Números 26 – El segundo censo
A. El segundo censo de Israel en el desierto.
1. (1-4) El mandato de tomar el censo.
Aconteció después de la mortandad, que Jehová habló a Moisés y a Eleazar hijo del sacerdote Aarón, diciendo: Tomad el censo de toda la congregación de los hijos de Israel, de veinte años arriba, por las casas de sus padres, todos los que pueden salir a la guerra en Israel. Y Moisés y el sacerdote Eleazar hablaron con ellos en los campos de Moab, junto al Jordán frente a Jericó, diciendo: contaréis el pueblo de veinte años arriba, como mandó Jehová a Moisés y a los hijos de Israel que habían salido de la tierra de Egipto.
a. Tomad el censo de toda la congregación de todos los hijos de Israel: Unos 38 años antes, al comienzo del Libro de Números, mientras Israel todavía acampaba en el Monte Sinaí, Dios les ordenó hacer un censo.
i. El primer censo fue principalmente para la organización militar. Si iban a entrar y tomar posesión de la Tierra Prometida, tenían que saber cuántas tropas tenían y cómo debían organizarse mejor.
b. Todos los que pueden salir a la guerra en Israel: El propósito del segundo censo también se dejó en claro. Debían contar a los que podían luchar en nombre de Israel. Este conteo, 38 años después, volvió a ser para organización militar.
i. 38 años antes, Israel estuvo suficientemente organizado; simplemente no tuvieron suficiente fe para tomar la Tierra Prometida. La organización es buena, y la obra de Dios puede sufrir por la falta de ella; pero la mejor organización nunca puede reemplazar la confianza audaz en Dios.
2. (5-11) La tribu de Rubén.
Rubén, primogénito de Israel; los hijos de Rubén: de Enoc, la familia de los enoquitas; de Falú, la familia de los faluitas; de Hezrón, la familia de los hezronitas; de Carmi, la familia de los carmitas; Estas son las familias de los rubenitas; y fueron contados de ellas cuarenta y tres mil setecientos treinta. Los hijos de Falú: Eliab. Y los hijos de Eliab: Nemuel, Datán y Abiram. Estos Datán y Abiram fueron los del consejo de la congregación, que se rebelaron contra Moisés y Aarón con el grupo de Coré, cuando se rebelaron contra Jehová; y la tierra abrió su boca y los tragó a ellos y a Coré, cuando aquel grupo murió, cuando consumió el fuego a doscientos cincuenta varones, para servir el escarmiento. Mas los hijos de Coré no murieron.
a. Los hijos de Rubén: En el primer censo, Rubén tuvo 46,500 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 43,730 – una pérdida de 2,770 hombres (6%).
b. Estos Datán y Abiram fueron los del consejo de la congregación, que se rebelaron contra Moisés: Notables en la tribu de Rubén fueron Datán y Abiram, quienes fueron co-líderes con Coré en la rebelión contra el Señor y Moisés descrita en Números 16. Quizás una razón por la que Datán y Abiram estaban resentidos por el liderazgo de Moisés era porque ellos eran de la tribu del hijo primogénito de Israel (Rubén); sin embargo, Moisés, descendiente de Leví (un hijo menor) era el líder de la nación.
i. El juicio de Dios sobre Datán, Abiram, Coré y sus seguidores en Números 16 seguramente fue una señal, tanto para la generación en el desierto como para más allá.
3. (12-14) La tribu de Simeón.
Los hijos de Simeón por sus familias: de Nemuel, la familia de los nemuelitas; de Jamín, la familia de los jaminitas; de Jaquín, la familia de los jaquinitas; de Zera, la familia de os zeraítas; de Saúl, la familia de los saulitas. Éstas son las familias de los simeonitas, veintidós mil doscientos.
a. Los hijos de Simeón: En el primer censo, la tribu de Simeón tuvo 59,300 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 22,200. Esta fue una pérdida asombrosa de 37,100 hombres para esta gran tribu (una pérdida del 63%).
