Salmo 8 – La gloria de Dios en la creación

El título de este salmo dice: Al Músico Principal; Sobre Gitit. Salmo de David. Indica la audiencia del salmo (Al Músico Principal), el autor del Salmo (de David) y el sonido del Salmo (sobre Gitit). En este salmo, David habla de la gloria de Dios y de cómo la gloria del hombre y su destino se reflejan en Dios.

A. La gloria de la creación que se ve claramente.

1. (1) La gloria de Dios en la tierra y los cielos.

¡Oh Jehová, Señor nuestro,
Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Has puesto tu gloria sobre los cielos;

a. ¡Oh Jehová, Señor nuestro! Aquí, David reconocía tanto el nombre del pacto de Dios (Jehová) como la posición de Yahvé hacia Su pueblo (Señor). Era una forma simple, directa y común de decir que “Nuestro Dios es nuestro Señor”.

i. “Yahvé Adonai; Oh Jehová, nuestro apoyo, nuestro soporte, nuestro sostén … La raíz dan significa dirigir, gobernar, juzgar, apoyar. Entonces Adonai es el Director, Gobernante, Juez, Partidario de los hombres”. (Clarke)

b. Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra: David también reconocía que aunque Jehová era el Dios del pacto de Israel, también era Dios de más que solo Israel. Su nombre es glorioso… en toda la tierra.

c. Has puesto tu gloria sobre los cielos: Al mismo tiempo, la tierra no era suficiente para medir la gloria y la excelencia de Dios.Su gloria es sobre los cielos.

2. (2) La gloria de Dios en su poder sobre sus enemigos.

De la boca de los niños y de los que maman,
fundaste la fortaleza,
A causa de tus enemigos,
Para hacer callar al enemigo y al vengativo.

a. De la boca de los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza: En el primer versículo, David consideró la grandeza de Dios por Su evidente poder y gloria en la creación, tanto en la tierra como en los cielos. Ahora, considera que el poder y la gloria de Dios se pueden ver en los niños pequeños – niños y de los que maman – ya que la fortaleza de Dios es evidente para ellos.

i. David tocó aquí un tema familiar en la biblia: la idea de que Dios usa cosas que normalmente se consideran débiles para mostrar Su gloria y fuerza. 1 Corintios 1:27 es un ejemplo de esta idea: sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte.

ii. Es difícil pensar en algo más débil e impotente que un bebé; pero el mismo Dios que puede fundar fortalezas de la boca de los niños y de los que maman puede darme fuerza y apoyo en medio de mi debilidad.

iii. “La palabra aquí significa más bien una fortaleza … que, de un material tan frágil como el habla de los niños, Dios construye una torre de fuerza que, como un castillo fronterizo, frenará e inmovilizará al enemigo imparable”. (Maclaren)

iv. “Las alabanzas del Mesías, celebradas en la iglesia por sus hijos, tienen una fuerza y un poder que nada puede resistir; pueden avergonzar la infidelidad, cuando están en su punto más alto, y hacer que el infierno mismo se silencie”. (Horne)

v. Significativamente, Jesús citó este pasaje a Sus acusadores indignados en Mateo 21:16, cuando Jesús hizo milagros maravillosos en el área del templo y cuando recibió la alabanza de los niños que clamaron ¡Hosanna al Hijo de David! (Mateo 21:15).

b. Para hacer callar al enemigo y al vengativo: La razón por la que Dios muestra Su fuerza en vasijas inverosímiles es porque obra para callar al enemigo; Satanás y sus compañeros adversarios no tienen nada que decir cuando Dios obra tan poderosamente en una persona por lo demás débil.

i. Un ejemplo dramático de esto es la historia de Job. En ella, Dios silenció las acusaciones de Satanás tanto contra Dios como contra Job al sostener a Job con su mano invisible en medio de una profunda debilidad.

ii. Al citar este pasaje en Mateo 21:15-16, Jesús les dijo a sus acusadores quién era Él y quiénes eran ellos. Dado que los niños y… los que maman alaban a Dios en el Salmo 8, Jesús se identificó a sí mismo como Dios. En esto, Jesús también identificó a los escribas y maestros indignados como el enemigo y al vengativo descrito en este salmo.

iii. “¡Ajá! ¡Ajá! ¡Oh adversario! Ser vencido por un gigante o un leviatán podría enojarte; pero ser herido por la boca de los niños te hace morder el polvo en total deshonra. Estás muy quebrantado, ahora que ‘de la boca de los niños y de los que maman’ eres avergonzado”. (Spurgeon)

B. La sorprendente gloria de la humanidad.

1. (3-5) Aunque aparentemente insignificante, el hombre es coronado con gloria y honor.

Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos,
La luna y las estrellas que tú formaste,
Digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria,
Y el hijo del hombre, para que lo visites?
Le has hecho poco menor que los ángeles,
Y lo coronaste de gloria y de honra.

a. Cuando veo tus cielos: David conocía el valor de simplemente considerar la gloria de la creación de Dios. Sabía lo que era mirar hacia el cielo estrellado y considerar qué gran Dios había creado este vasto y maravilloso universo.

i. A simple vista, se pueden ver unas 5.000 estrellas. Con un telescopio de cuatro pulgadas, se pueden ver alrededor de 2 millones de estrellas. Con un espejo de 200 pulgadas de un gran observatorio, se pueden ver más de mil millones de estrellas. El universo es tan grande que si uno viajara a la velocidad de la luz, se necesitarían 40 mil millones de años para llegar al borde del universo. Considerar los cielos nos hace ver la grandeza de Dios.

ii. Estos grandes objetos celestiales como la luna y las estrellas son la obra de los dedos de Dios “A pesar de la asombrosa magnitud del sol, tenemos abundantes razones para creer que algunas de las estrellas fijas son mucho más grandes: ¡y sin embargo, se nos dice que son la obra de los DEDOS DE DIOS! ¡Qué mano! ¡mover, formar y lanzar estos mundos!”. (Clarke)

b. ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria? Considerar la grandeza de los cielos también hizo que David considerara la relativa pequeñez e insignificancia del hombre. David se preguntaba por qué un Dios tan grande, tan enorme, tendría memoria de seres tan pequeños.

i. “Les dimos una imagen débil de nuestra relativa insignificancia, cuando dijimos que las glorias de un bosque extenso no sufrirían más por la caída de una sola hoja, de lo que las glorias de un universo extendido sufrirían si el mundo que pisamos , y todo lo que eso conlleva, se disolviera”. (Chalmers, citado en Spurgeon)

ii. Dios es tan grande que hace al universo con sus dedos; el hombre es tan pequeño que el universo lo empequeñece. Sin embargo, David no dudaba de que Dios tuviera memoria del hombre; simplemente dijo “que tengas de él memoria” y solamente se preguntaba por qué. Antes de compartir la pregunta de David, primero debemos compartir su confianza segura de que Dios tiene memoria de nosotros; Él piensa en nosotros y considera lo que hacemos.

iii. “Hombre enfermizo y lamentable, una masa de mortalidades, un mapa de miserias, una mezcla o compuesto de suciedad y pecado … y sin embargo, Dios se acuerda de él”. (Trapp)

iv. “La pregunta de David se puede formular con muchos matices. En el Salmo 144:3-4 se burla de la arrogancia del rebelde; en Job 7:17 es la súplica de un paciente por un respiro; en Job 25:6 se estremece ante el pecado humano. Pero aquí no tiene tinte de pesimismo; sólo asombro de que estés atento y te intereses”. (Kidner)

c. Y el hijo del hombre, para que lo visites: Ciertamente, usando el método poético de repetición, David repitió la idea de una manera más fuerte. Hijo del hombre es un título que enfatiza la “humanidad” del hombre, y podríamos decir que “lo visites” es aún más fuerte que “tengas de el memoria”.

i. David estaba seguro de que Dios no solo pensaba cuidadosamente en el hombre, sino que tenía algún tipo de conexión personal y contacto con los hombres (para que lo visites). Él piensa en nosotros y actúa en nuestra vida.

ii. Morgan consideró el uso de los términos hombre e hijo del hombre como un “contraste entre el majestuoso esplendor de la luna y las estrellas, y el hombre – Enosh – hombre frágil – y el hijo del hombre Ben-Adam – de origen aparentemente terrenal. Los contrastes son gráficos”. (Morgan)

d. Le has hecho poco menor que los ángeles: David veía que Dios hizo al hombre poco menor que los ángeles y esto es evidente en la forma en que el hombre está debajo de los ángeles en la gloria presente, el poder y la cercanía a Dios.

