Números 29 – El sistema sacrificial (continuación)
A. Ofrendas relacionadas con las fiestas estacionales (continuación de Números 28).
1. (1-6) Ofrendas en la fiesta de las trompetas.
En el séptimo mes, el primero del mes, tendréis santa convocación; ninguna obra de siervos haréis; os será día de sonar las trompetas. Y ofreceréis holocausto en olor grato a Jehová, un becerro de la vacada, un carnero, siete corderos de un año sin defecto; y la ofrenda de ellos, de flor de harina amasada con aceite, tres décimas de efa con cada becerro, dos décimas con cada carnero, y con cada uno de los siete corderos, una décima; y un macho cabrío por expiación, para reconciliaros, además del holocausto del mes y su ofrenda, y el holocausto continuo y su ofrenda, y sus libaciones conforme a su ley, como ofrenda encendida a Jehová en olor grato.
2. (7-11) Ofrendas en el día de la expiación.
En el diez de este mes séptimo tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas; ninguna obra haréis; y ofreceréis en holocausto a Jehová en olor grato, un becerro de la vacada, un carnero, y siete corderos de un año; serán sin defecto. Y sus ofrendas, flor de harina amasada con aceite, tres décimas de efa con cada becerro, dos décimas con cada carnero, y con cada uno de los siete corderos, una décima; y un macho cabrío por expiación; además de la ofrenda de las expiaciones por el pecado, y del holocausto continuo y de sus ofrendas y de sus libaciones.
a. Afligiréis vuestras almas: El día de la expiación no era una fiesta feliz. Era un día para considerar cuidadosamente la carga del pecado y desecharlo a nivel nacional mediante el sacrificio designado para ese día.
3. (12-39) Ofrendas en la fiesta de los tabernáculos.
También a los quince días del mes séptimo tendréis santa convocación; ninguna obra de siervos haréis, y celebraréis fiesta solemne a Jehová por siete días. Y ofreceréis en holocausto, en ofrenda encendida a Jehová en olor grato, trece becerros de la vacada, dos carneros, y catorce corderos de un año; han de ser sin defecto. Y las ofrendas de ellos, de flor de harina amasada con aceite, tres décimas de efa con cada uno de los trece becerros, dos décimas con cada uno de los dos carneros, y con cada uno de los catorce corderos, una décima; y un macho cabrío por expiación, además del holocausto continuo, su ofrenda y su libación. El segundo día, doce becerros de la vacada, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto, y sus ofrendas y sus libaciones con los becerros, con los carneros y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación; además del holocausto continuo, y su ofrenda y su libación. El día tercero, once becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto; y sus ofrendas y sus libaciones con los becerros, con los carneros y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación, además del holocausto continuo, y su ofrenda y su libación. El cuarto día, diez becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto; sus ofrendas y sus libaciones con los becerros, con los carneros y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación; además del holocausto continuo, su ofrenda y su libación. El quinto día, nueve becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto; y sus ofrendas y sus libaciones con los becerros, con los carneros y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación, además del holocausto continuo, su ofrenda y su libación. El sexto día, ocho becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto; y sus ofrendas y sus libaciones con los becerros, con los carneros y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación, además del holocausto continuo, su ofrenda y su libación. El séptimo día, siete becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto; y sus ofrendas y sus libaciones con los becerros, con los carneros y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación, además del holocausto continuo, con su ofrenda y su libación. El octavo día tendréis solemnidad; ninguna obra de siervos haréis. Y ofreceréis en holocausto, en ofrenda encendida de olor grato a Jehová, un becerro, un carnero, siete corderos de un año sin defecto; sus ofrendas y sus libaciones con el becerro, con el carnero y con los corderos, según el número de ellos, conforme a la ley; y un macho cabrío por expiación, además del holocausto continuo, con su ofrenda y su libación. Estas cosas ofreceréis a Jehová en vuestras fiestas solemnes, además de vuestros votos, y de vuestras ofrendas voluntarias, para vuestros holocaustos, y para vuestras ofrendas, y para vuestras libaciones, y para vuestras ofrendas de paz.
a. Trece becerros de la vacada, dos carneros, y catorce carneros: Esta era la ofrenda requerida en el primer día de la fiesta de los tabernáculos (Números 29:13). En el segundo día, se requerían doce becerros de la vacada, dos carneros, catorce corderos (Números 29:17), y así sucesivamente durante toda la fiesta.
b. Estas cosas ofreceréis a Jehová en vuestras fiestas solemnes: Dios requería tantos animales y un sacrificio tan caro porque la fiesta de los tabernáculos era un feliz recuerdo de la fidelidad de Dios a Israel durante el Éxodo. El sacrificio de tantos animales era una demostración de la riqueza de la provisión de Dios para ellos a través de los años en el desierto.
B. La obediencia de Israel.
1. (40a) Moisés les dice a los hijos de Israel las palabras de Jehová.
Y Moisés dijo a los hijos de Israel conforme a todo.
a. Y Moisés dijo a los hijos de Israel conforme a todo: Significativamente, ahora que Israel estaba en el umbral de la Tierra Prometida, necesitaban que se les recordara el lugar esencial del sacrificio. La gente de la Tierra Prometida sabe que necesita un sacrificio expiatorio y lo recuerda a menudo.
2. (40b) Una obediencia costosa.
Lo que Jehová le había mandado.
a. Lo que Jehová le había mandado: Que Israel obedeciera lo que Dios mandó en Números 28-29, significaba que cada año, los sacerdotes sacrificaban 1,086 corderos, 113 toros, 32 carneros, más de una tonelada de harina, y unas 1,000 botellas de aceite y vino en nombre de la nación.
i. El animal de sacrificio más destacado era el cordero. Esta es una referencia profética obvia a Jesús, quien es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo (Juan 1:29).
b. Lo que Jehová le había mandado: Todo este sacrificio no incluía los sacrificios hechos por individuos o familias. Los sacerdotes y levitas estaban claramente ocupados con el trabajo del sacrificio, y se cumplía a un costo considerable.
i. En los días de Jesús, hay registro de 255,600 corderos pascuales sacrificados en una sola pascua solo por individuos y familias.
ii. Significativamente, ¡nada de eso era suficiente! Ninguno de estos cientos de miles de sacrificios a lo largo de los siglos podría quitar el pecado de una persona; eso tuvo que esperar hasta que se ofreciera un sacrificio perfecto – el sacrificio de Jesús.
©2022 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik – ewm@enduringword.com