4. (15-18) La tribu de Gad.
Los hijos de Gad por sus familias: de Zefón, la familia de los zefonitas; de Hagui, la familia de los haguitas; de Suni, la familia de los sunitas; de Ozni, la familia de los oznitas; de Eri, la familia de los eritas; de Arod, la familia de los aroditas; de Areli, la familia de los arelitas. Éstas son las familias de Gad; y fueron contados de ellas cuarenta mil quinientos.
a. Los hijos de Gad: En el primer censo, la tribu de Gad tuvo 45,650 hombres listos para la guerra; 38 años después, tienen 40,500. Esta fue una pérdida de 5,150 combatientes (11%).
5. (19-22) La tribu de Judá.
Los hijos de Judá: Er y Onán; Er y Onán murieron en la tierra de Canaán. Y fueron los hijos de Judá por sus familias: de Sela, la familia de los selaítas; de Fares, la familia de los faresitas; de Zera, la familia de los zeraítas. Y fueron los hijos de Fares de Hezrón, la familia de los hezronitas; de Hamul, la familia de los hamulitas. Éstas son las familias de Judá, y fueron contados de ellas setenta y seis mil quinientos.
a. Los hijos de Judá: En el primer censo, la tribu de Judá tuvo 74,600 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 76,500. Esta fue una ganancia de 1,900 (3%).
6. (23-25) La tribu de Isacar.
Los hijos de Isacar por sus familias; de Tola, la familia de los tolaitas; de Fúa, la familia de los funitas; de Jasub, la familia de los jasubitas; de Simrón, la familia de los simronitas. Éstas son las familias de Isacar, y fueron contados de ellos sesenta y cuatro mil trescientos.
a. Los hijos de Isacar: En el primer censo, la tribu de Isacar tuvo 54,400 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 64,300. Esta fue una ganancia de 9,900 (18%).
7. (26-27) La tribu de Zabulón.
Los hijos de Zabulón por sus familias: de Sered, la familia de los sereditas; de Elón, la familia de los elonitas; de Jahleel, la familia de los jahleelitas. Éstas son las familias de los zabulonitas, y fueron contados de ellas sesenta mil quinientos.
a. Los hijos de Zabulón: En el primer censo, la tribu de Zabulón tuvo 57,400 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 60,500. Esta fue una ganancia de 3,100 (5%).
8. (28-34) La tribu de Manasés.
Los hijos de José por sus familias: Manasés y Efraín. Los hijos de Manasés: de Maquir, la familia de los maquiritas; y Maquir engendró a Galaad; de Galaad, la familia de los galaaditas. Éstos son los hijos de Galaad: de Jezer, la familia de los jezeritas; de Helec, la familia de los helequitas; de Asriel, la familia de los asrielitas; de Siquem, la familia de los siquemitas; de Semida, la familia de los semidaítas; de Hefer, la familia de los heferitas. Y Zelofehad hijo de Hefer no tuvo hijos sino hijas; y los nombres de las hijas de Zelofehad fueron Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa. Éstas son las familias de Manasés; y fueron contados de ellas cincuenta y dos mil setecientos.
a. Los hijos de Manasés: En el primer censo, la tribu de Manasés tuvo 32,200 listos para la guerra; 38 años después, tenían 52,700. Esta fue una ganancia notable de 20,500 (64%).
9. (35-37) La tribu de Efraín.
Éstos son los hijos de Efraín por sus familias: de Sutela, la familia de los sutelaítas; de Bequer, la familia de los bequeritas; de Tahán, la familia de los tahanitas. Y estos son los hijos de Sutela: de Erán, la familia de los eranitas. Estas son las familias de los hijos de Efraín; y fueron contados de ellas treinta y dos mil quinientos. Estos son los hijos de José por sus familias.
a. Éstos son los hijos de Efraín: En el primer censo, la tribu de Efraín tuvo 40,500 listos para la guerra; 38 años después, tenían 32,500. Esta fue una pérdida de 8,000 hombres (20%).