i. La palabra traducida como ángeles es Elohim y la mayoría de las veces se refiere a Dios mismo. Hay algunos (como Boice) que creen que David quiso decir que el hombre es poco menor que Dios, enfatizando la idea de que el hombre está hecho a imagen de Dios.

ii. Sin embargo, los antiguos traductores de la biblia del hebreo al griego entendieron aquí que elohim hablaba de seres angelicales; lo que es más importante, así fue como lo entendió el escritor de Hebreos. “El hebreo para [ángeles] es simplemente ‘Dios’ o ‘dioses’ (‘Elohim’). Puede referirse a seres angelicales”. (VanGemeren)

iii. Es significativo que David no dijo que el hombre fuera “poco mayor que las bestias”, aunque se podría decir que es cierto. Los teólogos desde Tomás de Aquino han notado que el hombre está en una posición intermedia entre los ángeles y los animales: poco menor que los ángeles pero mayor que los animales. Sin embargo, David correctamente nos hace mirar hacia arriba y no hacia abajo, aunque muchos piensan en la humanidad como más animal que angelical, David escribió que le has hecho poco menor que los ángeles.

iv. “Aunque fueron hechos a la imagen de Dios y ordenados para ser cada vez más como el Dios a quien reflejan, hombres y mujeres le han dado la espalda a Dios. Y como no mirarán hacia arriba a Dios, que es su privilegio y deber, en realidad miran hacia abajo a las bestias y así se vuelven cada vez más como ellas”. (Boice)

v. Este mismo pasaje se cita en Hebreos 2:5-9 para reforzar y elaborar sobre este punto exacto. En él, señala que la baja condición del hombre se relaciona solo con este mundo y no con el mundo venidero (Hebreos 2:5). De manera más significativa, el escritor de Hebreos usó este pasaje del Salmo 8 para mostrar que Jesús realmente agregó una naturaleza genuinamente humana a Su naturaleza divina y, por lo tanto, también llegó a ser poco menor que los ángeles.

f. Y lo coronaste de gloria y de honra: Aunque hecho poco menor que los ángeles, el destino del hombre es un día ser coronado con gloria y… honra que sobrepasen incluso a los ángeles. El destino de los hombres y mujeres redimidos es ser elevados algún día por encima de los ángeles (1 Corintios 6:3, Apocalipsis 1:6, 5:10)

i. “Poco puede significar ‘por un tiempo’ tanto en hebreo como en griego, que es el sentido probablemente implícito en [Hebreos]” (Kidner)

ii. “Un poco menores en la naturaleza, por ser inmortales, y un poco, porque el tiempo es corto; y cuando eso termine, los santos ya no serán menores que los ángeles”. (Spurgeon)

iii. La gloria de Dios está sobre los cielos; sin embargo, puso esta misma gloria y… honra sobre el hombre como corona. “Esta es una manera eficaz de identificar al hombre con Dios y de decir que ha sido creado a imagen de Dios, reflejando la gloria de Dios de una manera que otras partes de la creación no lo hacen”. (Boice)

iv. Como señala el escritor de Hebreos, parece que este llamado y don divino dado al hombre de gran dominio sobre toda la tierra está trágicamente incumplido; el hombre caído parece tan débil e incapaz de dominar sus propios pensamientos y deseos, y mucho menos coronado de gloria y honor. Sin embargo, como dice propiamente Hebreos, pero vemos… a Jesús (Hebreos 2:9).

v. “En Él hemos tenido la plena revelación de la grandeza del hombre. Pero hemos visto más que eso. Lo hemos visto “coronado de gloria y honra, para que por la gracia de Dios pruebe la muerte por todos los hombres”. Esa visión crea nuestra confianza en que el hombre finalmente realizará el propósito divino”. (Morgan)

vi. “Sin duda Satanás se llena de desprecio por el hombre cuando lo mira y lo compara consigo mismo. “¿Es esta la criatura que ha de ser puesta sobre todas las obras de las manos de Dios, hecha de tierra y agua, fosfatos y metales? Soy mucho más noble que ella. ¿No puedo yo destellar como un rayo, mientras que él debe arrastrarse por el mundo para encontrar una tumba?’”. (Spurgeon)

2. (6-9) El dominio del hombre y la excelencia de Dios.

