de los capiteles que estaban encima de las columnas. Hizo también las basas, sobre las cuales colocó las fuentes; Un mar, y los doce bueyes debajo de él: Y calderos, palas, y garfios; de bronce muy fino hizo todos sus enseres Hiram-abi al rey Salomón para la casa de Jehová. Y los fundió el rey en los llanos del Jordán, en tierra arcillosa, entre Sucot y Seredata.
a. Hiram hizo también: Hiram era mitad israelita y mitad gentil, y era el mejor artesano de la zona. Salomón lo contrató para que hiciera todo su trabajo – es decir, el excelente trabajo artístico del templo.
b. Calderos, y palas, y tazones: Estos artículos eran de especial interés para el cronista, porque fueron algunos de los únicos artículos que se recuperaron y usaron desde el período del primer templo hasta los días del cronista.
i. “El énfasis en los tazones del templo, así como la asociación entre la Tienda y el templo, subraya la continuidad representada por el templo. El regreso de los tazones del templo al segundo templo fue una de las señales principales de que el Israel post-exilio seguía siendo una comunidad de adoración del pueblo del pacto (cf. Esdras 1:7-11; 6:5; 8:24-34)”. (Selman)
2. (18-22) Resumen del mobiliario del templo.
Y Salomón hizo todos estos enseres en número tan grande, que no pudo saberse el peso del bronce. Así hizo Salomón todos los utensilios para la casa de Dios, y el altar de oro, y las mesas sobre las cuales se ponían los panes de la proposición; Asimismo los candeleros y sus lámparas, de oro puro, para que las encendiesen delante del lugar santísimo conforme a la ordenanza. Las flores, lamparillas, y tenazas se hicieron de oro, de oro finísimo; También las despabiladeras, los lebrillos, las cucharas y los incensarios eran de oro puro. Y de oro también la entrada de la casa, sus puertas interiores para el lugar santísimo, y las puertas de la casa del templo.
a. Enseres en número tan grande, que no pudo saberse el peso del bronce: “No se pudo descubrir el peso. Esto fue como debía ser. No hubo intento de averiguar el peso. Así era como debía ser. No se intentó llevar una cuenta exacta de lo que se entregó al servicio de Dios. Incluso la mano izquierda de Salomón no supo lo que hizo su mano derecha. Todos tenemos una tendencia a llevar una cuenta estricta de lo que le damos a Dios… pero la forma más elevada de devoción pasa por alto ese cálculo”. (Meyer)
b. Las flores, lamparillas: “El simbolismo de la flora y la fauna en el templo puede indicar la soberanía de Dios sobre el orden creado o ser otra alusión a la armonía de todas las cosas creadas en la presencia de Dios como en el Jardín del Edén”. (Selman)
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