10. (38-41) La tribu de Benjamín.
Los hijos de Benjamín por sus familias: de Bela, la familia de los belaítas; de Asbel, la familia de los asbelitas; de Ahiram, la familia de los ahiramitas; de Sufam, la familia de los sufamitas; de Hufam, la familia de los hufamitas. Y los hijos de Bela fueron Ard y Naamán: de Ard, la familia de los arditas; de Naamán, la familia de los naamitas. Estos son los hijos de Benjamín por sus familias; y fueron contados de ellos cuarenta y cinco mil seiscientos.
a. Los hijos de Benjamín: En el primer censo, la tribu de Benjamín tuvo 35,400 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 45,600. Esta fue una ganancia de 10,200 hombres (29%).
11. (42-43) La tribu de Dan.
Estos son los hijos de Dan por sus familias: de Súham, la familia de los suhamitas. Estas son las familias de Dan por sus familias. De las familias de los suhamitas fueron contados sesenta y cuatro mil cuatrocientos.
a. Estos son los hijos de Dan: En el primer censo, la tribu de Dan tuvo 62,700 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 64,400. Esta fue una ganancia de 1,700 hombres (3%).
12. (44-47) La tribu de Aser.
Los hijos de Aser por sus familias: de Imna, la familia de los imnitas; de Isúi, la familia de los isuitas; de Bería, la familia de los beriaítas. Los hijos de Bería: de Heber, la familia de los heberitas; de Malquiel, la familia de los malquielitas. Y el nombre de la hija de Aser fue Sera. Estas son las familias de los hijos de Aser; y fueron contados de ellas cincuenta y tres mil cuatrocientos.
a. Los hijos de Aser: En el primer censo, la tribu de Aser tuvo 41,500 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 53,400 hombres. Esta fue una ganancia de 11,900 (29%).
13. (48-50) La tribu de Neftalí.
Los hijos de Neftalí, por sus familias: de Jahzeel, la familia de los jahzeelitas; de Guni, la familia de los gunitas; de Jezer, la familia de los jezeritas; de Silem, la familia de los silemitas. Estas son las familias de Neftalí por sus familias; y fueron contados de ellas cuarenta y cinco mil cuatrocientos.
a. Los hijos de Neftalí: En el primer censo, la tribu de Neftalí tuvo 53,400 hombres listos para la guerra; 38 años después, tenían 45,400 hombres. Esta fue una pérdida de 8,000 (15%).
14. (51) El número total de hombres entre Israel listos para la guerra.
Estos son los contados de los hijos de Israel, seiscientos un mil setecientos treinta.
a. Estos son los contados: En el primer censo, Israel tuvo 603,550 hombres listos para la guerra; 38 años después tienen 601,730 hombres – una pérdida de 1,820 hombres (0,3%).
b. Seiscientos un mil setecientos treinta: Entonces, el número total de hombres listos para la guerra durante el desierto se mantuvo prácticamente igual durante el período de 38 años, cuando la generación de incrédulos murió en el desierto.
i. El estancamiento de la población refleja el estado espiritual de Israel durante estos 38 años – deberíamos haber esperado que creciera, como es normal en el transcurso de las generaciones. En cambio, simplemente se quedaron donde estaban. Los 38 años en el desierto fueron años sin crecimiento, sin avance – simplemente yendo en círculos hasta que la generación de incredulidad muriera y surgiera una generación de fe, una generación lo suficientemente audaz para tomar la Tierra Prometida.
c. Contados de los hijos de Israel: Durante este período, ciertas tribus sufrieron ganancias significativas y ciertas tribus sufrieron pérdidas significativas.
i. De estas doce tribus de Israel, cinco sufrieron pérdidas y siete ganaron hombres. La mitad de las tribus tuvo ganancias o pérdidas del 15% o menos; pero Simeón perdió el 63% de su población, y Manasés ganó el 64%. Dios estaba bendiciendo o maldiciendo a tribus particulares, sin duda en relación con su permanencia con Él.