Le hiciste señorear sobre las obras de tus manos;
Todo lo pusiste debajo de sus pies:
Ovejas y bueyes, todo ello,
Y asimismo las bestias del campo,
Las aves de los cielos
y los peces del mar;
Todo cuanto pasa por los senderos del mar.
¡Oh Jehová, Señor nuestro,
Cuán grande es tu nombre en toda la tierra!

a. Le hiciste señorear sobre las obras de tus manos: David entendía el mandato dado a Adán y sus descendientes en la creación (Génesis 1:26-28 y 9:2). Tanto por el decreto de Dios como por una habilidad superior, el hombre tiene dominio sobre las demás criaturas y recursos de la tierra.

i. “En esta sección del salmo, las alusiones al primer capítulo del Génesis son ineludibles, lo que muestra que David estaba muy familiarizado con este libro” (Boice). Quizás este conocimiento de la palabra de Dios vino de la madre de David, a quien dos veces en los Salmos se refiere como una sierva del Señor (Salmo 86:16 y 116:16).

ii. Como parte de esta autoridad, la humanidad tiene la responsabilidad de administrar sabiamente las criaturas y los recursos de esta tierra de una manera que le dé gloria a Dios y sea buena para el hombre. Significa que está mal ver al hombre simplemente como parte del ecosistema (negando así su dominio ordenado por Dios). También está mal que el hombre abuse del ecosistema, pues esto lo convierte así en un mal administrador de lo que en última instancia pertenece a Dios (Salmo 24:1). El mandato de señorear le pide al hombre que use las criaturas y los recursos de la tierra, pero que los use sabia y responsablemente.

b. Todo lo pusiste debajo de sus pies: Aquí, David desarrolló la idea introducida en la primera línea del Salmo 8:6. El señorío del hombre se extiende a todo, incluyendo ovejas y bueyes… las bestias del campo, las aves de los cielos y los peces del mar.

i. El apóstol Pablo citó este pasaje en 1 Corintios 15:27. Pablo lo citó de la misma manera que lo hizo el escritor de Hebreos en Hebreos 2:5-9, mostrando que esta promesa de dominio ahora solo se cumple de manera incompleta entre los hombres. Sin embargo, finalmente se cumplirá en Jesús, el Hombre supremo.Y algún día también se cumplirá por completo en Sus seguidores resucitados.

ii. A la luz de todo esto, es una gran tragedia cuando un hombre es capturado y esclavizado por las cosas de este mundo. Nacimos para enseñorearnos sobre esas cosas materiales, en lugar de ser esclavos de ellas.

c. ¡Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán grande es tu nombre en toda la tierra! Cuando David pensó en el vasto dominio que Dios le había dado al hombre, lo hizo alabar a Dios de nuevo. Que esta humilde criatura – humilde a la luz de la majestad del universo, humilde a la luz de su posición actual bajo los seres angelicales – reciba tal autoridad es una demostración tanto de la excelencia como de la bondad de Dios.

i. David entendía que la posición del hombre en la creación dice mucho más sobre la gloria de Dios que cualquier cosa sobre la gloria del hombre. Entenderlo todo debería hacernos alabar a Dios, no al hombre. “Porque el dominio del hombre sobre la naturaleza, por maravilloso que sea, ocupa un segundo lugar después de su llamamiento como siervo y adorador, a cuyos propios hijos se ha revelado el nombre del Señor”. (Kidner)

ii. Hay tres maravillosas e importantes verdades sobre el hombre que se encuentran en este salmo; cuando estas verdades son negadas o descuidadas, el hombre nunca es lo que Dios lo creó para ser.

·Dios hizo al hombre.
·Dios hizo del hombre algo glorioso.
·Dios hizo al hombre para un destino sublime y digno.

iii. Todos estos tres principios están arraigados en lo que Dios ha hecho del hombre; no existen ni se cumplen desde el plan o la obra del hombre. Por eso este salmo glorioso sobre el hombre es aún más un salmo sobre Dios. “La característica más sorprendente del Salmo 8… es su descripción del hombre y su lugar en el orden creado. Pero el salmo no comienza hablando del hombre. Comienza con una celebración de la incomparable majestad de Dios”. (Boice)

iv. “Nos hizo para enseñorearnos por la palabra de la creación. Nos hizo reyes para Dios con su sangre. Por tanto, Su nombre será honrado en toda la tierra”. (Meyer)

v. “Aun tú, gusano tonto, le honrarás, cuando se manifieste lo que Dios ha hecho por ti, las concupiscencias que Él ha mortificado y las gracias que te ha concedido”. (Spurgeon)

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