Tribus de Israel – Primer y segundo censo (Números 1 y 26)
TRIBU | ANTES | DESPUÉS | CAMBIO | PORCENTAJE |
Rubén | 46,500 | 43,730 | -2,770 | -6% |
Simeón | 59,300 | 22,200 | -37,100 | -63% |
Gad | 45,650 | 40,500 | -5,150 | -11% |
Judá | 74,600 | 76,500 | +1,900 | +3% |
Isacar | 54,400 | 64,300 | +9,900 | +18% |
Zebulón | 57,400 | 60,500 | +3,100 | +5% |
Manasés | 32,200 | 52,700 | +20,500 | +64% |
Efraín | 40,500 | 32,500 | -8,000 | -20% |
Benjamín | 35,400 | 45,600 | +10,200 | +29% |
Dan | 62,700 | 64,400 | +1,700 | +3% |
Aser | 41,500 | 53,400 | +11,900 | +29% |
Neftalí | 53,400 | 45,400 | -8,000 | -15% |
Leví | Sin contar | Sin contar | ||
Total | 603,550 | 601,730 | -1,820 | -0.3% |
B. Heredad de la tierra.
1. (52-56) El principio general de la heredad: Las tribus más grandes reciben porciones más grandes de tierra.
Y habló Jehová a Moisés, diciendo: A éstos se repartirá la tierra en heredad, por la cuenta de los nombres. A los más darás mayor heredad, y a los menos menor; y a cada uno se le dará su heredad conforme a sus contados. Pero la tierra será repartida por suerte; y por los nombres de las tribus de sus padres heredarán. Conforme a la suerte será repartida su heredad entre el grande y el pequeño.
2. (57-62) La tribu de Leví y su heredad.
Los contados de los levitas por sus familias son estos: de Gersón, la familia de los gersonitas; de Coat, la familia de los coatitas; de Merari, la familia de los meraritas. Estas son las familias de los levitas: la familia de los libnitas, la familia de los hebronitas, la familia de los mahlitas, la familia de los musitas, la familia de los coreítas. Y Coat engendró a Amram. La mujer de Amram se llamó Jocabed, hija de Leví, que le nació a Leví en Egipto; ésta dio a luz de Amram a Aarón y a Moisés, y a María su hermana. Y a Aarón le nacieron Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar. Pero Nadab y Abiú murieron cuando ofrecieron fuego extraño delante de Jehová. De los levitas fueron contados veintitrés mil, todos varones de un mes arriba; porque no fueron contados entre los hijos de Israel, por cuanto no les había de ser dada heredad entre los hijos de Israel.
a. Porque no fueron contados entre los hijos de Israel: Los levitas no fueron contados ni en el primer ni en el segundo censo, porque los hombres de su tribu no debían ir a la guerra.
b. Por cuanto no les había de ser dada heredad entre los hijos de Israel: Además, ellos no debían recibir heredad de tierra como las otras tribus; su heredad era mayor que la propiedad – el Señor Mismo (Números 18:20).
3. (63-65) La vieja generación no tiene heredad.
Estos son los contados por Moisés y el sacerdote Eleazar, los cuales contaron los hijos de Israel en los campos de Moab, junto al Jordán frente a Jericó. Y entre éstos ninguno hubo de los contados por Moisés y el sacerdote Aarón, quienes contaron a los hijos de Israel en el desierto de Sinaí. Porque Jehová había dicho de ellos: Morirán en el desierto; y no quedó varón de ellos, sino Caleb hijo de Jefone y Josué hijo de Nun.
a. Y entre éstos ninguno hubo de los contados por Moisés y el sacerdote Aarón: Ninguno de los contados en el primer censo fue contado en el segundo. Esa fue la vieja generación, la generación de incrédulos, que pereció en el desierto. Obviamente no tuvieron heredad en la Tierra Prometida (excepto Caleb y Josué).
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